XXX
REMORDIMIENTO (Part. 2)
Dolor.
Sufrimiento.
Remordimiento.
Culpa... Fue lo que experimento la pobre vampiresa de tan solo 15 años de edad, tras mirar con sorpresa, el rostro del hermano gemelo de su fallecida mejor amiga humana.
Alice fue una de las primeras novias de sacrificio en entrar en la mansión, que le brindo su amistad y cariño; la hermandad de ambas mujeres era indescriptible, pero con la pérdida de su trágica muerte, no pudo cumplir sus deseos de ayudarla a reencontrarse con su amado hermano...
Una promesa que rompió y que le dolió con todo su corazón.
Las lágrimas no paraban de cesar en el rostro de la joven; pues con solo mirar aquellos ojos color avellana que mostraban desesperación y tristeza, le hacía leer cada uno de los recuerdos tan dolorosos que paso el extraño chico para llegar con su destino.
Ryuu: Su nombre es Alice... Por favor. Deseo llegar pronto a ese lugar lo antes posible.
Sakura: ...
Ryuu: Por su mirada... He de suponer que la conoce, ¿No es cierto?...
Sakura: Y-yo... -. Triste y desesperada, la joven no dudo en sentir culpa en su corazón; en ningún momento dejo de bajar su mirada para observar aquellos ojos que tanto le recordaban su cruel pecado; el cual, su acompañante, dedujo cada uno de sus gestos, y tras ver nuevamente las finas y delicadas ropas de la muchacha, le indico algo de su posible identidad para su sospecha.
Ryuu: Usted es... ¿Sakamaki-san?...
Sakura: ¡...!
Sorprendida, la joven vampira miro con temor al extraño chico de cabello castaño, quien miraba atentamente su collar entre su cuello con las siglas de su familia adornadas en oro puro; y una sed de rabia y rencor, se adentro en su corazón tras recordar cada palabra e historia de aquella terrible familia, que tenía pactos corruptos con una de las Iglesias más destacas e importante de toda la región de Japón.
Pero la verdad nunca puede ser ocultada para siempre.
Ryuu: Lo es. Es una de ellos, ¡Lléveme con ella! ¡AHORA! -. Grito furioso el hombre hacia la chica; a quien sujetaba con fuerza y dureza sus delicadas manos, que su suave color crema en su piel era reemplazado a drásticos tonos rojos y morados. La bella dama no dijo nada; soportando todo llanto y grito mientras ligeras lagrimas eran esparcidas en los tristes ojos azul verdosos que miraban el odio y tristeza del enloquecido mortal humano.
El Sol estaba alejándose en el horizonte, y cuando el muchacho de cabellos castaño intento realizar aún más fuerza para lograr con su cometido, algo más le detuvo en su entorno.
Sakura: ...D-duele... P-por favor...
***: ¡Suéltala imbécil!
Sakura: ...A-ayato... -. Débil, la joven suspiro aliviada cuando sintió el dolor desvanecer de sus frágiles brazos, que sintió que se rompían por dentro poco a poco, ante la fuerza del humano de cabellera castaña, sorprendido por la figura tan repentina del extraño hombre; los increíbles cabellos rebeldes color rojizo de aquellos hermosos ojos verdes esmeraldas brillar en el oscuro y tenebroso bosque, hizo sentirlo inseguro con su mirada de muerte. Siendo acompañado de otras misteriosas cinco sombras llegar al rescate de la joven rubia.
Ryuu: ...¿Q-quién eres?... -. Sorprendido, el muchacho miro tenebroso cinco miradas frías pero sádicas de aquellos hombres de noble poder en su figura, que hizo sentir aún más inseguro consigo mismo; reaccionando finalmente de su terrible error, tras haber intentado lastimar a una pobre e indefensa mujer, que tal vez no sabía nada de su amada hermana, y estaba deduciendo todo sin pensar.
***: Te ha dicho que la sueltes. -. Contesto una voz fría pero profunda, de aquel hombre de cabellos rubio-anaranjados, que era caracterizado por representar el pecado capital de la pereza en persona; pero con aire de firmeza y protectora en su mirada tras las marcas.
Sakura: Shu-nii...
***: Patético humano. ¿Has sido tan estúpido como para dañar así una dama? -. Dijo una voz refinada, pero con odio combinado, en sus mismos ojos color magenta; reflejaban su estricta forma de querer castigar a todo ser inmortal que le rodeara, y este no seria la excepción.
Sakura: Reiji-nii...
***: Ne~ Teddy, me parece que... Tendremos una nueva muñeca para jugar... -. Susurro una pequeña voz, que causaba miedo y pánico en el rostro del muchacho de cabellos castaño oscuro; tras mirar nuevamente los brillantes ojos de los seis desconocidos que deseaban lastimarlo, y traían un aura oscura en su alma.
Ryuu: ¡...!
***: Eres un cobarde. -. Respondió enojado, cierto albino de ojos rojo profundo; intentado calmar su fuerza, antes de acabar con sus propias manos, con el débil patético humano, que tenía la descarada idea de querer hacerle daño, a una criatura tan dulce y llena de vida.
El joven extraño mortal no resistió más, y en un intento de escapar, se sorprendió cuando un par de pies le impidieron su paso y le hicieron tropezar en su camino.
***: ¿Te vas tan pronto?...~ -. Dijo una voz felina en el fondo, mientras miraba el tonto gesto de miedo que reflejaba el inútil mortal en su intento de escape; el cuerpo arrodillado del muchacho de ojos color avellana era tan solo el principio para que los seis miembros y príncipes del clan Sakamaki acabaran con la vida de la apestosa peste en persona.
•••
Hasta que sucedió lo peor...
Ryuu: ...Auchh...
Un aroma bien conocido a metálico, pero desagradable para el género masculino, miraron con sorpresa la sangre color carmesí rondar en la piel ligeramente bronceada del joven humano; quien, confundido por sus miradas de sorpresa, no estaba preparado para lo que vendría a su alrededor...
Sakura: ...
Ryuu: ¿Qué?... ¡Ahhhrrr! -. Con gemidos de dolor, el muchacho no vio sentir la presencia de aquella mujer tan dulce en su mirada, que rápidamente se transformó en gula y avaricia por el aroma tan maravilloso que sus mismas papilas gustativas no paraban de saciar su sed.
Fue una sorpresa para todos, ver finalmente la naturaleza vampírica de la dama de cabellos rubios dorados en su persona; los tiernos ojos azul verdosos se convirtieron aún más brillosos con una chispa de sed por sangre humana recién fresca.
Finalmente...
Llego el día en que se marca su actitud demoniaca en persona.
Sakura: ...Es... Dulce...
Ryuu: Ustedes... Son... V-vampiros.
Todos: ...
La luna llena estaba en lo alto del cielo, y tras sentir sus pálidos ojos cerrase con cada minuto que pasaba; su mundo giraba de cabeza, pero juraría haber escuchado en su último momento consciente, una triste y melodiosa voz.
-. ...Gomennasai...
_________ 🥀 ________
~Omake~
Nadie menciono nada al respecto después de observar con ojos curiosos la escena tan repentina pero desagradable en el ambiente.
Los celos y envidia que experimentaron los seis miembros de la familia del clan vampírico, eran dirigidos a aquel extraño humano, que había sido la primera víctima de su amada prima; en aquel entonces una bella y atormentada Sakura, estaba colapsando por sentir el peligro, y tras sentir su culpa combinada con desprecio hacia su persona, hizo salir su bestia interna con el aroma tan irresistible olor a dulce en la piel humana del muchacho de cabellos castaño, que estaba muy confundido por su mirada y gestos. Su cuerpo no aguanto la pérdida de su propia sangre, y termino desmayado en el frio, oscuro suelo del bosque.
Tardo un poco en reaccionar la vampira de sangre noble tras haber saciado su hambre, y nuevamente la culpa junto con el dolor invadieron su persona una vez más...
•••
Todos regresaron a la mansión sin decir nada al respecto, mientras que algunos de los sirvientes fantasma, trasladaban al débil humano en una de las habitaciones de huéspedes por su llegada tan misteriosa.
La vampira observo a su alrededor, algunas miradas tensas pero pensativas, que decidió hablar de una vez por todas; y aunque fuera lo más doloroso para él, sabía que no había otra opción.
Pues ahora, ese chico, sabia su secreto.
Sakura: El... Sera ahora mi fuente de Sangre... Me encargare de alimentarme de él... -. Dijo firme en sus palabras la doncella, mientras miraba con valentía a sus seis familiares; insatisfechos con sus palabras. Pero ella había hecho una promesa; le prometió a Alice mantener vivo a su hermano, y haría hasta lo imposible por ayudarlo a escapar.
Ayato: ¡Tsk!, ¡¿Y quién diablos te dio esa autorización!? -. Grito furioso el pelirrojo trillizo, que estaba aún más que furioso con la repentina declaración de la vampira; que no estaba dispuesto en permitir que otro chico, de la misma edad que su hermano menor de cabellos albinos, viviera ante sus dominios.
Reiji: Ayato. Si no quieres ser castigo por eso. Tendrás que comportarte.
Ayato: ¡CÁLLATE!
Shu: ...Está en su derecho.
Ayato: ¡¿De qué demonios hablas!? -. Grito enfurecido el vampiro tras mirar la actitud despreocupada de su hermano mayor; quien ahora se encontraba tranquilamente relajado en la sala de estar, dormir como siempre.
Shu: De eso era lo que quería hablarles esta mañana...
Subaru: ¿De qué hablas?
Shu: Esa persona dijo que pasaría esto algún día.
Sakura: ...¿Qué?...
Reiji: Tu sed por la sangre humana.
Sakura: ¡...! -. Sorprendida, la joven miro con terror el cruel destino de la realidad... Como las anteriores novias... Ser un sacrificio durante la próxima luna llena para realizar el "Despertar" al sacrificio humano.
Nunca pensó que se complicarían las cosas; su plan de solo intentar ayudar a escapar al pobre humano, y declarar que había fallecido por anemia, fue un cambio drástico en sus planes.
La crueldad en su mundo fue una triste realidad, pues no podía negar que el increíble sabor de la sustancia roja la hicieron sentir adicta pero satisfecha en sus necesidades físicas; con cada minuto que pasaba, quería dejar seco al pobre y e indefenso frágil humano en todo su cuerpo, que tan solo pensar en aquello, le aterraba en el fondo de si misma por su bestia interna.
Kanato: ¿Sabías todo esto... Shu-san?... -. Resentido, el vampiro de cabellos color lila miro con odio a su medio hermano mayor por la noticia; y al igual que su hermano trillizo de sangre, no estaba dispuesto en compartir a su apreciada muñeca, si él mismo podría ser el que le brindara con gusto toda la sangre que pidiera la bella vampira.
Shu: ...Dijo que enviaría un humano para probar su teoría.
Ayato: ¡Tsk! Ese hombre... No es más que un bastardo.
Laito: Supongo que tendremos un invitado en estos próximos días.~
Reiji: Al parecer tendremos un nuevo invitado en la mansión de forma temporal. Sakura, sabes lo que tienes que hacer.
Sakura: ... S-si...
Kanato: Sakura-chan... Teddy no puede esperar... Por verte realizar el ritual...~ -. Sádico en sus palabras, el vampiro de ojos color lila no dejaba de reír y soñar con el día tan esperado por todos; la ternura e inocencia trasformada en sed sádica por sangre humana en la vampira. Finalmente ella tomaría una vida mortal por primera vez en sus manos, y era algo que todo el mundo deseaba en admirar en persona.
La flor de cerezo por fin seria corrompida por la oscuridad.
Ayato: ¡Ore-sama no aceptará a ese bastardo!
Reiji: Ayato. Esa decisión no te concierne. Tendrás que adaptarte a su presencia desde ahora.
Laito: Si Ayato-kun. Después de todo, ese inútil no es tan guapo como nosotros. No debes estar celoso de atención~
Ayato: ¡NO ESTOY CELOSO!
Los gritos y reprimendas por parte de todos los presentes eran inevitables; la bella Sakura reflexionaba con temor de lo que pasaría después con Ryuu; tendría que tomar su vida en la siguiente noche de luna llena, mientras saciaba su sed de sangre humana con su ayuda.
Se sentía repugnante con ella misma; por haber mentido a su familia... A su mejor amiga...
Pero ya era tarde.
Tendría que hacer todo lo posible para ayudarlo a escapar pronto, de esta terrible prisión.
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