||Narra Ciel||

Para mi suerte, los que no estaban sobre mí ayudaron a quitarme a esos tres y después Snake me ayudó a levantarme, sacudí mi ropa para tomar asiento frente a ellos, tan pronto lo hice los gritos comenzaron a sonar por todo el despacho, explicarles sería todo un reto sino lograba mantenerlos a raya, trataba de pensar en como lograrlo hasta que algo que fue dicho en particular me hizo prestar atención entre los gritos, hubiese querido que no lo dijese.

¡Se los dije! ¡Entre Sebastián-san y el bocchan surgió un romance prohibido y por ello huyeron lejos para consumar su amor secretamente!-. Esa voz era la de Meirin sin dudar, sus palabras me dejaron sorprendido y por el calor en mis mejillas podía deducir que estaba sonrojado, más no fui el único que se sorprendió, todos estaban igual y me miraban para saber mi reacción ante lo que se escuchó.

...Shieru... ¿E-eso es así? ¿Sientes algo p-por tu mayordomo, por S-S-Sebastián?-. Mi verdadero problema entro todos era la reacción de Lizzy ante la verdad, no era como si sintiera algo por ella, la apreciaba y quería mucho pero eso no iba más alla del hecho de que la veía solo como mi prima.

No sería correcto que tratara de mentir cuando nos encontraron de esa manera... La verdad es que sí siento algo por él, deje de verle como solo un simple mayordomo hace un tiempo, pero no esta relacionado al hecho de que por eso nos fuéramos-. Me encontraba apenado por decirles tan directamente eso, pero era verdad que mentir a esas alturas era inútil y algo tonto.

El que te fueras tiene que ver con el contrato demoniaco que tienes con él ¿Verdad?-. Esta vez fue Sullivan la que habló, nunca espere que dijera aquello, estaba enterado de que Sebastián tuvo que explicarle la marca en mi ojo cuando permanecí temporalmente ciego, pero él mismo me afirmo que no le comentó que él era el demonio con el que hice el contrato.- No te alteres, todos nosotros sabemos eso desde hace ya más o menos medio año.

Eso fue como un balde de agua fría que cayó sobre mí sin previo aviso ¿Cómo que estaban enterados desde hace ya medio año? ¿Quién se los dijo?

Les ví exigiendo ahora yo las explicaciones, era relevante que me dijeran el porque lo sabían.

Ciel, durante unos meses después de que enviaste aquellas paletas con el mensaje de que habías muerto todos realmente nos sentimos muy tristes, estuvimos en luto un largo tiempo-. Ahora era Soma el que hablaba, no era muy tonto como para no notar la tristeza y el sufrimiento que sus palabras guardaban, todos tenían una expresión que mostraba ello.

Luego de ello, un día mientras nosotros tratabamos de mantener la mansión limpia un carruaje llegó frente a la puerta principal y de el sorpresivamente usted bajo... o bueno, el que creíamos que era usted-. Bard hablaba mientras rascaba su nuca con nerviosismo, de hecho ahora todos parecían estarlo también, no sentía nada bueno a causa de ello.

Nosotros lo recibimos debidamente y muy felices creyendo que eras tu Smile, dice Oscar-. No me sorprendía el hecho de que fuese una de las serpiente de Snake el que siguiera el relato, pero entre más hablaban menos tranquilidad sentía.

Sin embargo, algo no estaba bien, yo lo note de inmediato pero el resto tardo un poco en darse cuenta, muy dentro de mí una voz decía que ese no era el bocchan que conocíamos, que podía tener la misma voz, apariencia pero en definitiva no era usted-. Desde que lo conocía sabía que Finnian era uno de mis más leales sirvientes, era él el que más aprecio y cariño parecía tenerme por haberle dado libertad, supongo que era fácil para él saber si era yo o no.

T-Ta-Tanaka-san fue quien de inmediato nos dijo que él era usted, Ciel Phantomhive, el dueño y señor de la mansión, ya que era él quien lo decía nosotros creímos en ello pero aun así no entendiamos porque de pronto usted regresó y sin Sebastián-san, cuando le preguntamos nos respondió que no conocía a nadie de ese nombre más que a un antiguo perro que tuvo, a-aquello no desconcertó en demasía pero creímos que tal vez algo le había sucedido realmente m-malo y por tal razón no quería mencionarlo o siquiera recordarlo, así que no preguntamos más en caso de que le doliese hablar de ello-. Aquello que decía Meirin ya era en definitivo lo que más me estaba preocupando, no quería creerlo.

¿Acaso él podría haber sobrevivido? Era absurdo e imposible, debía serlo, yo lo había visto morir.

A pesar de ello, a nosotros rápidamente nos llegó la noticia por parte de tus sirvientes de que parecías estar vivo y tan pronto como nos fue posible nos reunimos todos para darte una gran bienvenida justamente durante invierno, cerca de tu cumpleaños, sin embargo ni siquiera parecía reconocer a la mayoría, o saber con exactitud como los conoció, pero si me reconoció a mí y de hecho me trató como yo solía tener recuerdos de que era tratada, en ese momento supe de quien se trataba, en verdad era Ciel... el Ciel que había sido comprometido conmigo-. La mirada de Lizzy era difícil de entender que quería expresar, era como una mezcla de tristeza, decepción y cierto enojo, pero no se sentía como si fuera dirigida a mí, no del todo.- De inmediato le pregunte si era realmente el Ciel que conocía de niños, su respuesta fue que sí y que estaba buscando al bastardo de su gemelo que le había quitado todo para buscar y cumplir venganza propia usando el poder que un demonio le dió a cambio de su alma.

Con eso yo supe que se trataba de ti, ya que Sebastián fue quien me comento lo de la marca en tu ojo, claro que yo misma deducí que era él aquel demonio con el que formaste el contrato, era un poco obvio si me detenía a pensarlo-. A esas alturas era un milagro que estuviera aun consiente, realmente estaba asustado, no creía en que él pudiese haber sobrevivido pero así parecía serlo.

Cuando nosotros le preguntamos entonces que haría si le encontraba nos dijo algo no muy bueno, dijo que tomaría lo que le pertenecía y destruiría la cena del demonio que llevo al bocchan a la oscuridad, por su propia cuenta dedució que era Sebastian-san el demonio que lo controlaba a usted y lo obligaba a realizar una venganza-. No podía ni quería seguir escuchando más.

No cuando parecía que él estaba vivo y buscándome para matarme, aunque eso ahora era imposible.

Él comenzó a insultarnos por creer en ustedes y defenderles, para nosotros eso no era aceptable, no cuando a ustedes nosotros les debíamos mucho, por ello el primero en explotar en furia fue el príncipe, diciendo que no debía de insultarle sino sabía nada de lo que habían hecho por nosotros y fingía que era alguien más-. No podía no imaginar la manera en que Soma debió decir aquello.

Pero en sus palabras no habías mas que errores, en especial al decir lo último, ya que era yo el que fingió ser otro.

Entonces eso tan solo le hizo reír y dijo que quien fingía ser otro eras tú, nos dijo todo sobre ti, nos dijo que el antiguo conde no tuvo solo un hijo, sino dos, gemelos.- Ya no podía tener más dudas, las palabras de Soma lo confirmaban, mi hermano estaba vivo y ahora había tomado de vuelta la vida que yo le "quité".

Tanaka-san nos terminó de contar el resto respecto a cuando nacieron y el como usted al ser más débil debía ser más cuidado, por otra parte el que decía ser el real amo Ciel entonces nos contó lo que sucedió antes, cuando se supone usted hizo el contrato con Sebastián-san, al finalizar parecía muy molesto porque el bocchan recurriera a un demonio para salvarse-. Bard era quien más seriedad mantenía mientras hablaba, de hecho todos lo estaban, lo que me hacía sentir mayor ansiedad, algo más estaba por serme dicho y no me agradaría aparentemente.

Ya entendíamos muchas cosas para ese momento gracias a lo que nos dijo, en especial yo, pero por otro lado aun así me preocupaba también por ti y por ello le pedí que no te buscara ya que entonces al parecer tú habías muerto, pero él nos dijo que no era así, que alguien afirmaba haberles visto, una persona de su confianza lo aseguraba, entonces con una sonrisa que me atemorizó bastante nos juró que haría que el demonio que te llevó a la oscuridad las pagaría, que conocía la manera de herirle y de paso destruiría su cena-. Mi preocupación causada por las palabras de Lizzy me hizo llamar a Sebastián en un susurro sin darme cuenta.

Tan pronto lo hice él ya estaba junto a mí tocando mi hombro en señal de apoyo.

Fue de esperarse que todos se sorprendieran un poco por su repentina llegada cuando se suponía no estaba, pero tan pronto como él había llegado su sorpresa se desvaneció y regresaron a la seriedad junto a cierta ¿paz?

No lograba decifrar eso, si sabían lo que Sebastián era, me era fácil pensar que debían tenerle por lo menos un poco de miedo pero no parecía ser el caso, aun así, no estaba en un momento adecuado para cuestionarme ello, no cuando sentía que algo verdaderamente relevante me sería dicho.