Me he ido hasta la otra punta de la ciudad para comprarle la nutella a mi hermano y no sé si realmente vale la pena, luego me lo agradecería con una de sus bromas pesadas y yo como soy inocente y nunca se me ocurren brillantes plantes para devolvérsela pues moriré entre sus torturas diarias.

- Ten, tu nutella- le digo poniéndola en la mesa.

Me mira sorprendido.

- ¿Estás bien Rita?

Vale, esto si es extraño, esa pregunta es extraña, esta situación... ¿Tiene fiebre mi hermano?

- Sí, ¿Por qué no iba a estarlo?

- Siempre que te despierto de manera bruta y te pido que vayas a buscarme nutella vuelves con un pote de nocilla y tú querida hermana eres alguien de rutina. Así que algo debe estar pasándote.

Tengo unas cuantas cuestiones:

1) Desde cuando mi hermano es tan elocuente hablando.

2) Como sabe tanto de mí si apenas hablamos.

3) Porque razón no le he comprado nocilla.

4) Porque he recorridos dos kilómetro para traerle Nutella.

5) Que me está sucediendo.

Maldita sea, esto es culpa de Alex, por dejarme medio lela. Miserable el día que me vio.

Me arrepiento tanto de haber deseado durante noches enteras que él me viera, que él supiera que existo y ahora... ni siquiera sé lo que él piensa de mí, ahora tengo miedo que algo suceda y ese algo es que la típica historia cliché se haga real y yo sea la novia del tan deseado quarterback y esa historia tan esperada asusta a la que debería ser la protagonista, la cliché.

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Estamos justo a la mitad de la novela y espero que no os este defraudando.

Dadle las gracias a los organizadores: @Concursos_y_Retos por esta oportunidad.

Besos de:

Merry_popiiin