Damián empezó asistir a la doctrina, pero casi siempre se salía de la iglesia y se ponía a jugar, un domingo el padre Zermeño abordo a madre e hijo a la salida de misa.

-Damián me dice la catequista, que casi no asistes a la doctrina, que está pasando si sigues faltando no vas a estar preparado y no vas a poder hacer tu primera comunión

Antes de que su madre empezara a hablar Damián inmediatamente dijo, poniendo su cara de pena.

-Te dije mamá que me iban a regañar, es que mi mamá siempre que ya es hora de venir siempre me pone hacer cosas, me dice, primero me ayudas y después te vas y se me hace tarde, padrecito, pero yo sí quiero hacer mi primera comunión.

Victoria se quedó asombrada, por la capacidad de mentir de su hijo, le dio miedo.

-¿Padre podría hablar con usted en privado?

-Claro que sí, hija vamos al curato.

-Padre, tengo mucho miedo por mi hijo.

-Pero por qué hija, tu hijo es un niño muy encantador.

-Por fuera, padre, pero por dentro mi hijo es malvado, tengo que contarle un secreto muy grave padre que guardo en mi corazón.

-Pero mujer, que secreto puedes guardar que sea tan grave como dices.

-Padre por favor déjeme que le explique  ¿Qué sabe usted de mi esposo?

-Lo que tú me dijiste, que había viajado a trabajar al estado de Veracruz y que había muerto ahogado en el mar.

-Le mentí padre, mi marido si murió, pero no ahogado a mi marido lo asesinaron.

-Pero hija, porque mentiste.

-Padre, mi marido, era el multi-asesino, de mujeres, al que mataron hace ocho años.

-Pero hija, que estás diciendo, que tu marido era Pedro Gil el asesino de mujeres.

-Si padre, todavía no me explico cómo no termine muerta como las otras mujeres, tengo el terrible presentimiento que mi hijo heredo la maldad de su padre.

-Pero hija que cosas dices, Damián es un niño muy bueno, además él está creciendo entre personas de buen corazón, tu eres un ejemplo de bondad y dedicación, recuerda que los niños aprenden con el ejemplo, quita de tu mente ese temor, Damián es solo un niño inquieto, y algo torcido, pero para eso nos tiene a nosotros para enderezar su camino, vas a ver como él sólito va a venir al templo para prepararse para hacer su primera comunión, ya lo oíste él quiere hacerla, tranquilízate y vamos a pedirle mucho a Dios por el niño.

-Gracias padre tiene razón, creo que mis temores son infundados.

Y el padre tenía razón a los pocos días Damián regreso a la doctrina y se aplicó mucho, pronto se puso al corriente con los demás niños, pero no por los motivos que el padre había dicho, si no por un motivo muy diferente.

-Damián te invito a mi fiesta de cumpleaños le dijo Cristina a Damián.

-A tu fiesta de cumpleaños ¿Cuándo es?

-Este domingo

-Este domingo, creo que no voy a poder ir.

-¿Pero por qué no?

-Es que mi mamá está enferma, y me sentiría muy mal, que yo me divirtiera mientras ella se queda  sólita en mi casa, me tengo que quedar con ella por si necesita algo.

-Qué bueno eres Damián otro niño en tu lugar, no haría eso, es por eso que me gusta ser tu amiga.

-Pero si mi mamá se alivia voy a tu casa.

-Mi fiesta no va a ser en mi casa, pero te voy a dar la dirección de la casa de mi madrina ella se empeñó en que la fiesta fuera en su casa, aunque no es necesario darte la dirección, todos conocen la casa azul.

-Damián abriendo desmesuradamente los ojos exclamo.

-¡Tú madrina vive en la casa azul¡

-Sí, Damián mi madrina doña Blanca es la dueña de la casa azul.

-Cristinita sería una majadería que no asistiera a tu fiesta, ya que tú eres mi única amiga, le voy a decir a mi madrina Cande, que le haga un remedio a mi mamá para que el domingo que sea tu fiesta, ya este aliviada, como no se me ocurrió antes.

A Cristina se le ilumino la cara de alegría, ¿entonces si vas a ir?

-Si Cristinita en todo caso si mi mamá sigue enferma le digo a mi nana Clara que la cuide un rato.

-Pero que estúpido soy, tengo tantas ganas de conocer la casa azul, que bueno que la babosa de Cristina me dijo que allí va a ser su fiesta, si no me hubiera perdido de conocer esa casa, si por fuera está muy bonita ya me imagino como esta por dentro.

La madre de Cristina fue a la casa de Damián.

-Señora Laura, pase por favor, tome asiento.

-Gracias Ana Victoria el motivo de mi visita es por dos cosas, primero para invitarla a usted y a Damián a la fiesta de cumpleaños de mi hija y en segundo lugar, encargarle el pastel, o más bien los pasteles, ya que van a asistir muchos niños.

-Gracias señora Evelia es un honor para mí hacer el pastel de su hija y asistir a la fiesta de la niña, en nombre de mi hijo y mía, le doy las gracias.

-Las mujeres se pusieron de acuerdo en la confección del pastel, y la hora en que pasarían por él, despidiéndose con un apretón de manos.