"¡Recuerden mis palabras, ustedes dos! ¡Nunca más volveré a beber de estos desechos baratos después de que salgamos de aquí!" anunció Zeldris. Los tres se habían despertado en algún lugar alrededor del mediodía con una resaca masiva. "Oh, vamos, Zel. Realmente estás sobre reaccionando". exclamó Galand. "Dije eso también la primera vez. Mira dónde estoy ahora". Melascula dijo. "Con resaca, destrozamos el lugar en un estado de ebriedad y sin mencionar el hecho de que bebimos un montón de la única forma en que podemos beber". dijo Zeldris. Melascula gimió, sabiendo que tenía razón. "Espera. Tenemos las bebidas cubiertas, pero ¿qué pasa con la comida? No hay forma de que salgamos de aquí por un tiempo hasta que los demás encuentren la manera de sacarnos". explicó Galand. "Espera. Zeldris. ¿Les contaste a los demás sobre la situación?" preguntó Melascula. "Inmediatamente.

"Bien." Ella respondió para ser recibida por un gruñido estomacal, trayendo de vuelta la conversación a la comida. "Tiene que haber un armario de almacenamiento o algo...", dijo Zeldris, ahora mirando a su alrededor. Melascula y Galand empezaron a hacer lo mismo. Zeldris abrió una puerta para encontrar un montón de ingredientes. "Encuentra algo." Luego, Zeldris chasqueó los dedos y apareció un pequeño resplandor en la chimenea.

"Deberías dejarme cocinar. Sé algunas recetas geniales". Melascula dijo. Galand se acercó al fuego y se sentó. "¡De ninguna manera! La comida ha sido terrible durante años. Tienes que probar algunos buenos clásicos". exclamó Galand. Melascula se echó a reír. Ni siquiera lo intentes. Casi prendes fuego a Monspeet la última vez que entraste en la cocina. Melascula dijo. "Sí. No vamos a hacer eso de nuevo". Zeldris estuvo de acuerdo. "¡Y no recuerdo que ustedes dos hayan preparado las mejores comidas!" gritó Galand. "¡BASTA! Arreglaremos esto con nuestras manos". Zeldris dijo, preparándose para la batalla. "¡Bien entonces!" Galand dijo, ahora de pie. Melascula sabía lo que Zeldris iba a hacer y esperaba con el alma que tuviera éxito ya que realmente detestaba la comida de Galand.

Roca para Zeldris y papel para Galand. "¡NO!" Gritó Zeldris. "¡Hurra!" Galand dijo, aprovechando la victoria. "¡Ugh, nunca funciona!" Zeldris murmuró. "Espera, espera. Jugaré. Para ser justos con nosotros, Zeldris es muy predecible en pequeños juegos como estos. Elige uno y lo usa una y otra vez. Seguramente deberías usar esa ronda como calentamiento". explicó Melascula. Galand reflexionó sobre su argumento y sintió que finalmente se le presentaba un desafío. "Está bien, entonces, pequeña niña. Acepto." "Bien hecho, Melascula". Zeldris pensó, un poco molesto por el predecible comentario. Los dos se prepararon y se lanzaron. Papel para Galand y tijeras para Melascula. "¡Maldición!" exclamó Galand. "¿Debería haber mencionado que también tienes un truco con pequeños juegos? Dos veces seguidas". Melascula explicó, dando una mueca confiada. Galand refunfuñó y volvió a sentarse mientras Melascula preparaba la comida. Los tres comieron alrededor del fuego y hablaron un rato. "Entonces, ¿por qué crees que colocaron la caja alrededor de una taberna, Zeldris?" preguntó Melascula. "Lo más probable es que sea impredecible. Nos engañó y probablemente sabían que algunos de nosotros tenemos problemas con la bebida". explicó Zeldris. Melascula y Galand pusieron los ojos en blanco y siguieron comiendo. "¡Malditas diosas... escoria del mundo!" Galand proclamó. Melascula asintió con la cabeza y notó la expresión enojada/triste de Zeldris. "...Él realmente extraña a su hermano." Ella pensó para sí misma. Zeldris era terrible con las emociones, así que no se molestó. "Entonces, ¿por qué crees que colocaron la caja alrededor de una taberna, Zeldris?" preguntó Melascula. "Lo más probable es que sea impredecible. Nos engañó y probablemente sabían que algunos de nosotros tenemos problemas con la bebida". explicó Zeldris. Melascula y Galand pusieron los ojos en blanco y siguieron comiendo. "¡Malditas diosas... escoria del mundo!" Galand proclamó. Melascula asintió con la cabeza y notó la expresión enojada/triste de Zeldris. "...Él realmente extraña a su hermano." Ella pensó para sí misma. Zeldris era terrible con las emociones, así que no se molestó. "Entonces, ¿por qué crees que colocaron la caja alrededor de una taberna, Zeldris?" preguntó Melascula. "Lo más probable es que sea impredecible. Nos engañó y probablemente sabían que algunos de nosotros tenemos problemas con la bebida". explicó Zeldris. Melascula y Galand pusieron los ojos en blanco y siguieron comiendo. "¡Malditas diosas... escoria del mundo!" Galand proclamó. Melascula asintió con la cabeza y notó la expresión enojada/triste de Zeldris. "...Él realmente extraña a su hermano." Ella pensó para sí misma. Zeldris era terrible con las emociones, así que no se molestó. Melascula y Galand pusieron los ojos en blanco y siguieron comiendo. "¡Malditas diosas... escoria del mundo!" Galand proclamó. Melascula asintió con la cabeza y notó la expresión enojada/triste de Zeldris. "...Él realmente extraña a su hermano." Ella pensó para sí misma. Zeldris era terrible con las emociones, así que no se molestó. Melascula y Galand pusieron los ojos en blanco y siguieron comiendo. "¡Malditas diosas... escoria del mundo!" Galand proclamó. Melascula asintió con la cabeza y notó la expresión enojada/triste de Zeldris. "...Él realmente extraña a su hermano." Ella pensó para sí misma. Zeldris era terrible con las emociones, así que no se molestó.

"Me voy a ir a dormir". Dijo Zeldris, levantándose y acostándose en una mesa. Melascula hizo lo mismo y se acostó en una mesa diferente. Galand se durmió después de su comida y así terminó el segundo día.

Shao