Tras el paseo, el grupo fue a comer y después a dormir un rato, hasta que llegara la hora de una excursión a la playa que estaba planeada a las seis de la tarde. Nikki y Marge, tras saber lo que se traían entre manos sus amigos, decidieron ser más amables con Jessica. Intentaron convencerla de que siempre que quisiera podría ir con ellas, que no tenía porqué estar sola, pero la castaña tan solo agradeció sus intenciones y salió al balcón de la habitación a escuchar música mientras ellas se echaban la siesta.

Logan la observaba sin que se diera cuenta desde su balcón, a unas seis o siete habitaciones de distancia. La chica se había quitado la capucha momentáneamente y su cabello castaño, corto y ondulado, bailaba sobre su rostro. Ni los auriculares impedían su movimiento. Miraba la playa perdida en sus pensamientos y Jessica no se había dado cuenta de que estaba siendo observada.

El joven sintió un cálido escalofrío recorrerle pero no entendió el porqué. Algo confuso, volvió a la habitación en el momento justo en el que la castaña miró en su dirección, y vio perderse en el umbral de la puerta a una sombra que no identificó. Al igual que Marge y Nikki, Ian y Jared dormían emitiendo profundos ronquidos a los que Logan ya estaba acostumbrado: habían ido de acampadas y habían pasado semanas enteras juntos para viciarse a la PlayStation. Sonrió al ver a sus amigos, pero se preguntó si de verdad consideraba que hacerle daño a Jessica era su billete a la fama.

Tampoco estaba seguro de si escondía algo. A lo mejor la chica era así o no había motivo alguno por el que hubiera dado semejante cambio. A lo mejor se cansó de ser simpática. A lo mejor olvidó cómo sonreír.
A lo mejor la habían herido y le habían robado la alegría.

Eran muchas posibilidades y ninguna era cierta. Logan no le dio más vueltas: averiguaría que ocultaba, y si era muy fuerte, se lo guardaría para él. Una parte muy honda de su ser le suplicaba acercarse a Jessica, tan solo para verla y conocerla, más que por sus inmensas ganas de indagar en sus secretos.

¿Por qué le llamaba tanto la atención la amargada de la clase? ¿Desde cuando sentía culpabilidad por hacer algo así? ¿Desde cuando había sentido tanta paz observando a una chica? ¿Desde cuando... Desde hace cuanto la miraba sin siquiera darse cuenta?