Capítulo 14
María salió de la farmacia satisfecha con el susto que la había dado a aquel hombre, le había dado tanto asco cuando éste descaradamente le tomó su mano y cómo miraba a Beverly de manera lujuriosa. Mientras caminaba por la acera vió a Beverly, quien la esperaba a unos cuantos metros de la farmacia.
- ¿Me esperabas?- dijo ella y Beverly le sonrió comenzando a caminar junto a ella.
- ¿Porqué demoraste tanto?- preguntó la pelirroja.
- Tuve una reflexiva charla con el señor Keene, fue divertido- Beverly miró confundida a María y luego rió- Mira , nos esperan- dijo María señalando a lo lejos a Bill, quien las esperaba en la entrada de una callejón y estaba inmóvil mirando hacia algo hipnotizado, María siguió la mirada del castaño hasta darse cuenta que lo que miraba no era algo , sino alguien y ese alguien era la pelirroja.
El dueto de chicas caminaron hasta quedar frente a Bill ,quien sacó nerviosamente un par de doláres de sus bolsillos para luego proceder a ofrecércelos a Beverly.
- G-gracias- dijo él.
- No fue nada- dijo Beverly guiñandole un ojo y sacudiendo ligeramente su cabeza dándolea a entender a Bill que no necesitaba ofrecer dinero.
Por otro lado, el castaño miraba a la pelirroja con ojos embelesado, María no pudo evitar sonreír enternecida por la escena, esos dos eran realmente lindos.
- Está sangrando, Dios mío- se oyó decir a Stan.
- Tienes que relajarte- decía Eddie, Beverly miró hacia el fondo del callejón y se sorprendió.
- ¿Estudios sociales? - dijo de repente y comenzó a caminar hacia los chicos, Bill y María se miraron extrañados para luego seguirla.
- Tienes que chuparle la herida antes de ponerle la bendita- decía Richie mientras que Eddie estaba agachado frente a alguien y lo mandaba a callar.
María fue acercándose y acercándose hasta que vió de quién se trataba, era Ben y era un Ben muy lastimado con sangre en su camiseta y rasguños en la cara.
- ¿Estás bien? Seguro duele- dijo Beverly con preocupación.
- ¿Ben?- dijo María llegando detrás de la pelirroja junto con Bill- ¿Que sucedió?
- Nada, solo me caí- dijo Ben.
- Si claro, encima de Henry Bowers- dijo Richie sarcásticamente.
- Henry...- dijo María suspirando con una mano en su frente y atando los cabos , el niño que Henry y los demás perseguían entonces era Ben.
- Cállate R-Richie- dijo Bill regañando a su amigo.
- ¿Porqué? Es la verdad- se defendió el mencionado con sus brazos alzados.
- ¿Seguro trajeron lo indicado para el niño nuevo?- dijo Beverly con picardía mientras miraba a Ben y éste le sonrió.
- Eh, nosotros lo vamos a a-atender y gracias Beverly- le agradeció y Beverly asintió, mientras ellos conversaban María se hincó frente a Ben y alzó su camiseta, la azabache vió con horror las cortadas en la panza del menor que daban forma a la letra "H" .
- Pinche culero- dijo María enojada entre dientes, definitivamente Henry no tenía límites.
- Adiós chicos , adiós María- dijo Beverly yéndose y todos se despidieron de ella.
- No debiste mencionar a Bowers frente a ella- dijo Stan dirigiéndose a Richie.
- Si, ya oíste lo que hizo- dijo Eddie.
- ¿Qué hizo?- preguntó Ben confundido.
- Más bien a quién se lo hizo, oí que la lista es más larga que mi pene- dijo Richie en forma de broma refiriéndose a los turbios y falsos rumores sobre Beverly ,María escuchaba todo lo que decían en silencio.
- Éso no dice mucho- dijo Stan nuevamente ,María algo molesta de esas habladurías, carraspeó y los chicos se callaron por unos instantes.
Ella se levantó de donde estaba hincada y miró con cierta decepción a los chicos.
- No deberían juzgar tan rápido ¿No creen? No saben si eso fue verdad o no- dijo María mirándolos y éstos agacharon sus cabezas apenados.
- María tiene ra-razón, son solo rumores- dijo Bill y ellos quedaron en silencio.
- Bueno...cambiando de tema - comenzó a decir Richie- ¡Mis buenos amigos! ¡Éste niño necesita ayuda, ahora a curarlo!- dijo él hacia Eddie, quien rodó sus ojos con molestia.
- ¡Ya cállate , Einstein! Sé lo que tengo que hacer- dijo el pequeño castaño.
- Bien, creo que debo irme- dijo María suspirando- Bill , te encargo a ese galán- dijo lo suficientemente alto para que Ben la escuchara y éste le sonrió tímidamente.
- Oye, ma-mañana iremos a la cantera y quería sa-saber si querías venir con nosotros- dijo Bill invitandola- Beverly t-también irá creo.
- Me gustaría , creo que iré un rato- dijo María comenzando a irse - ¡Adiós chicos!- gritó ella despidiéndose.
- ¡Adiós María!- dijeron todos agitando sus manos.
•••
Era el comienzo de un nuevo día de verano en Derry, el calor había disminuido y la mañana estaba llena de brisa y cantares de aves.
- ¡Buenos días escuincla!- se oyó gritar a Tomás del otro lado de la puerta- ¡Ya deja de roncar y baja a tragar!- gritó nuevamente.
Pero como casi siempre, aveces esas maravillosas y sublimes mañanas eran perturbadas por algo o más bien, alguien.
- ¡Cállate, culero!- gritó María en repuesta mientras se levantaba de mala gana.
Minutos después María bajó ya duchada y lista para poder desayunar, en el comedor la esperaban Tomás y Darío.
- Bueno hasta que al fin haces acto de presencia ¿No?- dijo Tomás con falsa decepción y María le mostró el dedo de en medio disimuladamente.
- Buenos días ,mija- dijo Darío.
- Buenos días pa'- dijo María tomando asiento y sirviéndose jugo de naranja.
- ¿Harás algo hoy?
- Si, se puede decir que tengo planes-dijo María mordiendo una rodaja de pan tostado con mantequilla.
- ¿Con quién vas a hacer esos mentados planes?- preguntó Tomás con una ceja alzada y María rodó sus ojos para luego mirarlo con fastidio- ¿Qué? Sólo pregunto ¿No puedo o qué?
- Eres un sangrón- le dijo María con una expresión de fastidio.
- Iris in singrín- repitió Tomás con voz aguda haciéndole burla.
- Bien niños, tú ,por favor deja de chingar a tu hermana- dijo Darío señalando a Tomás quien alzó sus brazos en rendición- Y tú, diviértete- le dijo a María y ésta sonrió- Debo irme ,así que los veo más tarde- Darío se levantó de la mesa, revolvió un poco el cabello de Tomás y besó a María en la mejilla para luego salir de casa, dejando a los hermanos solos.
Pasó alrededor de una media hora en el que los hermanos desayunaban entre risas y chismes, eran raros pero especiales las pequeñas cosas que compartían.
- Bueno , te dejo, mis amigos me esperan- dijo Tomás levantándose de la mesa y yendo donde María y abrazándola por detrás- Oye, tú sabes que puedes contar conmigo ¿No? Pa' las que sea y si ves que te jodo mucho es porque quiero que estés a salvo y...porque también me gusta joderte la paciencia-le dijo con una sonrisa y María rió.
- Lo sé Tom, sólo no te pases o te parto tu madre- dijo y Tomás soltó una risita para luego besarla en la cabeza y se fue.
María suspiró, la chica guardó todas las cosas del desayuno, se colocó sus botines negros planos y salió de casa, ella se preguntaba a sí misma que harían en la cantera, si esos niños pensaban tirarse del acantilado estaban locos. De pronto mientras tenía su mente distraída, alguien en una bicicleta frenó frente a ella.
- Hola María- era Beverly pero ésta estaba diferente, su precioso cabello pelirrojo largo ya no estaba , ahora era corto y no es que no fuera lindo ahora, siempre lo fue, pero el cambio desconcertaba un poco a María.
- Hola Bevly- saludó devuelta y mencionando el apodo que le había dado a la pelirroja de cariño.
- ¿Te perdiste? Si quieres te llevo- sugirió Beverly.
- No me perdí, sé donde queda pero no me molestaría que me llevaras, así me ahorro caminata- respondió la azabache y seguido de eso se subió en la parte trasera de la bicicleta.
Las dos chicas partieron hacia la cantera , en el camino las dos chicas hablaban de diferentes cosas, una de ellas era si alguien te había empezado a llamar la atención, Beverly dijo que tal vez había uno pero no dió detalles al respecto, luego le tocó a María responder y extrañamente al oír la pregunta no respondió, pero el primer chico que se le vino a la mente fue Patrick, sí, el mismo Patrick Hockstetter, la azabache no pudo creer como su mente la traicionaba de tal forma.
- Llegamos- anunció Beverly y María algo ida se bajó de la bicicleta.
- Vaya ¿Tan pronto?- María había estado tan metida en sus pensamientos que no se dió cuenta que habían llegado- ¿Ves a los chic...
María dejó de hablar para luego fijarse en el grupo de cinco chicos frente a ella que formaban una hilera casi en el borde del acantilado, pero eso no era lo que llamo la atención de la azabache, los chicos estaban en ropa interior ,María no pudo evitar esbozar una sonrisa divertida y ella no era la única ya que su amiga pelirroja también sonreía viendo la escena.
- O-oigan ¿Quién salta?- se oyó preguntar a Bill, Beverly miró a María con una mirada decidida y comenzó a desabrochar su vestido floreado.
- Yo primero- dijo la pelirroja llamando la atención de los chicos quienes miraron atrás- Maricas- bromeó y los chicos quedaron impactados al ver como ella dejaba caer su vestido y corría determinada hacia el acantilado.
Beverly al llegar casi al borde, dió un pequeño salto y cayó directamente al agua.
- ¡Oh maldición!- exclamó Richie sorprendido.
- Rayos, fue increíble- comentó Eddie.
-¡No puedo creerlo, nos avergonzó una chica!- volvió a decir Richie, María sonrió y se les acercó.
- ¡Vengan!- gritó Beverly desde el agua.
El primero en saltar fue Bill, luego Ben, luego Stan, Eddie y por último Richie, mientras éstos se tiraban, María se fue adelantando y caminó por el bosque hasta dar a la parte baja del acantilado donde estaba la orilla del lago, al llegar vió enternecida como los chicos jugaban en el agua, se veía divertido, la azabache se sentó en una piedra que estaba cerca de la orilla y vió como Bill observaba disimuladamente a Beverly y ésta al darse cuenta sonrió, esos chicos eran una ternura.
- ¡Rayos! ¿Qué fue eso?- exclamó Richie.
- ¿Dónde?- decía Eddie.
- Justo ahí- Richie señaló en el fondo del agua en donde estaba, Bill se acercó y se sumergió.
- ¿Qué es?
- Una tortuga- dijo Bill emergiendo.
- ¿Hay tortugas ahí?- preguntó María desde donde estaba.
- Si- respondió Bill.
Después de unas horas los chicos salieron del agua y se reunieron en las rocas restantes de la orilla, María observaba con algo de diversión como los chicos miraban embobados a Beverly, quien se encontraba recostada en una toalla y tomando el sol, al parecer la pelirroja tenía la sensación de que la miraban por lo que miró en dirección a ellos y éstos desviaron su mirada rápidamente.
- No puedo creerlo, estamos de vacaciones y Ben trae un proyecto de historia- decía Richie mientras sacaba una carpeta de la mochila del mencionado sin permiso alguno.
- Es que cuando llegue aquí no conocía a nadie con quien salir y empecé a ir a la biblioteca- dijo Ben- Pero creo que fue buena idea ya que ahí fue donde conocí a María- volvió a decir mientras miraba a la azabache y ésta le sonrió.
- Quiero ver-dijo Beverly mientras se levantaba y se iba a sentar al lado de Bill y veían juntos la carpeta la cual tenía copias del libro de historia de Derry.
María, quien estaba al lado de Bill, miró unas copias que tenían una especie de noticia sobre un lugar llamado el Black Spot.
- ¿Qué es el Black Spot?- preguntó María.
- El Black Spot era un club nocturno que se quemó hace años- respondió Eddie- ¿No lo sabías?
- La verdad no, nunca pude salir de casa hasta ahora, así que , estuve desinformada de los acontecimientos de éste lugar - explicó María.
- Oh, lo siento- dijo Eddie apenado.
- Ya, tranquilo, no lo sabías.
María siguió observando las copias.
- Te hi-hiciste otro corte- comentó Bill de forma nerviosa refiriéndose a Beverly, quien no dijo nada.
- Tu cabello se ve hermoso Beverly- dijo Ben esta vez con más confianza.
- Gracias- respondió Beverly con una sonrisa, María miró al futuro triángulo amoroso con detenimiento "Parece que otro se unió a la conquista" pensó ella. María regresó la carpeta de Ben a las manos de Richie.
- Aquí sólo hay homicidios y...niños perdidos- dijo el pelinegro.
-Derry no se parece a ningún lugar que haya visitado- dijo Ben llamando la atención de María- Hicieron un estudio, resulta que aquí las personas mueren o desaparecen seis veces más que en todo el país.
- ¿Leíste eso?- preguntó Beverly sorprendida.
- Y hablo sólo de adultos, los niños es peor, peor como no imaginan- terminó de decir Ben dejando a todos conmocionados, especialmente a Bill y a María, quienes instintivamentese miraron entre sí.
María iba a preguntarle algo a Ben pero de pronto escuchó pisadas detrás de ella, María miró hacia atrás y le pareció haber visto a alguien escondiéndose entre los árboles a lo lejos.
- Tengo más cosas , por si quieren ver- dijo Ben y el único que negó algo asustado fue Eddie.
- Iremos- dijo Bill y todos se levantaron.
Bill miró a María quien seguía con su vista puesta en el bosque.
- María- la llamó y ésta la volteó a mirar- Iremos a ca-casa de Ben , él tiene cosas que pueden servirnos para la b-busqueda de Georgie y tu investigación ¿Vienes?
- Me gustaría ir , pero debo cerciorarme de una cosa ¿Podrías ir por mí y contarme todo después?- le pidió María mientras se levantaba.
- Si, c-claro.
- Gracias Billy Willy, adiós- dijo María despidiéndose de su amigo y adentrándose en el bosque.
María caminó por unos largos minutos buscando a aquel que pareció ver, ella no sabía si era su imaginación o era su mente jugándole una broma ,pero le pareció ver que esa persona era Patrick, "¡Puta madre! ¿Qué carajos me pasa?" Desde aquella pregunta que Beverly le hizo, extrañamente la azabache no pudo dejar de pensar en él ,a tal punto que ahora su mente estaba en su contra.
- Ese pendejo - se dijo María sacudiendo su cabeza para despejar su mente- Ay , la verdad no sé ni qué hago aquí , debí irme con los morros - se volvió a decir parando de caminar y decidida a devolverse, pero volvió a escuchar las pisadas , esta vez mucho más cerca y más cerca y más cerca hasta que ya harta de todo, cerró sus ojos y se giró lanzando un puñetazo a quien fuera que estuviera ahí.
- ¡Ah! ¡Demonios!- se escuchó y María abrió rápidamente sus ojos.
~Continuará~
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