EL LAZO

La habitación olía a sexo, la perfecta mixtura de sus aromas era una exquisita amalgama de umami.

Los dos híbridos que llevaban horas amándose, parecían no cansarse jamás.

Casi llegando a su estallido orgásmico, Sialuk detuvo las estocadas para gruñir sobre el cuello de su amado.

-Ahh, ahhh por las estrellas... Krasnyy, te amo...

-Márcame.

-Amor, ¿Estás seguro?

-Por las estrellas, Luk marcame ahora, rompe mi carne...

Cargado sobre su espalda, apoyó su boca sobre el cuello de Krasnyy y sin salir del cuerpo del chico, sus dientes rompieron la piel de su amante desgarrandola sin piedad.

Estallaron en fluidos y sus voces bramaron de placer.

Los gruñidos del rojo, se manifiestaron en un increíble canon circular infinito, a la que unos compases más tarde la voz de Sialuk, repetiría la misma melodía de manera exacta a la del bello dux.

La respiración de ambos fue retomando el ritmo normal.

-Amor, esta marca no desaparecerá jamás. Eso significa que te he reclamado y que ahora estaremos incondicionalmente unidos.

-Ya soy tuyo, Sialuk. Nada más importa.

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Deliberadamente he decidido no regresar nunca jamás a mi aldea. He descubierto entre los lobos lo que es pertenecer a un pueblo, formar parte de él y sentirse uno más. Nunca me sentí así.

Huérfano a temprana edad, me aislaron en la colinas de Siku, la zona más inhóspita de la región de los Hielos y me condenaron a vivir en la más cruel de las soledades.
Una vez al mes debía bajar a la aldea de mi manada a recibir la preparación para ser un angakkoq.

«Mi manada» dije... Nunca fue mía.
Manada de Siku... los mismos que me hicieron crecer pensando que estar solo, estaba bien. Lo único que siempre han querido es que yo cumpla con un maldito mandato sin haberme dado nada a cambio.

Esas tres o cuatro lunas en las que me dejaban habitar el pueblo, siempre aparecía, como por arte de magia, algún «candidato» dispuesto a aparearse conmigo para luego desaparecer.
Ahora me doy cuenta que eso estuvo siempre premeditado por los líderes. Tal vez pensaron que manteniéndome saciado durante mi celo, no necesitaría del cariño fraterno.

Y así crecí, sin saber lo que es el cariño, ni un abrazo contenedor, ni una mísera mirada de aprobación.

Que Trueno me arrastrara de esa estepa helada y me obligara a venir a su aldea para conocer a Sialuk ha sido, sin dudas, lo mejor que me pasó en la vida.
Me enamoré. Mi corazón da saltos en mi pecho cuando lo escucho llegar. El lazo que creamos después de que me marcara se hace cada vez más intenso. Mi hombro sangra cada vez que él refuerza la marca pero juro por todas las estrellas que es el dolor más placentero del mundo.

La Noche Púrpura ya ha sucedido y con ella, la anunciación y eso me tiene muy nervioso. Solo espero no haber sido el designado. Ojalá hayan nombrado a alguno de los otros aprendices.
La verdad es que tengo mucho miedo. No quisiera que mi terror opacara mis momentos de felicidad pero ahora mismo tengo mi pecho cerrado por la angustia.

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-¡Kras! ¿Dónde estás? Puedo sentir tu dolor amor, ¿Dónde estás?

-Aquí estoy, Sialuk, curando la marca de anoche. Me duele un poco.

-Oh mi bebé, me asusté mucho. Pude sentir que estabas triste.

-Estoy asustado Luk. Estoy aterrado. La anunciación ya se debe haber hecho y no saber lo que ocurrió me tiene muy mal.

-Tranquilo amor. Estás conmigo. Ven acá, déjame ponerte ungüento en la herida.

-No quiero ungüentos. Solo pasa tu lengua. Tu saliva me calma. Además, esta noche quiero otro de esos mordiscos profundos.

- Krasnyy, no. Basta. No voy a lastimarte nuevamente. Nuestro lazo ya está creado. No necesitas que siga lacerando tu carne.

-Pero.... No quiero que se cierre. No quiero que me dejes, si me dejas me muero, no quiero que....

-Amor, no llores, ¿Qué pasa? Nunca voy a dejarte. Esto es para siempre.

Un sonido ensordecedor llegó desde el sector norte de la aldea y los dos salieron a ver de qué se trataba.

Todos corrían en cuatro patas porque algo había estallado y se había prendido fuego el corral de las ovejas.
Sialuk cambió de forma y el hermoso alaskan corrió veloz al lado de su manada.

Entre todos ayudaron a apagar el fuego y pusieron a salvo a las ovejitas.

Regresó rápidamente a su casa para contarle a su omega que solo fue un susto, pero al llegar no lo encontró allí.

-Krasnyy, amor, ¿Dónde estás?

Lo buscó incansablemente por toda la casa y por fuera de ella. Sintió que su alma abandonaba su cuerpo cuando vió que el cerco había sido violentado y jirones de la ropa que el rojo llevaba puesta está mañana, habían quedado enganchados en partes de las maderas rotas.

-¡¡No, noo, no, Krasnyy, Krasnyy!!

A través del lazo, él experimento el terror que Krasnyy estaba sintiendo.

Trueno y tres de sus mejores lobos llegaron ante los alaridos de Sialuk.

-Calmate Sialuk, ¿Qué ocurre?

-Se lo llevaron, se lo llevaron -repetía sin parar- Prometí que lo cuidaría, que no lo dejaría solo, y me fui como un idiota ante el primer ruido. Nos tendieron una trampa...

Luk cambió de forma y comenzó a correr persiguiendo las huellas.
Trueno, convertido en lobo, más rápido y más fuerte que él se interpuso en su camino haciéndolo detener.
El alaskan no paraba de aullar y girar en círculos.

-Sialuk, detente un minuto. Por favor. Haremos esto bien. Iremos a rescatarlo. Eso es un hecho. Pero lo haremos bien. Prepararé a mis mejores lobos. Volvamos a la aldea, ven conmigo. Prepárate tú también.

-No, no, debo ir ya...

-Sialuk de los Gritos, es una orden -Aulló Trueno con su voz de mando. El alfa líder no le daba opciones.

El perro accedió a desgano y corrió al lado de su líder de regreso a la aldea a convocar a los lobos guerreros.
En ese momento llegaron dos de los lobos vigías. Sialuk es el alfa de esos lobos, pero no estaba en condiciones de nada. Solo se detuvo para escuchar lo que tenían para decir.

-Trueno, Sialuk, tres de nuestros vigías están persiguiendo de cerca a los siberianos que se llevaron a Krasnyy.

El alaskan salió del mal trance en ese instante al oír el nombre de su amor.

-Uno de ellos se comunicó a través del lazo con su omega. Ella pudo ver todo. Nuestros vigías están muy cerquita de los secuestradores. Lo han obligado a cambiar de forma y lo llevan encadenado detrás del trineo.

-Voy a matarlos. Voy a sacarles el corazón....

-Saldremos ahora -Gruñó Trueno- Tranquilo Sialuk, nadie se mete con un miembro de nuestra manada. Los mataré yo mismo...

Glosario:

†| Lazo

En el género Omegaverse, los lazos son una conexión que se establece únicamente entre alfa y omega.

Este lazo es eterno, y se genera cuando un alfa muerde a un omega en un costado de su cuello durante la relación sexual, dejando una marca en el cuello del omega que no desaparece jamás. Esto significa que el omega ha sido reclamado y está unido incondicionalmente a su alfa.

Hay conexiones tan fuertes que ambos lados pueden sentir lo que el otro miembro de la pareja incluso si están en lugares distintos.

†| Umami
Es el quinto sabor básico. A los ya conocidos dulce, ácido, amargo y salado, se sumó el sabor umami, descubierto por científicos en el año 2002. Umami es un sabor inherente que se disfruta universalmente.

†|Dux y Canon circular o infinito

El canon es una forma musical con carácter polifónico que está basada en la imitación estricta de una
línea melódica entre dos o más voces. La voz número uno que interpreta la melodía principal recibe el nombre de Dux. La siguiente voz repetirá lo que dux hizo de manera exacta.

Nota: escribí este párrafo en honor a mi maestro de música y director del coro en el que canté por años. El canon es una de las técnicas polifónicas que más me gustan. Por eso la traje acá, porque imaginé a los híbridos gruñiendo en canon y me emocioné.

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