*****Al día siguiente*****

— Buenos días, Señor Kirigaya — le saludo cuando ingreso a su oficina cerrando la puestas tras mi paso — Venia a recordarle que en exactamente una hora tiene la reunión con los socios en el piso 30 — le digo leyendo lo escrito en mi Tablet — Y en la tarde vienen promotores de las empresas de Kioto — Lo miro tratando de mostrar tranquilidad— La única oportunidad de conseguir esa carpeta es cuando él se vaya a la reunión con los socios — respiro profundo — ¿Necesita que le ayude en algo señor? — le pregunto tratando se actuar con normalidad, cuando por dentro solo quiero gritar de impotencia.

— Si —responde — Prepare todos los documentos que necesitaré, por favor — me pide abriendo su cajón — Y veo que no se ha puesto el collar que le regale — me dice sin observarme, tomándome completamente por sorpresa — ¿No le gustó?

— Lo contrario, me encantó señor — respondo — De hecho, lo llevo puesto — desabotono el primer botón de mi camisa — Mire — le muestro la delicada cadena — Siendo sincera traer esto en mi cuello, solo me causa tristeza pues me recuerda lo que le haré — camino unos centímetros hacia él — No lo merezco— bajo la mirada — Aun mas, cuando lo traicionaré.

— Para nada — me responde — Usted se ha esforzado mucho por la empresa — sonríe y siento como algo oprime mi pecho — Este regalo es una forma de agradecimiento — me mira con firmeza, causando que el dolor aumente, aunque siento que si continua observándome de esa manera me doblegaré y le confesare todo, los nervios que intento controlar ya están por desbordarse — Señorita Yuuki — dice mi nombre y levanto la mirada — Gracias por su esfuerzo — apoya su espalda sobre su sillón, intento mantener la neutralidad en mi rostro — Puede retirarse — inclino mi cabeza dibujando una media sonrisa en mi rostro, pero al darle la espalda aquella sonrisa se desvanece.

— Porque hoy decide decir tales palabras — salgo de la oficina — Esto provoca que todo se complique aún más — boto aire apoyando mis manos sobre la pared — Me siento mareada — parpadeo un par de veces — Vamos — intento controlar mi respiración — Tranquila — enderezo mi postura — Mejor voy al baño — continuo caminado y al pasar por mi lugar de trabajo y dejo mi Tablet — Mi bolso — doy un paso atrás y lo cojo — Cálmate — camino a paso lento hasta llegar al baño, voy apresurada hacia el lavabo, abro el grifo y mojo mi rostro — Uff — suspiro aliviada.

— ¿Asuna? — Me llama alguien desde uno de los baños, me volteo para ver quien es — ¿Eres tú, Asuna? Soy Liz.

— ¿Liz? — Le digo acercándome a una de las puertas — ¿Qué sucede? — pregunto.

— ¿Tienes alguna toalla intima o tampón? — Pregunta un poco avergonzada — Me acaba de venir.

—Oh — digo sorprendida — Creo que si — le respondo — Espera un momento, revisaré mi bolsa.

— Siento que me muero — se queja — Casi nunca me pasa esto — abro mi bolso y encuentro uno de cada uno, ¿Por qué tengo dos?, los tomo dejando mi cartera sobre el lavabo — Generalmente sé cuándo me vendrá — me acerco a la puerta y le paso lo que necesita por debajo, esto es un poco raro, yo siempre tengo uno, no ambos, me digo a mi misma — Me has salvado — responde y me levanto un poco pensativa.

— ¿Cuándo fue la última vez que me vino? — Camino hasta el lavabo — He estado tan ocupada que no he pensado en mí — busco mi celular — Pero eso no puede pasar — observo de lado en el espejo— Tengo el chip, no debo preocuparme — abro una aplicación en la cual muestra mi calendario menstrual que marca que la última vez que me menstrué fue hace dos meses— Tal vez esté anémica — suspiro nerviosa cuando escucho como la puerta del baño se abre.

— Gracias Asuna — me dice Liz caminado hacia mí — ¿Qué miras? — pregunta y bloqueo la pantalla de mi celular.

—Nada — sonrío — Solo la agenda del día de hoy —lo guardo — Ya sabes — me seco la cara — Por cierto — le hablo intentando cambiar de tema — Lo que te di era lo único que tenía, en el almuerzo ve a comprarte — me pongo un poco de maquillaje — Bueno nos vemos — me despido.

—Gracias — sonríe — Asuna — me llama — ¿Estás bien? — Me pregunta y yo asiento — ¿Segura?

—Por supuesto, Liz — le contesto saliendo del baño. Al llegar a mi lugar de trabajo, decido olvidar lo ocurrido y trato de concentrarme en los documentos que el señor Kirigaya me pidió, los minutos transcurrieron sin que los notara, cuando de repente escucho el sonido de la puerta de la oficina abrirse.

—Señorita Yuuki — el señor Kirigaya se acerca a mi escritorio — ¿Ya tiene los documentos? — me pregunta poniendo sus manos sobre el mueble.

— Si señor — me levanto y se los entrego — Aquí están — sonrío volviéndome a sentar — ¿Algo mas señor?

— No — contesta — Siga con lo habitual, no sé cuánto tiempo tardaré — revisa los documentos — Pero si no vuelvo en media reorganice las visitas — Me dice sereno, asiento ante su petición y lo veo marchándose.

—Hasta luego, señor — le respondo viendo cómo se va por el ascensor — ¡Sí! — suspiro aliviada — Ahora que se marchó es momento de dar un repaso a mi plan — observo la hora que marca mi celular — A cinco minutos de su partida, ingreso a su oficina — volteo nuevamente hacia la salida — Busco la caja fuerte, la abro, saco la carpeta — tomo un vaso de agua para los nervios — Y para las grabaciones de la cámara de la oficina — masajeo mi frente — Le pediré dinero a el señor Miller para sobornar a los de seguridad.

Observo de reojo a mis compañeros, cuando habían transcurrido los minutos necesarios me levanto tomando un par de archivos en mis manos y me dirijo a la oficina de manera tranquila, realizando la primera parte todo lo planeado — Esto es más fácil de lo que imaginé — suspiro aliviada al ingresar — Mejor me apresuro — dejo los archivos sobre el escritorio y me dirijo a la caja fuerte, al verla marco los dígitos con la fecha que él me había dicho — Por favor ábrete — pido al apretar el botón de ENTER y lo logró — ¡Sí! — Suspiro aliviada, tomo la carpeta y la oculto entre los archivos que traje, camino hacia la puerta, sin embargo esta se abre antes de que yo la toque — ¿Quién puede ser? — doy un paso hacia atrás y entra él.

—Señorita Yuuki — me nombra mi jefe con el rostro inexpresivo, abro levemente la boca, en este momento solo puedo pensar ''trágame tierra'', agarro con fuerza los archivos — Que sorpresa — cierra la puerta tras él.

—Debo pensar en algo rápido — lo miro — Señor — sonrío nerviosa — Vine a dejarle unos documentos — muestro lo que traigo entre manos.

— ¿Ah, sí? — Arquea sus cejas — Me permite — me quita los archivos con algo de fuerza, debido a que me opuse — Señorita Yuuki — me observa serio — rayos, mi jefe es un hombre listo, creo que se dio cuenta — ¿Por qué me miente?— me pregunta molesto y yo solo bajo la mirada muy avergonzada — Usted buscaba esto — tira los otros documentos y mi cuerpo tiembla al escuchar como retumban contra el suelo, quedándose él con la carpeta azul — Lo admito — levanto la mirada — Tenía mis sospechas — Me mira decepcionado — Pero no quería aceptarlo — camina hacia mí — ¿Por qué querías esta carpeta? — Tira la carpeta sobre su escritorio provocando que cierre los ojos por inercia — ¿Desde cuándo trabaja para él director de Glowgen? — me acorralándola contra su escritorio obligándome a verlo a los ojos.

— ¿Eh? — Lo miro confundida — ¿Cómo sabe que esto es para él? — mi boca queda entre abierta.

—Ayer cuando se fue la seguí — confiesa, dejándome completamente petrificada.

— ¿Qué? — Le pregunto tratando de reaccionar — ¿Po-por qué?

— Ha actuado algo extraña desde el día de ayer — pone ambas manos sobre el escritorio — Usted me ha mentido desde que trabaja aquí — frunce su frente molesto, mientras que yo, solo lo escucho — Primero me oculto que su padre era el ex-dueño de la empresa RECTO Progress Inc — tensa su cuerpo — Y que fue acusado de fraude.

— Así que ya lo sabe — mis labios comienzan a temblar — ¿De-desde cuándo sabe lo de mi padre? — le pregunto sorprendida, sintiendo como mis piernas se debilitan — Aunque yo...

— ¿Eso importa? — Gira levemente su cuello— Usted ha mentido desde el inicio — se aleja pasando su mano por su cabello — Y todo eso me quedó más que claro cuando él contesto su celular la noche en la cual yo me fui — baja su mirada por unos segundos.

— ¿Llamada? — Inclino un poco mi cabeza — No sé de qué me habla señor — contesto muy desorientada.

—Si claro — pone los ojos en blanco — Y también vi como ayer él, la tomaba de la mano — abro los ojos sorprendida, entonces si lo notó, muerdo mi labio inferior — ¿Desde cuándo son amantes ustedes? — Da una media vuelta — ¿Solo me estaba utilizando para conseguir esa maldita carpeta? — baja levemente sus cejas, mostrándome un rostro de decepción.

—No — respondo de inmediato — Claro que no — mis ojos se comienzan a llenar de lágrimas — Señor — lo llamo con la voz quebrada — ¿Usted ya sabía sobre mi padre? — le pregunto con mirándolo a los ojos y continuo — ¿Y aun así me permitió trabajar aquí? — llevo mis manos a mi rostro.

— ¿Eh? — Me mira sin entender — ¿Eso importa?

—Contésteme— le pido casi entre sollozos — Por favor.

—Hum...— sacude la cabeza algo nervioso — Se podría decir que si — al escuchar tales palabras salir de su boca, causan que me llegue algo de esperanza, pero sin darme cuenta mi cuerpo pierde fuerza y cae, sin embargo el señor Kirigaya me sostiene con sus fuertes brazos.

—Señorita Yuuki — me dice algo asustado — ¿Está usted bien?

—Señor — sollozo — Ya no puedo aguantar más mis sentimientos — dejo salir todo lo que había dentro de mí — Ayúdeme — lo miro suplicante — por favor, ayúdeme — Mi respiración se vuelve errática.

— ¿Qué? — Me ayuda a levantarme y me sienta sobre su escritorio — ¿Por qué lo haría? — Responde algo frio, me seco las lágrimas y trato de calmarme, mis labios tiemblan, llevo mis manos a mi pecho — Cálmese — bufa resignado — Escuchare lo que quiere decirme. Una vez estando más tranquila le cuento todo lo ocurrido, desde lo extraño de la cena, hasta el chantaje que me hizo con el asunto de mi padre, el señor Kirigaya, al comienzo parecía escéptico, pero al ver que no mentía escuchó con atención todo lo que le decía, y al ver que yo no tenía ninguna intención para dañar a la empresa, las palabras que salieron de su boca fueron las siguientes —Tiene que hacerse un examen toxicológico — hablo neutro, con una gesto inexpresivo, pero su cuerpo parecía tenso — Debió hacer eso ayer, ante la duda — se agarra la corbata— Debió ser más responsable — me reprochó.

—Lo siento — contestó sin mirarlo a la cara — Pero al amenazar a mi padre yo...

—No le ocurrirá nada a él — dice seguro — Mi padre lo protege desde el día en que fue a la cárcel — abro la boca asombrada, ¿Por qué mi padre no me dijo nada? — Pero es mejor no arriesgarse — toma la carpeta entre sus manos — Usted vaya a hacerse un examen toxicológico — camina hacia su sillón — Límpiese la cara y me avisa cuando tenga los resultados — se sienta — Yo buscaré lo que tanto quiere él — respira profundo — Si se comunica con usted dígale que tiene la carpeta, ya pensaré en algo — termina de hablar con una clara frialdad.

—Señor — Camino hacia la puerta sin dejar de observarlo — Gracias — le digo, pero el solo ve sus documentos, ¿Me odiará?, sacudo mis manos — Debo entender, tal vez ha sido mucha información para él — de manera inmediata salgo de lo más rápido que puedo del edifico y tomo un taxi para dirigirme a la clínica privada más cercana. Al llegar al lugar no esperé mucho para ser atendida.

—Buenos días, señorita Yuuki, soy la doctora Tachibana — me saluda una mujer con una bata blanca ingresando al consultorio — Me han informado que usted quiere realizarse un examen toxicológico — cierra la puerta — ¿Tiene alguna indicación? — Me pregunta — O tal vez ¿Algún motivo en específico? — me mira con el rostro sereno.

—Doctora sucede que... — suspiro con pesadez — Creo que me drogaron hace dos noches y quiero ver si, sale algo — respondo con honestidad — ¿Puede realizar ese examen lo más rápido posible?, no importa si debo pagar más — camino hacia la camilla — Por favor — la miro — Necesito saberlo.

—Entiendo — afirma con la cabeza — Para obtener una prueba más segura —camina hasta su escritorio — Necesitaré que entregue a laboratorio una prueba de orina — escribe la orden — Esta prueba es muy útil para identificar esas clases de sustancias — se detiene — ¿Necesita algo más?

— ¿Eso también sirve como prueba de embarazo? — pregunto un poco avergonzada.

—La muestra sí — me responde — Pero serían dos pruebas diferente, porque los laboratorios son distintos — afirme con la cabeza y ella continuó — Estos exámenes estarán listos en máximo 2 horas y tendrán el doble de su precio normal, ¿Está de acuerdo?

—Oh, si — me rasco la nuca nerviosa — Está bien, esos dos entonces — la doctora me da las órdenes para que me realicen los exámenes, salgo del consultorio. Una vez tomadas las muestras las dejo en laboratorio, por lo que solo espero en la recepción, es algo abrumador estar sola, mis pensamientos y arrepentimientos me destrozan la mente, muchos minutos después, mi celular comenzó a sonar, miro la pantalla — Es el señor Kirigaya — suspiro aliviada y me levanto con rapidez para dirigirme a las afueras de la clínica y hablar con el con mayor tranquilidad — Señor — contesto nerviosa.

—Escuche atentamente lo que le diré — asiento con la cabeza mientras me apoyo contra la pared — Cuando Gabriel Miller se comunique con usted, le dirá que tiene la carpeta y lo citará en la dirección que acabo de enviarle — mi teléfono vibra ante la llegada un mensaje — Entonces me llamará y le diré que es lo que debe hacer.

— ¿Quedo para una cena? — Pregunto un poco confundida — Y señor ¿Encontró el motivo?

—Si — dice cortante — Y creo que ya sé lo que él quiere — responde — ¿Ya se realizó los exámenes — pregunta — ¿Demoraran?

—En aproximadamente a las once saldrán — respondí — aunque pagué el doble para que salgan más rápido.

—El dinero no importa — dice — Cuando salgan los resultados, me informa — cuelga.

Observo el cielo y trato de tranquilizarme, la verdad estoy más tranquila al contar con su ayuda — Sé que está molesto conmigo y ¿Cómo no? — bajo la mirada intentando controlar mis lágrimas — Si mis acciones fueron como un puñal en la espalda — inhalo profundo — Debí confiar más en él — sacudo levemente mi cuerpo — Pero tenía miedo que al hacerlo lo alejase de mi — muerdo mi labio inferior — Y ahora lo arruiné todo — cierro mis ojos con fuerza — Él ya no volverá a confiar en mi — elevo mi cabeza — Pero esto es algo de lo que me debo preocupar luego — abro los ojos — Primero debo asegurarme de que a mi padre no le suceda nada malo — relajo mis hombro y vuelvo a la sala de espera.

Los nervios de estar aquí sin compañía me consumen, cada vez me siento más tensa, las personas caminan delante de mí, simplemente como si yo no existiera, pero no puedo culparlos, cada quien está en lo suyo, absortos es sus propios problemas.

—Asuna Yuuki — me llama la recepcionista, me levanto con rapidez — Aquí está su resultado — me entra por debajo de la ventanilla un documento — Gracias — lo recibo y veo que dice es examen toxicológico.

— ¿Aquí están los dos exámenes señorita? — pregunto un poco confundida, ella observa su pantalla.

—Me permite su factura, por favor — me pide con amabilidad, busco en mi bolso y se la entrego — Muchas gracias — sonríe y se levanta — Espéreme unos minutos, por favor — se dirige a la parte de atrás donde no la puedo ver y me dispongo a jugar con mis dedos hasta que vuelva, demora unos minutos — Disculpe la demora — me entrega otro sobre — Aquí están sus resultados, muchas gracias.

Camino hasta mi antiguo lugar donde abro el sobre donde está los resultados de mi prueba toxicología — Que nervios — observo los resultados — ¡Sí! — Digo victoriosa al ver como una droga muy conocida sale como positivo — Entonces utilizó flunitrazepam — apoyo mi espalda contra la silla y observo el otro sobre, cuando mi teléfono comienza a sonar, observo la pantalla y era un número desconocido — Debe ser él — camino rápidamente hacia la salida cuando me dispongo a contestar — ¿Halo?

—Señorita Yuuki es bueno oír su voz — me dice el señor Miller — ¿Tiene buenas noticias para mí? — habla tranquilo.

—Si — contesto mientras abro el otro sobre — Ya tengo la carpeta en mi poder — busco un lugar donde sentarme — ¿Nos podemos ver en el restaurante Ragout en la noche? — le pregunto.

—Por supuesto — contesta — ¿Acaso quiere cenar conmigo? — pregunta juguetón.

—Si — digo tajante — Lo veré en ese lugar — me siento en una banca — A las 8 le entregaré la carpeta azul y necesitaré que lleve dinero, tuve que sobornar al jefe de seguridad — miento, con la ilusión de que crea en mis palabras.

—Está bien — dice contento — Nos vemos en la noche señorita Yuuki — cuelga y yo dejo caer mi cuerpo sobre la banca.

—Bueno ahora solo queda ver los resultados — desdoblo el papel — Y con esto estaré más tranquila — Observo cada palabra con rapidez — ¿Qué? — parpadeo un par de veces incrédula — Debo estar leyéndolo mal — boto aire por la nariz, veo nuevamente que los resultados que marcan en el papel es positivo — Pero yo tengo el chip y muchas veces el usaba preservativo — doblo la hoja — Las posibilidades que suceda esto eran bajas — siento como si una descarga eléctrica recorriera mi cuerpo — No — bajo la mirada y entonces mi celular suena — ¿Quién puede ser? — Veo la pantalla y contesto tratando de recuperarme de la gran noticia — Diga señor.

— ¿Ya salieron sus resultado? — me pregunta y aunque me encuentre muy impactada me las arreglo para contestarle con la mayor calma posible.

—Si — contesto — Salieron positivos — al darme cuenta de lo que dije sacudo mi cabeza — El examen salió positivo a flunitrazepam — digo — Es una droga muy usada en violaciones — siento algo húmedo sobre mis mejillas y lo toco — ¿Son lagrimas? — Observo mis dedos húmedos — Es la única droga que encontraron, pero con eso se puede iniciar una demanda — comento intentado demostrar firmeza en mi voz, recién acabo de caer en cuenta que me violaron.

—Eso son buenas noticias — responde — ¿En qué clínica está? — Me pregunta mientras que yo tapo mi boca y nariz para que no oiga mi sollozo — Pasaré por usted.

Feliz cumpleaños a mi, feliz cumpleaños a mi, jajajaja, no pude subirlo a tiempo, para celebrarlo con ustedes, pero lo escribi con mucho cariño. 

Espero que les haya gustado el capitulo y aviso que no sé cuando pueda actualizarlo nuevamente, ya que quiero enfocarme en mis otros fics, sin embargo espero que me sigan apoyando, gracias por llegar hasta aquí.

No se olviden  de apretar la estrellita de aquí abajo y de dejar su valioso comentario. 

Los quiere 

Miss Lemons