;Jaze's p.o.v.

Bien.
A contar esto otra vez.
Un puto cuento.
Eso fue nuestra relación.
Yo y mis ojos ciegos.
Que mal. Que mal que no me dí cuenta antes.
Una hija de puta a más no poder.

Varios meses atrás.

— ¡Entiende que no soy capaz de engañarte! - Me gritó.
— ¿Entonces? ¿Porqué cuando volví del podcast estabas con otro tipo, en NUESTRA cama y desnudos? — Hablé con mis ojos volviéndose cada vez más cristalinos. — T/N, lo tuyo es engañar a la gente.
— No sé de que estás hablando.
— Hacete la estúpida nomás. Mil canciones te dediqué y ya no puedo escuchar nada sin pensar en ti. — Estaba con la voz quebrada, e iba a seguir, hasta que ese tipo entró.
— ¡Hola bebé! ¡Vamos a repet...
Mi cara era de furia.
— ¿Quien eres tú y que haces con mi chica? — Preguntó.
— ¿No te contó? — Dije con una sonrisa. — Te aviso que esta chica de acá es una puta de piernas abiertas a cualquiera.
— ¡JAZE CALLATE!
— A mí no me vas a callar así nomás. Es la verdad. — Silencio de su parte. — Me voy y te dejo esta casa que yo compré partiendome el lomo en las compes. Mañana paso a buscar todo lo que sea mío.
Subí a mi habitación y agarré un bolso de viaje. Puse mi máscara, mis auriculares, la ropa que me alcanzase a entrar en él y varias cosas más sin importancia.
Llamé a Cacha, ya que estaba en Perú durante un tiempo y le dije que si podía ayudarme para llevar mi guitarra y otras cosas. Me dió el "Si" y lo esperé abajo con todas las cosas. Llegó, subimos todo y fuimos a otra casa que yo tenía hace tiempo y no quise vender. Acondicionamos todo y me quedé en mi habitación, pensando hasta tarde que habré hecho para que me pase esto.
— ¿Querés algo de comer? Podemos encargar...
— ¿Como qué?
— Lo que vos quieras, yo total me encargo otra cosa.
— ¿Comida china? — Pregunté. Sinceramente, me gusta mucho ese tipo de comida.
— Dale, ¿Fideos?
— Si, porfa.