[Todo tiene un comienzo]

– Dejeme ver si entendí... ¿ustedes me secuestraron para que yo les diga dónde está mi bóveda?

Hablo un castaño con tranquilidad. El castaño se encontraba atado en una silla, que estaba compuesta de madera de roble muy refinada. Se podía notar como unas heridas resaltaban en su joven rostro, y de estas desprendían gotas de sangre las cuales caían al sucio suelo.

Este joven se llamaba William, un empresario corrupto que mueve las mafias desde las sombras, también dueño de una empresa muy importante, y que es en donde se encuentra ahora mismo.

El castaño apesar de su deplorable condición, mantenía una mirada tranquila, mirando a sus 3 captores.

– Parese que ahora nos entendemos. Muy bien, ahora habla.

Hablo el del medio con tranquilidad pero con cierto tono demandante. Pero el de la derecha se movió para golpearme y apuntarme con un calibre 22.

– ¡habla hijo de puta!

– ¡Wou!, tranquilo T.

Esta ves hablo el de la izquierda. Pero el anterior nombrado como T, le exclamó.

– Tranquilo F, así hablamos los adultos.

– No creo que cualquier adulto le gustara recibir un golpe, más que tampoco le apuntaran con un arma, además tengo 22 año-.

Hable con claro sarcasmo, solo ser interrumpido con el golpe de un arma.

– Jeje, ¿¡que!? ¡No que muy chistoso! ¿¡no!?

Hablo con claros signos de locura, pero el del medio se acercó a T para tomarlo del hombro.

– T, mantén la calma. Muy bien niño, dime la contraseña de la bóveda y no saldrás lastimado.

Los tres se me quedaron mirando expectante a mi respuesta. Yo con un poco de dolor los mire, pero la puerta de mi sala fue derribada.

– ¡Oigan chicos!, ¡nos tenemos que apresurar!, están sospechando pero todavía no se han alertado de la ausencia de su jefe.

Un encapuchado había hablado con nerviosismo, este era escoltado por otros dos encapuchados cargando unos G36C.

– Si, ya casi lo tenemos.

– muy buen niño, dime donde está la bóveda y este cuchillo no tocará tu carne.

Dijo el del medio para sacar y clavar un cuchillo en la silla, casi justo dándome en mi entrepierna. Yo lo mire con una mirada ensombrecida, pero hable con calma.

– Ves ese estante de libros que abarca la mayor parte de la pared, bueno, jala el libro que dice "Clave".

Los presentes me miraron con sorpresa por mi fácil coperación. Algunos de los presentes miraro con admiración al del medio, aunque este no le dio importancia. Mientras tanto, F y T fueron a buscar el libro.

– Gracias por tu coperación niño, parese que podrás vivir un día más.

– Oye M, ya lo encontramos, voy a tomarl-.

No pudo seguir hablando por qué cuando jalo el libro, la estantería se empezó a mover. La estantería se empezó a dividir en cuatro partes para dejar paso a en el sentr una placa de metal circular en donde se encontraban una pequeña caja fuerte.

– //...//

Todos los que se encontraba en la sala quedaron en shock, por la complejidad de mi caja fuerte. No podía evitar sentirme orgulloso, por fin podía presumir mi caja fuerte-, Quiero decir, no es como si la hubiera echo simplemente para que los demás la vieran.

No, claro que no.

El nombrado como M, se acercó a la caja para abrirla, pero vio algo que lo exalto.

– ...Tiene contraseña...

Todos me miraron con fuego en los ojos, claramente quería a toda costa lo que había allí. El nombrado como T, se acercó y me habló con un claro tono amenazante.

– Muy bien niñato, habla.

– No la recuerdo.

– ... ¿Que?

Eso era verdad, no la recordaba, siempre guardaba todas mis contraseñas en un papel, y siempre era en un lugar en donde lo no lo pudiera perder.

Lastimosamente a el papel lo perdí en mis vacaciones en Dubái, pero gracias a Dios ise una copia, solo debe estar por aquí.

Pero mis pensamientos fueron cortados por un golpe en mi estómago, mi cabello fue tomado para ser jalado a la cara de mi agresor.

– ¡¡NO TE HAGAS EL CHISTOSO NIÑO!!, ¡DINOS LA CONTRASEÑA!

– N-no lo recuerdo Cof*, solo recuerdo que ha-había dejado en algún lu-lugar Cof* de esta s-sala Cof*, es-escrito en un p-papel.

– ¡Busquen ese papel!, ¡y traiganlo rápido!.

Todos los presentes empezaron a buscar desesperadamente el papel. Paso una media hora desde que lo encontraron y abrieron la bóveda.

En esta había un montón de dinero tirado junto con unos lingotes de oro puro, y también habían cuadros históricos hay dentro.

Todos los asaltantes parecían babear, y tan rápido reaccionaron, así de rápido empezaron a tomar todo.

– ¡JAJAJA con todos esto me podré comprar una casa en la playa, y esa puta no me va a jodre más con el divorcio!

– ¡JOJOJO esto es enorme!, ¡oye niño!, ¿¡cuántas carteras robaste!?

– Joder, L va a tener mucho papeleo que hacer.

Todos estaban extasiado, tanto que no vieron como me desate y miraba todo esto cargando una ametralladora. Si, también tenía unos accesorios escondidos con los que rápidamente me armé. parte del arma que cargaba estaban unos cuchillos arrojadizos, o y unas granadas de mano...

Sabes, cuando eres millonario te das lujos.

Los cañones de la minigun empezaron a jirar lentamente tomando velocidad, los presentes casi ni lo notaron por su pequeña distracción, hasta que uno se dio la vuelta.

El que se dio la vuelta abrió los ojos a más no poder, trato de sacar su arma pero una furiosa lluvia de balas salieron disparada de los cañones, golpeando la carne, huesos, y órganos vitales del hombre, solo dejando una gran mancha roja que manchaba todo mi preciado dinero.

– Voy a que tener que contratar a alguien para limpiar eso.

Hable para mi mismo con enojó. Mis captores habían tomado cobertura y estaban muy alterados por lo que veía.

– !Santa mierda!, ¿¡por que no lo vigilaron!?, ¡espera!, ¿¡como mierda consiguió esa arma!?

– ¡Joder!, ¡ese tipo esta loco!.

– ¡N-No quiero morir!, ¡No quiero morir!

– ¡Callate estupida nena!. ¡Oye M!, ¡no dijiste que el niño no sería un problema!.

– Eso me dijo L, el estaba-

No pudo terminar de hablar por mi interrupción. Cabe aclarar que aun sigo disparando para que nadie salga de la bóveda.

– ¡Oh!, ¿hablan de su amigo Lester Crest?, ¡el me dijo que ustedes vendrían a mi morada con malas intenciones!, ¡por lo que con agradecimiento le di la moderada suma de 58 millones de dólares!, ¡el muy alegre me agradeció y ahora ya debe de estar saliendo del país!.

Hable con tranquilidad mientras me acercaba a un botón rojo a mi espalda, claro sin dejar de disparara a la única salida de mis captores.

Golpe con mi codo a el botón, en eso se activó una alarma que alertó a todos los que se encontraban en mi edificio.

– 'Odio cuando la gente ataca mi rascacielos, ¿no tiene otros lugares para robar?'. Pensé con molestia para tirar mi arma y correr a la salida, no sin antes tirarles unas granadas de mano.

Cuando salí pude ver como mis agentes se acercaban, estos se encontraba armados hasta los dientes. No voy a negar que siento un poco de penita por esos ladrones, pero bueno, ellos se la buscaron. Pensé para mi mismo, dejándoles el trabajo a ellos.

. . . Con los ladrones . . .

¡Pum!

– ¡¡Mierda!!, ¡la explosión casi nos mata!. ¡Ese hijo de puta nos vendió por unos millones!, ¡juro que cuando lo encuentre le cortare las pelotas!

Hablo T con enojó, tirando unos muebles y pateando una silla.

– ¡Ese hijo de perra!. ¡Oye M!, ¿¡alguna puta idea para salir de esta mierda!?

– Bueno... no creo que te agrade mucho lo que tengo pensado hacer, F.

. . . Con William . . .

– 'Valla, no me esperaba que pudieran entrar a mi edificio sin problemas, tengo que alargar su esfuerzo, no es algo que cualquiera logre, pero eso no importa, ellos ya están muertos'.

Pensé para mi mismo, pero note algo que me llamo la atención.

Desde la ventana se podia ver un helicóptero. Este se encontraba al lado de la pared en donde tengo mi oficina, pero una explosión sucedió al lado del edificio, el cual generó un agujero en la pared de mi oficina. La explosión desestabilizo un poco el helicóptero, pero este se recuperó y siguió como si nada.

Luego del helicóptero salieron unas cuerdas las cuales fueron lanzadas dentro del agujero, los ladrones de antes tomaron las cuerdas y se empezaron a mover rápidamente, mientras otros dos comenzaron a abrir fuego a la policía que estaba disparando desde el suelo.

Obviamente mis agentes también intervinieron, pero estos eran fácilmente masacrados por un tipo que llevaba... una ametralladora.

– 'Esto es una mierda'.

Pensé con clara molestia. Pude notar como uno de los ladrones le dio una seña al helicóptero. Clara mente yo no tengo ni puta idea de lo que tienen planeado.

El helicóptero empezó a ir a dirección contraria del edificio, y los demás ladrones que se encontraban cubriendo el helicóptero se metieron al edificio.

El helicóptero parecía que estuviera jalando algo, y apesar de las balas que lo golpeaban, este no se detenía. Llego un momento en que el helicóptero empezó a destruir el lugar donde se encontraban los ladrones, pero lo que sucedió después me dejo en shock.

El helicóptero había sacado mi caja fuerte a la fuersa, el peso de la caja casi provocó que el helicóptero se chocara contra otro edificio, pero el peso de la caja volvió a hacerlo de nuevo, y desestabilizando el helicóptero.

Yo me encontraba unos piso más abajo de mi sala, por lo que pude ver todo, pero para desgracia mía, justo la caja se empezó a hacercar a mi dirección.

Cuando noté que mi caja iba a chocar con migo, me tiré al costado para evitar el impacto, por suerte salí ileso pero cuando me trate de para, noté como una de las cuerdas que sostenía la caja se enredó en mi pie.

– MierdaaaaAAAA!!!

. . . On Music . . .

Fuy jalado sin compasión por la cuerda, estaba de cabeza en el aigre, y lo único que no permitía que me volviera una mierda roja regada por el suelo, era una cuerda que sostenía la caja, que se había enredado en mi pie.

Yo claramente me altere, trate de agarra la cuerda que me mantenía con vida, pero los movimientos bruscos del helicóptero más los choques de la caja contra los edificios no me daban esa chance.

Mi cuerpo se había chocado contra esos edificios, pero con esfuerzo tome la cuerda y comenze a escalar hasta la caja.

– ¡M!, ¡eres un jodido loco!, ¡como se te pudo ocurrir esta locura!.

– ¡¡Por primera ves estoy feliz de que decidieras tu, mi gran amigo!!

Se podían notar a 5 persona dentro de la caja, aunque una había sido aplastada por los lingotes de oro puro, por lo que eran 4, más el 5to que era el que manejaba el habion.

Pero una bola de metal que se metió por la entrada de la caja fuerte, rodo por el suelo, todos los presentes la notaron, pero cuando se dieron cuenta de lo que era.

¡Pum!

Una granada de mano había explotado, dejando semi inconsciente a todos los presentes. Un nombre había entrado por la entrada, este saco un cuchillo y se lo clavó a F, pero T que se encontraba medio consiente lo noto y atacó, pero su golpe fue desviado por la mano de sus agresor solo para que este le diera un puñetazo, que rompió la nariz de T.

M con esfuerzo sacó su pistola y trato de disparar al atacante, cuando este noto que era el castaño quedó en shock, pero el castaño aprovechó esos minutos de ventaja para sacar un cuchillo y darle en la mano de M, este se retorcio de dolor, pero F aprovechó y golpeo la cara del castaño, luego trató de aficciarlo.

El helicóptero había recibido una bala en una de sus turbinas, esto proboco que se desestabilizara y la caja golpeara un edificio.

Todos los presentes se habían desestabilizado, pero el castaño con gran astucia golpe la garganta de su agresor y lo tomó del cuello de su camisa para golpearlo contra la pared.

Uno de los acompañantes que no había echo nada en la pelea, pudo por fin recuperarse, este cuando notó la pelea sacó su G36C. El castaño al notar como iba a ser acribillado, usó a su víctima como escudo.

Las balas le llovieron a F, pero de no ser por su chaleco ya estaría muerto, pero unas balas le habían dado en su pierna izquierda. William al notar que de la cintura de F había una pistola, este la sacó y le quitó el seguro para rápidamente balear al hombre armado, una bala atravesó sus cabezas, matando al criminal.

F con gran enojo golpeo la cara del castaño para luego tratar de tomar su arma, pero el castaño con fervor no se dio por vencido y trato de apuntarle con el arma a la cabeza.

El helicóptero estaba dando todo de si, pero por más que tratara de salir de la siudad no podía, la condición del helicóptero era deplorable, tanto que apenas si podía estar con un poco de altura sobre el suelo, aunque la caja golpeara constantemente los postes de los y demás árboles, aunque los arboles parecian inamovibles, incluso le lograban hacer abolladuras a la caja.

William golpeó ferozmente a F, pero este no parecía seder, William sin muchas ideas optó por una solución alocada.

F al notar como estaba perdiendo cancha decidió aplicar más fuerza para no perder más terreno, pero solo logró sacarle una sonrisa al castaño. Aprovechando que F hacia fuersa, William lo tomó del cuello de su chaleco y lo jalo para su dirección, haciendo que el quede encima suyo, pero William puso su pie en su estómago para que con fuerza F saliera volando a la salida de la caja.

F estuvo apunto de palmar si no fuera por que había tomado la cuerda que William tenía atada al pie, William al sentir como su pierna era jalada con fuerza, tuvo que sostenerse de uno de los bordes de la entrada de la caja fuerte para no caer.

Llego un punto en el que helicóptero que pudo subir más altura, pero cuando parecía que podía salir se la siudad, no calculo bien y terminó anclando la caja fuerte a un edificio.

William casi se suelta por el impacto, pero logró permanecer. Lastimosamente, T estaba parado frente a él con una mirada no muy agradable, aunque esta era cubierta por su mascara.

– Ten una provadita de mi zapa-

No pudo seguir hablando por un balazo que rozó su cuello, sacando grandes cantidades de sangre. Lastimosamente, la acción solo logró enfurecer más al hombre delante de él, más no matarlo. T con gra furia tomo al castaño de su cuello y lo levantó como si nada, William trató de dispararle pero un agudo dolor iso que soltará el arma.

F que estaba sosteniéndose del cable, le disparó en el brazo al castaño, pero no pudo seguir por que los policías habían llegado y le empezaron a disparar. F sin muchas opciones, empezó a abrir fuego contra la policía.

T miro al castaño con una sonrisa, pero ante de que este pudiera siquiera reaccionar, fue brutalmente golpeado contra el suelo. El castaño se trató de levantar, pero fue tomadon por la espalda para ser lanzado contra la  pila denlingotes de oro, esto proboco que se fracturaran dos costillas. William ahogó un grito de dolor, y con un poco de esfuerzo tomó un cuchillo y lo lanzó a la soga que inmovilizaba su pie.

T al notar que esa soga sostenía a F, rápidamente saltó para agarrarla, quedándose tirado en el suelo mientras sostenía la soga. El castaño que veía todo esto, se levantó con esfuerzo y tomó el cuchillo que quedó en el suelo, se acercó a T para clavarle el cuchillo en su nuca.

¡Pum!* ¡Pum!* ¡Pum!*

Tres balas había perforado un riñón, el hígado, y el intestino grueso. William con dolor miró rápidamente atrás suyo, solo para ver a M cargar con un solo brazo la G36C, pero a le arma se le habían acabado las balas. William rápidamente se preparó para lanzar un cuchillo, pero la caja se movió, haciendo que ambos perdieran el equilibrio y calleran.

El helicóptero había logrado sacar la caja, pero la condición del helicóptero era demasiado grave, y el piloto no creía que durara más en el aire. El piloto podía ver como estaba apunto de chocar contra un edificio en construcción, por lo que soltó sus últimas palabras.

– ¡¡Adoro patear mi siudad!!

Grito con tal potencia que sus cuerdas vocales se desgarraron.

¡¡¡¡¡¡PUUMMMMM!!!!!!!

El helicóptero impactó, y las hélices del helicóptero chocaron contra el edificio. Con suerte el edificio no se calló, pero el helicóptero estaba soltando chorros de gasolina desde el tanque, y eso podría ser un grave problema.

. . . Off Music . . .

Me dolía todo el cuerpo, podía sentir el ardor en mis músculos, y uno que otro hematoma se generaba en mi cuerpo. Mis órganos estaba dañados, tenía barrios raspones junto con cortadas y mis costillas rotas me eran el calvario. Con suerte tenía una hora hasta que las heridas comienzen a aser mayor efecto y muera.

Escupi un poco de sangre y me levanté, miré a mi alrededor y pude notar como la caja colgaba sobre mi, esta se movía como si tuviera vida propia. Mire con más detalle y pude notar como el helicóptero se había dividido a la mitad, quedando la cabina del copiloto a lo que parecía un ascensor sin terminar.

Me inspeccione por si tenía algo de utilidad, pero solo me quedaba un cuchillo y unos cigarrillos junto a mi mechero de plata con grabados de cobre.

Decidi mirar a mi alrededor solo para notar como un tipo estaba caminando a duras penas, cargando una bolsa en la espalda. No me costó mucho darme cuenta que era mi dinero, pero no me importaba eso, solo quería salir de aquí. Lastimosamente para mí, ya no era posible.

El tipo me notó y rápidamente sacó una pistola y me apunto. Yo lo mire aturdido, pues si bien me podía matar, creo que le convenía más irse.

– Hi-Hijo de perra, a-aun sigues con vi-vida.

Dijo a duras penas, pero se podía notar el enojo en su voz.

Yo mire esto con gracia, me había recordado a, ¿como se llamaba? ¡Si!, un meme, jeje que gracioso.

– ¿¡Que t-te causa gr-gracia!?

Yo solo lo mire con una sonrisa, aunque probablemente se vea horrible por mi sangre.

– Es qu-que... si en-entendí esa ref-referencia.

Nos quedamos unos segundos en silencio, pero no duró mucho porque las risas de hombre delante de mi se empezaron a intensificar.

Yo me le uní y ambos reímos como locos, pero tuvimos que parar por el dolor de nuestras heridas.

– ¡Uhg!, como duele.

– Jeje, concuerdo contigo ladrón desconocido.

Pero el ambiente se llenó de tención cuando se dejó de chistes y me apunto con el arma. Yo claramente no le di importancia, después de todo ya me estoy muriendo.

– Me causaste muchos problemas niño. Espero que descanses en el infierno.

Dijo para dispara, pero yo rápidamente traté de esquivarlo, pero solo me rozó el cuello, dejándome un pequeño corte. Con esfuerzo tiro mi ultimo cuchillo a una de las cuerdas que sostenía la caja, y esta calló subre mi.

M miró esto con sorpresa, pero solo suspiro y decidió irse lo más rápido de allí. Pero no noto que la bala que rozó mi cuello le había dado al tanque de combustible del avión, causando que este explotara. M solo pudo ver un gra destello de fuego antes de que su consciencia se desvanezca, si siquiera saber que lo mató.

William que se encontraba dentro de la caja, se sentó, esperando que su plan funcione, pero no calculo la gravedad de sus heridas y ahora terminaría muerto dentro de unos minutos.

El planeaba matar a todos los mejores ladrones de los Santos. El sabia que sus negocios estarían en la mira de talentosos criminales, Por lo que tuvo que tomar medidas y empezar a matar a todo aquello que amenazara su imperio.

Para su buena suerte lo logro, pero para la mala le terminó costando su vida, y no tenía nada que lo pudiera salvar, además de que ahora estaba atrapado en una caja apruebas de misiles nucleares.

No calculo el echo de, que literalmente su ataúd sería el lugar donde se resguardan todas sus pociones, aunque no era tan malo, oh eso pensaba el castaño.

Simplemente saco sus cigarrillos y encendió uno con su cerillo. Pudo sentir como todo a su alrededor temblaba, probablemente por la explosión del helicóptero.

Pero no le dio importancia. Se concentró en inhalar para luego exhalar el humo de manera tranquila, aunque se terminó atragantado por la sangre.

Pero fue interrumpido cuando la estructura del edificio se empezó a derrumbar sobre la caja. William apesar de que su cuerpo se encontraba una condición deplorable, y su situación no era la mejor, sonrió, vivió la vida como le placio, y la disfrutó apesar de su laborioso trabajo.

– Ya no tengo nada por que arrepentirme.

Fueron sus últimas palabras antes de quedar inerte y sepultado, junto a la minoría de toda sus grandes riqueza, que se le serán entregadas a todas sus generaciones.

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Una cabellera rubia se mecia por el aigre que venía de una ventana, este se encontraba admirando a una belleza de mismo tono de cabello que el tenia, aunque esta se encontraba sentada delante de él atendiendo una pila de papeles.

Sus azules ojos marinos miraron la oreja de la mujer que se encontraba delante de él.

Este con una sonrisa mojó su dedo pulgar con un vaso de agua que sostenía, para luego pasarlo por la sona de su hélix de su oreja, y terminar bajando su dedo pulgar suavemente a su lóbulo.

La chica dio un lindo chillido para voltearse y mirarme con claros atisbos de enojo en su cara, aunque solo la hacía más adorable a mi vista.

– Joven kabuki chihiro, le pido formal mente que deje las bromas, oh me veré en la obligación de ponerle un alto.

Mi sonrisa se fue para mirala con adorable confusión.

– ¿Pero no me esta poniendo un alto ahora?

Un pequeño tinte cubrio las mejillas de la rubia, pero mantenlo una postura firme. Yo solo le sonreí para acercarme a su cara, lo suficiente para que nuestros alientos choquen.

– Lo siento, no quería ofenderle o lastimarla, pero es que te ves tan linda cuando te enojas que provocas que mi corazón pegue pequeños saltitos.

Dije de una manera dulce mientras le daba una linda mirada adorable a la rubia. Esto desencadenó a un gran sonrojo por parte de la rubia. Esta intentó hablar, pero yo la interrumpi.

– Tome, se que no trae comida a la escuela por que no le alcanza el tiempo para cocinar, por lo que me tome la molestia de cocinar para ti.

La rubia, por no decir tomate, estaba avergonzada por el trato del joven oji azul que tenía hacia a ella. pero por si no fuera malo para su delicado corazón, este le dio un delicado beso en su frente, mientras el acariciaba suavemente su cabello, sin desordenarlo.

– disfrútalo, te mereces un descanso por tu arduo esfuerzo, Ellen~.

Dijo para luego irse de la habitación, dejando a la rubia como colegiala recién enamorada.

La chica miró su bento con un gran sonrojo. aunque su estómago gruñón, no le dio importancia y con delicadeza desató el nudo que cubría el bento para luego quitarle la tapa.

Era... inexplicable el aroma de la comida, tenia tantas palabras para describir la exquisitez del aroma, pero solo se limitó con la simple palabra, "delicioso".

Pero un latido retumbó por todo su pecho al leer unas palabras escritas con salsa.

♡Para la Más Fuerte♡

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El rubio que se encontraba caminando en los pasillos de sus escuela, pudo notar la figura de un sierto peli azul. kabuki con una sonrisa siniestra, se acercó al peli azul para hablarle como si fueran amigos de toda la vida.

Pero solo un pensamiento muy serio pasaba por la cabeza del rubio.

– 'Te recuperare, Ellen'

-Fin cap-

Joder, al fin terminé este capítulo, le metí mucho empeño, más que cualquier capítulo de otra de mis historia, aunque tengo que pulir un poco más mi escritura, no esta mal de lo que estaba cuando empeze a escribir por primera ves.

Les doy gracias por los que están leyendo mi historia, y si no es mucha molestia me gustaría pedir alguna opinión o idea, no es como si no tenga ideas, pero me gustaría recibir alguna opinión de un factor externo a mi.

Sin mucho más que decir, Adiós.