— Ya sé cómo te llamas y a qué vienes.— Proclamó con orgullo Roselyn. Acto seguido, sin mediar nada más que unos instantes, la "chica" se volvió emocionada hacia mí mientras gritaba como niña pequeña:— ¡Nayeli!, ¡Nayeli! ¡Esta humana dice que vino a hablar conmigo!

¿Vas a actuar engreída o emocionada? Decídete. Bueno, supongo que si Andrea no la ve no importa que sea inconsistente... De hecho, conociéndola, probablemente no le importaría actuar así aun si su interlocutora la estuviera viendo.

— Por aquí.— Puse mis manos a ambos lados de la cabeza de Andrea y la hice mirar en dirección a Roselyn. Acción que seguramente se volvería irrelevante dentro de poco considerando lo inquieta que nuestra amiga, la entidad sobrenatural, suele ser.— Dice que sabe quién eres y qué vienes a hacer.

— Guau, ¿Lo dice en serio? No es que no confiara en tu testimonio, Yeli, pero aun cuando ya me contaste que podía hacer eso... ¡Sigue siendo sorprendente!— Andrea exclamó mientras me miraba con una gran sonrisa y agitaba sus puños en el aire. Nunca la había visto tan emocionada por algo.— Cuéntame, Roselyn, ¿Cómo puedes hacer eso?— Le preguntó ahora mirando a la chica, o más bien al lugar en el que ella no estaba.

—...— Roselyn me miró, luego miró a Andrea. Su mirada saltó entre las dos repetidamente un par de veces.

Creo que esta situación me resulta familiar...

— ¿No quieres responder?— Le pregunté a la chica al ver su comportamiento.

— ... Explicar cosas es aburrido. ¿Por qué no lo dejamos en que soy Roselyn, la súper-identidad imaginaria interdimensional y pasamos a hacer algo más divertido?

Muchas veces me he preguntado... ¿Por qué Roselyn parece tan reacia a hablar sobre su naturaleza? No me da la impresión de que esté ocultando algo, quiero decir, ¡es un libro abierto!. Con el tiempo, una hipótesis empezó a surgir en mi mente: tal vez simplemente sea algo demasiado complejo como para explicar, sobre todo en el limitado tiempo que ella tiene cada vez que nos ve. Si yo solo pudiera interactuar con el mundo una limitada cantidad de tiempo por vez... Creo que también preferiría usar ese tiempo para disfrutar yo misma, en vez de gastarlo respondiendo las interminables preguntas de los demás.

— Pues, no es tan así, Nayeli.— Dijo Roselyn, como respondiendo a mis pensamientos.

— Ah ¿no?— Estaba algo sorprendida. Por su respuesta, no tanto porque respondiera a mis pensamientos, ya me estoy acostumbrando a lo segundo.

— Aunque también tienes razón en algo: prefiero pasar mi tiempo haciendo cosas divertidas. Pero tampoco es que tenga un límite de tiempo para estar aquí.— Roselyn me explicó mientras negaba con la cabeza.

— ¿Cómo que no? ¿Y todas las veces que te esfumas en una luz mientras dices que no te queda tiempo?

— Eso lo hago cuando lo que estemos haciendo ya se está volviendo monótono, eso no es divertido. Por otra parte, ¿no es mucho más dramático despedirse así que como lo harían ustedes normalmente?— La chica se encogió de hombros, aparentemente sugiriendo que lo que está diciendo es una obviedad.

Nunca me sentí tan traicionada en mi vida. Al pasar ese pensamiento por mi cabeza, Roselyn rápidamente se sobresaltó, y se apresuró a pedirme disculpas. ¿Realmente se preocupó por mis sentimientos? ¿O ella ya sabía que en realidad no estaba tan enojada, y solamente está actuando dramáticamente, como se ve que le gusta hacer? Algo me dice que no obtendría respuesta, aun si le preguntaba con palabras. Lo que es seguro: me divirtió, no pude evitar reírme un poco con la situación.

— Ejem... ¿Ya terminaron de contarse secretitos? Les recuerdo que hay alguien más con ustedes.— Andrea, quien ahora estaba cruzada de brazos, me preguntó cuando dejé de reir.

— Ah, Sí, claro, deja que te ponga al día.— Le conté a Andrea sobre lo que hablé con la súper-identidad imaginaria interdimensional.

— Eso no es justo, Roselyn, ¿por qué a Yeli sí le explicas lo que quiere saber?— Andrea hizo un puchero y cuestionó a Roselyn tras haber escuchado mi recuento de los hechos.

Espera, está... ¿celosa?

— ¿Eh?... !Ah!— Exclamó Roselyn con sorpresa.

Espera... ¿no se dio cuenta de lo que estaba haciendo?.

Ains, estas dos... Le dije a Andrea que la chica no se percató de lo que estaba haciendo. A partir de ahora, para ahorrarme explicaciones, empezaré a omitir mis intervenciones para explicarle a Andrea las palabras de Roselyn. Si ellas mantienen una conversación coherente de ahora en adelante, que sepan que es gracias a mi intervención.

— ¿Y si tú le haces mis preguntas, Yeli?— Andrea me preguntó de un momento a otro con cierta emoción, como si hubiera dado con una idea brillante.

— ¡No creas que caeré en un truco como ese!— Roselyn se quejó agitando los brazos. Si todos la vieran, y decidieran ignorar sus extravagantes ojos y cabellos, pasaría perfectamente como una niña de doce años cualquiera.

— Entonces, ¿qué quieres que hagamos para divertirnos?— Le preguntó Andrea a Roselyn.

— Solo quieres que baje la guardia mientras jugamos para que te diga lo que quieres saber, ¿verdad?— Roselyn no parecía desconfiada de Andrea. Más bien parecía que quería que esta fuera más honesta con sus palabras, ella sabía sus intenciones, después de todo.

— Tal vez, pero míralo de esta forma: tienes aquí a dos personas que voluntariamente jugarán contigo, los detalles son irrelevantes ¿no?— ¿Acaba de incluirme a mí? Bueno, no es que no pensara unirme a ellas.

— ...Eres buena. ¡Está bien! Permitiré que te nos unas, eres amiga de Nayeli, al fin y al cabo.— Roselyn, ¿tú también?

Andrea y yo pasamos un rato jugando a lo que Roselyn propusiera. Cabe mencionar que sus propuestas fueron únicamente juegos de palabras, adivinanzas, verdad o reto... ese estilo de juegos. Andrea más de uns vez propuso juegos con más actividad física de por medio, me pregunto si quería poner a prueba las capacidades físicas de Roselyn. Desgraciadamente para ella, la chica se negaba en cada ocasión, probablemente para no dejar que Andrea la testeara.

He de decir, no pude evitar recordar las ocasiones en que hacíamos esto con Alex. Todo era tan similar, las tres jugando juntas, en un espacio que teníamos solo para nosotras. Ains, Alex, mi querida Alex, me pregunto si volveré a tener la oportunidad de hablar con ella pronto. Debería, ¿no?, La conversación de ayer significa que nos reconciliamos, ¿no?. Mientras pensaba cosas como esta, más de alguna vez me gané el regaño de Roselyn, quien me decía que me concentrara en el juego.

— 12:48, ya deberíamos volver.— Dijo Andrea mientras consultaba la hora en su celular. Por si no lo recuerdan: el horario de visita del jardín finaliza a las 13:00 horas.— Roselyn, ¿no vienes con nosotras?— Le preguntó a la chica.

— Nop.— Respondió tajantemente.

— Supongo que no me dirás por qué tanta insistencia en permanecer en el jardín ¿no?

— En efecto, qué bueno que empiezas a entender.

— Pero puedes salir si lo quisieras, ¿no?

— Sin comentarios.

Me pregunto si a Roselyn le parecerá divertido retenerle información así a Andrea. Bueno, mi amiga no conoce el significado de rendirse, cada vez que Roselyn evita una de sus preguntas ella tiene otra más. Para alguien como ella que le gusta recibir atención, debe sentirse en las nubes.

— ¿Al menos puedes guiarnos de vuelta al jardín?— Pregunté, estaba algo preocupada de que si era Andrea quien le preguntaba, ella se negaría a eso también.

— Ah, sí. Bueno, técnicamente seguimos en el jardín, pero entiendo a lo que te refieres, síganme. Andrea y yo hicimos caso y empezamos a caminar detrás de la chica.

— Así que sí este lugar también es parte del jardín... Definitivamente tiene esa escencia.— Mi observación resultó correcta— Pero no es una parte normal de éste ¿no?

— No he visto humanos por aquí, asumo que la mayoría de ellos no tienen la perspectiva necesaria para ver más allá de las tres dimensiones a las que están acostumbrados.— Respondió Roselyn, añadiendo un suspiro al final.

— No creo que ninguno tenga esa habilidad...

— Pues, la persona que construyó este jardín debe haberla tenido ¿no? De lo contrario este espacio no existiría.

— ¡¿Dices que la mamá de Alex puede?!— Siempre supe que ella es alguien genial, pero ¿en verdad tendrá súperpoderes como ese?

— ¿Así que la persona que construyó el jardín fue la mamá de Alexandra? No es de sorprender que ella tenga tanto talento entonces.— Mientras Roselyn decía eso, en algún momento que no pude discernir, estábamos de vuelta en un lugar familiar del jardín.

— Siento interrumpir su conversación, si es que lo hago. Yeli, ¿tú notaste el momento en que volvimos?— Me preguntó Andrea.— Yo no, y estuve atenta todo el tiempo.

Así que por eso estaba tan callada y pensativa mientras seguíamos a Roselyn.

— fufufu... En fin, nos vemos, Nayeli. Andrea... err... ¿Un medio por nos vemos? Sí, dejémoslo en eso.— La chica desapareció en luz como es costumbre.

Habiéndonos quedado Andrea y yo solas, me volteé hacia ella.

— Respondiendo a tu pregunta: No, no lo hice, pero creo que tengo una idea de lo que pudo haber pasado con eso.

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Muchas gracias por leer el capítulo 10 + 1

Otro capítulo corto, pero aquí es donde debió haber acabado el capítulo anterior xD Sorry por eso.

No hubo capítulo la semana pasada, pero no se preocupen, no he perdido la apuesta con mi hermano. Ah, y no le teman al hiatus, los capítulos seguirán publicándose semanalmente de ahora en adelante.

En fin, bye~~