🌸2. La tarjeta roja de los F4🌸
Hany
El Suho que conozco es muy diferente al Suho de esta realidad. Para empezar él solía ser muy bromista, extrovertido, hablador y tenía un gran talento para la música, mientras que aquí es más reservado, inteligente, serio y aunque carismático se ve elegante y discreto, totalmente diferente a la imagen que tenía sobre él en mi otra vida. Además de ser un estudiante modelo, tenía entendido que él jamás se metía en peleas o cosas por el estilo, por algo era el delegado de la clase así qué cuando Seomin me dijo sobre la tarjeta roja que recibió no supe como reaccionar.
El pasillo estaba lleno de estudiantes de grados inferiores y superiores todos estaban listos con globos de agua o lo que al menos supuse eran globos llenos de agua y no otra cosa como pintura o algo parecido. En serio esperaba que no fuera otra sustancia líquida. En fin, estaban cerca del casillero de Suho y tuve que abrirme paso entre los que estaban parados observandolo para llegar hasta él. En medio de todo ese caos, escuché los murmullos de unos cuantos chicos, que me dieron una idea de lo que sucedía.
—La familia Kang, dueña de Z.A.I.C sorprendió a todos al declararse en bancarrota cuando su compañia de animación y entretenimiento fue absorbida por la empresa Shinhwa —es lo que apenas pude llegar oír en un noticiero del celular que llevaba uno de ellos.
Los Kang son la familia de Suho y eran accionistas minoritarios de la cooperación Shinhwa. Su compañia se dedicaba a la animación de webtoon, por lo que era todavía poco reconocida y valorada, para esa época en donde los kdramas estaban de moda y eran más populares. Además había escuchado que el grupo Shinhwa y los padres de Suho no estaban en buenos términos, por así decirlo, pero aún así no veía razón para que tuvieran que tomar represalias contra su hijo. A fin de cuentas él no tenía ni la más mínima idea de los negocios de sus padres, al menos, aún no.
—El señor Kang era un egocéntrico.
—Siendo solo un accionista minoritario, se creía la gran cosa para tomar decisiones por todos.
—Su hijo es igual que engreído que ellos, se cree superior solo por tener notas un poco altas.
—Es verdad, su familia fracaso por eso —comentaron todos en voz alta.
No les importaba si los oían o no, eso estaba claro. Llegué hasta donde estaba Suho y lo ví con la cabeza agachada, mientras veía la tarjeta roja en sus manos, la apretó en un puño antes de tirarla al suelo; pero apenas hizo eso un globo de agua dio contra la cabeza. Él no dijo nada y solo retrocedió unos pasos hasta toparse con los casilleros.
Pensé que si el chico que salta desde la azotaba resultaba ser Suho, entonces él debía ser rescatado por Jandi y quizá no fuera buena idea que yo interviniera para cambiar el flujo de la historia, pero algo en mí seguía sintiendo que eso estaba mal y que no podía quedarme callada.
—¡Detenganse! —la primera vez que lo dije fue como un susurro—.¡Detengase! —empecé a pensar que estaba mal interferir pero no podía detenerme—. ¡Detenganse ahora! —grité con todas mis fuerzas para llamar su atención.
—Hany ¿Qué te pasa? —me dijo Seomin a modo de reprocharme disimuladamente, ella quería que me callara de inmediato.
—Esto esta mal, ¿Por qué demonios piensan que pueden tratar a alguien así? ¿Es tan importante para ustedes qué alguien sea multimillonario? —les reclamé poniéndome delante de Suho.
—Deja eso. Todos aquí saben muy bien que mientras más dinero y bienes materiales, tengan nuestras familias seremos más valorado y sino, bueno será mejor que nos marchemos antes de recibir una tarjeta roja de los F4 —mencionó uno de los chicos que tenían preparados más globos de agua listos para arrojarlos nuevamente hacia Suho.
—¿En serio todos aquí tienen esa mentalidad tan inútil? —pregunté con ironía.
Aquel chico no lo pensó dos veces y me aventó uno de los globos llenos de agua a la cara, mala suerte para él, pues durante mi tiempo escolar en mi otra vida era la campeona indiscutible de quemados en mi escuela. Sabía bien que ese globo no era igual que la pelota que solía manejar, pero me las arreglé para atraparlo en el aire y devolverle el tiro.
El globo de esa ocasión contenía pintura verde y reventó de lleno en toda la cara del chico, lo cual provocó las risas de todos sus demás compañeros. Asumí que era la primera vez que se burlaban de él, por lo que jamás había sentido lo que le causaba a los demás cuando se aprovechaba de ellos, esta era una buena lección para ese perdedor.
—Ahora la recuerdo es la Camelia Salvaje de la preparatoria Ming en California —me señaló una de las chicas de mi clase.
—Es cierto, Hany Park la belleza fatal con personalidad de leopardo —añadió otro estudiante.
—Yo no me metería con ella, me voy.
—Yo opinó igual —uno por uno y luego todos se marcharon rápidamente.
¿Camelia salvaje? ¿Leopardo? Creó que esos eran los apodos que tenía la dueña de aquel cuerpo en su otra escuela, pero bueno si me tenían miedo era mejor para mí. Así no se meterán conmigo, ni con mis amigos. Y hablando de amigos sabía que podía ser vergonzoso ser rescatado por una chica, pero aún así esperaba que él no se enfadara conmigo y fuera amigable, así que le extendí una mano cuando todo termino.
—Gracias —agachó la cabeza una vez y se fue rápidamente.
Suho era amable como siempre, pero al parecer había dañado su orgullo. De cualquier modo tuve que seguirlo para asegurarme de que la historia no comenzará sin mí. Si es que era el chico que Jandi estaba destinada a salvar, quería estar ahí para no perderme ningún detalle y bueno no esperaba que eso pudiera ser un gran problema.
❀❀❀
—¿En dónde está? —Junpyo se veía muy enojado al buscarla —. ¿Donde rayos se metió? ¿Cómo se atreve a interfirir y quitarnos la autoridad de la escuela? —se quejó derribando una tras otra las puerta, delante de él revisando los salones del pasillo en donde estaba, junto a los F4.
—Ya cálmate Jun Pyo, no es para tanto. Además tú mismo dijiste que le darías una lección. Eso fue lo que hiciste con el hijo del señor Kang ¿No es así? —Yi Jeong trató de hablar con él y tranquilizarlo antes de que derribara media escuela.
—No fue por eso, Kang no tiene nada que ver —aseguró—. Tenía planeado dejarla pasar porque era nueva y en realidad no hizo nada tan relevante, pero ahora realmente le daré una lección —el líder de los F4 se veía decidido al querer vengarse de Hany.
—¡Aish! En serio no te entiendo. Solo defendió a ese chico, la escuela sabe que está bajo tu mando, eso no cambiará por una chica —replicó Woo Bin.
—¡Salve reina Camelia! —se escuchó una ovación de los estudiantes en honor a Hany.
—¡Camelia salvaje soy tu fan! —exclamaban un grupo de estudiantes de primer año.
—¿Qué decías? —le preguntó Jun Pyo con sarcasmo.
—Bueno, eso... —Woo Bin no supo como responderle.
—Insubordinación, si lo dejamos pasar una vez. Los demás estudiantes creerán que está bien saltarse las reglas y defender a patéticos tipos como ese. Si eso pasa entonces, nada de lo que hagamos podrá remediarlo. Es por eso que la atacaré directamente esta vez. Nada puede salir mal —se dijo Junpyo así mismo, mientras pensaba en una trampa para hacer caer a Hany ante ellos.
—Aún pienso que es un error, los Park tienen buenas conexiones y son los únicos que aún no están vinculados con el grupo Shinhwa —le recordó Woo Bin.
—Es verdad, si tu familia hace un trato con ellos quizá lo que hagas ahora afecte más tarde las negociaciones. —Yi Jeong intentó de convencerlo de echarse para atrás con la venganza, pero sabía que no tenía muchas posibilidades de lograrlo.
—No importa, también cuento con eso —replicó Jun Pyo—. Por cierto ¿En dónde está Ji Hoo?
—Debe estar durmiendo en algún lugar de la escuela, no me preocuparía mucho por él, siempre hace lo mismo —les recordó Yi Jeong.
Mientras tanto Ji Hoo, seguía los pasos de alguien que a simple vista le pareció interesante. Por la forma en la podía hacer que sus amigos perdieran el control y que toda la escuela la respetará en cuestión de segundos, sumado a la forma que tenía de ver las cosas, era lo que lo tenía tan intrigado y no planeaba perderse nada de lo que ella haría de ahora en adelante.
—Hany Park ¿Qué clase de chica eres? —se preguntó Ji Hoo mientras la observaba de lejos.
Hany caminaba ocultándose detrás de los estudiantes para que Suho no la notará. Ella planeaba seguirlo y ver si la historia que tanto adoraba y por la que se desveló varias noches, por fin daba inició. Sus sospechas serían resultas al cabo de unos pocos minutos, cuando una gran conmoción iniciara, por el anuncio de que uno de los estudiantes de esa escuela, iba a saltar desde la azotea de uno de los edificios, pero ese estudiante no era Suho.
Continuará...
Bonus:
—Min Ha recibió la tarjeta roja de los F4.
—Dos en un día, vaya inicio de clases. —Se rumoreaba en los pasillos.
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