Liam

Desperté a la mañana siguiente sobre el pecho de Zayn, levanté mi rostro creyendo que lo encontraría dormido pero no fue así. Sus ojos transmitían preocupación y coraje, su mirada estaba clavada en algún punto de la habitación, no se movía y de alguna manera me sentía preocupado también.
Giré un poco mi cuerpo para quedar a horcajadas sobre él, tenía toda la intención de hacerle sonreír, no me gusta cuando su carita transmite tristeza, eso es tan duro para mi.

__Zayn ¿qué pasa?__susurré contra la cálida piel de su mejilla, sólo en ese momento su mirada se desconectó de donde quiera que la tenía para llagar a mi. Sus ojitos no tenían tanto brillo como siempre.

__¿Sabes quién es Louis?

__Se que es tu mejor amigo__me había contado muy poco de él y la verdad es que yo no tenía ni la más mínima intención de preguntar más, no me gustaba la arrebata vuelta que daba el ambiente al mencionar su nombre.

__Bien, creo que esto lo tuve que hacer hace tanto tiempo__susurró pasando sus deditos entre su cabello, estos estaban más que alborotados dando un aspecto tierno e infantil a mi novio__bueno él era mi mejor amigo, un día salimos a una fiesta, no le recuerdo del todo bien, salimos del lugar cuando ambos estábamos más que seguros de no aguantar una gota de alcohol más, todo iba bien, estaba pasando una de las mejores noches de mi vida en compañía de mi mejor amigo. Irresponsablemente veía conduciendo, se que no lo tenía que hacer, pero. Dios, lo hice. Cantamos a todo volumen, reíamos y hacíamos chistes, de un momento a otro el trató de tocarme argumentando que le gustaba, yo no sabía que hacer, siempre lo quise como un amigo, como mi mejor amigo. Perdí el control del auto y sufrimos un accidente, yo por mi parte salí casi ileso, pero Louis entró en coma y milagrosamente despertó hace unos días. Yo me siento tan malditamente culpable, quería morirme y ser yo el que estuviese en esa cama, estaba jodido. Pero tú estabas para mi, fuiste esa pequeña luz en mi obscuridad y hasta el momento lo sigues siendo__abrí mi boca tratando de formular una buena respuesta, no sé qué decir, no se como actuar.

__Mi padre me trató tan mal, me trata tan mal. Aunque era mi auto el había pagado todo, me exigió buscar un trabajo para reparar los daños que causé en ese accidente, creo que a final de cuenta esto me sirvió, gracias a conseguir ese empleo puedo disfrutar de tenerte__continuó con su relato acariciando la miel de mi espalda baja, para este momento yo estaba sobre él completamente, mi cabeza estaba recargada en su hombro y con una de mis manos repartía cariño a su pecho rodando mi dedo sobre este repetidamente__en alguna ocasión me quería obligar a mantener una relación con uno de los hijos de su socio, puedes imaginarte la mierda de persona que es, un jodido cavernícola entre estos tiempos. Él metió pensamientos homofóbicos en la cabeza de mi madre, ella no me acepta más, creo que no me quiere más,mi padre dice tantas cosas malas sobre mi. Me duele, pero no puedo hacer nada.

Oh Dios, quiero jodidamente llevarlo a casa, meterlo en alguna especie campo de fuerza y no dejar que alguien lo toque nunca más. Ni siquiera yo. Temo tanto poder lastimarlo, no me gustaría que sufriera por mi culpa. No quiero que llore más. No lo quiero ver sufrir.

__A-amor__a este punto yo me permitía llorar libremente, no podía decir nada, mi boca parecía sellada y mi pecho quería estallar diciendo miles de te amo y palabras bonitas para hacerle saber que estaba ahí,que nunca lo dejaría y que en ese instante estaba prometiéndome yo mismo cuidarlo siempre, aún así mi vida dependiese de eso.

__No llores, nada de lo que me pasa merece una lágrima tuya, nada que tenga que ver con mis desgracias merece que sufras, te tengo a ti ahora, eres mi luz, mi pequeño sol particular__lo abracé con fuerza, con demasiada fuerza. Aferrándome a su cuerpo. Y aunque suene raro yo no quería abrazarlo para unir todas sus partes desechas. Yo malditamente quería abrazarlo hasta romperlo y después de eso unir sus partes con todo el amor del mundo. Quería que no tuviera ningún recuerdo doloroso.

__Te quiero tanto, Zayn. Te quiero tanto que duele__me dolía saber que seguramente lloraba por mucho tiempo, que aunque estuviese pasando por eso para mi siempre era la persona más bonita y cariñosa del mundo. Me dolía saber que no pude cuidarlo como quiero. Me dolía saber que su vida fue una dolorosa mierda.

Y yo estaba prometiéndome con todo el amor que le tengo que lo haría feliz, el hombre más feliz del mundo.

Mis lágrimas seguían corriendo libres por la extensión de mi rostro, no hacia nada por quitarlas, no tenía ganas de hacerlo. Poco a poco levante mi rostro esperando encontrarme con su mirada.

Zayn no lloraba.

__¿Estás bien?__susurré posando mi mano en su mejilla, asintió recargándose en mi toque, le sonreí mientras dejaba tiernas caricias en su cabello.

__Tenemos que ir a casa__soltó de la nada, abrí mis ojos más de lo normal mirándolo con atención, no sabía que tenía en mente, ni siquiera podía preguntar el porque de sus decisiones, pero sus ojitos eran víctimas visibles de un fuerte dolor.

__¿Ahora mismo?

__Ahora mismo__acepté poniéndome de pie y llevando conmigo a Zayn en dirección al baño, abrí las llaves de agua midiendo una buena temperatura y cuando estuvo bien quité su ropa delicadamente mirándolo en todo momento con adoración infinita.
Lo llevé conmigo hacia adentro del caer de la regadera, dejé que su cuerpo se mojase un poco antes de mojar el mío también. Zayn lo decía nada y aceptaba mis caricias mirándome a los ojos. Lavé su cabello con shampoo olor a vainilla y tallé su cuerpo con una esponja color rojo. Movía mis manos con la esponja en ella por todo su cuerpo asegurándome de dejar limpio todo a mi paso. Lo continuaba mirando con adoración y amor. Besé sus labios una vez los dos estuvimos completamente limpios y después de enrollar una toalla en nuestra cintura salimos del baño directo a la cama.

__Definitivamente eres mi rayo de luz, mi pequeño sol__soltó de la nada, me volteé a verlo rápidamente. Me miraba con una sonrisa sincera y amor puro__gracias por todo,te amo muchísimo__y santo Jesús. Era la primera vez que uno de los dos decía "Te amo" se sentía tan bien y correcto. Quería probar cómo se sentía en mis labios esa palabra cuando era dirigida a Zayn. Quería decirle que también lo amaba.

__Te amo también, bonito__sonreí acercándome a él. Junté mi frente con la suya y acaricié su nariz con la mía. Mis labios parecían hormiguear ante lo bien que se sentía decirle a Zayn que lo amaba.

Porque si, amo a Zayn.