Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 3

En mi búsqueda de un empleo y mejorar mi experiencia con el idioma salgo todas las tardes al parque que se encuentra a dos cuadras de mi casa, saludo a las personas trato de entablar una conversación y alargarla lo más posible para practicar, aunque la mayoría de las veces confundo a las personas con palabras que no van al caso, me divierto demasiado. Hace unos días Gaby me dijo que pronto se acercará la fecha del alquiler, lo cual me provocó un gran dolor de estómago por lo cual no he podido dormir bien, ¡Me urge un trabajo! pero nadie me quiere dar la oportunidad por el simple hecho de que no hablo bien el idioma, sé que es comprensible, pero en verdad lo necesito. 

Así que decidí ir a casa, en casa solicitando empleo como personal de limpieza, sé que en este tipo de empleo no necesito hablar solo limpiar bien, así que voy con toda la actitud.

Al llegar a la primera casa respiro hondo... y toco la puerta.

Cuando por fin abren.

Ciao! scusi il disturbo, signora. (Hola, disculpe señora) He venido a ofrecer mis servicios como personal de limpieza —portazo en la cara.

Pero que signora tan grosera, me ha ignorado por completo ni siquiera me dejo hablar, vayamos a la siguiente casa.

Ciao! scusi il disturbo, signora —portazo de nuevo, otra vez, otra vez y otra vez, en las próximas horas me la vivo con señoras molestas, con perros guardianes correteándome, con otros que son callejeros, con personas que me gritan mucho antes de atender la puerta, otras que por nada del mundo entienden mi italiano y el peor, un señor que me arrojó un balde de agua, no lo puedo creer estoy profundamente cansada, decepcionada y mojada. En camino a casa voy analizando todo lo que me acaba de pasar, no puedo creer que nadie me haya prestado atención ni siquiera un poco, también tengo unas ganas inmensas de llorar.

Aunque realmente no sé qué hacer, si entrar a mi casa o de una irme al aeropuerto, tal vez es algo tonto, pero me siento tan fuera de lugar. En cuanto llego al departamento me encierro en mi cuarto, tomo algo de ropa y me meto a bañar, en cuanto salgo, me preparo un café a velocidad para no ver a Gaby, ya que seguramente me va a preguntar y no quiero llorar frente a ella seguramente se reiría de mí, y no tengo ganas de afrontarla el día de hoy, seguramente a ella le fue excelente en la universidad, y no quiero agobiarla con mis charlas de lo pésimo que la paso día a día. 

A la mañana siguiente amanecí más tranquila, trato de tener una mejor actitud para enfrentar todo esto, no tengo más opción, tal vez no me agradan muchas cosas, pero no significa que odie este lugar. Así que... no queda de otra que volver a la misión de encontrar trabajo, en cuanto salgo de la casa camino con la mejor vibra posible, saludo a mis vecinos, sonriéndole a la vida, camino algunas cuadras hasta llegar al área donde termine de buscar el día de ayer, veo una puerta grande color morada, algo curiosa para ser de ese color, me acerco a ella y con la mano de dios me decido por tocar.

Ciao! scusi il disturbo, signora. He venido a ofrecer mis servicios como personal de limpieza.

—¿Limpieza dices? —me pregunta. Es una señora grande, algo subida de peso, baja de estatura, cabello oscuro, ojos pequeños, tiene algunas manchas de paño en la cara y tiene una mirada algo ruda, sobre todo tiene muy mal gusto en la moda.

—Así es, segnora. Necesito empleo y soy muy buena haciendo mi trabajo, si le interesa no tendrá queja sobre mí.

—¿Puedes empezar ahora mismo?  —me dice. 

Aunque su pregunta me sorprende, me pongo muy feliz ya que prácticamente me está contratando

—¡Por supuesto que sí señora! Usted dígame por dónde comienzo —me abre camino para entrar a su casa.

—Me llamo Carmina, te pagaré lo que crea conveniente, entrarás a las 7 am, y saldrás hasta que termines de limpiar, la anterior muchacha dejó muy sucio así que necesito con urgencia que todo quede impecable.

—Está bien señora, pero respecto al pago ¿A qué se refiere con "conveniente"?

—Si queda como yo espero te pagaré mejor.

—Entiendo —respondo algo insegura. 

—¡A trabajar! —me levanta la voz y aplaude al mismo tiempo.

Y eso hago, la señora Carmina me muestra la casa, me da los productos de limpieza y pongo asear, sinceramente si le urgía la limpieza, se encuentra demasiado sucio jamás había visto algo parecido, en ocasiones mientras estoy limpiando grita algunas cosas, pero como mi italiano no es muy bueno no entiendo nada, cuando creó terminar por el día de hoy paso a lavarme las manos y la cara para quitarme un poco el polvo y la suciedad.

—¿Qué haces? —me pregunta la señora Carmina.

—Me estoy lavando la cara, ya terminé Señora.

—Que no había quedado claro que yo te decía cuando era el momento para retirarse, aparte la entrada es a las 7am y hoy entraste a las 10, así que, aunque hubieras entrado a la hora no es la salida, y como comprenderás mucho menos con la entrada tarde.

—¿Está bromeando?

—¿Tengo cara de que bromeo? No, señorita, si piensa hacer su trabajo bien obedezca mis órdenes y siga trabajando—me responde molesta. 

—¿Qué le pasa? Es usted muy grosera, ni siquiera me dijo cuánto me va a pagar y aparte me trata así—maldita gorda—pienso.

—¿Quieres el trabajo sí o no? Porque a lo que me decías lo necesitas con urgencia, es lo que te puedo ofrecer.

Maldita vieja abusiva—lo vuelvo a pensar.

Por más que quiera no puedo dejar el trabajo la próxima semana tendremos que pagar el alquiler y no tenemos dinero, ya pasó un mes de esperar y esperar y nada, lamentablemente la única persona que me puede dar empleo es esta vieja loca.

—Está bien, pero... ¿a qué hora me voy a retirar el día de hoy? No he comido nada señora, le recuerdo que desde que llegué no he parado ni salido para nada—le reclamo. 

—Termina el baño y te vas, pero antes me esperas en la puerta para revisar que no te lleves nada.

La respuesta de la "doña" me molesta demasiado, pero qué puedo hacer, necesito el maldito dinero. Después como ella lo indicó cuando termino me espero en la entrada de la casa.

—Bien acabo de revisar lo que hiciste, quedo funcional espero llegues mañana temprano, ahora vete.

Con pensamientos agresivos y sin decir ni una palabra me retiro. En camino a casa pienso en decirle a Gaby sobre el trabajo la verdad es que ella no tiene ni idea, no tengo celular así que no hay modo de hablarle, seguramente debe estar preocupada porque no he llegado debí decirle a la panzona que me dejara llamar desde su casa. Por cierto, me muero de hambre, las tripas me suenan como locas, incluso siento que me está doliendo la cabeza, no fue nada sencillo trabajar así, solo necesito resistir unas semanas ya después me acostumbraré.

Cuando estoy a una calle de mi casa me pongo super feliz, mis pies ya no resisten más están muy cansaditos, aunque no parezca esta algo lejos el lugar. 

En cuanto abro la puerta del departamento le hablo a Gaby para poder platicar con ella todo lo que me paso el día de ayer y el día de hoy, pero al mencionar varias veces su nombre no me responde, me parece algo raro ya que por lo regular a esta hora ya se encuentra en casa, me dirijo a su habitación toco la puerta y no hay respuesta, me asusta pensar que le haya pasado algo así que decido abrir para notar que no hay nadie, aún no ha llegado a casa, sin más que hacer me doy una ducha rápida y me preparo algo simple para cenar, me siento en nuestro pequeño comedor y enciendo el televisor, aunque no hay mucho que ver me sirve practicar, así que escucho de lo que sea que se trate ese programa, pasan y pasan las horas y Gaby no regresa, ya pasan de las 12 am y comienzo asustar, sé que es adulta y puede hacer lo que le plazca pero el hecho de que ninguna de las dos tenga celular nos desconecta por completo, el único modo de comunicarnos es el teléfono del departamento, pero no hay un número al cual marcar, ojalá recuerde avisarme y alguien le pueda prestar un celular para que llame al departamento. Espero un rato más y ya no puedo con el cansancio, me siento mal irme así a la cama sin noticias de ella, pero en dado caso que la fuera a buscar, no tengo ni idea de donde comenzar, no creo que a estas horas este abierta la universidad, así que lo más seguro es que este con algunos amigos. No tengo idea en qué momento me quedo dormida, cuando menos lo espero ya es de mañana entreabiertos los ojos y con la luz en mi cara toda soñolienta miro el reloj que tengo en mi buró, y ¡bum! Las 9 am, me levanto rapidísimo a cambiarme y a salir corriendo del departamento, doña Carmina me va a matar, lo más seguro es que saldré igual o más tarde que el día de ayer, si es que no me despide.

Al llegar como lo esperaba la señora Carmina me regaña como ella cree que es debido, aunque no me deja entrar a su casa si no es primero con una pequeña revisión, me dice de nuevo las reglas de su vivienda y me deja pasar, al paso de unos minutos me instalo en una de las habitaciones para comenzar la limpieza, la señora Carmina no deja de pasar y decirme lo mal que he quedado con ella el día de hoy y eso que es mi segundo día, cuando cambio de habitación va y me revisa la anterior, y si no le gusta como tendí la cama me habla para que vuelva a comenzar, no pasa más de 1 hora y ya me quiero ir, es sumamente molesta, gritona y fastidiosa.

—Muchacha ya te dije que así no se sacude aquí en mi casa, ¿Cuántas veces tengo que repetírtelo? Créeme que estoy pensando en despedirte.

Pues ojalá lo hiciera—pienso. Muero por decirlo, pero necesito el empleo, necesito soportar para pagar el alquiler, un poco más, solo unos días más.

Y esos días más se convirtieron en meses... si ya lo sé dirán que soy una tonta, pero entiéndanme ¿Qué puedo hacer? Gaby no tiene tiempo para trabajar, todo el tiempo está estudiando, no tenía más opción.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro