Años siguieron pasando, Thanatos aceptó su cruel vida solitaria y gris, por el capricho del destino le prohíben su felicidad ¿acaso la muerte no puede ser feliz?¿ acaso la muerte no es la salvación de aquellas almas que sufren en esta vida? Empezó a volverse un dios más huraño, antisocial y antipático, e iniciaba a ser un dios empeñado en el trabajo, su vida se volvió a empezar monotoma y sincronizada, todo estaba organizado y todo tenía su tiempo y orden.

En uno de sus trabajos, el Dios Thanatos baja a la Tierra para cumplir con su deber de llevarse el alma de aquellos que ya están en las últimas, en uno de esos días, mientras andaba por el bosque de un miserable pueblo escuchó las súplicas de un hombre, un simple campesino pobre de 1.60 de alto, tez morena, cabello corto negro,contextura delgada y de apariencia famélica (solo por la cara), ojos marrones, lleva zapatos cómodos con zuela plana, pantalones beige largos hasta la rodilla, camisa blanca un poco desgastada y se encuentra afuera de la puerta de una cabaña gritando al viento con los brazos extendidos.

-Oh gran Dios Hades, rey del inframundo y soberano de los muertos vivientes, desde lo más profundo de mi alma le imploro que cumpla con la petición de mi corazón-sigue repitiendo lo mismo.

Thanatos al ser uno de los consejeros del Dios Hades actúo apareciendo en escena, inmediatamente una densa niebla apareció cubriendo por completo su cuerpo y haciendo imposible verlo, lo único que se podría saber de él era su inmensa presencia de poder, olor  azufre y su impotente voz.Poco a poco la densa niebla fue cubriendo los alrededores acorralando al campesino que temblaba justo frente a la puerta de su casa-

-¿Quién an..anda ahí?¡-dice tiritando y mirando sin parar a cada lado 

-Mortal-llama su atención provocandole un escalofrío en toda su espalda- ¿Quién te crees para invocar la presencia de mi señor Hades?

-.....-se queda callado pero sin dejar de temblar debido a que la niebla se vuelve más densa hasta cubrirle la vista.

-Responda o acepta las consecuencias por..-lo interrumpen

-Discúlpeme¡¡, Tenga piedad de mí un simple campesino, pero solo quiero que cumpla con mi petición¡¡ Se lo suplico¡¡-le gritó rompiendo en llanto

-Mi nombre es Thanatos,dios de la muerte y vengo en representación del Señor Hades, ahora dime ¿qué petición tiene tú ambicioso corazón?

-Es.....es la mujer que está dentro de esta casa, es mi prometida,-empieza hablar apagadamente- estamos a unas semanas de casarnos pero enfermó gravemente y ya muchos doctores que vinieron a verla me dicen lo mismo-empieza llorar- que está al borde de la muerte, ella es mi única razón por la de vivir, mi vida antes de conocerla era gris y solitaria-eso atrajo la atención del dios- ella el sol que ilumino mi vida, recién hace dos días cuando murió un viejo brujo vino y me dijo que invocara al Dios Hades, como el tiene poder sobre la muerte solo él podría revivirla, llevo dos días suplicando y sin respuesta..hasta ahora, por favor Señor Thanatos salvela. 

-Mortal, digamos que eso es posible, pero nada en esta vida es gratis, tú un pobre campesino ¿qué me darías a cambio de salvarle la vida a tu prometida? 

-Usted es sabia mi Señor, no tengo nada, a la justa si me alcanza para alimentos, pero le prometo mi señor que si regresa en un año le entregaré como ofrenda a mi primogénito.

-¿Me darías como ofrenda a un miserable bebé humano?-le dice con desprecio

-Por favor mi Señor Thanatos, es lo único que podré ofrecerle, no tengo otra cosa más, no puedo ofrecerle algo que sé que no tengo ni nunca tendré

Thanatos estuvo apunto de asesinar al hombre pero tuvo un momento de misericordia y aceptó el trato.

-Mortal, aceptaré tu oferta, salvaré a tu prometida a y cambio me darás a tu primogénito, cuando el bebé nazca deberás ponerle este medallón (multimedia) y si te atreves a mentirme no solo vendré inmediatamente por el alma de esa criatura, sino también por el de tu mujer y la tuya. 

-No se preocupe mi Señor, seré pobre pero honrado, cumpliré con lo que me pida.

Thanatos ingresa a la casa del mortal encontrando en el cama del único cuarto a una mujer pálida, un cuerpo muy delgado, labios morados y los parpados cerrados, su cabello castaño corto estaba perdiendo brillo y llevaba sus brazos recostados a los extremos de la cama, él con solo tocar su frente y recitar un viejo conjuro le regresa la vida. 

-Oi dynámeis tou pératos, tou skotadioú kai tis katáras, epistréfoun tin psychí aftoú tou sómatos sti thési tou, epistréfoun ti zoí pou ríchtike kai tis dínoun ti défteri efkairía na zísoun(Poderes del más allá,oscuridad y maldición, regresen el alma de este cuerpo a su lugar, regresen la vida que se le arrebató y denle la segunda oportunidad de vivir.)-después de decir estas palabras el cuerpo de la chica se ilumina por un aura blanca y sus ojos se empiezan a abrir.

Un año pasa, y en el mismo bosque una niebla densa vuelve aparecer y se ve como el campesino que estaba cortando la leña se da cuenta de que la hora llegó.

Con el corazón en la garganta entró a su casa, posó su vista en al cuna de madera que se encontraba en el dormitorio y con lágrimas en los ojos apreciaba la imagen de su bebé durmiendo.

-Adiós mi querida hija, adiós mi preciosa bebé-le da un beso en la frente y agarra el medallón que estaba en el respaldo de la cuna  para colocarlo en el cuello de la infante y con tristeza y pesar en su andar sale afuera y sin mirar al frente le entrega a la niña al dios que se cubría en con la niebla.

-..-recibe a la niña y luego se aleja junto a la niebla y y le susurra a la bebé- Ahora te llamarás Alma, y serás mi hija.-se regresa a los campos elíseos.