Desperte por una alarma que creo, provenia de la plaza, me levante y corri hasta el lugar, estaban todos solo que unos formados y otros buscando a sus parejas o compañeros.

Me situe juanto a Alma mientras la líder explicaba las normas de seguridad, etc etc. Vo el cielo que estaba mas oscuro y comencé a preguntarme si solo yo me percataba que llovería, o tal vez sea que mi padre me pego lo de el saber el estado del clima por su antiguo trabajo de meteorólogo. Comence a sentirme inseguro, como un mal presentimiento de que algo sucedería.

(...)

Unos minutos después de haber comenzado a caminar a través del bosque nos encontramos en una entrada de alguna clase de mina cubierta por varias plantas cortadas recientemente, pero parecían haberse puesto específicamente para cubrirla. Algo me seguía dando mala espina.

Nos adentramos a la mina, vi detenidamente todo lo que sostenia la tierra y piedra, las vigas de madera que estaban algo enmoesidas, como si fueran a romperse en cualquier momento aunque parecían estar totalmente firmes, mire a todos a mi alrededor y rei por lo bajo al ver a las amigas que se abrazaban por la oscuridad y los chicos que por aburrimiento hacían figuras de sombras en doble sentido para reírse un rato.

Despues de haber descendido unos cuarenta o cincuenta metros bajo tierra la líder se detuvo y comenzó a contar la historia de esta mina y que no podíamos bajar mas por cosas de seguridad y otras cosas, vi el suelo y vi que se habían formado pequeños canales de donde descendia agua, no recuerdo haber visto goteras asi que debe de estar lloviendo en la superficie.

Unos chicos comenzaron a molestarse empujándose, no les preste mucha atención y vi las vigas que iban mas al fondo, estaban ligeramente dobladas, estas si parecían a punto de romperse y echarnos todo el peso de la tierra encima.

Mire a donde los chicos ya comenzaban a gritar pero tres estaban empujando uno solo hacia mi, no me dio tiempo de quitarme y recibi un empujon de cuatro personas prácticamente, azote contra la fría pared haciendo un ruido muy fuerte que hizo girar a casi todos a donde estaba.

-¡¡Oiga, tengan mas cui...!!- no me dio tiempo a terminar cuando el suelo cedió y cai en un agujero, cai sobre piedra y no me pude mover por unos momentos, mire hacia arriba como algunos se asomaron con sus linternas -malditos hijos de...- el suelo volvió a romperse y cai en un vacio que sentí eterno, vi hacia los lados y el suelo ya estaba roto en suelos inferiores, azote contra el suelo.

Abri los ojos por agua que me caia en la frente, estaba en absoluta oscuridad lo que me aseguraba que seguia vivo, me levante pero cai de rodilas, sentía algo latente en mis brazos y algunos en mis piernas.

Si había perdido la cosciencia no sabia, me levante a fuerzas, busque la pared pero choque con una mesa, la explore con mis manos hasta que toque algo cilíndrico, encontré un botón y para mi suerte era una linterna con baterías.

Me alumbre a mi mismo y tenia algunos moretones y raspones en brazos y piernas, algo afortunado por haber caído por algunos pisos y azotado contra en suelo. Vi hacia donde era para subir, iba a volver pero unos sollozos me hicieron ver hacia atrás, puse la linterna hacia el lado contrario y era un pasillo mas largo que los demás, alguien además de mi tuvo que haber caído.

-Alguien esta ahí?!- grite un poco bajo para evitar causar un pequeño derrumbe por la inestabilidad del lugar, los sollozos se detuvieron por un momento y luego regresaron, debe estar herida.

Reuni valor y baje mas de donde estaba, fue un largo camino pero pasaron mas minutos de los que pasamos bajando antes y me pregunte que era lo que extraían de aquí ya que no había ningún indicio, solo algunas herramientas rotas clavadas en las paredes.

Llegue finalmente a una puerta entre-abierta, entre y vi todo pero cuando iba a ver una esquina escuche que algo se movio pero me contuve a señalarlo.

-Estas bien?- los sollozos se detuvieron -Ni se te ocurra ponerme esa luz encima- era la voz de una chica ligeramente irritada, aunque no sabia porque -debemos salir de aquí- se quedo en silencio unos momentos -esta bien pero solo muestra la luz a donde yo no este- dude unos momentos preguntándome el porque de esa petición -esta bien- al final solo acepte, no tenia nada que perder la verdad.

Señale la luz hacia el camino para salir de esta mina de locos pero me quede observando entre la oscuridad donde escuche la voz, lo único que veía eran dos pequeños destellos de color ambar, sacudi la cabeza y me convenci que no tenia nada que ver con aquel extraño sueño.

Pasamos como una o dos horas caminando a través de la mina cuidándonos de los agujeros por los que pase antes, hasta que vimos la luz de la salida entre la oscuridad, trate de aumentar mi ritmo pero el dolor me impidió hacerlo.

Ella me lanzo tierra en los ojos en un momento y escuche sus pasos alejándose, que gran compañera, la salve de esta pesadilla, me limpie los ojos y segui mi camino hasta salir donde la lluvia era normal, camine a través del bosque hundiendo mis pies en pequeños charcos de lodo hasta que me percate que no estaban las huellas de ella, ¿se habrá perdido al salir? Suspire y trate de hacer como que nunca haya estado con alguien ahí dentro a pesar de los sollozos y la irritada voz del interior de la mina.

Mire la plaza pero estaba vacia, era obvio, nadie estaría bajo la lluvia, vi el comedor y estaban las luces encendidas y una que otra silueta pasando frente a las ventanas y me di cuenta que lo mejor habría sido dejar a alguien para ver que nada pasara en la mina.

Camine aun hacia el comedor sintiendo cada vez mas cansancio, entre y nadie se dio cuenta pero había un grupo alrededor de la Lider que preguntaban como buscarme y dando muchas opciones absurdas, sin sentido y que terminarían en mas búsquedas.

Ya me estaba enojando mas y mas por cada opción estúpida que daban aunque reia en lo mas profundo porque nadie veía al herido alejado del grupo.

Me harte y comencé a gritar -¡¡O que tal si mandan las precauciones a la vuelta de la esquina y simplemente bajan!!- todos voltearon a donde estaban y abrieron paso para que la líder me viera, sonreí, trate de erguirme pero ya tenia suficiente dolor y cai de rodillas.

-¡¡Rapido, llévenlo a la enfermería!!- dijo como si fuera algún tipo de capataz de construcción o algo asi, me llevaron a la enfermería y una mujer de treinta y tantos esperaba dentro leyendo una revista. Me dejaron sobre la cama y salieron.

-Conque tu eres el desafortunado- me vio, dejo su revista a un lado y comenzó a ver mis heridas,- eres totalmente afortunado por no haberte roto nada o algún daño mayor- comenzó a desinfectarlas con alcohol y luego revisar detenidamente si no tenia nada mas. -sobre que parte de tu cuerpo aterrizaste?- trate de recordar aunque fuera solo oscuridad -mi espalda supongo- ella me sento y levanto mi camisa, hice una mueca de dolor al sentir el alcohol de nuevo -eres totalmente afortunado de verdad- dijo antes de bajar de nuevo mi camisa y sentarse a ver de nuevo su revista -ya puedes retirarte- dijo mientras se acomodaba, me levante y Sali despidiéndome con la mano aunque ella no me prestara atención.

Me diriji hacia mi cabaña mientras veía que aun estaban todos en el comedor, pase por el camino del bosque y comencé a escuchar como si me llamaran pero decidi ignorarlo, estaba solo en la oscuridad y lluvia de la noche.

(...)

-Psssstt!- era cada vez mas fuerte la llamada y los pasos que se escuchaban acercándose -no hay nadie ahí, no ahí nadie detrás de mi- lo repeti tantas veces que había comenzado a susurrarlo -Pssssstttt!!!!- poco a poco mi paciencia desaparecia -pssstttt!!!!!! Psssstttt!!!!- vi la cabaña a lo lejos asi que podía entrar, los llamados no paraban.

Llegue a la cabaña y saque mi llave para abrir, una roca golpeo directo la llave haciendo que se me cayera en el lodo, mire de donde venían los llamados -¡¡YA!! ¿¡Que pasa!?- mire todo y no había nadie, simplement el frio bosque, a menos que los arboles tengas consciencia y la habilidad de lanzar piedras, los llamados eran los susurros del viento.

Suspire y vi al suelo buscando la llave, me agache y meti la mano entre el lodo pero no había nada, absolutamente nada solo lodo y una que otra hoja seca. Gruñi por lo bajo, iba a levantarme pero alguien se sento sobre mi.

-¿Perdiste algo?- reconoci la voz, era de la chica de la mina, trate de voltear a verla pero puso su mano en mi cabeza y me obligo a ver el suelo -No me veas, es tu castigo por ignorarme todo el camino hasta aca- debi haber volteado? Lo pensé de nuevo, y creo que es mejor asi. -Pues tu me abandonaste en la mina- escuche el cerrojo de la puerta, ella tenia mi llave.

Se me quito de encima y entro, me levante y me limpie las manos en mis pantalones y entre, la silueta de la chica estaba frente a la ventana observando el bosque aunque veía algo raro en ella, su cabello estaba puesto como dos triángulos sobre su cabeza y algo que pasaba de lado a lado atrás de ella.

Tenia la mano en el interruptor de luz pero no sabia si encenderla o no, algo aun estaba mal, ella volteo a verme y los destellos ambar se fijaron en mi, entre la oscuridad sabia que estaba sonriendo.

-Adelante, enciendela- lo hice y me quede paralizado, una chica, la misma chica solo que ahora la veía completa, comenzó a reir mostrando sus colmillos anormalmente grandes, sus orejas y su cola que se agitaba, no paro de reírse, se acercó a mi -Bueno, debo irme, hasta luego- salio pero yo aun estaba petrificado y aun segui escuchando su risa.

Apague la luz y me acosté sin desvestirme, me dormi algunos minutos después tratando de olvidar a esa chica que podría tener o no un disfraz.