Jimin tocó suavemente con su dedo índice la piel coloreada del mayor. Un escalofrío de dolor recorrió el cuerpo de Yoongi y apretó sus labios para no soltar una maldición.

—No si... Solo era el labio —refunfuño el menor observando las feas manchas violetas, azules y rojas sobre el abdomen del mayor.

—No si... No me lastimó —refunfuña de igual forma Yoongi mientras contemplaba el hematoma en el antebrazo de su pareja, igual de horroroso que el de él.

Suspirando Jimin tomó un poco de la crema que les compró su madre y la esparció suavemente en el torso de su pareja, en cada fea mancha que molestaba la pálida piel de su pareja.

—¿Duele mucho? —pregunto esparciendo lo más suave que podía la crema.

—Se ve feo pero no es tan así —aseguró apreciando las tiernas facciones del menor, quien estaba concentrado en su tarea.

—Déjame te ayudo, Hyung —dijo ayudándole a colocarse la camiseta y la chaqueta una vez que terminó.

—Ahora es mi turno —señaló palmeando al lado de su cama.

Jimin se sentó obediente y estiró su brazo con el feo hematoma donde los dedos de su padre quedaron marcados.

—Cómo me gustaría volver a golpearlo —pronunció Yoongi furioso de ver una marca en la piel de su pareja.

Antes de colocarle la crema dejó un suave beso en la piel lastimada, acelerando el corazón de Jimin con ese dulce gesto.

—Hyung, está seguro de que no quiere ir a médico —insistió el menor observándolo aún preocupado—. Sé que mamá ya lo vio y todo eso pero...

—Confío en tu mamá, Mochi. No es enfermera por nada —le guiña un ojo.

—Pero dijo que si le costaba respirar tenía que ir a la clínica —le recordó arrugando su nariz.

—Suerte que sí puedo respirar bien —sonríe terminando de esparcir la crema, entrelazo sus dedos.

El menor le observó con desconfianza antes de asentir lentamente con su cabeza. Inclinándose hacia adelante dejó un suave beso en los labios del pelinegro.

—Gracias por defenderme y detenerse cuando se lo pedí, a pesar de que quería seguir golpeándolo —murmura alejándose.

—Nada es más importante que tú, Jimin —aseguró—. Ahora, salgamos antes de que tu madre piense mal sobre todo el tiempo que llevamos aquí en la habitación.

—¿Por qué pensaría mal? —pregunto a la vez que se levantaba.

—¿Te acuerdas de lo que dijo cuando me vio apretar tu hermoso trasero? —arqueó una ceja, aun algo avergonzado de que lo atraparan.

Había sido un descuido, le gustaba ver las diferentes reacciones de su pareja cuando lo hacía, algunas eran tímidas, avergonzadas y otras enojadas.

Tenía que admitir que le gustaba su reacción enojada, como levantaba levemente su labio superior y entrecerraba sus hermosos ojitos mientras le señalaba con su dedo para seguido golpearlo suavemente en el pecho al estar avergonzado.

—Entonces solo deje de hacerlo Hyung, fue vergonzoso y mamá... Oh... Ya entendí —apretó sus labios mientras su rostro pasaba a consumirse en un tierno rojo.

—Sí, a eso me refiero —suspira dejando salir una pequeña risa. Tomó la mano de su pareja otra vez para salir a la sala.

Una desconfiada mirada se posó en ambos al salir, en especial sobre el castaño claro. Fue como si estuviera analizando todo en él, buscando algo.

—Yah mamá, es vergonzoso —se quejó el menor colocando su mano libre en su mejilla, intentando aplacar el calor de esta.

—Ustedes no... —subió y bajo sus cejas.

—¡Mamá! —chillo con bochorno el menor, prefiriendo ocultarse en la espada de su pareja para no enfrentar a la mujer.

—Prometí que esperaría hasta que Mochi fuera mayor —respondió con seriedad Yoongi.

Jimin bajó su cabeza al sentir movimiento, sonrió entre tímido y divertido cuando vio la mano de Yoongi cruzando sus dedos con fuerza.

—Bien, así me gusta —asintió con su cabeza para volver a guardar los trastes que había limpiado luego de comer.

Yoongi observó sobre su hombro a su pequeña pareja y le cerró un ojo, el castaño claro negó sonrojado y apoyó suavemente su cabeza en el hombro del contrario.

Antes de que el pelinegro pudiera darse vuelta para abrazar a su pareja, la puerta de su departamento se abrió y Taehyung entró junto a su pareja sin siquiera esperar invitación alguna, como si fueran los dueños del apartamento.

—¿Cómo consiguieron mi contraseña? —pregunto Yoongi frustrado.

—Un mago no revela sus trucos —respondió cantarín el pelirrojo antes de saltar sobre el sofá para sentarse en él.

—Hace unos días te descuidaste y manzanita te vio antes de entrar a su departamento —contestó Taehyung ignorando los ojos entrecerrados llenos de indignación de su pareja—. Ay no llores, de todas formas la va a cambiar ahora —le recordó sentándose en su regazo con toda la confianza del mundo.

—De todas formas creo que tendré que castigarte —le gruñó dándole una idea bastante clara a su pareja por la mirada que le daba.

—¿Cómo lo vas a castigar, kookie hyung? —preguntó Jimin.

—Bueno, ya sabes... —sonrió algo pervertido, moviendo sus manos discretamente sobre el cuerpo de Taehyung.

—... No, entiendo —respondió sonriente, corriéndose con su divertida pareja para darle paso a su madre.

—Chim, lo que pasa es que aún eres muy inocente como para entender —dijo Taehyung observando a su pareja, relamió sus labios.

—¿En serio? Yo creo que se está haciendo una idea bastante clara respecto a lo que se refieren ustedes dos actuando así —exclamó la mujer mayor, sobre saltando a la joven pareja.

Jungkook rápidamente levantó sus manos en busca de demostrar su inocencia.

—No te pares —gritó Taehyung agarrándose del cuello de su pareja para no caer cuando este se levantó del sofá.

Lamentablemente, aquello hizo que Jungkook perdiera el equilibrio y para no caer al suelo aplastando a su pareja, los giro estratégicamente para caer en el sofá, quedando en una posición más comprometedora que la anterior.

—Hyung, la mano de kookie está tocando el...

—No es necesario que lo digas Mochi —detuvo colocando su mano sobre la boca del menor, ambos aguantando las ganas de estallar en carcajadas.

—¡No estábamos haciendo nada malo! —gritaron ambos, separándose al instante en que se recuperaron.

Sus rostros estaban rojos y evitaban la mirada de todos.

—¿Tu paquete está bien, hijo? —pregunto Hyojin aguantando sus ganas de reír.

—¿Paquete? —pregunto confundido.

—Donde te agarro Kookie hyung —señaló Jimin ya sin poder aguantar la risa junto a su pareja, ambos se llegaban a doblar de la risa.

Taehyung observó incómodamente su entrepierna al igual que su pareja, ya podía entender por qué le dolía.

—¿Te duele bebé? —preguntó Jungkook entre preocupado y divertido.

—Solo... No digas nada más —pidió el castaño oscuro negándose a estar avergonzado para divertir a los demás, por lo que prefiero que la vergüenza recayera sobre su pareja.

Jungkook observó aquellos ojos y supuso que algo había planeado aquella cabecita por el brillo en ellos.

—Cómo estás tú amor, creo que te agarre algo más abajo de tu paquete —pregunto dibujando un círculo en el aire.

Esta vez la madre de ambos simplemente no pudo evitar reír.

Oh, quién iba a pensar que Jungkook se podría sonrojar más que Jimin.

—Carajo... Duele... —exclamó Yoongi abrazando su abdomen mientras seguía riendo.

—Ya hyung... No ría —pidió Jimin limpiando sus lágrimas—. No quiero que le duela.

—Siento que es una total falta de respeto el que Yoongi hyung diga una palabrota y no le digan nada al respecto —reclamo Jungkook tratando de pasar rápidamente el tema de él.

—¡Oh! ¡Es cierto! ¡Eso es favoritismo al extremo mami! —reclamo Taehyung apoyando a su pareja.

—Creo que ya está recibiendo su castigo por ello —señaló apuntándolos.

Jimin estaba inclinado sobre Yoongi intentando que éste dejara de reír a la vez que se quejaba del dolor.

—Ya hyung —pidió Jimin tomando su rostro entre sus manos.

—Pero... Tu viste... —ríe y hace una mueca de dolor.

Sin pensarlo más, el menor se inclinó para besarlo, aquello definitivamente llamó la atención de su pareja que dejó de reír y se concentró en devolverle el beso, recordándose en mantenerlo uno simple por las visitas no deseadas y su suegra.

—¿No le vas a decir nada? —se quejó el mayor de los hermanos.

—Solo es un beso, no veo nada allí de lo que vi de ustedes en el sofá —señaló.

—¡Bien! Mejor les muestro por lo que veníamos, malagradecidos —exclamó indignado Taehyung, volviendo a sentarse en el sofá junto a su pareja, solo que esta vez dejando una pequeña distancia.

—Conectalo a la Tv —se entusiasmo en pelirrojo, encendiéndola.

Sonriendo Taehyung volvió a buscar el vídeo en YouTube y lo transmitió a la pantalla plana para que todos lo vieran cómodamente.

Interesados, los restantes se acercaron y se sentaron en el sofá también.

—¡Eres tú, Yoongi hyung! —exclamó Jimin impresionado.

El vídeo era sobre la salida de ayer, específicamente el momento en que Yoongi lo salvaba de su padre y lo golpeaba, luego salían sus amigos y su madre intentando golpearlo también.

—Esto es viral, lo he encontrado en cada red social en la que me he metido —agregó Taehyung.

—¿Yoongi has revisado tus cuentas? Twitter está que arde —comentó el pelirrojo.

—¿Hay cosas malas? —pregunto Jimin angustiándose mientras observaba a su pareja meterse en la cuenta desde su móvil.

—Yo no diría exactamente eso —murmura su hermano mayor mientras le muestra a su madre.

Yoongi alzó ambas ceja sorprendido al leer los comentarios.

—No Mochi, todos están puteando a tu estúpido padre y defendiéndote... —desliza su dedo por la pantalla. Jimin se inclinó a su lado para ver también—. Preguntan cómo te encuentras y... ¿Por qué Jin está respondiendo? Ese es mi trabajo —se quejó.

Jimin estaba realmente sorprendido de ver los comentarios de apoyo y preocupación, definitivamente era algo que no había esperado.

—Kook —llamó Yoongi a la vez que le lanzaba su móvil—. Tomamos una foto —pidió acercándose más a su pareja.

Encogiéndose de hombros Jungkook les tomó dos fotografías y luego lo volvió a lanzar hacia su dueño.

—¿Qué piensas hacer, hyung? —pregunto el menor con curiosidad.

Min sonrió y se movió un poco evitando que su pareja le viera.

—Listo —sonrió.

Jimin le observó extraño y luego sacó su teléfono cuando vibró, alzando una ceja se metió a Twitter.

Pequeño Mochi está bien y yo igual, gracias por su preocupación 👍

Pd: Eres tierno mi lindo Mochi 😍

Pd2: Ugh... ¿Ven qué tan enamorado me tiene que incluso usé un emoji?

MY.

—Te daré un corazón sólo porque Chimchim sale re tierno en la foto —advirtió Taehyung.

—Hyung —murmura lanzándose encima del pelinegro.

Yoongi cerró con fuerza sus ojos y aguanto el dolor mientras correspondía el abrazo, aceptando gustoso los pequeños besos del menor en su mejilla.

—Ahora, eso es karma —señaló la madre de los hermanos Park.

—Ay hyung, perdón —exclamó Jimin alejándose rápidamente mientras la otra pareja reía.

—Solo vuelve a abrazarme —gruñó abriendo sus brazos en espera.

Y Jimin volvió, solo que esta vez se aseguró de hacerlo con cuidado para no volver a lastimarlo.

—Oh, parece que Jin también subió una foto de él con mi bebé —dijo la mujer al seguir en la cuenta de su hijo mayor.

—Esto es la guerra —gritó Taehyung quitándole el teléfono a su madre para subir sus fotos.

Jungkook se levantó y se sentó al lado de la pareja, colocando uno de sus brazos por los hombros de Jimin.

—Jiminnie, ¡di galleta!

—¿Galleta? —repitió confundido mientras salía de su escondite, justo en el momento en que Jungkook tomaba la fotografía.

—Ajá, ahora yo también tengo —exclamó alejándose y sentándose al lado de su pareja otra vez mientras subía la foto.

—Supongo que yo también debería de subir —exclamó la mujer, soltando un suspiro resignado que divirtió a todos.

—No tienes Twitter, mami —le recordó Jimin.

—Podría enviármelas y yo las subo en mi cuenta en su nombre —resolvió Yoongi.

—¡Eso es trampa! —gritó Taehyung mientras su madre le ignoraba y enviaba las fotos a Yoongi.

—Querías guerra —respondió burlón el pelinegro.

Jimin rodó sus ojos y se acomodó más cerca de su pareja, tal parecía que iba a ser el tema en las redes sociales por el día de hoy.

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Yo avisando que el próx también es el ultimo... 

Besitos! <3