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21 - Confrontación

Notas del cap:

Ay la madre... juraría que aquí iba mucho más avanzada en cuanto a publicaciones O.O lo lamento mucho DX no pensé que me faltaran tantos capítulos por subir aquí. No prometo nada pero, como ya tengo algunos capítulos avanzados, intentare irlos poniendo a lo largo de esta semana... como sea

¡A leer!


21 - Confrontación

—¿Dónde estoy? —se pregunto en cuanto, al frenar sus pies y acabar por arrastrarse, su consciencia parece volver a su persona y, luego de mirar a sus alrededores, no puede reconocer el lugar. Mira una segunda vez, esta vez en la búsqueda de Azteca o de alguno de los demás integrantes dentro de su cabeza, pero, milagrosamente, desde que había comenzado su viaje; esta es la primera vez que se encuentra a si mismo solo—. Cinco minutitos —jadea, dejándose caer de trasero al suelo, apenas recargándose cercas de un árbol para poder tener algo de sombra

Al subir la mirada, un cielo azul lo envuelve todo; un viento fresco y gentil y el sonido a la distancia de personas hablando tranquilas en lo que para el latino son murmullos suaves. Sus ojos se cierran. Tenía hambre, tenia sed, sentía sus parpados cansados... tal vez, tal vez la razón por la que no estaba escuchando a ninguno de sus acompañantes dentro de su cabeza, se deba precisamente porque su cuerpo ha llegado al límite y, aun si los demás no lo quieren, México debe de descansar

Tomando otro tranquilo suspiro cansado, el latino cierra sus ojos, dejándose caer despacio sobre el pasto de lo que ahora reconoce como una pequeña arboleda a mitad de un parque, alrededor ve a otras personas teniendo un picnic y a gente riendo. La tranquilidad le embriaga lo suficiente para cerrar sus ojos y dejarse llevar por un tranquilo sueño, solo "cinco minutos" y después continuaría su camino...

************

—Ataca —Escucho a sus espaldas una voz femenina dando una orden que no termino de comprender. Su cuerpo reacciono, una de sus manos se elevo suavemente; apenas pudo enfocar hacia el frente, descubriendo entre una vista borrosa que se encontraba arriba, tal vez en la azotea de algún edificio grande, bajando la mirada para entrar cientos de personas que gritaban, otras más, y, objetos más grandes y oscuros moviéndose a lo lejos, su vista no le permite observar quienes son o lo que hacen— ¡He dicho que ataques! —segundos después de la voz, la sensación, como si jalaran de tus cabellos violentamente hace a México tensarse, su mano apunta hacia la gente abajo

La sensación de que no es buena idea lo que está haciendo, la sensación de un calor sofocante en su mano, la curiosa sensación de su corazón dando saltos desagradables en su pecho y esa voz en su cabeza que grita que no continúe, se vuelven ensordecedores, hasta que puede ver que algo parecido a un rayo de luz brota desde su mano y se estrella con la gente de abajo

Lo siguiente que apenas alcanza a ver es una explosión blanca, escuchar un sonido estridente y destructor mientras los grito se ven superados por la explosión y, para cuando todo comienza a calmarse, no quedan ni cadáveres de lo que antes fueron, las personas que ahora, muy seguramente intentaron detenerlo

—Bien hecho —la misma voz que le había dado la orden, le felicitaba, permitiendo a México volver la mirada hacia sus espaldas donde una mujer a la que no le puede ver la cara, le sonríe satisfecha— hay que trabajar en tu tiempo de respuesta a las ordenes, pero lo haces más decente de lo que podría suponer en principio —suspira, dando media vuelta y marchando

Un dolor en el corazón de México se hace presente, la sensación de que quería asesinar a esa mujer le llego desagradable mientras, una de sus manos, la misma que había usado para asesinar gente inocente, apunta a las espaldas de la mujer, creando un rayo de luz que, a punto de ser disparado hacia la mujer, solo alcanza a ver como la mujer se gira, dando una sonrisa burlona... México juraría que ha alcanzado a ver su rostro pero

Pero mas allá de apenas distinguir sus labios y esa sonrisa burlona... solo un dolor se acuna en su pecho, negándole a respirar

—No puedes contra mí, Mictlan

**************

—¡¡Hgggg!!! —Pego un brinco, sentándose de golpe. Mira a todos lados, el cielo que había estado azul, ahora está oculto por espesas nubes, el calor agradable se volvió en un ambiente más frio y con viento, el aroma a tierra húmeda le anunciaba a México que en un par de horas cuando mucho, comenzaría a llover. Aspiro aquel agradable aroma, tratando de calmarse a si mismo tras lo que él consideraba como una mera pesadilla

Se puso en pie, descubriéndose solo en medio del parque donde había acabado descansando. Estiro su cuerpo hasta escuchar el clásico insulto de parte de Azteca, en cuanto volvió a verlo, le sonrió suavemente en un intento por que ambos pudieran llevar mejor y no hacer el resto del camino pesado. Por desgracia, Azteca no daba muestras de querer ser más amable con el latino y, honestamente, el latino no tenía muchas ganas de insistir demasiado en sus intenciones así que, en cuanto escucha de parte de Azteca la siguiente dirección que deben de tomar todos, el latino acepta, comenzando a caminar hasta que siente como su cuerpo se debilita y su consciencia por un segundo se vuelve borrosa

—En tu tobillo —Escucho la voz de Nazi. Su mirada bajo hacia la zona, descubriendo un pequeño dardo tranquilizante que ni siquiera sintió cuando se enterró en su piel y que le hizo perder la fuerza en sus piernas hasta acabar de rodillas en el piso. Volvió la mirada hacia sus espaldas encontrando una silueta borrosa que se acercaba a paso tranquilo. México negó

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«Te atrape» pensó en victoria fría Urss en cuanto vio a su amado mexicano caer a cuatro patas en el suelo, intentando mantenerse en pie y viéndolo con molestia, parpadeando varias veces para intentar despejar su propia mirada— Solo ríndete y duerme México —ordeno

—Haha —se burlo el tricolor— ¿Crees que será tan fácil? —jadeo— estúpido perro sin dueño

La mirada seria de Urss cambio a un gesto ligeramente confuso. La voz de México sonaba diferente, mas "adulta" y llena de odio combinado con una burla amarga. No solo eso, Urss pudo apreciar cómo pese a que el latino lucia tambaleante se ha puesto en pie, mirándose fijamente entre ambos

«Algo no va bien aquí» dedujo en cuanto, luego de haber conseguido el latino ponerse en pie, sonreír divertido, inclinándose debido a la dificultad de poder mover su cuerpo a voluntad

—No tendrás de vuelta a tu perro jamás —la mirada perdida del latino, cambio, extraña a un color dorado ocre, parecido a un marrón pero reluciente y, por algún motivo, intimidante para Urss quien, tras observar su reacción, da un paso hacia atrás confuso de encontrar a México inclinarse hacia el frente como si estuviera dispuesto a correr y, en un arranque violento como veloz, correr hacia Urss y dar un fuerte golpe a su boca del estomago

La sensación de perder el aliento se hizo presente junto a un golpe venidero de algún lado, golpeando violentamente contra su cabeza para hacerlo caer. Cuando reacciona, encuentra a México corriendo en dirección opuesta a la que había llegado Urss. Maldice por lo bajo y, sacando de entre sus ropas la misma pistola que había usado ya una vez, dispara al tricolor un segundo dardo tranquilizante esta vez en la espalda

El latino gime adolorido y su velocidad disminuye, a punto de caer, apenas se sostiene de un banco. Urss se pone en pie, acercándose a paso lento y cuidadoso para observar como el country aun continuaba luchando por moverse y poder escapar, gruñe y maldice por lo bajo. Cuando Urss le da alcance y toma su hombro para hacer que ambos se miren a los ojos, la mirada del latino cambia cada tanto entre el chocolate de su mirada como ese marrón ocre que parece querer volverse dorado

—No mereces... ser el dueño... de Mictlan —se ahoga en trabajo el tricolor. Urss se mantiene en silencio, inclinándose para dar un suave beso sobre los labios del latino, apenas un simple y gentil rose de labios que sorprende a México y por fin, siente como su cuerpo, sin fuerzas para seguirse resistiendo, cae pesadamente sobre los brazos de Urss

Hay un silencio poco después. Urss carga con el cuerpo del menor de un modo nupcial y, mientras se dirige hacia su auto para llevarse al menor, cae en cuenta de una palabra en especial

México hablo sobre un tal "Mictlan" expresamente, dijo que "no merecía ser el dueño de Mictlan" que extraño, se dijo. Mexica también le había dicho que tenía que destruir a Mictlan

«¿Qué tiene que ver México con el tal Mictlan?» siquiera ¿Qué demonios se supone que era Mictlan? Mexica solo lo llamo como un "proyecto" hasta donde podía recordar y, parece que México se refiere a Mictlan como... como alguna especie de ¿animal? No, en todo caso, dudaba que fuera algo tan "sencillo" como un animal a lo que se refieran cuando hablan de un Mictlan

No debería de ser un animal... tal vez se trate de algún tipo de proyecto militar o el desarrollo de algún arma biológica o bacterial, tal vez de algún tipo de droga o... debe ser algo diferente, lo suficiente importante para obligar a alguien como a Mexica a hacer a un lado a su hijo para acabar con el proyecto y, tal vez... ¿Involucrar a México? No, México no podía, no "DEBÍA" de estar involucrado

Pero, mientras llega a una ubicación secreta para todos y termina por amarrar al latino a modo de que no intente volver a escapar mientras ocurre el interrogatorio que se haría en el futuro, Urss se dice que no puede seguir haciéndose el ciego con la situación. De algún modo, México estaba involucrado y sabia lo que estaba pasando, además, la simple situación de que estuviera rondando perdido ya no parecía ser una opción viable. Quedaba más que claro que tenía que llegar a un lugar en especifico en Suiza, el había conseguido predecir sus movimientos y encontrarlo antes que Mexica

Urss no era estúpido, pero habían cosas que todavía no terminaban por estar del todo claras en su cabeza. Aun si quería mantenerse en la inocencia de creer que México no sabía nada, el hecho de que México tuviera que llegar a un punto, que hablara sobre algo relacionado a Mictlan y la sorpresiva decisión de Mexica de cambiar sus prioridades y dejar de buscar a su hijo para encontrar al proyecto Mictlan bajo la premisa de destruirlo. De algún modo, debían de estar conectados y, tal vez, por el momento, solo podría obtener la información de parte de México. Mexica no parecía querer responderle a sus preguntas aun si se lo preguntara en serio, sin golpes de por medio

—Mmggg —escucho al tricolor quejarse por el dolor

—¿Cómo te sientes niño? —pregunta con frialdad, observando al tricolor que parpadea lento, removiéndose incomodo y, aun ido por la droga

—Vete... a la puta... mierda... huugg —volvió a quejarse, Urss suspiro

—Si esta situación fuera "normal" y tú no tuvieras nada que ver conmigo, haría esto por el modo placentero y te golpearía hasta la muerte para saber lo que necesito pero —comienza a hablar, al tiempo que avanza por la habitación, tomando una maleta la cual, luego de abrirla, comienza a sacar una jeringa y un diminuto bote con un liquido verdusco que comienza a preparar—, eres realmente importante para mí, lo sabes —comenta— así que seré amable contigo y haremos esto de un modo indoloro para ti

El tricolor pudo ver que, luego de darse la vuelta el country de rojo a quien no podía reconocer, dejaba ver entre sus manos una jeringa con un liquido verdusco que le hizo tener una mala espina. Sintió un escalofrío luego de ver a Urss acercarse a su cuerpo con la jeringa y luego, como simple y sencillamente le obligaba a ladear su cabeza. Con la debilidad de su cuerpo, ni siquiera pudo oponer resistencia y soltó un leve quejido de dolor al sentir algo enterrándose en su cuello y algo frio entrar en su sangre

—Olvide decir que te dolería un poco —se burlo Urss, acabando de inyectar al tricolor, se sienta en una silla delante del latino y lo observa en silencio, a la espera de que la droga haga su efecto

Cinco minutos más tarde, Urss observa a México con un rostro ligeramente pálido, moverse como si aun no pudiera mantener el equilibrio, era claro, que para estas alturas, la droga ya habría hecho efecto en el tricolor que, cada tanto, parecía ver a Urss

—México, lo que te inyecte fue una droga de la verdad, así que, comencemos —habla Urss al country que no parece poder sostener su propia cabeza

—Mi nombre no es México... idiota —jadeo

—Ho, ¿Y entonces quien eres?

—... Azteca... "El comando Azteca" —jadeo con un leve tono de burla en sus palabras. Urss enarco una ceja confundido

—¿De qué estás hablando?

—Eres un estúpido ¿Verdad? —se burlo— ¿Cómo le das la orden a un perro de que siga a su dueño? —jadea— le das la orden, un "comando" —entre jadeos, ha levantado su mirada para encontrarse con la mirada de Urss y una sonrisa burlona de parte del tricolor seguido de una pequeña risa burlona—, el comando "ven", el comando "siéntate", el comando "dame la pata"... el comando "Ataca"

—México no es ningún perro

—Tal vez no tuyo —suspiro— pero si de su dueña. La dueña que manda entre todos los perros

—¿De quién hablas?

—No creo que importe, tú eres solo un perro fuerte, no podrás nunca contra la dueña. Ni Mictlan ni yo podemos enfrentarla de todos modos —jadea, soltando pequeños quejidos de dolor al tiempo que trata de liberarse de las ataduras que le impuso Urss

—¿Qué es Mictlan?

—Quien sabe... tal vez le estas dirigiendo tus preguntas estúpidas a alguien que no debes... tal vez estas preguntándole a la persona equivocada, ¡Al perro equivocado! —acaba burlándose de lo ultimo— Un perro ve a otro perro como a un igual, como tú miras a México... sin embargo, el dueño mira a su perro y a este otro perro, como un animal de la calle sin entrenar, solo eso

—¿Qué es Mictlan? Me dijiste antes que no tenía lo necesario para que me perteneciera —insiste, ahora que ha comprendido que hay alguien más que está moviendo los hilos y, para su desgracia, tal y como temía averiguar, realmente México está involucrado en todo esto

—Una pistola... un palo... un perro con dientes muy filosos... da igual que sea. Los humanos siempre consiguen crear un arma de aquello que no estaba destinado a serlo

—Mictlan es un arma entonces —susurra para sí mismo, notando una leve chispa de burla

—No tienes lo necesario Urss —se burlo de nuevo— no tienes la fuerza ni el control para utilizar a Mictlan y no puedes destruirlo

—No me interesa Mictlan, lo que quiero saber es ¿Qué demonios tiene que ver Mictlan y México? —interrumpió el monologo de Azteca y, ante la mirada de Urss, los ojos ocre de México, cambiaron a un bi color en rojo y verde al tiempo que, la misma piel, el color de bandera de México, lentamente cambiaba, volviéndose en verde de su bandera, en un carmesí sangriento y el carmesí, en un color verde

—Si quieres averiguar que tiene que ver México conmigo, te recomiendo que vengas a Suiza y detengas todo antes de que se salga de control

La sorpresa fue grande para Urss al observar como las sogas que tenían fuertemente amarrados a México, parecen desintegrarse ante su mirada incrédula, permitiendo libertad al latino que, tras ponerse en pie y observar unos momentos a Urss, se da la media vuelta

—Te voy a dar un consejo de parte del Azteca real —su voz, que había cambiado por la de un niño mas infantil pero, curiosamente maduro, volvió a cambiar a la voz de aquel que ahora Urss podía reconocer a medias por la voz de Azteca, esa otra personalidad dentro de México—, no trates de matar a México, no tienes la fuerza mental para hacerlo —se dio media vuelta y, aunque los colores de la bandera de México aun lucían invertidos, sus ojos habían vuelvo a ser ocres— ni siquiera Nazi o Rusia tuvieron lo necesario para destruir a México. Tú eres el menos indicado para esta importante misión, así que solo hazte a un lado y no me estorbes mas

Luego de acabar con sus palabras, en un resplandor rápido de luz, México ha desaparecido de la habitación, dejando a Urss sorprendido he inmóvil. Su asombro fue tal, que por un segundo, luego de ya no ver a México por sus alrededores, por fin ha recuperado el aliento y toma una honda bocanada de aire luego de lo que ha observado

¿Eso había sido Mictlan? ¿O ese aun era su México?

Algo al menos había surgido. Tenía que llegar antes a Suiza y detener lo que fuera a suceder a continuación. Si quería respuestas, debía de hacerlo

—Bien, te seguiré el juego México —suspiro— te veré en Suiza mi amor

Notas finales:

¿Qué mierdas le pasa a Urss? No sé, no lo reconozco ¿Y ustedes? Me inclino a que es debido a la desintoxicación de las feromonas de México, se está volviendo loco como el adicto que al no tener sus drogas no está actuando de un modo sensato... pero en serio, juro que no reconozco a este Urss

Datos extras:

*Primero que nada... con respecto al sueño de México... no tengo ni idea, bien pudiera ser una premonición del futuro (como paso en suggar daddy) o, puede que solo fuera una simple pesadilla. Eso se verá en el futuro si es que es relevante

*¿Cómo es que Urss dio con México mucho antes que los demás? No tengo ni idea XD solo sé que por fin está usando su cabeza para algo... y no parece que sea tan buena idea, igual, imagino que, pese a su violencia y su actitud yandere que está demostrando (que de pronto me dio todo un aire al loco de Rusia), puede que estemos viendo un poco de su verdadera actitud...digo, retorcida por la falta de las feromonas de México

*Urss entendió que México en estos momentos sufre de múltiples personalidades, así que, pese a que fue una sorpresa, lo controlo bien. Lo que si no esperaba es que directamente México usara habilidades que sobrepasaban a los seres humanos. Recordemos que originalmente en este mundo, todos son humanos, no existe la magia ni cosas por el estilo, y aun así, México es el único que rompe esta regla junto con Mictlan por su condición

Err ya no se me ocurre nada más, así que, lo de siempre, si tienen dudas, yo respondo

¿Les ha gustado?

Que tengan lindo día

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