Capitulo 41: Reprimenda
-Minutos antes-
—Nunca pensé que un baño pudiera ser tan...
—¿Lujoso? Ja, entiendo tu desconcierto Megumin-san, ni yo me lo creía la primera vez que los usé...
Quería ir al baño, a refrescarme obviamente, asi que Hebe, el mago vestido de mujer se ofreció guiarme, pues era muy fácil perderse en los pasillos del Sindicato.
Justo ahora está usando su voz normal mientras conversa conmigo.
—Pensé que mis camaradas de la aldea carmesí sólo estaban exagerando cuando elogiaban a los baños...
Creo que debo tomármelos más enserio la próxima vez que nos veamos.
—¿Eres Megumin? Sir Rolando quiere hablar con ella en su oficina
—Oh hola capitán, si ella es Megumin, solo pequeño cambio en su estilo, pero sigue siendo la misma persona
¿Eh? ¿¡De verdad me están buscando?!
¡Por fin! ¡Definitivamente este es mi momento!
—¡¿Acaso buscaba a la gran gran Megumin?! ¡Usuar-!
—No tengo tiempo para tu presentación niñita, se me ordenó escoltarte a la oficina de Sir Rolando, quiere seriamente contigo, sígueme, es una orden
—¿N-Niñita?
El capitán cuyo nombre no recuerdo, ni siquiera espero se molesto en esperar una respuesta mía y solo camino en la dirección contraria de la que vino.
—... Megumin-san es mejor que obedezcas al capitán Idris aunque no haya dado una explicación, a menos que quieras que te grite pues él tiende a ser muy....
—¡P-Pero ese sujeto ni siquiera me dejó terminar mi presentación! ¡Eso es una grave falta de respeto para los demonios carmesí! Además esa no es la forma en la cual debería dirigirse a una maga de tan alta...
Por alguna razón, Hebe, con miedo retrocedió mientras le explicaba mis razones para no obedecerle a ese hombre.
—No me cuestiones pequeña mocosa, no estamos en tu pueblito natal para que actúes como si tuvieras autoridad, no tienes influencia real aquí y ni siquiera deberías tener el derecho de pisar este lugar en primer lugar después de lo que tú hiciste....
Repentinamente sentir su presencia detrás mío y me tomó del hombro.
—Ahora sígueme, ¿¡ME escuchaste pequeña engendra?!
—S-Si, f-fuerte y c-claro
—Bien
Dejo de presionar mi hombro en cuanto le respondí.
—Ahora que conoces tu lugar, ven conmigo, Sir Rolando quiere hablar contigo
—O-Oye capitán, para la próxima no pongas esa cara tan aterradora, casi me oriné encima....
—Entonces para la próxima, adviértele a los "invitados" más activamente las consecuencias de hacerme enojar
Luego de ese pequeño diálogo, fui escoltaba por el c-capitán Idris a la oficina.
Abrió la puerta y luego se fue, dejándome a solas con el líder del sindicato, Sir Rolando, el cual tenía aspecto de no haber dormido en varios días.
Incluso tenía varias jarras con café.
—Por favor toma asiento Megumin-san
—G-Gracias
Solo éramos nosotros en su oficina, pero por alguna razón me puse muy nerviosa al entrar... c-casi como si hubiera otra persona.
Kazuma estaba dormido en el sofá cuando salí a buscar los baño, a-así que no debería haber nadie con la capacidad de ocultarse en la habitación ¡P-Pero aún así...!
—Para empezar, debo aclarar la razón por el cual te llame específicamente a ti Megumin-san.... se me ha informado que usaste el hechizo de "explosión" en medio del bosque de las tarántulas arcoíris, provocando daños al bosque, causando que las tarántulas se vuelvan hostiles a los seres humanos y que a su vez hizo que una misión de bajo nivel que incluso un aventurero novato podía completar, ahora requiera de un grupo de aventureros experimentados para completarse... si es que tienen suerte....
Hizo una pequeña pausa para que procesara lo que acaba de decirme.
N-Nunca pensé que usar mi hechizo tuviera tantas consecuencias...
—Pusiste en riesgo a los aventureros, a tus compañeros e incluso a ti misma aún a pesar de que se advirtió que no usarás hechizos tan destructivos dentro de ese bosque.....así que con todo eso, solo quiero saber una cosa
—¿Q-Que cosa?
—¿Porque lo usaste? Se me ha informado que tu memoria de esos eventos está borrosa debido a que hiciste contacto con la sangre de las tarántulas arcoíris, pero aún así, incluso si no recuerdas claramente la razón, ¿Podrías darme aunque sea de lo más risible una explicación de porque usaste el hechizo de explosión Megumin-san?
—Bueno....
—Un momento, antes de que respondas déjame hacer algo
Retrocedió en su asiento y buscó algo entre los cajones de su escritorio.
..... Un detector de mentiras.
—Las personas saben que los detectores de mentiras, valga la redundancia, detectan mentiras, pero lo que muchos no saben, es como realmente detectan una mentira, pues al parecer lo que en realidad detectan, es si la persona cree o no en lo que acaba de decir
—¿D-Disculpe?
Creo que se a donde quiere llegar, pero estoy algo confundida.
—Déjame explicar con un pequeño ejemplo, alguien podría afirmara que el cielo es rojo, y el detector de mentiras se activaría, no porque lo que se haya dicho sea mentira, sino porque la persona en el fondo sabe que lo que dijo no es verdad... la persona no cree en lo que acaba de decir....
—¿E-Entonces?
—Quiero determinar la verdad, en base a si crees o no, en tu propia palabra Megumin-san, quiero saber si todas aquellas razones que le diste a policia y a tus compañeros para usar ese hechizo son totalmente justificadas para ti... quiero saber si crees en tus propia palabra... Megumin...
—¿Y-Y que le hace p-pensar que m-mis razones no p-podrían ser válidas?
—Le mentiste a mi mensajero, escuché lo que hiciste para obligar a Satou Kazuma a aceptarte en su equipo y también porque conocí a alguien como tú
—¿Como.... yo?
Ya no entiendo lo que intenta decirme el hombre frente a mí.
Además dudo que existe alguna persona siquiera comparable conmigo,
¡Soy Megumin la maga número uno del clan de los magos carmesí y también una prodigio! ¡No existe nadie como yo!
—Arrogante, agresiva, evasiva, soberbia pero sobre todo.... peligrosa
—¿¡Disculpe!?
Me siento halagada de cierta forma por alguna razón, no puedo evitar sentirme igualmente ofendida.
—¡Aunque puede ser considerado un halago para los magos carmesí ser etiqueta como "peligroso"! ¡No me agradan para nada los otros adjetivos con los cuales me describe!
—Podría explicarte porque te tengo con esas etiquetas pero sería inútil... supongo que es como dicen, ver para creer...
—¿¡Y ahora de que está hablando!?
—Solo responde mis preguntas y entenderás
—Hphm, ¿Y si me nie-........?
Súbitamente s-sentí... n-no sé cómo d-decribirlo, como si alguien estuviera d-detrás mío... y q-quisiera h-hacerme d-daño....
—¿Megumin-san? Estas pálida...
—Ah.. ahh...
Y la aplastante presión desapareció como si nunca hubiera existido.
—Y-Ya estoy bien...
¿Q-Que fue eso?
—¿Estas segura? Puedo llamar a mis sacerdotes si lo deseas
—N-No gracias, quiero acabar con esto lo más pronto posible
N-No sé qué haya sido esa cosa, pero deduzco que solo actuará si no obedezco lo que me dice el hombre delante mío....
Solo responderé sus dichosas preguntas para irme lo más pronto de aquí, lo que sea que haya sido eso, está en este cuarto y d-dudo que se me deje en paz si me niego a cooperar.
—... Esta bien, entonces responde a mi pregunta, ¿Porque crees que usaste ese hechizo a pesar de las advertencias?
Debo tener mucho cuidado con mis palabras, no sé qué pretende con sus preguntas, pero no me gusta para nada.
Piensa Megumin, piensa en una respuesta aceptable....
Me tome mi tiempo para pensar, y por suerte no me presionaron para responder.
Ya tengo mi respuesta.
—.... Seguramente estaba... asustada...
—Continúa
No puedo creer que admití ante alguien estar asustada...
—Y lo más probable es que yo... lo haya usado por impulso... casi como si fuera un instinto mío.... después de todo, cuando uso mi magia de explosión me siento... poderosa, capaz, ¡invencible!... y también... segura de mi misma... porque la magia de explosión.... es la cosa que más amo en el mundo...
Espero que sea suficiente para que me deje ir, pensé muy cuidadosamente esa respuesta mía.
Hmph, me siento orgullosa por la forma en que maneje la situación.
El hombre delante mío proceso mi respuesta por unos segundos.
Je, debo haberlo impresionado.
—... Entiendo, pero en ese caso, déjame preguntarte una cosa, ¿Porque amas tanto a la magia de explosión?
Ja, esa es fácil.
—¡Porque es la magia más poderosa de todas! ¡No hay ninguna otra magia que siquiera se le compare! ¡Es tan única! ¡Espectacular! ¡Y....!
Pensé en la Onee-san misteriosa, y el momento en que me enseñó tan increíble magia.
—... y porque cada vez que la uso... siento que soy como alguien que admiro mucho... por eso es que amo la magia de explosión...
—Gracias por tu honestidad Megumin-san... puedo entender tu pasión, hace mucho tiempo, yo también deseé ser grande, ser como aquellos héroes de los cuentos....
El hombre delante de mí cerró sus ojos con nostalgia.
—Pero la vida nunca es como la deseamos....
Noté una mueca de tristeza.
—Aquel día que me inscribí en el gremio de aventureros, fue el día en que mi sueño fue arruinado... simplemente no tenía talento...
.... Pobre hombre.
—Fui forzado a escoger la clase de aventurero ya que mis estadísticas simplemente no me lo permitían, y aunque de cierta forma logré ser como los héroes que admiré.... nunca podré ni de cerca tan poderosos como ellos o tan impresionantes... solo mírame, puedes responderme o no a esto pero... ¿Tengo una apariencia realmente olvidable, verdad?
—Ehh...
¿¡Que hago! ?Incluso yo no soy tan cruel para decir que alguien tiene una apariencia tan poco memorable.
Decirle eso a un demonio carmesí es como escupirle directamente en su orgullo.
Probablemente sea de las mejoras formas para atacar psicológicamente a mi clan...
—¿Lo ves? Incluso mis subordinados no quieren decirme eso en voz alta...
ahhh~, bueno a lo que quiero llegar Megumin-san
—¿Si?
—Es que aunque los sueños son buenos, no puedes hacer de ellos tu único objetivo en la vida, nunca podrás estar totalmente segura si es posible cumplirlos
—¡Estoy segura que puedo ser la maga más grande de todos los tiempos! ¡Es más! ¡Incluso aquella que derrote al Rey demonio de una vez por todas!
¡Estoy segura que puedo cumplir mi sueño!
—Bien, supongamos que lo logras, ¿Y luego que?
—¿Eh?
El hombre delante mío suspiro con cansancio.
—No es bueno hacer que toda tu vida gire entorno a cumplir tu sueño, ya sea porque por cosas de la vida no seas capaz de realizarlos, o en tu caso, no quedará nada al final
—¿¡De que está hablando!? ¿Entonces cumplir tus sueños esta mal? ¿¡Es eso lo que me quiere decir?!
Creí haber encontrado a alguien que me entendía, pero parece ser que solo quiere frenarme, como todos....
—Lo que trató decirte Megumin-san, es que no es bueno estar dispuesto a hacer cualquier cosa para cumplir tu sueño, porque si tomas ese enfoque, terminarás sola, no tendrás a nadie más con quien compartir tu logro, y ademas existe la posibilidad de que te corrompas... como en aquel cuento del héroe que terminó por volverse malvado.....
—¡Eso solo es cuento para niños!
—Así es, pero eso no quita el hecho de que nos deja una enseñanza Megumin-san....
—¿Ya puedo irme? Creo que ambos perdimos el tiempo con esto
Pensé que por fin alguien me apoyaría...
Deje mi silla y camine para la puerta pero...
—Trate de ser amable, pero creo que no tengo más opción que ser más duro contigo Megumin-san
—¿Y ahora de que esta hablando?
Le respondí con fastidio.
—¿Acaso debo recordarte que tienes una deuda con el Sindicato?
¡Maldición! ¡Lo olvidé!
—N-No, ¿y eso que tiene que ver?
Maldición, maldición, maldición...
—Megumin-san, por favor toma asiento
—¡P-Pero...!
—Por favor Megumin-san... toma... asiento...
Dijo con un poco amenazante.
—Tch
No tuve más opción que seguir sus órdenes.
—Déjame aclarar unos hechos, para empezar, podría simplemente no haberte dado aquella charla, pero no lo hice por una simple razón...
¿Alguna idea de cual es?
—N-No
—... Porque creo en las segundas oportunidades...
¿Segundas oportunidades?
—Vi a alguien con tu misma actitud, con tu misma dedicación ir por un mal camino.... incluso trato de hacerme daño, y le di una segunda oportunidad, no porque sea alguien bondadoso o un santo, nada de eso, sino porque aquella persona.. realmente me admitió que se arrepintió absolutamente de todo lo que me hizo, tanto así que estuvo dispuesta a darme su vida para probármelo... estuvo dispuesta a pagar las consecuencias de absolutamente todos sus actos....
Hizo una pausa para dar otro suspiro.
—Y aunque aún falla, por mucho, en ser una mejor persona y a veces ni siquiera parece qué quiere cambiar... lo sigue intentando.... por eso es que empecé a creer en las segundas oportunidades... por eso estuve dispuesto a darte esa charla... Megumin...
—..... Vaya historia...
—Pero por lo que veo, no seguirás mis consejos, así que seré claro Megumin, aprende más hechizos aparte de explosión, piensa mejor en tus aspiraciones o simplemente paga tu deuda conmigo y el Sindicato... te estoy dando el derecho de escoger, porque ambos nos beneficiaríamos independiente de los que escojas, yo me beneficio porque ya no lidiare contigo y tu porque mejorarás algún aspecto de ti misma.... ahora piensa y escoge sabiamente Megumin
—......
¡N-No puedo tomar ninguna de esas opciones!
—¿O acaso quieres que le envíe la factura de la deuda a tus padres Megumin?
—¡¿Eh?! ¡N-No! ¡Por favor no haga eso! ¡Todo menos eso! ¡No quiero preocuparlos!
—¿Sabes? Debí hacer eso desde el principio ya que técnicamente aún eres una menor de edad, solo una niña...
—¡Ek!
—No lo hice ya que estaba consciente de la situación de tu familia... más específicamente de tu padre, Hyoizaburoo... me apenó tener que informarles y quizás ponerlos en una situación aún más difícil de la que ya están, así que lo deje pasar... pero debido a tu actitud y al más reciente desastre de tu equipo, me temo que no tendré más opción que...
—¡Espere! ¡P-Por favor! ¡N-No lo haga! S-Se lo... ruego... no lo haga...
Decidí dejar mi orgullo de lado y empecé a rogarle....
—No quiero ser una carga para mi familiar! ¡No quiero que sufran por mi culpa!
—....
—¡P-Por favor! ¡Deme un tiempo límite para pagarle si quiere! ¡Haré todo lo posible para pagarle! ¡Pero hasta entonces no se contacte con mi familia! ¡Por favor!
—... ¿Estas segura? Estoy dispuesto a aceptar eso pero con una condición
—¡E-Esta bien bien! ¡Gracias!
—Mi única condición es que no puedes recibir ayuda directa de tus compañeros de equipo
—¿¡?!
¡P-Pero así sería más difícil que pague mi deuda!
Casi le grite eso pero me quede callada.
.... M-Maldición, ya no tengo más opciones...
—A-Acepto sus términos... S-Sir Rolando...
—Bien, en ese caso, después haremos el papeleo correspondiente, ahora por favor ve y llama a tus compañeros a mi oficina
Deje escapar por accidente una lagrima de desesperación al salir de la habitación.
Mamá, papá... komekko, c-creo que selle mi destino...
—Lo siento....
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro