4:30 de la tarde.

a esta hora la gente o sigue trabajando o ya esta descansando, a excepcion de alguno idiotas que apenas se estan despertando, pero bueno.

mas o menos, a esta hora llegaron avelline y kris al "Paramo Bendito", kris no estaba muy seguro de conocer aquel lugar en donde estaban, las luces, el calor, y sobre todo, los inklings y octolings juguetones que normalmente estarian jugando combates territoriales..no habia nada...kris se preguntaba ¿que tenia esto de bendito?

-avelline ¿donde esta la gente?-pregunto preocupado kris.

-¡todo estan adentro!-dijo feliz avelline, mientras señalaba la puerta de lo que alguna vez fue el lobby.

-ese lugar...¿que es?-pregunto kris.

-es la sede de el lider, ¡alli estaremos seguros!-respondio avelline.

el sol y el calor casi inexistente tocaban aquella puerta, kris se acerco un poco para mirarla, definitivamente ya no era el lobby, estaba por tocar la puerta cuando avelline lo detuvo.

-¡hey! ¿que haces?-pregunto algo enojado kris.

-¡no puedes entrar asi como asi a la sede! ¡el lider debe permitirte entrar! mira, tocare, entrare, hablare con el lider y lo convencere de que te deje entrar y hablar con el, asi tendra informacion para tu mision esa ¿ok?-dijo avelline.

kris lo penso un poco, ahorraria energia, tiempo, y balas, acepto; avelline toco la puerta, mientras le señalaba a un arbusto sobre el cual esconderse, kris se escondio alli, hasta que la puerta se abrio y avelline entro, quizas habia algo que un kris promedio no tiene, paciencia, pasaron 10 minutos y kris sintio una eternidad pasar, hasta que la puerta se volvio a abrir.

de la puerta salio avelline, quien confusa buscaba con la mirada a kris, hasta que volteo al arbusto donde alli estaba.

-¡por el amor del Wommy! ¡tardaste una eternidad!-reclamo kris.

-kris...pasaron 10 minutos...-dijo sarcastica avelline.

-me vale, se sintio como una eternidad.

la chica miro a kris con cara de: "lo bueno es que yo soy la berrinchuda" , suspiro y continuo.

-oye, logre hacer que te dejaran entrar, solo hay un detalle.-dijo la chica.

-¿que detalle?-pregunto el chico.

-pues que no te van a dejar entrar con esa ropa...-termino avelline.

kris miro con un sonrojo minimo a la chica.

-¡no voy a desnudarme y menos en el frio!-reclamo el femboy.

-¡ay ya! ¡no seas chillon! ademas ¿quien dijo algo sobre ir desnudo?-pregunto la chica-lo unico que vas a hacer es cambiarte de ropa...-concluyo avelline.

-¡ah! ya, pense que me iban a desnudar, ¡jaja!-rio sin gracia kris.

avelline suspiro de nuevo, cansada y le entrego una ropa.

-mira pontela y podras entrar, yo ya entrare, toca la puerta cuando estes listo.

la puerta se cerro frente a kris, mientras este curioseaba la ropa, era bonita, solo que era de un empalagoso color blanco y unos toques de plateado, venia con guantes cortos blancos, botas de nieve blancas, ¡solo faltaron calzones blancos!

-vaya...¿que obsesion con el blanco tiene esta gente?

sin mas que hacer, con un frio extremo y una cara de idiota, kris se cambio de ropa, pero no se quejo, la ropa era calentita, estaba excelente, era un numero mas grande que su talla, perfecta.

-¡wow! ¡esta ropa es genial!-dijo feliz el octoling, volteo a ver su vieja ropa, y al nostalgia lo atrapo, a pesar de que solo llevaba unas horas con ella.

-no te dejare aqui...-tomo su ropa y la guardo en una bolsa, para posteriormente esconderla, enfundo sus armas y toco la puerta.

"¡toc, toc!"

el sonido retumbo en toda la ciudad, le cayo un poco de nieve encima, pues habia mucha acumulada, para que la puerta se abriera por un tipo.

el tipo miro de pies a cabeza a kris.

-¿eres el invitado?-pregunto.

-supongo-dijo kris.

el tipo, que por cierto estaba muy elegante, dejo pasar a kris, y este se maravillo al ver todo el gran salon.

-...wow...-fue todo lo que pudo formular

era el lugar mas elegante y ordenado que jama vio en su vida, habia tonos de azul que en su vida habia visto, tan hermoso, tan ordenado, tan marina... ver aquel lugar le recordo a marina, pues ella siempre fue muy ordenada, hubo veces en las que ambos convivieron, y si algo le tenia que agradecer a marina fue a enseñarle a ser algo ordenado.

-esto es...genial...-dijo kris.

-¡kris!-una voz pequeña y tierna lo llamo.

-avelline...¿esto es el cielo?-pregunto kris.

-¡no tonto! ¡este es la sede del lider! ¡ven te esta esperando!-avelline jalo a kris con ella, mientras este miraba con inklings y octolings trabajaban como hermanos para salir adelante, las elegantes mesas, los centros de entretenimiento, hasta tenian un lugar para los calamares y pulpos bebes, era todo tan...hermoso...

luego de ver aquellas maravillas, llegaron a una clase de elevador, elevador donde avelline se detuvo, por mucho tiempo.

-¿avelline? hey, avelline ¿estas bien?-pregunto kris, era como si su mente se hubiese quedado en blanco.

-¿ah? s-si, estoy bien, solo...me llegaron algunos recuerdos al ver este elevador...-dijo avelline-¡ven sube! ¡el lider te espera!-dijo feliz.

avelline y kris subieron en el elevador, donde se sentia una enorme tranquilidad, hasta que llegaron al piso.

-¡ven!-dijo avelline- te espera...

kris salio algo tembloroso, estaba por conocer al creador de aquella sociedad, lo visualizo como un hombre grande y fuerte, con cara de: "acercacate 2 milimetros y te rompo la columna" y el, el solo era un chico (pipipipi :c).

caminaron por un largo pasillo, hasta llegar a la puerta, avelline la toco

-pasen...-se escucho desde adentro.

al entrar se veia una gran oficina, llena de planos, luces y una enorme sillos que miraba hacia la ventana, el sillon se volteo, y una silueta encapuchada salio de el.

-¡Avelline! ¡Que gusto verte mi niña! ¡Creimos que te habias muerto!-dijo la voz, a estas alturas kris debio haber sabido si era chico o chica, pero no.

-¡estoy muy bien! ¡Todo gracias al invitado!-dijo avelline.

la silueta volteo a ver a kris, este se quedo paralizado, se acerco un poco, la silueta se quito la capucha.

-¡¿kris!?

-¡¿M-marina!?