Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

6. ¡Odio caer en ello!

Capítulo 6.

Kylie:

Ya solo faltaban 2 días para el mes libre del instituto. Ese mes me vendrá increíble para ir a New Hills y podré conectarme con Christopher. De ellos solo me recuerdo por el hecho que desde que llegó Jael y allanaron mi casa, los recuerdos de los demás vinieron a mi.

Nombre solo de dos.

Chris y Jael.

El recuerdo de los niños no esta en mi mente, los que me perturban son los recuerdos del laboratorio, las pruebas, los castigos, las expediciones, los días de supervivencia, los retos, los encarcelamientos.

El aroma a químicos y metal.

El sonido de cada alarma anunciando cada cosa que haríamos.

Los gritos de ellos.

Sus llantos.

Todo ello durante 14 años.

Cada pesadilla era más fuerte cada noche de esos 14 años. Desde hace unos 3 años las pesadillas disminuyeron su intensidad, la ayuda de Chloë y Chase ayudó mucho.

Estos días había pasado más Tiempo con Chloë, Chase y Dylan... La verdad no se porqué pero ahora casi siempre estaba en nuestros planes, bueno quitando la parte de que ahora Chase y él eran como mejores amigos de toda la vida.

¿Dylan sabía de lo mío?

Era lo que siempre me preguntaba Chloë, obvio no, él no puede enterarse de eso. Puede ser divertido, gracioso y pasar tiempo con el aceptable pero no confío del todo. Pero la verdad si me he abierto mucho y me preocupa.

— ¡Ey! — Chloë llama mi atención.

— Ey.

Ella mira a nuestro al rededor y me guía hacia nuestros casilleros.

— ¿El Domingo nos vamos a New Hills? — dice entusiasmada.

La miro y niego con la cabeza.

— Chloë, Te amo, eres lo más cercano que tengo a una familia y por esa razón no te llevaré, si llega a pasarte algo, nunca me lo perdonaría, así que deja la intensidad. — respondo.

— Y por esa misma razón no puedes ir sola, Chase y yo iremos, ya tengo todo. Nos iremos en su auto, tengo las maletas ya hechas y ya mis padre saben que me iré de "campamento" — Hace comillas con sus manos. — un tiempo. — dice adornando su pálido rostro con una sonrisa.

Tal vez ir sola no sea la mejor opción...

— ¿Segura?

La castaña asiente mil veces con la cabeza.

— Si, esto es tan emocionante.

— Si tu lo dices... — digo y seguimos caminando llegando a nuestro lugar favorito.

Las gradas.

Al cabo de unos minutos allí sentadas llega Dylan acompañado.

— ¡Ey! Hola señoritas. — saluda con el mismo entusiasmo de siempre.

— Hola Dylan. — Saluda Chloë como siempre amablemente.

— Hola. — Digo yo regalándole una sonrisa pequeña.

Dylan agarra del hombro a su amigo y lo acerca.

— Él es R, que supongo que saben quién es.

R. Blaz.

¿Su verdadero nombre? Ni idea.

Toda la vida, lo he conocido como R. ¿Considerado un nombre? No lo sé, pero es alguien muy callado. Es un chico alto, de la altura de Dylan, cabello de color negro, igual que el color de sus ojos y era un tanto palido. Era lindo.

Chloë extiende su mano.

— Si claro. Hola, soy Chloë Frederick, un gusto.

Sus pestañas rovoloteaban y sonreía abiertamente.

— Hola. — dice secamente R.

R. me mira unos segundo, lo sentía como si me analizará. Al cabo de unos segundos quita su mirada y se fija de nuevo en la nada.

Raro.

Y allí es cuando llega Chase. Se adentra en medio de R y Chloë y se sienta.

— Si, si mucha charla ¿Qué haremos este mes libre? — Pregunta mi mejor amigo.

Chloë me mira y empieza a tartamudear.

— MMM... Nosot– yo– ell–

Le pongo la mano en el hombro y ma alejo un poco.

— Estaremos ocupadas.

Dylan me mira y se cruza de brazos.

— ¿En? — pregunta mirándome directo a los ojos. Me analizaba y eso causo una rara sensación, como... desconfianza.

— No estas involucrado en ese asunto Dylan, así que no tengo porque decirtelo. — Digo y cojo mi mochila, que se posaba a solo unos centímetrosde mi.

El castaño gira sus ojos.

— Disculpa.

Hago lo mismo y bajo unos escalones, pero, antes habló:

— Si me permiten tengo que irme, Adiós.

___________________

— Deberíamos ir Kylie. — Vuelve a insistirle la castaña que camina a mi lado.

— Ve Chloë, nunca te he dicho que no vayas. — Hablo mirándole a los ojos.

Ella hace un puchero.

— Quiero ir con mi mejor amiga.

La miro.

— Sabes que las fiestas no son mi ambiente favorito. Ser rodeada por una multitud no es mi idea de pasar un fin de semana.

Ella se aferra a mi brazo.

— Si todos van, tenemos que ir.

— ¿Por qué es tan importante? — preguntó sin entender.

— Porqué yo iré. — Responde Dylan haciendo presencia a nuestro lado.

— Viste, el va a ir, Chase irá, Vamos. No pierdes nada. — Chloë es alguien insistente mientras tenga la idea allí dentro, nunca ha a dejar de insistir.

— Vamos Tortuga no es tan malo como piensas. — Apoya Dylan.

¿Ir a una fiesta de alborotados? Paso. No estoy nada de segura de lo que puede llegar a pasar.

— Si, porqué estar en una fiesta con puros adolescentes hormonales, alcoholizandose, drogandose, la música irritante en mis odios, comida vieja y cada uno de ellos frotándose unos con otros es lo más divertido del mundo. — ironizó.

Chloë mira a Dylan.

— Si lo pinta así...

El castaño sostiene mi muñeca y me mira.

— Ven, te reto a ir.

Arqueo mi ceja, mirándolo a los ojos.

— ¿Enserio? — preguntamos Chloë y yo al momento exacto.

— Bueno, vamos Chloë, ella es muy aburrids para poder ir a una simple fiesta. — Empieza Dylan...

Y Chloë sigue el juego...

— Tienes razón, mejor vamos nosotros y problema resuelto.

Empiezan a hablar como si yo "no estuviera" allí.

— No la veo en una fiesta, ¿Tu, si? — Le pregunta El castaño a Chloë.

— Para nada, es Kylie, porfavor.

Exhalo fuertemente.

— Sinceramente, no los soporto. Esta bien, iremos. — Dyaln ríe y mi mejor amiga me abraza.

— ¡Siiiii! ¡Te amo K! ¡Te amo tanto!

Me separó y ella sigue sonriendo.

— Si, si, si.

— Ya me voy, iré a ver que me pondré esta noche. — se despide la castaña y quedamos Dylan y yo.

Caminamos hasta quedar cerca del campus.

— No era tan difícil, ¿Ves?

Lo fulminó con la mirada.

— Cállate.

Dylan ríe fuertemente y luego me mira.

— Me amas. — asegura, con mucha arrogancia.

Lo empujó suavemente del pecho.

— ¿Sabes qué? Adiós.

Empiezo a caminar lejos de él.

— Te mueres por mi Fox. — Canturrea.

De espaldas le enseñó mi hermoso dedo del medio y lo escucho reír, lo que causa sacarme una pequeña risa a mi también.

____________________

La música proveniente de la cancha del instituto retumbaba en mis oídos fuertemente. Lo odiaba. Veía como todos los que nos pasaban por un lado saludaban animadamente a Dylan y las chicas claro que no podían desperdiciar el tiempo.

— ¿No es increíble? — Pregunta Chloë acomodando su pequeño bolso.

Chloë lucia hermosa traía un vestido celeste de tirantes corto y unos tacones negros no tan altos, un maquillaje sencillo y su cabello castaño rizado.

— Fantástico... — respondo sarcástica.

Yo por lo contrario de Chloë llevaba unos jeans sueltos grises y una blusa Blanca ajustada. –solo porque Chloë insistía mucho– unos botines blancos y una chaqueta negra.

— Vamos Anímate Tortuga, no es tan malo como parece. — habla Dylan juguetonamente.

Chase me mira negando con la cabeza y luego abrazandome.

¿Por qué quieren tanto afecto de mi parte?

— Es increíble que la hayan traído. — dice Chase revolviendo su claro cabello.

Dylan se encoge de hombros.

— Fue muy fácil.

Mi mirada hacia el castaño hace que ría.

— Mi nivel de competitividad es más alto. — murmuró.

Y todos como si fuese un chiste empiezan a reír.

— Ven vayamos a dentro.

Chloë agarra mi brazo y nos adentramos a la cancha. Estaban casi todos los que veía caminando por el pasillo, las luces de colores no paraban de titilar, las personas chocaban entre sí, era un poco –muy– asfixiante.

Chloë se soltaba en el ambiente fácilmente, al contrario de mi. Ella baila con un chico pelirrojo y disfrutaban en la pista de baile. Chase estaba con una rubia charlando y Dylan se perdió en la multitud.

Pasaron unos minutos y yo solo observaba a todos desde una esquina de la pista, con un vaso en mis manos. La música cada vez me disgustaba más. Quiero salir de aquí.

Me acerco a donde mi mejor amiga baila.

— ¡Saldré un rato! — digo fuertemente para que me escuche a través de la música.

— ¡Esta bien! —. Antes de yo asentir y dirigirme a la salida, ella me sostiene por el brazo. — ¡Oye K! ¡No te vayas a ir a casa!

Asiento con la cabeza y llego hasta el gran campus del Instituto. Creo que este es mi lugar favorito en toda la escuela.

Siempre y cuando no estén los idiotas de los equipos de deportes.

Casi siempre está vacío y el aire es más fresco.

Estaba parada en medio de toda la cancha del instituto.

— Miren a quien nos trajo el mundo. — Habla el ser de ojos blancos detrás de mi.

— Vete Jael, ¿No vas a dejarme en paz? Ya deja de atormentarme, por favor. — pido todavía sin girarme a verlo cara a cara.

— ¿Yo? ¿Atormentarte? — suena ofendido.

Me giro rápidamente y lo señaló.

— ¡Si! ¡Siempre que vuelves a aprecer en frente de mi, todos los malditos recuerdos que se borraron de mi mente vuelven cuando estás tú! ¡Deja de hacerlo! — grito histérica.

— No creas que tu sola es la que se siente mal Kylie. ¡No todo gira a tu entorno! — dice de la misma manera.

Me acerco más a él.

— ¡Lo sé! ¿¡Pero sabes lo desgraciada que es mi vida!? ¡Poniendo a las únicas personas que tengo a mi lado, en peligro cada segundo del día! ¡Y no poder hacer nada! ¡Ese lugar es lo que condena mi vida y siempre llegas tu a recordarmelo!

El agacha su cabeza.

— Tu decidiste escapar de allí, no era algo tan malo, al fin y al cabo era nuestro ambiente. ni siquiera pudieron... pudiste esperarme...

Jael y yo éramos muy cercanos cuando vivíamos en el laboratorio. Recuerdo que cuando terminaban de hacerle sus experimentos venía a refugiarse en mi celda. Solíamos estar el, yo y un pequeño niño castaño. Éramos un poco más unidos que el resto. Siempre nos lograbamos pasar de jaula en jaula, o de celda en celda.

— Estas consiente de que nunca habían oportunidades para salir, debíamos aprovechar. — me alejo unos centímetros de él.

El dirije su mirada hacia mi, sus ojos blancos titilaban.

— Tu dices que tu vida es horrible, la mía sigue siendo la misma que tenías hace 4 años, ¿Sabes? Ya uno termina acostumbrado. — habla asqueado.

— Vete. Ya no quiero escucharte. — digo alejándolo fuertemente haciendo que se tropiece pero con el equilibrio no cae.

Ellos vienen, prepárate, te lo he advertido miles de veces, tu solo piensas en lo mierda que es tu vida, pero no haces nada para cambiarla. — Me mira una vez más un tanto enoja y decepcionado y desaparece como suele hacerlo.

Tenia ganas de llorar. Pero no me estar triste, era por el enojo.

Él tenía razón.

Me quejaba pero no hacía nada para cambiarla, ¿¡Qué demonios piensa que puedo hacer!?

Cuando algo no puede molestarme más, llega él.

— Hola Tortuga. — Habla Dylan de seguro sonriente. Se nota un poco alegre en su tono.

— No ahora... — susurro hablando conmigo mi misma— ¿Que demonios quieres Dylan? — me volteo y me cruzo de brazos. El me mira confundido.

— Uhh... ¿Pero, qué pasa?

Giro mis ojos y resoplo.

— Asunto tuyo no es. — mi tono agresivo me sorprende un poco.

— Solo Dime. — insiste y se acerca un poco.

Lo miro extrañada.

— ¿Para qué quieres saber?

— Puedo animarte. — Sonríe como un Ángel.

— No es tu trabajo hacerlo. — digo enojada.

— Si, lo es. — responde arrugando un poco sus cejas.

— ¿Lo es? — Pregunto mirándolo a los ojos levantado una ceja—. Entonces, estás despedido. — digo rápidamente y sonrío sin mostrar mis dientes.

— No puedes hacer eso. — Responde.

— Ya lo hice, ahora vete.

Me sostiene rápido del brazo cuando trato de irme.

— ¿Se puede saber cuál es tu problema?— Miro su mano al rededor de mi brazo, devuelvo la mirada a él y me suelto.

¿Enserio quiere saber mi problema?
¡Las Personas no pueden dejarme en paz!

— ¿¡Sabes cuál es mi maldito problema Dylan!? —. Me acercó a él con fuertes zancadas hasta quedar a escasos centímetros de él .— ¡Odio a la gente arrogante, y tu eres un nivel extremo, me convences siempre de que haga cosas que se que nunca hago, enfrentar algunos de mis miedos, como si genuinamente te importarán en lo más mínimo!  — grito eufórica.

Si fuese una caricatura estaría roja y saliendo humo de mis orejas.

Dylan me observa estupefacto.

— Kylie yo–

— ¡No! — Interrumpo como él lo hizo— ¿¡Sabes que es lo peor del caso?! —Empiezo a caminar en círculos, revolviendo mi cabello de forma desesperada y dirigiendo varias veces mi mirada hacia él.— ¡Odio caer en ello! ¡Se supone que siempre debo ver a través de las personas como tú, alejarlas... — Mi tono de voz empieza  a bajar—. el daño llega a ser irreversible... — Baje la mirada esperando que eso hiciera que Dylan se fuera, pero en su lugar podía sentir su mirada con una enorme intensidad.

Dylan intenta acercarse.

— Mira Kylie, no se qu–

— ¡Deja de interrumpirme! — exclamó furiosa de nuevo— ¡Me niego a hacer rotundamente un maldito juguete que quieras conquistar y conseguir! ¡Simplemente quieres terminar de ver porque no estoy rendida a tu pies! ¡Si vas a hacer eso, vete Dylan!

— Eso no es así Kylie.

— ¡No voy a caer Dylan! ¡No te necesito en mi vida! ¿¡Ok!? — Hablo señalando— ¡Nunca he necesitado a nadie y nadie me ha necesitado a mi! ¿¡Entiendes?! mi respiración es agitada, mi malhumor está afectandome—  ¿¡Así que podrías dejar de irritarme de esta manera?! ¡Deja de ser bueno conmigo, deja de hacerme sentir... cosas!

— Kylie...

Vuelve a intentar acercarse. Toca uno de mis brazos.

— Dylan mi vida no es como crees, nunca la entenderás. — Digo mirándolo.

— Déjame intentarlo. — Niego con la cabeza.

— Puedo dañarte, Simplemente tienes que alejarte.

El inclina si cabeza a un lado.

— No creo que sea tan mala. — En sus ojos podía notar indecisión y curiosidad a lo que decía. Mi Corazón estaba agitado.

No es tan mala, es horrible.

— Es una mierda.

— Kylie, no debe ser tan mala, deberíamos calmarnos, si quieres te llevo a tu casa y–

Interrumpo.

— ¡Estoy agotada! — Vuelvo a decir, alejandome de Dylan. — ¡Mi vida es una mierda! ¡Una mierda que ya no puedo arreglar! —. Miro al enorme cielo azul estrellado que está encima de mi .— ¿¡Cuando será el milagroso día que la vida de Kylie Fox termine!?

— Si lo hacemos sin tantos rodeos, hoy mismo. — Responde una Mujer Pelirroja, acompañada de unos cuantos hombres.

Dylan se coloca a mi lado.

— ¿Lo decías enserio? — Pregunta sin apartar la mirada de los nuevos extraños que nos acompañan.

— Ven Linda, ¿Quieres acabar con tu vida? Ven con nosotros, iremos con ella.

¿Ella?

¿Ahora quién demonios quiere buscarme?

¿No era solo el laboratorio?

— ¿Quién? — pregunta Dylan.

— No hablábamos contigo, niño bonito.

— Ok, no se quien es usted pero —

— Acércate más y te vuelo la cabeza.

— Muy bien, ella está muy ansiosa de verte. — Sonríe Amargamente, sin despegar sus ojos de mi. — Formulario — Pide a uno de los extraños que esta con ella y un chico bajo le entrega una planilla.— Esta bien. Proyecto KY113 más conocida como Kylie Fox. — Empieza a leer. — Interesante. 17 años de edad, Género Femenino, Nació el 08 de agosto de 2004, trasladada bla bla bla, Fugitiva De Laboratorio Liense's. El proyecto debe ser entregada a — Hace una pausa y no menciona nombres. — Luego de ello serán beneficiados y no quedarán a cargo de nada. — Aparentemente termina de leer y sonríe victoriosa hacia donde me encuentro.

— ¿Qué? — Dylan dirige su mirada hacia mí, confundido.

Dos de los hombres de negro se acercan.

— Alejense. — Esquivo a los hombres.

Dylan intenta meterse pero la pelirroja habla.

— Amarrenlo.

Dos hombres más aparecen y sostienen a Dylan. Como no se iba a quedar tranquilo empieza a forcejear con los hombres hasta que uno lanza un golpe directo a su mandíbula. Cubro mi boca por el asombro.

Los anteriores extraños vienen por detrás.

— ¡Qué te alejes idiota! — Muy mal para todos ellos.

El viento empieza a jugar a mi favor, grandes olas de viento son controladas por solo una de mi manos. El viento empieza a atacar a los de mi derecha y con la mano izquierda solo con simples movimientos y jugadas de mi mente los de mi izquierda empiezan a retorcerse en el suelo.

— oh mierda... — escuchó decir pero no se de donde.

— ¡Señora! ¿¡Que demonio es este!? — Grita uno de los hombres tratando de alcanzar a la pelirroja cuyo nombre aún es desconocido.

Detengo el viento y hago que todos sufren ardores, golpes, pequeños rasguños y algunas mínimas subidas de sangre a la cabeza.

— Santa mierda...

Algunos se retorcían ferozmente, otros giraban sus ojos al punto que quedaban completamente blancos, unos lloraban y otros gritaban.

¿No querían ese bando? Pues miren lo que pasa.

— ¡Ella no dijo nada de esto! — Grita la pelirroja lloriqueando.

Las Luces de la cancha empiezan a titilar, hasta quedarse en un punto semi oscuro.

Y cae el primero.

Muerto.

— Están del lado equivocado y por ello pagarán con su vida. — Y caen uno por uno.

Uno empieza a arrastrarse y quedar muy cerca de mi. Y como puede, con mucha fuerza se arrodilla.

— Te lo ruego, tengo familia, necesitaba el dinero. — habla con lágrimas cayendo por sus ojos.

Sostengo su cabello con rudeza.

— ¿Quien los mandó? — Pregunto enojada para que sepa con que esta tratando.

— No se su nombre, pero es una mujer rubia, mayor y esta loca, te busca a ti y a otros más y dijo que necesita encontrarlos urgente. Quiere llevarlos a un lugar aislado, Katiene — Supongo que habla de la Pelirroja, que es como la líder.— tiene los formularios de todos adentro del vehículo.

— ¿Color?

— Negra.

Tiene sentido lo que dice, pero, sigo con la duda.

¿Quién es "ella"?

— ¿Cual era la misión concreta? — cuestionó, hacia el extraño todavía con las manos unidas como si rezará.

Los dioses no te librará de mi.

— Atraparlos a cada uno de ustedes, llevarlos y tenerlos en el mismo lugar que todos. Luego llevarlos con Ella. Los haría del mismo bando para luego llevar a cabo algo planeado. — Dios, cada día pasa algo nuevo.

¡Que Maravilla!

Veo en sus ojos que presiente que lo soltare, no es así, si ninguno llega a decirle a "Ella" que md encontraron mejor, ¿no?

— Lo siento, pero igual no confío en tí. — Escucho como los huesos se rompen y queda el extraño retorcido de una forma fea en el piso.

Las Luces de la cancha vuelven a la normalidad. Quedo mirando todo el desastre que hice.

Lo que más me llama la atención es que hice todo esto y por ellos no siento ninguna culpa.

¿Es algo malo?

— Oh mierda... — me paralizó.

Mierda

¿¡Enserio olvide que Dylan estaba mirando todo!?

Me hicieron tan estupida...

Giro rápidamente en donde se encuentra Dylan mirando todo el escenario que quedó en el suelo.

Cadáveres en el piso.

Los gritos.

Los llantos.

Mi faceta peligrosa.

Oh oh.

— Dylan — Trato de llamar su atención— ey —. Hago movimientos con mis manos en su cara.— Dylan te lo pido, te lo ruego, no le digas a nadie lo que viste. — Por fin empieza a parpadear y me mira.

— Yo–  se corta solo.

Empieza a jugar con su mirada. De un lado a otro, de los cadáveres a mi, de mi a los cadáveres.

— Ey! — Se centra en mi .— Necesito que me prometa que no dirás nada.

— No dire nada. — Mi alivio era inmenso— pero, ¿¡Que mierdas fue todo eso!? — Dice algo... ¿emocionado? señalando todo el campus.

— Te explicare todo pero no aquí. — habló algo preocupada.

Él me mira confuso.

— ¿Qué harás con todo eso? — pregunta curioso, sobre lo del campus.

— Oh... — extiendo mi mano y con gran viento logro desaparecer los cuerpos, haciéndolos volar muy lejos.— Listo. — Sonrío un poco apenada.

Es que la cague muy mal.

Nadie tenía que saber excepto Chase y Chloë.

— Dios... — Sus ojos tenían un brillo nuevo, un tanto extraño.— eres tan... —no termina de decir cuando lo agarro del brazo.

— Vámonos.

Los dos corremos hacia la cancha donde está la fiesta.

¿Quien diría que mi primera "fiesta" terminará haciendo que Dylan Collins se enterará de mi habilidades, casi morir y matar unos extraños?

Que Locura, ¿no?

Busco a Chloë y a Chase.

Encuentro a los dos juntos muriendo de risa.

— vámonos.

— ¡Ay! ¿Porqué? — Cuestiona Chloë mirandome raro.

La analizo unos segundos... y no, no está ebria.

— Es urgente, gracias a Dios no estás ebria. — la cojo del brazo y la llevo conmigo.

— ¿También voy? — Escucho gritar a Chase.

— Si Tarado, camina.

Al llegar a la salida, estábamos Chase, Chloë, Dylan y ¿¡R!?

No puede venir, el no se va a enterar.

— ¿Por qué...?

Chloë mira a todos, con sus cejas muy fruncidas.

— Tenemos que buscar una camioneta Negra. — informó.

— ¿Como estas tan segura que sea una camioneta? — me pregunta Dylan.

— Más de 10 personas no pueden venir en un auto pequeño. — Digo haceidno que lo piense.

Asienten y llegamos al estacionamiento.
Autos blancos pequeños...

Grises...

Limusinas...

Nada.

— ¿Está? — Pregunta Chloë a lado de una.

Doy al botón de las llaves y suena.

— Bingo. — Dice Chase y lo miro extraña.

— Aquí encontraremos algo... — digo.

Tengo que encontrar algo acá, debe haber información, de quiénes me buscan, de ellos, no puedo irme de esta camioneta sin saber algo más.

Antes de abrir la puerta recuerdo.

— Pero, R... tú... bueno... — digo algo dudosa.

— ¿Estas segura?

— oh demonios...

__________________

ig: @skyy_zz

🌼.

Un pequeño video de cuando Kylie está en el campus.


🌼🌼🌼🌼🌼

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro