Ya llevaban unos minutos en el auto, Dahyun recordó que en la mañana Sana había tenido que atender asuntos de trabajo y para nacer menos silencioso el recorrido pregunto a la conductora sobre el tema
- ¿Que tal te fue en la mañana? -

- Excelente, pude confirmar el envío de algunos embarques con unos inversionistas de América - Arin no entendió ni pío de lo que dijo la señorita Sana, así que ella también preguntó, pero a su manera.
- ¿Que son los embadcationistas? - Sunshine batallo un poco para poder pronunciar esa palabra tan complicada, su mami y la señorita Sana rieron con ternura. - Se dice inversionistas cariño -

Sin quitar los ojos del camino Sana se dispuso a explicar lo más claramente posible a la niña en que consistía su trabajo - Un inversionista es un persona que tiene mucho dinero, mi trabajo es convencer a esas personas de darnos ese dinero a cambio de algo que después nos dará dinero a los dos - hizo lo que pudo.

- ¿Cómo? - la explicación solo género más dudas en Arin.
Sana miro a Dahyun que simplemente encogió los hombros como diciendo "te pregunto a ti". - Pues... Pongamoslo así, hay un señor del otro lado del mundo con mucho dinero, pero el no sabe cómo o en qué gastarlo, mi trabajo es hablar con ese señor y convencerlo de que gaste su dinero en algo que yo le puedo vender y si el lo vende después, los dos podemos ganar aún más dinero - ahora incluso Dahyun prestaba atención a lo que Sana trataba de explicar.

- ¿Que es lo que le vendedas? -
Una pregunta más, otra respuesta que explicar - Productos electrónicos, como computadoras, televisores, teléfonos, muchos, tantos que enormes barcos tienen que llevarlos por el mar hasta donde está el señor que los compro, luego el los venderá y los dos tendremos dinero - la niña lo había entendido mucho mejor ahora, movió la cabeza en símbolo de aprobación y un "okay" salió de su boca para luego mirar por la ventana.

"Esta niña es maravillosa" pensó la Japonesa
.

Unos minutos más tarde y se encontraban en el restaurante de comida rápida donde Arin quería comer, Sana se encargo de pedir y pagar los alimentos, muy a pesar de Dahyun, ella no quería que la mayor pagará pero después de unas cuantas palabras la convenció.

Mientras esperaban su órden Arin pidió permiso para ir a divertirse a los juegos del establecimiento, corrió hacia ellos y dejo a la mami en la mesa junto a la señorita Sana.
- Nunca creí tener que explicarle a una niña de 5 años que eran las relaciones económicas internacionales - Sana río un poco llevando su mirada había Dahyun quien no tardó en responder - Una vez Jun trato de explicárselo, pero era más pequeña y creo que el no se supo dar a entender -
Ahora el ambiente había cambiado en la mesa - Lo extraño - agrego después de unos eternos segundos de silencio. La Japonesa sintió una punzada en el corazón, que otra cosa podía esperar, Dahyun seguramente aprendió a amar a Jun, estuvieron casados por 6 largos años, formaron un hogar y juntos criaron con mucho amor a la hermosa niña que ahora estaba gritando.

¡La niña estaba gritando!

- ¡MAMI! ¡MAMIIII! - la pequeña Sunshine no podía bajar de ese laberinto de tubos de colores, no recordaba por dónde estaba la salida y se comenzó a desesperar.
Las mayores llegaron corriendo hasta el lugar de donde venía los gritos pero no la veían.
- ¡Arin! ¿Cariño estás bien? -
- ¿Pequeña donde estás? -

La niña tardo en responder y cuando lo hizo no las calmo - No lo se, no puelo bajad - su voz venía de la parte de arriba de los juegos. - Iré por ella - su madre dijo decidida, pero Sana la detuvo del brazo - Tranquila, yo iré - seguido de eso se quitó el saco y se lo entrego, tenía que admitir que por un segundo pareció como la típica escena de película de acción en donde el héroe se sacrifica, no como si fuera a sacar a su hija de esos confusos juegos.

Lentamente, Sana subió por una pequeña escalera en medio de una piscina de pelotas de colores y llegó a la parte superior, tuvo que gatear por el lugar para poder avanzar, el fuerte olor a plástico y los niños que cruzaban por ahí son ningún cuidado complicó su andar.
- ¿Arin? - preguntaba en momentos - Ariiiin -
De repente, un tono familiar comenzó a sonar en el bolsillo de sus jeans, con mucho esfuerzo lo sacó de ahí y sin mirar quien la llamaba contesto. - ¿Diga? -

- ¿Ya la besaste? - la voz de Momo la aturdió - Momoring, no es un buen momento - aparto el teléfono de su oreja  y volvió a preguntar por la niña siguiendo su camino.
- No me digas que tú y Dahyun están...- dijo en tono insinuante.
- ¿Que? Dios, no Hirai - su amiga río fuertemente. - Si te dijera en donde estoy no lo creerías - solo unos "pasos" después logro encontrar a la niña - Arin! ¿Estás bien? -

- SEÑODITA SANA - se abalanzó a ella con los brazos abiertos y la atrapó en un cálido y tierno abrazo, - Te encontré pequeña - una tranquila sonrisa de paz llegó. Un gran "awww" por parte de Momo sonó a través del móvil.

- Te llamo en un momento ¿De acuerdo? - separó con ligereza a la niña, cortó la llamada y tratando de guardar su celular continúo avanzando junto a la pequeña.
- Por aquí Arin, creo que vi hace un momento un toboGAAAAN -

Sana trato de recargar la mano en el piso pero el lugar de eso se deslizó de cabeza por dicho tobogán. Cayó por unos segundos y llegó al suelo boca arriba justo a los pies de Dahyun.
- ¿Sana donde está la niña? -
Unos momentos más tarde Arin descendió cayendo de golpe sobre Sana y riendo al ver a su mami.

Mareada y con algo de dolor dijo aún desde el suelo - A-quí la tienes -

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Les gustó la clase de relaciones internacionales?

Oigan, Momo sabe cosas... Muchas cosas.

Este capítulo si está un poco más largo de lo habitual, espero les guste, y si no se aguantan (no es cierto, saben que los amo)

Ya se la saben, comenten, voten, coman sus verduras y hagan Stream a Alcohol-Free, adioooos.