Capítulo dedicado a  @GranRambo

  -Esa noche Damián no podía dormir, por lo tanto se fue en su auto eso lo relajó, llegó a un pueblito solitario, dejó su coche a la entrada del poblado escondido en una arboleda, se adentró en el pueblo caminando, pronto encontró a una mujer solitaria por su vestimenta supo que era una mujer galante, ella lo vio por el lado derecho y caminaron hasta su vivienda muy cerca de dónde había dejado su coche, cuando llegaron a la casa la mujer prendió la luz y cuando volteo y vio de frente a Damián, lanzó un grito de terror.

-No te asustes por mi aspecto, el fuego me hizo esto, pero mira tengo dinero, para pagar tus servicios.

-La mujer al ver la abultada billetera de Damián cambió su expresión de horror a una más agradable, se quitó la ropa y lo mismo hizo Damián, sólo se dejó la  mascada en su cuello, la mujer la tocó con la punta de los dedos mirándola con fascinación Damián se quito la mascada y le pregunto. 

-¿Te gusta mi mascada? 

No le dio tiempo a contestar le puso la mascada en su cuello diciéndole.

-Es tuya.

-La mujer quedó encantada  se dispuso hacer el amor con ese hombre que tuvo ese detalle tan lindo con ella, en un momento dado Damián empezó a apretar su cuello, ella al momento recordó, la alerta que había puesto la policía y antes de perder el sentido metió la mano debajo de la almohada sacó un puñal y trato de apuñalarlo, pero este fue más rápido quitándole el puñal a la mujer, se lo encajo en el corazón, la sangre salió a borbotones, Damián sintió más placer del que jamás se imaginó, su cara se bañó de la sangre, se estuvo un largo rato encima de la mujer hasta que salió de su éxtasis, de pronto escuchó pasos que se pararon en la puerta tocaron  y una voz se escuchó a través de  esta.

-Elisa, Elisa ábreme la puerta, traigo dinero para pagar tus favores, si no me abres entraré a la fuerza.

Damián quedó petrificado, rápidamente tomó sus ropas, se vistió rápido sin importar que su cuerpo estuviera totalmente cubierto de sangre, le quito la bufanda a la mujer envolvió el puñal en la mascada y salió por una ventana que daba a espaldas de la entrada, corrió por la callejuela desierta  hasta llegar a su auto y no paró hasta llegar a la casa azul, entrando por la puerta del jardín ya dentro se fue directamente a su habitación, tomo un baño de tina, inmediatamente el agua se tiñó de rojo, el reía como poseído.

-Pero qué noche, esto es lo que mi padre debió sentir cuando apuñalaba a una mujer, es lo máximo, iba a escribir en su diario su escalofriante crimen, pero desistió estaba demasiado excitado se quedó un buen tiempo en la tina de baño jugando con el agua teñida de sangre hasta que sintió frió le quito l tapón a la tina, se enjuago el cuerpo con agua limpia y se dispuso a limpiar muy bien el baño no fuera que por un descuido de su parte descubrieran que el era el asesino de mujeres que traía loca a la policía esa tarea lo hizo olvidarse de escribir en su diario.

-Al siguiente día, los diarios sacaron una escalofriante noticia.

-¡El asesino Pedro Gil, ha vuelto a matar, regreso del más allá!

Escalofriante asesinato de una mujer galante, todo parece que la mató un hombre que usó el mismo método que el legendario asesino Pedro Gil que mató a varias mujeres en los años 1900, famoso por su forma de matar a sus víctimas estrangulándolas,  y apuñalándolas  el legendario asesino fue linchado por la muchedumbre en el año 1911, no se sabe el número total de sus asesinatos, la población cansada de sus múltiples crímenes, lo persiguieron hasta un paraje en el mismo lugar donde años más tarde fue construida la casa azul, la policía no tiene ninguna pista, pero dicen que no van a descansar hasta dar con el asesino, se cree que el criminal actual se inspiro en el legendario asesino para cometer su escalofriante crimen.

Damián leyó la noticia y sintió un placer indescriptible, sintió el deseo de matar a más mujeres para hacerle honor a su padre.

La voz de Adán lo sacó de sus pensamientos.

-Señor Damián tiene una llamada por teléfono dicen que es urgente.

-Está bien voy para allá.

-¿Bueno quien habla?

-Señor, hablo del despacho del señor Sergio Delgado Jr. le urge hablar con usted.

-¿Y qué quiere? Yo no tengo nada que hablar con el.

-Aquí le pasó al señor Sergio.

Sergio tomó aire, y trató de ser lo más convincente en lo que le iba a decir al asesino de su padre.

-Señor Damián me urge hablar con usted urgentemente.

-Yo no tengo nada que hablar con usted.

-Si no fuera tan importante no lo molestaría  se trata de su herencia, tenemos que hablar es urgente.

-¿Dice usted que se trata de mi herencia?

-Sí, señor es un asunto delicado, que no se puede tratar por teléfono.

-Está bien cuando quiere verme.

-Sí puede ahora mismo, no lo voy a tardar mucho.

-Muy bien enseguida voy para allá.

Rápidamente Damián se dirigió al despacho del administrador todo lo que refería a dinero era música para sus oídos, cuando llegó pasó directamente a la oficina de Sergio.

-Bueno aquí estoy  ¿qué es lo que pasa con mi herencia?

-Mire señor, el últimos informe del doctor dice que doña Blanca tiene los días contados, en cuanto esto suceda usted será el dueño de la fortuna de la señora, como usted en algún momento me lo hizo saber, a usted no le interesan las propiedades solo el dinero.

-Así, es a mí solo me interesan las propiedades del extranjero, la casa de París, la de Venecia, la de Suiza también la de Estados Unidos.

-La señora Blanca es propietaria de una hacienda que se encuentra en el estado de Chiapas hay un comprador extranjero, él quiere tratar la venta con usted personalmente.

-¿Pero eso no lo puede arreglar usted personalmente?