Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝕋𝕣𝕖𝕚𝕟𝕥𝕒 𝕪 𝕕𝕠𝕤

Cualquiera creería que toda la situación de Chisaki y Camie le tomaría tiempo a Izuku para recomponerse y volver a su vida normal.

Si es que se le podía llamar así a una vida llena de periodistas.

Izuku decidió tomarse un tiempo de las redes sociales y cualquier sitio de comunicación, necesitaba un tiempo para él mismo. Orumaito se encargó de posponer cualquier evento o entrevista hasta que se sintiera mejor para continuar.

Y si bien, no quería tener nada que ver con el mundo en ese momento, todo lo que había pasado le servía para poder escribir una canción. Era una manera en la que podía expresar su dolor, canalizar sus sentimientos. 

Ahora mismo se encontraba en su departamento, no vería a sus amigos ni al cenizo hasta el día siguiente, por lo que podía aprovechar ese tiempo para comenzar a escribir.

Pensó y pensó.

El tiempo que estuvo con Chisaki sentía que tenía la obligación de producir ganancias para él por medio de su trabajo, hacía lo que él quería, nunca se detuvo a pensar que era lo que realmente quería, para qué había sido hecho, cuál era el propósito de su vida.

Muchas preguntas que en aquellos tiempo lo habían invadido, y qué, desgraciadamente nunca obtuvo alguna respuesta. Al menos hasta ahora.

Ahora podía responder a cada una de ellas con toda la seguridad que alguna vez pudo tener.

El instrumental y la sintonía debían sonar nostálgicas, cuestionables al punto de que te hicieran pensar y reflexionar.

Suspiró, pensando una y otra vez que verbos y palabras utilizar. Ojala y escribir canciones fuera tan sencillo.

El sonido de su celular lo sacó de su actividad, al encenderlo vio que era un mensaje de su madre. Decidió llamarla, hacia mucho que no escuchaba su voz.

—¿Mamá?

¡Midoriya Izuku, así tengas sesenta años sigo siendo tu madre, por lo que merezco saber que es en lo que te andas metiendo en tu vida!

Alejó un poco el celular de su oído al escuchar la fuerte voz de su madre, se notaba mucho que lo era realmente. Los dos se alteraban demasiado cuando no sabían del otro.

—Lo siento mamá, no fue mi intención.

Haya sido o no, soy tu madre. ¿Crees que me hace bien saber por las noticias que estuviste involucrado con la policía por un caso en el que casualmente también estaba involucrado tu antiguo manager?

Si Izuku tuviera orejas de algún tipo de animal, aseguraría que las hubiera bajado arrepentido. No era la manera en la que quería que su madre se enterara, pero tampoco tenía el valor para decirle él mismo todo lo que estaba pasando en su vida últimamente.

—Lo siento mamá.

Da igual, solo quiero saber, ¿cómo estas?

Izuku podía jurar que lloraría en ese momento, el cúmulo de sentimientos que se amontonaba en su corazón lo lastimaba. 

Todo lo que había querido hacer en todo ese tiempo, era llamar a su mamá. Decirle que la necesitaba, que anhelaba uno de sus abrazos; de esos abrazos que solo tu madre sabía darte, en los que te sentías protegido.

Era de conocimiento público el cariño que le tenía Izuku a su madre.

En su primera presentación, Izuku prometió agradecer siempre a su madre porque de no ser por ella, él no habría llegado hasta donde estaba.

Y sin ninguna excepción, Izuku lo hizo.

—Estoy, relativamente bien. Solo un poco cansado, es todo.

Sabes que si necesitas algo estoy para ti cariño, no estás solo.

—Lo se madre.

Siguieron hablando por unos minutos más sobre todo lo que había pasado, por supuesto que Inko estaba furiosa, cuando supo todo lo que Izuku había vivido a manos de Chisaki se molestó al punto de querer ir a alguna empresa de noticias a decir todo lo que estaba pasando.

Sin embargo, el pecoso le pidió que no dijera nada, puesto que no quería que el castaño les hiciera algo, después de la muerte de su padre temía de lo que Chisaki fuera capaz de hacer. 

Ya lo había perdido a él, no quería perder a su madre tampoco.

Inko decidió dejar eso de lado por muchos años, no quería hacer sufrir más a su hijo recordando eventos del pasado.

Pero el pasado siempre vuelve, de distintas maneras, siempre estaría presente.

La plática era amena, pero como cualquier madre curiosa, decidió sacar un tema algo... necesario, a palabras de ella. 

Dime algo, ¿qué traes con con ese chico, Katsuki?

Casi se atraganta al recibir esa pregunta, no esperaba esa pregunta, al menos no todavía. Reuniendo todo su valor, Izuku comenzó a contarle su historia con Bakugou Katsuki.

≫ ──── ≪•◦ ❈ ◦•≫ ──── ≪

Katsuki estaba demasiado ocupado ayudando a Mitsuki con todo el papeleado de la denuncia formal y la condena que se le impuso a Chisaki, ella misma le advirtió que aunque ya estuviera preso, no faltaría el tonto que trataría de limpiar su imagen.

Por lo que con su ayuda necesitaba hacer llegar la información a todos los estudios que existían y que estaban por existir, así, en el momento en que ese bastardo saliera de prisión, no tendría posibilidad de obtener ningún trabajo.

Con él, estaba Kirishima, el cual se había ofrecido a ayudarlo con todo eso, mientras que Mitsuki se encargaría de otras cosas.

—En serio hermano, la vida sin Camie es mucho mejor, es genial no tener que tolerar sus chillidos.

—Sigo sin entender como descubrieron que ella fue quien le dio la entrada a Chisaki.

—Denki lo descubrió, no le digas que lo dije, pero así como es bueno para cantar, es bueno para hackear. Logró entrar al sistema de cámaras de las calles cercanas al estudio y pudo ver todo, solo tuvo que sobornar a unos cuantos para que le dieran esa información de manera "legal".

—Es increíble que ese tipo haya hecho el trabajo de la policía, menuda justicia y seguridad.

—No es para menos, teniendo en cuenta lo mucho que aprecia a Midoriya.

—¿Él lo sabe?

—Hasta donde sé no, Denki quiere decirle a su tiempo, no quiere abrumarlo con más información.

Katsuki suspiró, puesto que el pelirrojo tenía razón, apenas Izuku pudo librarse un poco de toda la carga que tenía desde hace días. Incluso le pidió descansar para tampoco tener que molestarlo él mismo, quería lo mejor para el pecoso.

Sin tan siquiera ponerse a pensar que era lo que realmente quería Izuku.

—Ahora bien, ¿hasta cuándo hablaras con él sobre ustedes?

Al igual que el pecoso, se atragantó con su propia saliva.

—Por lo que he visto y me han contado, se tratan como si fueran una pareja, pero te conozco y sé que no tienen nada formalizado. Así que, ¿hasta cuándo?

—No quiero presionarlo, estoy esperando a que él este cómodo.

—A mi parecer ya lo está, cuando se trata de ti confía ciegamente sin importar nada. Le das una seguridad que estoy seguro que no ha conseguido con nadie más, en cuestión de lo romántico.

—Preocúpate de tus propios asuntos.

—Esta bien no te enojes, solo recuerda dejar en claro tus sentimientos por él, no lo hagas esperar Bakugou, ese chico realmente se ve interesado en ti.

—Lo sé, solo, quiero esperar un poco más.

Kirishima sabía lo que realmente quería hacer el cenizo, lo conocía a la perfección, no hacía ni dejaba nada a medias, ni tampoco hacía cosas sencillas ni básicas.

Si realmente quería estar con Izuku, lo demostraría como lo que era y como lo que valía.

Porque para Bakugou Katsuki, el corazón y alma de Midoriya Izuku lo eran todo para él.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro