18. La ultima esperanza
Psicofonías y rugidos sin iguales se apoderaron de cada una de las calles solitarias de Tokio.
Los sentidos de peligro de las 7 variantes restantes inmediatamente captaron que algo en el aire no andaba bien.
Los mas propensos a ser asesinados debido a sus discapacidades físicas actuales, sintieron un escalofriante y abominable repeluzno escalar desde la punta de sus talones hasta la lisa y apetitosa piel de sus frágiles nucas.
Donde aquellos rugidos inhumanos y guturales sobrenaturales reinaban en cada cuadra.
*Morder*
Cada monstruo presente del lugar, fue puesto bajo una especie de trance sin final. Donde la fauna más débil no tenia tierra al cual pisar.
Los monstruos físicamente fuertes y en consecuencia, los mas peligrosos. Comenzaban a devorar a sus similares que estaban por debajo de su clase.
Aquel qué está al fondo de la cadena alimenticia no tiene derecho a respirar el mismo aire donde los fuertes prevalecen.
Comer o ser comido, ese era la ley. La naturaleza es así de cruda.
*Crujir*
No dejará en paz ni si quiera al más débil, donde las mariposas venenosas te atraerán con su belleza sin igual.
Entre esos jadeos intensificados acompañados de constantes derrapes por medio de capos de autos y deslices en esquinas, la paciencia y la agilidad de un cazador estaba siendo puesta a prueba en este instante.
Solo para que al final del todo, termines siendo parte de la cadena alimenticia sin final.
*Bufido*
Pezuñas alargadas rompieron lo que vendría siendo un poste de luz, arquero frenó en seco y extendió su arco.
—¡Demonios!
FUSH*
Cargó consigo tres flechas de luz, superando de por creces la velocidad del viento cada proyectil rompió la barrera del aire para precipitarse hacia sus atacantes.
CLANK*
CLANK*
CLANK*
Las flechas atravesaron cual mantequilla el cuerpo de distintos monstruos.
¡RUAAAAAAR!
En su furor los heridos qué no cayeron ante el ataque de advertencia del chico rugieron con intenciones para nada amigables.
Arquero, uno de los 7 clasificados y quien actualmente mantiene un ritmo de estrategia bastante pasivo a la hora de actuar, en este momento se está enfrascando en una persecución desacelerada.
¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOR!!
La carrera por su vida había iniciado desde que ese bramido monstruoso alertó a cierta cantidad de enemigos en el área donde se disputaba su supervivencia actual.
—¡!
Tirando su cuerpo hacia un lado, por los pelos evitó una mancha borrosa que se precipitó a gran velocidad con el objetivo de despojar su vida.
*Choque*
Uno de los autos que estaba estacionado a un lado salió volando por los aires debido a la fuerza cinética empleada en ese ataque.
Cuando Arquero vislumbró el daño que ocasionó su oponente no pudo evitar tragar saliva.
'T-Tan cerca...'
Ring~
[Ciervo espada – A.]
Similares a los del planeta tierra, pero diferentes en cuanto a tamaño y forma de ser. Poseyendo unas astas grises afiladas asemejándose al filo de un arma blanca, este tipo de monstruo a estado persiguiendo a Arquero con su incesante embestida.
Retirando su cabeza de la puerta del vehículo, esta misma se quedó colgada en uno de sus cuernos que se extendían como ramas de árboles.
Arquero no lo dudo ni un segundo y nuevamente decidió apuntar hacia esta bestia.
¡¡ROOOAR!!
—¡! ¡Carajo!
Su tiro se interrumpió, un tigre blanco cauteloso y silencioso como el soplido del viento emergió de un salto en uno de los callejones del lugar.
Ante ese hecho, Arquero tomó con ambas manos la parte delgada de su arco.
PRASH
Batió con fuerzas el arco y este se estrelló a un costado de la mandíbula del tigre.
Ring~
[-LiverFang – B.]
'... ¡Joder! ¡A este paso estaré acorralado... debo pensar en algo!'
Arquero intento pensar en algo, hasta que su mente se ilumino en una respuesta.
—¡[Flecha de agua.]!
La punta de su flecha pasó a ser de un azul océano puro, cuando el brillo de su habilidad estuvo listo. Arquero disparó en dirección al ciervo.
GUASH*
Demostrando que no iba a ser un oponente fácil, de inmediato este esquivó el proyectil del muchacho de un salto hasta una pared de concreto.
—¡!
En ese mismo salto, el ciervo decidió propulsarse con ayuda de aquel impulso del muro, su intención empalar al Arquero.
—¡[Flecha de Humo]!
Fuuuush*
La humareda abrió un grueso telón gris opacando la visión del ciervo, ocasionando que su embestida pasara de largo. Tocando el absoluto aire.
Snuff Snuff
Pero lejos de todo escape, el Tigre expandiendo su nato sentido del olfato. Logró captar con la ubicación de Arquero.
Calles más adelante, Arquero se precipitó hacia un local abierto.
Oculto tras el mostrador, comenzó a vigilar tenuemente los alrededores.
'... ¡E-esto es ridículo! ¡Los monstruos están actuando demasiado raros!'
Era imposible que tuvieran tal nivel de organización, y todo para acabar con él.
A estas alturas Arquero solo quería estallar en llanto mientras se acurrucaba en el suelo en posición fetal.
Sin embargo, luchando contra esas ganas contuvo su respiración.
'En poco tiempo, darán con mi ubicación'
Entre las filas enemigas, se encontraban monstruos capaces de oler hasta varios kilómetros de distancia la sangre de su presa.
'Cualquiera en estas circunstancias moriría...'
La vista de arquero gradualmente fue reposándose hasta el final de la calle'
—Yo, por él contrario. Tengo la suerte de mi lado.
"Centro Comercial Inuyama" escrito en un cartel enorme, el ingenio del cazador comenzó a resurgir dentro de la mente de Arquero.
El tiempo pasó, la entrada del centro comercial fue abierta de par en par dejando entrar a varios monstruos.
En general, casi todos estaban por encima del rango B. Lo que equivaldría a darle muchísimos problemas a un aventurero solitario.
Desde unos cuantos lobos feroces, un ciervo espada y aquel Liverfang.
La causa del por qué trabajaban juntos era todavía desconocida, sin embargo, una cosa era segura.
Le darían caza al arquero.
Indicando con pequeños gestos, y asumiendo el rol de líder. El ciervo espada alzó su hocico. En respuesta a eso, los monstruos se replegaron por diferentes caminos.
El centro comercial era un sitio bastante cerrado, las ventanas que indicaban un claro indicio de escapatoria, se encontraban totalmente selladas. Y la única salida presente del lugar estaba siendo vigilada por ellos.
Por ende, Arquero se atrapó así mismo tal cual como una rata de alcantarillado.
Los olores de Arquero estaban esparcidos por doquier, era seguro que el chico en su última esperanza por resguardarse quiera buscar cubierta y acabarlos desde lejos.
Pero ya conocían a los de su tipo, en cuanto ellos se les presentara la oportunidad de recortar distancia de golpe, Arquero estaría acabado.
El trio de lobos se pasearon por el pasillo en búsqueda del Arquero, pero lo único que había eran locales de ropa ligeramente cerrados.
Eran lobos jóvenes entusiastas, por lo que el juego del cazador y la presa ovacionaba sus instintos salvajes.
—...
De alguna manera había grandes bolsas de harina esparcidas por los alrededores. Pero más importante aún era dar con la ubicación de su enemigo.
Snuff
El trio captó su hedor preferido, aquel que anunciaba a grandes campanas de qué su presa está a punto de entregarse en bandeja de plata para su cena.
Sangre.
Rápidamente la emoción del momento invadiendo las comisuras de sus lenguas, sus oscuros instintos tomaron el lugar qué les corresponde para fortalecer su agilidad y fuerza.
La presa estaba detrás de unos mostradores del mostrador de una de las cafeterías qué se pueden encontrar en el área de restaurantes.
Cada uno preparó sus garras y silenciosamente se deslizaron por debajo de las mesas sin dejar caer tan si quiera un pelo de sus cuerpos.
FUSH*
En el momento en que estuvieron a una distancia relativamente cerca, la tensión entre ellos estalló en forma de un salto de gracia sincronizado.
*Morder*
Con sus dientes afilados, mordieron la gruesa y al tiempo la suave carne de su presa.
Pero algo andaba mal... Hacía tiempo están captando un olor tenue en el ambiente.
Y sumándole que una especie de humo blanco se está expandiendo en cada esquina de cada restaurante presente.
Toda área del centro comercial fue recubierta por esa niebla espesa, sin embargo. Aquello no era un impedimento para su vista.
Del otro lado, en el área de juegos. El Liverfang también cayó en cuenta de dicho acontecimiento, sin embargo. Estaba tan sumergido en su cautelosa cacería, que decidió no prestar atención ante la diferencia del clima.
Snuff... snuff...
—¡!
Sabía que algo andaba mal, por lo que de inmediato decidió dar marcha atrás a toda prisa.
El ciervo espada, siendo el único que se quedó en la entrada principal patrullaba la zona en un patrón casi de un semi circulo.
Captando la niebla con sus propios ojos, se percató de una presencia de tras suya.
—¡!
Arquero estaba extendiendo su arco con una flecha que irradiaba casi como una estrella.
' ... ¿Qué sucede cuando en un sitio cerrado hay alta concentración de harina en el aire y lo expones a una chispa? '
—Respuesta simple, [Dust Explosion.]
GUASH*
La flecha de fuego arropó la entrada en una gran llamarada, cubriéndola por completo.
Cuando...
BOOOOOOOOOOOOM.
Una bola de fuego se alzó sobre Arquero, las ruinas del centro comercial se eyectaron al mismo cielo.
Arquero dio media vuelta mientras todavía permanecía sin cambios en su expresión debido a la hazaña que acababa de hacer.
'Distraer a los carnívoros con carne de la carnicería... Lo froté con algo de mi olor para que sea más convincente... Escabullirme usando la habilidad [Acecho] que compré en la tienda... Esparcir la harina en puntos estratégicos sin la necesidad de que se filtre...'
Uno a uno comenzó a enumerar los pasos que conllevó su plan improvisado.
Antes de ser transportado al nuevo mundo, como pasatiempo se la pasaba checando en las redes sociales algunas reacciones químicas interesantes.
Entre esas la muy conocida "Explosión de harina" al exponer cierta cantidad de partículas de carbohidratos, estos por consecuencia se transforman en una glucosa inflamable.
Lo que conlleva al riesgo exponencial de una explosión bastante peligrosa al estar expuesto a una chispa.
Sin embargo, aunque por dentro esté enumerando fríamente los pasos, por fuera sus piernas temblaban como gelatina al son de los pasos.
—... ¡¡QUE MIEDO PASÉ!! ¡¡NO QUIERO VOLVER A HACER ESO!! ¡¡JAMAS!! ¡¡JAMAS!!
Cruck*
—... ¿Uh?
Sin querer su bota terminó tocando algo pesado, al bajar su vista ahí lo vio.
—¡¡¿?!!
Lo que parecía un tiranosaurio, con escamas carmesís. Yacía en el suelo inerte con la parte de su vientre abierta de par en par.
—¿Q... que demonios?
Al rodear a la bestia muerta, una gran pila de cadáveres se alzaba sobre los andenes de las calles.
Arquero sabía que seguir adelante era indicio de que la parca llamaría a la puerta.
—¡!
Sin embargo, sus planes de retirada de vieron interrumpidos cuando logró visualizar una montaña de monstruos más grande qué cualquier casa o local comercial visto hasta la fecha.
La característica de Arquero, era su gran capacidad de sentido nato en la caza de cualquier monstruo. En este torneo ha sido uno de los sobrevivientes que ha perdurado por su instinto de supervivencia.
Pero cuando lo vio... Comprendió qué todo lo aprendido en el pasado, cualquier experiencia aprendida para sobre llevar un monstruo peligroso y convertirlo en su presa. Se vieron totalmente nulificadas ante la presencia que se encontraba en el pino más alto de cadáveres.
Como un rey dominando sobre la manada, como un emperador dictando su siguiente orden. Ojos sedientos de sangre permanecieron inamovibles ante arquero.
Él comprendió... Qué sin importar cual medio utilice, en este preciso instante se convirtió en la presa del cazador.
Ring~
[Cazador de héroes -S.]
*Paska: ¡¡CORRE QUÉ TE VIOLA EL FURRO!!*
***
Comprender cualquier patrón era clave para sobre llevar la victoria en cualquier juego.
Nazi, la variante más inteligente de todos los presentes. Con su gran intelecto veía hasta cierto punto este torneo como un gran campo de ajedrez.
Donde cualquier jugada podría cambiar drásticamente el futuro de la partida.
Mientras que él gane al final, utilizaría todos los medios necesarios en garantizar su victoria absoluta. Así como entablar relaciones que favorezcan su protección. Con tal de seguir con vida usaría todos los peones y cartas presentes en su manga.
Siendo de ese modo, con un mapa extendido en un tablero del salón de clases. Nazi comenzó a cartografiar un patrón que ha notado en la eliminación de cada distrito.
Fumó su cigarro a la par que dejaba qué los miles de fórmulas y ecuaciones sobre volaban la sala entera.
'Cualquiera habría dicho que estos tipos están eliminando a diestra y siniestra los distritos. '
Usando un marcador rojo, tachó los distritos que fueron eliminados.
Tenía conocimiento de esto gracias a que mientras sus difuntos "compañeros" de equipo estaban ocupados planeando del cómo se ocuparían de Liche, Nazi por otra parte se dio la tarea de investigar la desaparición misteriosa de los distritos por medio del saboteo de cámaras de seguridad y zonas faltantes que eran clave para la cultura de Tokio.
'No es que me incumba... Los bloqueos del sistema para que ninguno de nosotros acceda a ciertas zonas cada vez se está haciendo más recientes... Pero ¿cuál es la causa de no darnos total libertad? '
Nazi caminó a cada extremo de la habitación mientras meditaba sobre aquello.
'¿De qué sirve lanzarnos a un torneo a muerte sí nos ponen un límite de zonas? ... Puede de que la posibilidad sobre evitar qué nos escondamos hasta el final sea una de ellas. Pero desde el principio del todo, este comportamiento ha perdurado sin cambios. '
Sus ojos terminaron reposando a las afueras de la escuela en la que actualmente estaba refugiado.
'... ¿Nos están ocultando algo? ... En ese caso debieron tomar medidas al saber que llegaría a esta conclusión tan problemática tarde o temprano. '
Nazi siguiendo tachando de manera apresurada el pizarrón.
'Pero sí quieren destruirme... Les hace falta años luz de investigación para hacerme caer en una trampa tan obvia. '
Finalmente golpeó el marcador, dando por hecho una conclusión.
'Sí mis cálculos no están mal, la zona final está en Shibuya... Actualmente me encuentro en Ueno, por lo que tardaré un rato en llegar sí no llamo la atención'
—Pero en vista de que el combate es necesario...
Nazi revisó un papel. En este se encontraban un listado completo de cada variante que recordaba desde el primer momento en que se anunciaron.
Y las que se eliminaban con el paso del tiempo, eran marcadas con un asterisco.
—Siempre hay que ser precavido.
***
Alquimista estaba a punto de morir.
Luego de luchar contra Gremio, este había quedado en un estado lamentable.
Todo su cuerpo tenía heridas internas, sumando una especie de maldición que dejó Gremio en sus células y alma.
Durante las últimas horas el estuvo durmiendo para despertar creyendo que ya había muerto, pero eso era sólo gracias a su flujo de mana.
Este no sabía cómo, pero había llegado hasta el centro de Shibuya, uno de los últimos 3 distritos sobrevivientes.
'Mierda...'
Sus brazos temblaron al apoyarse con un muro, ya no tenía fuerzas en sus piernas.
'Quiero vomitar... Quiero llorar... Quiero dormir...'
Incluso con el alimento escaso a la mano, este no había logrado curarse de sus heridas a tiempo.
Su mayor problema fue cuando Gremio logró perforar su hígado, causando un desangrado interno.
Aunque se había logrado cerrar de forma externa, la herida seguía siendo un agujero de pequeño tamaño en su interior.
Ring~*
[¡El HP está siendo reducido!]
[¡El HP se encuentra al 9%!]
Con el sonido del Sistema, Alquimista finalmente perdió toda la fuerza que estaba extrayendo para poder caminar.
Este cayó de rostro en el frío suelo, quedando cerca de un cruce de cuatro calles.
'Solo quiero... Solo quiero...'
Pero aún así Alquimista seguía creyendo que había una forma de salvarse de esta.
En la desesperación, Alquimista se aferro a cualquier clase de esperanza.
—No quiero morir...
Este miró el cielo, notando que la noche ya estaba empezando a tomar lugar en aquella imitación de Tokio.
—... Por favor...
Alquimista estaba empezando a sentir como sus ojos querían cerrarse para nunca más despertar.
Pero también noto que la oscuridad de su mirada no se debía al cansancio de sus párpados.
Literalmente todas las luces estaban parpadeando alrededor de sí mismo.
—... ¿?
Este vio como todo pareció empezar a emitir estática, como si hubiera un efecto magnético que este alterando la electricidad.
Pero la realidad era algo mucho más grande que todo lo que se podría pensar, pues era de arriba.
El primer regalo por llegar tan lejos había llegado.
TRUAR*
BRZZZ*
*¡¡Estruendo!!*
De repente el cielo se partió en dos cuando algo pareció dirigirse a toda velocidad en contra del suelo.
Esto cayó apenas unos metros de Alquimista, cegándolo por culpa de la repentina carga.
¡¡Pumm!!*
—... Esto...
Alquimista había sentido la abismal cantidad de poder mágico que estaba siendo liberado por aquel objeto.
Una ves que la cortina de polvo se disperso, sus ojos brillaron con esperanza.
Pues ese objeto era conocido por posiblemente todas las variantes, una leyenda que había aparecido delante suyo.
"Solo aquel que sea digno de ser un rey podrá portar el poder del trueno y la tormenta."
Una leyenda que se había hecho realidad, pues delante de él estaba aquel objeto.
El arma del dios del trueno, Thor.
[Nombre : Mjolnir]
[Rango : ¿?]
[Clase : Martillo]
[Arma única del dios del trueno y la tormenta, Thor. Imbuida en un encanto único para solo el digno sea capas de portarla como suya.]
[Se digno y recibe el poder de un dios, no existe restricción de clase.]
Alquimista vio esperanza en eso, decidiendo usar todo lo que le quedaba.
'Yo puedo...'
Cuando sus manos y piernas ya no respondieron, este optó por usar sus codos para arrastrarse.
Por el peso y las heridas, incluso estos comenzaron a sangrar por culpa del daño.
Pero eso no era algo que pudiera detener la determinación de Alquimista, quien se aferro a la vida gracias a la esperanza.
La esperanza era aquella que perdura entre el abismo de la desesperación, la única que nos puede salvar.
—A-aún puedo...
Alquimista logró estar cerca del Mjolnir, estirando su mano para así lograr tomar su empuñadura.
Varios pequeños rayos salieron para emitirse a través del martillo y llegar hasta el Alquimista.
Brzzz*
Trosh*
Alquimista estiró su mano, mientras que sus ojos brillaron por un segundo.
—¡Yo aún puedo vivir!
Alquimista se estiró para así lograr tomar la empuñadura del arma divina.
Una onda de poder celestial fue emitido por todo su ser, sólo para darle la única respuesta posible.
—N-no...
El no era digno.
Se dio cuenta de esto cuando sintió como el poder lo rechazaba, incluso dañándolo más de lo que ya estaba.
—¡Argh!
Alquimista de volteo mientras que su mano ardía por quemarse con el contacto con los rayos.
Este solo pudo apretarla con fuerza durante unos segundos, para después dejar de sostenerla.
'Fui un idiota al pensar que yo...'
Alquimista finalmente había desistido de toda esperanza, sintiendo como su ser era rodeado por la oscuridad.
Esa era la muerte.
***
Pero en ese momento se escucho un par de pasos, acercándose de forma pesada y lenta hacia el.
Tap*
Tap*
Tap*
Tap*
Tap*
Alquimista ya no tenía ganas de siquiera sentir al ser que se aproximaba hacia el, solo cerrando los ojos.
—Así que eso fue lo que causó el ruido.
—... ¿?
Alquimista abrió sus ojos al escuchar su propia voz, viendo como un monstruo cubierto de un exoesqueleto lo miraba.
El era el Adaptable.
Adaptable miró todo el panorama, logrando percibir gran poder en el Mjolnir, también reconociéndolo.
Incluso Ali salió durante unos segundos al percibir y entender lo que había sucedido.
—Este chico... De verdad que se aferro a su vida a pesar de esas heridas.
—Si, que lo hizo.
Incluso las mentes paralelas del Adaptable sintieron pena por verse en tal estado.
Este volvió a mirar al Alquimista, quien sólo sonrió al verlo.
—¿Acaso quieres hacer equipo conmigo?
—Creo que ya es tarde para eso.
Adaptable no se negó por que ya estaba pronto de terminar toda esa batalla, sino que por que Alquimista estaba en las puertas de la muerte.
Su mana respondía sus ganas de vivir, pero estas ya no se mantuvieron estables una ves perdidas estas ganas.
Alquimista relajo su cuerpo, mientras que la adrenalina que sintió por la esperanza se empezó a perder.
El sabía que el infernal dolor estaba por llegar, mirando a Adaptable con un pedido sincero.
—Por favor... Quiero irme en paz.
A diferencia de casi todos los seres vivos, Alquimista ya no tenía ni un rastro de la esperanza.
Por eso mismo ya no aceptó a la muere con desesperación, sino que fue con una paz para así abrazarla.
El se había dado por vencido, queriendo solo descansar.
Adaptable se sorprendió un poco por eso, pero luego volvió a poner un rostro con pena.
No me gustaba ver esta escena, pero iba a hacer algo noble luego de tanto.
—Bien, solo por que odio verme así.
Adaptable se inclino para lograr tomar el cuello de Alquimista con su mano.
Este sintió la fuerza de Adaptable, susurrando algo antes de partir a los brazos del descanso eterno.
—... Gracias.
Adaptable apretó su agarre al escuchar eso, escuchando un crujido.
Cruck*
Ese había sido el último momento de vida de Alquimista, quien desapareció en unas partículas de luz incluso más brillantes que todas las demás.
Ahora sólo quedaban 6.
[¡"Alquimista" ha sido eliminando!]
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