—¿Por qué tan malhumor? —pregunto Jungkook caminando a su lado.

—No sé... Quizás... ¿Porque usaste a mi hermanito para atraerme hasta aquí? ¿O porque por tu culpa los perdimos de vista hace horas? —exclamó enojado, deteniéndose.

Jungkook alzó ambas cejas con gesto arrogante.

—¿Por qué te preocupas ahora?, hace solo un momento atrás estabas muy entretenido conmigo haciéndole muecas a una estrella de mar.

—Eso es diferente —se quejo haciendo un puchero.

—¿En qué? —soltó un suspiro cansado—. ¿Por qué eres así?

—¿Así cómo?

—Como... Si evitas a propósito divertirte conmigo cuando en verdad lo haces, y no me puedes decir lo contrario luego de haber hecho esa épica competencia de quién se come más rápido el helado —señalo apuntándole con el dedo.

Taehyung hizo una mueca y luego sonrió al recordar como a ambos se les congeló el cerebro por aquella estúpida competencia en la cual, él ganó obviamente.

—Ves, estás sonriendo —acusó feliz el contrario.

—Está bien, sí, me divierto contigo y es exactamente por eso no quería venir —refunfuño al verse descubierto.

—¿Por qué? —cuestiono algo desconcertado, no lo podía entender.

—Porque nunca me ha gustado alguien o nunca nadie me ha llamado tanto la atención como tú lo haces y me da miedo porque, vamos, eres famoso, puedes tener a quien quieras a tu lado y muestras interés en mí —confesó finalmente con una larga exhalación—. Waoh, eso fue profundo —dijo llevando una mano hacia su pecho, tratando de quitarle un poco de seriedad al asunto.

Jungkook bajo su cubre bocas con una sonrisa de oreja a oreja sin poder evitarlo, muy feliz con la confesión del contrario. Ya que él sentía exactamente lo mismo, solamente que no lo asustaba, le fascinaba ese sentimiento por Taehyung.

—Ah claro, ríete de mí y mi confesión dramática —enojado se dio media vuelta, más que enojo, sentía dolor al pensar que se burlaba de él.

—No, espera —lo agarro de la mano y lo jalo hacia él, provocando que ambos cuerpos se juntaran.

Taehyung quedó aturdido por un momento ante la cercanía, el perfume varonil del contrario llegó a su nariz de lo cerca que estaban.

—No me reía de ti, solo sonreía porque estaba feliz que tú te sintieras igual a mí —exclamó entrelazando sus dedos.

—... ¿En serio? ¿No me mientes? —pregunto desconfiado e inseguro.

—Nop —sonríe—. La única diferencia, es que mientras tú tienes miedo de ese sentimiento, yo estoy muy feliz con él. No, me interesan las otras personas tampoco, solo me interesas tú.

—Entonces...

—Entonces... —imitó.

—¿Ya me vas a besar o no? —pregunto Taehyung observando los labios de contrario.

Feliz, el pelirrojo junto sus labios en un suave beso, donde por primera vez sus lenguas se conocieron y bailaron juntas.

—Esto solo cambia un poco las cosas... —susurro el castaño oscuro cuando se separaron, ambos rieron bajito.

—Bueno, entonces solo tengo que besarte más...

Una multitud de personas los pasaron a llevar, separándolos.

—¡Estás seguro de que viste a Min Yoongi aquí!

—¡Sí! ¡Estaba cerca de las tortugas, frente a los caballitos de mar, joder!

—Dime que no hablan del mismo Min Yoongi que yo conozco —pidió cerrando uno de sus ojos.

—Bueno... —ambos vieron a lo lejos como Jimin y Yoongi corrían siendo perseguidos—. Creo que si es el mismo que nosotros conocemos, a menos que Minnie tenga un gemelo.

—Tengo que salvar a mi hermanito.

—¿Y cómo lo vas a hacer? —cuestionó alzando una ceja, la sonrisa inocente del contrario le predijo algo no muy bueno.

—¡OH DIOS MÍO! ¡ES JEON JUNGKOOK! —grito quitándole el gorro, señalándolo.

—Me debes diez besos y otra cita por esto —gruño antes de echarse a correr cuando la multitud que seguía a su hermanito lo comenzaron a perseguir.

—Hyung, ya no hay nadie —informo Jimin abrazando a su panda.

—Hum... Mejor para nosotros —se encoge de hombros, ambos salieron de su escondite.

—Hey, acabo de vender a Jungkook por ustedes así que yo también quiero un panda —señalo Taehyung caminando hacia ellos.

Jimin inclinó ligeramente su cabeza, observó a su panda y luego se escondió detrás de Yoongi.

—Este es mío TaeTae, obtén el tuyo —advirtió abrazando con ambos brazos su peluche.

—¿Cómo es eso de que vendiste a Kook? —pregunto Yoongi divertido, distrayendo al castaño oscuro que observaba la cabeza del menor sobresalir por el costado derecho del rubio solamente para sacarle infantilmente la lengua.

—Nosotros estábamos... Eh... ¿Hablando? Sí, hablando —asiente con la cabeza—. Y entonces vimos corriendo a Chim y ti, así que para ayudar a mi hermanito, grite su nombre y luego todos estaban corriendo detrás de él —terminó de explicar riendo y contagiando a los otros dos.

—Pobre kookie hyung —musito Jimin saliendo de su escondite.

—Fue un buen sacrificio —sonrió Yoongi.

Les informamos a los presentes visitantes que el acuario cerrará en la próxima hora, por favor pedimos ir retirándose.

—Woah... ¿Estuvimos tanto tiempo aquí? —exclamó impresionado el menor.

Ambos mayores se observaron fruncido el ceño, no eran más de las siete de la tarde, aún temprano como para que el acuario cerrara.

Pedimos por favor que no corran, pueden lastimarse o causar daños a la propiedad.

—Eso lo explica —murmuraron Taehyung y Yoongi.

—Esperamos a Kook en el estacionamiento —propuso el mayor siendo enseguida aceptado por los hermanos.

Camino al auto Taehyung recibió una llamada de su madre y se separó de su hermano y Yoongi.

—Fue una tarde muy divertida —exclamó el menor comenzando a dar pequeños brinquitos mientras caminaban.

—¿A pesar de que tuvimos que correr? —Jimin rio suave y asintió con su cabeza.

—Si, eso fue la parte más divertida —exclamó verdaderamente feliz—. Estar con usted siempre me pone feliz y más ahora que... Ya sabe —ríe tímidamente.

—Yo lo sé —rio contagiado por la ternura del menor.

—Estoy feliz de haber aceptado salir con kookie hyung —susurro antes de hacer un mohín al recordar, se detuvo cabizbajo.

—¿Ocurrió algo? —pregunto deteniéndose, agarrando suavemente del mentón al pequeño Mochi.

Le dolió ver la expresión del menor, era tan preocupada.

—Jimin, pequeño ¿Qué sucede?

—Hoy... Hablé con mi papá —susurro mordiendo su labio inferior—. Mamá no lo sabe.

—¿Y de qué hablaron? —logró mantener su voz tranquila a pesar del odio que le invadió solo por escuchar hablar de ese hombre.

—Me ha estado llamando toda la semana y yo lo estuve ignorando, pero hoy me dio curiosidad saber cómo consiguió mi nuevo número y conteste.

—¿Y...? —le insto a seguir.

—Me pidió que nos juntáramos, que extrañaba pasar tiempo conmigo —bufo ignorando como sus lágrimas se deslizaban por sus mejillas—. ¿Por qué me pide algo así, si en verdad no me quiere?

Con ternura, Yoongi limpió con sus pulgares aquellas brillantes lágrimas

—Seré sincero, tu padre es un estúpido que no sabe lo genial, tierno e increíble que eres. Es un hipócrita que no sabe ya qué hacer para seguir llamando la atención dentro de tu familia —dijo totalmente serio, sonriendo suave cuando Jimin rio bajo, dejando de llorar.

—Gracias, Hyung —susurro reconfortado por las palabras de su ahora novio.
Si esto era un sueño, realmente no quería despertar.

—Solo digo la verdad pequeño, ¿Te dijo algo más?

—Uhm... Se enojó y me gritó cuando le dije que no quería salir con él y que por favor no me llamara más.

—Imbécil. —esta vez Jimin soltó una alegre carcajada—. No te preocupes por eso —pidió dejando un beso en su frente.

Sonrojado, Jimin sonrió hasta que sus ojos desaparecieron.

—No... Saben... Cuánto tuve... Que correr —exclamó cansado Jungkook, recargándose en sus rodillas.

—¿Estas bien, Kook hyung? —pregunto Jimin acercándose.

—Muero... Por aguaaa... —respondió tomando grandes bocanadas de aire.

—Ugh... No tengo agua... —murmuro preocupado, inclinándose delante del pelirrojo para observarlo mientras abrazaba a su peluche.

Yoongi dejó de ver a esos dos y observó a Taehyung cuando se dio cuenta de que le hacía señas para que se acercara.

—¿Qué sucede?

—¿Podemos quedarnos contigo? —imploró juntando sus manos.

—Explicame primero que sucede.

—Mi estúpido padre se apareció en la casa diciendo que quería vernos y mamá le dijo que nosotros salimos y que nos íbamos a quedar en la casa de un amigo.

—Adivino, no le cree —Taehyung hizo una mueca.

—No y dijo que nos iba a esperar.

—Por mi no hay problema —acepto fácilmente, no quería que Jimin volviera a estar triste por ese hombre.

—¡Gracias!

—Yo quiero mi recompensa —exigió Jungkook apareciendo al lado de ellos, al igual que el menor.

—Fue por una buena causa, no deberías de estar exigiendo nada —regaño Taehyung indignado.

—¡Casi me torcí el tobillo allá!

—¿Lo hiciste?

—No.

—Entonces estás bien, no chilles como nena.

Jimin y Yoongi rieron observándoles divertidos.

—Vamos, seguirán discutiendo en mi departamento —ordenó el mayor, agarrando la pequeña mano del tierno castaño claro comenzaron a caminar.

—¿Vamos a ir a su departamento, Hyung? —pregunto entusiasmado Jimin.

—Aún es temprano para volver a casa y tu mamá ya dio permiso.

Jimin sonrió en grande mientras seguía de cerca a Yoongi.

Detrás de ellos, Jungkook y Taehyung les seguían a unos pasos de distancia, el primero aún quejándose de todo lo que corrió.

Aburrido, Taehyung agarro el rostro del pelirrojo y le dio un corto beso.

—¿Mejor? —preguntó volviendo a caminar.

—Creo que si me das otro estaré mucho mejor que ahora —el castaño oscuro rió y negó con su cabeza, divertido.

—Vamos en mi auto, yo te paso a dejar a tu casa para terminar bien nuestra primera cita.

—Fallaste en un detalle, Romeo —se burló Tae viendo como su hermanito se subía entusiasmado al auto del rubio.

—¿Qué cosa? —pregunto divertido ante el apodo.

—Que aún no me voy a casa, me iré a quedar con Chim al departamento de mí aún no cuñado, alias, Yoongi.

—¡¿Qué?! —exclamó sorprendido, deteniéndose frente a su auto.

—Así mismo, mamá me pidió que no volviéramos a casa porque estaba papá y yo le pregunte a Yoongi y dijo que sí, en verdad está colado por mi hermanito, me pregunto cuando le pedirá ser su novio, quiero grabarlo todo —murmura pensativo.

Ambos se subieron al auto del pelirrojo.

—¿Problemas familiares? —pregunto comenzando su conducir, detrás del auto de Yoongi.

—Se podría decir, mi estúpido padre es un hipócrita que habla mal de Jimin cuando no está presente y que engañó a mamá. Ahora están haciendo el trámite para el divorcio pero a papá se le metió la idea de que quiere vernos por lo menos dos veces a la semana o tenernos todos los fines de semana —se quejó rodando sus ojos.

Jungkook frunció el ceño, molesto.

—¿Jimin...?

—Sabe que papá habla mal de él y por eso ya no quiere tener nada que ver con él.

—¿Y lo del divorcio y tu madre?

—Mamá no le quiere decir nada porque sabe que Chim se va a culpar y tiene razón —suspira—. Cuando papá se comenzó a distanciar, Minnie se culpó enseguida.

—Sabes... Cuando llegue hoy, Jimin parecía muy triste.

—¿Qué? ¿Por qué? —cuestionó preocupado, volteandose verlo.

—Me dijo que habló con su padre de algo sin importancia, no le tome el peso hasta ahora.

—¿Por eso le pediste salir al acuario? —pregunto sorprendido.

—En parte —admite—. Sabía que Yoongi lo haría feliz y sabía que Hyung vendría a verlo si lo molestaba y se enteraba que estaba con Minnie.

—¿Y la otra parte? —pregunto conmovido.

Jungkook apagó el motor y volteó a verlo.

—Fue la única forma de conseguir una cita contigo —le cerró un ojo y se bajó del auto con una atractiva sonrisa que afectó a Taehyung.

—Malditas hormonas... —murmura deseando no estar rojo como su hermanito.

—¿Vamos? —pregunto el pelirrojo abriéndole la puerta, estirando su mano en su dirección.

—No soy una chica —gruño aceptando de todas formas el gesto.

—Nop, eres mi chico —sonrió comenzando a caminar para encontrarse con los otros dos.

Jimin le sonrió a su hermano mayor y luego le volvió a prestar total atención al rubio con el cual iba de la mano, ambos en su mundo con un secretito que no pensaban compartir aún.

—Dime que nosotros no nos veremos así.

—No, nosotros somos más cools —sonríe comenzando a caminar.