Pov Narrador (Yo):

Eran las 12 de la tarde.

Podemos ver qué Kazuma estaba caminando por las calles de Alcanretia con una bolsa con ingredientes en las manos.

Junto a él estaban Yumeko y Kai, quienes lo acompañaban.

Este andaba recordando lo que pasó hace unos 2 días luego de lo que ocurrió en los baños termales con su sensei.

Kazuma: (Maldición... Eso no sale de mi mente... Estos días he estado enfocándome solo en aprender y cuando tengo tiempo libre jugar con Yumeko-chan, además de terminar los guantes con símbolos de Alquimia).

Pensaba mientras veía a la niña mencionada quien está al lado suyo llevándola de la mano.

Yumeko: Kazuma nii-chan...

Kazuma: (El problema con lo de la poción del cabello pues decidí solo ignorarlo, ya le acostumbré, además de que luego de que aclarara lo del porque estaba cansado a Yumeko-chan volvió a estar alegre conmigo).

Pensaba ignorando que la niña le estaba hablando.

Yumeko: Kazuma nii-chan...

Kai: Wof!

Yumeko: Parece que no nos presta atención Kai...

Dijo mirando a su perro.

Yumeko: Kazuma nii-chan...

Repitió otra vez.

Kazuma: (Esos problemas se resolvieron fácilmente, pero en cuanto a lo de la sensei... Intento ignorarlo, pero el verla así me excitó mucho, aún seguimos hablando con normalidad, pero no puedo evitar recordar eso... Solo seguiré intentando ignorarlo).

Yumeko: ¡Kazuma nii-chan!

Dijo en voz alta.

El castaño al escucharla salió de sus pensamientos y le prestó atención a la niña.

Kazuma: A perdón, estaba pensativo, ¿Que sucede?

Pregunto con una gota de sudor en la frente.

Yumeko: ¿Ya podemos regresar?, Creo que ya compramos lo que nos pidió la Tía Ruri para la comida.

Kazuma: Ammm si, regresemos.

Dijo tranquilamente.

Yumeko: Bien.

Kai: ¡Wof Wof!

Los 3 caminaban de regreso tranquilamente mientras que Kazuma seguía pensando en lo que pensó hace unos instantes.

Pero en eso Kazuma escucha algo de unas señoras.

Señora 1: Oye, ¿Esa no es la niña de ese hombre raro?.

Señora 2: Si, creo que lo es, que raro verla con alguien que no sea su padre.

Se susurraban ellas mismas.

Señora 1: Ese chico debe estar cuidandola, tal vez por petición del padre de ella.

Señora 2: Ajá, aunque es extraño que ese hombre hablé con alguien que no sea un cliente de dónde compra.

Señora 1: Si, casi nadie va a su tienda debido a lo de hace años y los rumores que hay.

El castaño escuchaba eso que hablaban las señoras, le parecía extraño lo que hablaban.

Quería seguir escuchando, pero Yumeko lo jalaba del brazo, dando a enteder que ya debían irse.

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Unos 20 minutos después.

Ya estando en la puerta de la casa sacaron las llaves y entraron.

Fueron recibidos por Ruri, quien fue de visita para cuidar a Yumeko.

Ruri: Hola, ¿Encontraron lo que les pedí para cocinar?

Kazuma y Yumeko: Si.

Dijeron al unisonó.

Aunque Kazuma lo dijo con un tono neutral, estaba un tanto nervioso.

Y en cuanto a Ruri, pues a ella no le importaba lo que pasó hace unos días.

Ruri: Que bien, cocinaré algo rápido y delicioso.

Dijo acercándose a Kazuma para tomar la bolsa que este tenía.

Kazuma le entrego la bolsa que tenía con las cosas que compraron a Ruri.

Yumeko: ¡Ahora podríamos jugar Kazuma nii-chan!

Dijo alegre mirando a Kazuma.

Kazuma: Hmmm, creo que podríamos jugar después...

Lo dicho por el extraño a Yumeko.

Yumeko: ¿Por qué después?

Dijo triste.

Kazuma: Quisiera jugar contigo, pero necesito estudiar para aprender de la Alquimia.

Dijo sintiéndose algo mal por ver a Yumeko así.

Yumeko: ¿No podría ser después?

Kazuma: Es que e descuidado un poco mi aprendizaje (Si no aprendo más sobre la Alquimia no lograré usarla a mi favor para subir de nivel y cambiar de clase, entonces me quedaría estancado y no podré vencer al Rey Demonio)

Pensó recordando la misión que le encargaron antes de ir a ese mundo.

Yumeko: Está bien, pero prométeme que jugaremos después.

Dijo mirando al castaño con un rostro triste.

Kazuma: Lo prometo Yumeko-chan.

Dijo acariciando la cabeza de la niña.

Yumeko: ¡Ok!

Dijo alegre de nuevo.

Entonces Kazuma se dirigió a la biblioteca de Fuji a leer de nuevo.

Entro y cerro la puerta, se acercó a una de las estanterías, agarro un libro y se puso a leer.

Mientras leía pensó en una duda que tenía.

Kazuma: (A pesar de que quería jugar con Yumeko-chan, le di más prioridad a estudiar, que raro, yo no soy así usualmente... Pero en verdad no quiero quedarme estancado en esta clase, aunque ya no parece ser tan malo, por está clase conocí a la sensei y a Yumeko-chan, pero no me permite aprender muchas habilidades... Aún debo pensar en cambiarla, total no creo que las cosas cambien mucho).

Pensó algo alegre.

Pero entonces recordó el motivo por querer cambiar de clase.

Kazuma: (Además está clase es casi olvidada, además de que me ha traído muchas molestias...)

Pensó molesto.

Kazuma: *Suspiró* Aún quiero cambiar de clase...

Dijo en voz baja.

Kazuma: ...Seguiré leyendo, debo dejar de hablar solo conmigo mismo...

Entonces continúo con su lectura.

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2 horas después.

Luego de que Kazuma estudiara un buen rato, decidió salir atrás a practicar su Alquimia.

Kazuma: Bien, dibujaré el símbolo.

Saco de su abrigo una tiza que compro hace unos días en el mercado de Axis.

Y empezó a dibujar en el suelo el símbolo de Alquimia.

Unos minutos después lo termino.

Kazuma: Listo.

Yumeko: ¿Que está listo?

Dijo detrás del castaño.

Este se dió la vuelta rápidamente.

Kazuma: ¡Ahhh!, No hagas eso.

Dijo algo exaltado.

Yumeko: Lo siento.

Se disculpo, aunque sin mirar al castaño ya que más le llamaba la atención el símbolo.

Kazuma: Ok, ¿Y Kai?

Yumeko: Se fue a dormir un rato, y como no tenía nadie con quien jugar vine a ver qué hacías.

Le explicó.

Kazuma: Entiendo, bueno Yumeko estoy a punto de usar mi Alquimia.

Yumeko: Wow!, ¡¿Puedo ver?!

Pregunto emocionada.

Kazuma: Claro, ahora veamos si lo que e estudiado me ha servido *Aplauso*

El chico aplaudió y puso sus manos en el suelo, tocando el símbolo.

Kazuma: Vamos concéntrate... Ya conozco las 3 ramas de la Alquimia muy bien, así que intentaré crear un arma.

Dijo sin perder la concentración.

Pero parecía que nada pasaba, pues el símbolo no tenía ninguna reacción.

Hasta que empezaron a salir rayos de este.

Yumeko: ¡WOW!

Gritó muy sorprendida de lo que veía.

Kazuma no perdía la concentración y seguía pensando en lo que quería crear y lo que quería modificar de los elementos.

Luego de unos segundos...

Lo había conseguido, creo una lanza.

Yumeko: ¡Lo lograste Kazuma nii-chan!

Gritó sorprendida.

Kazuma: Lo logré...

Dijo alegre mientras miraba la lanza.

Ruri: Vaya...

Kazuma y Yumeko se dieron la vuelta y vieron a Ruri, quien vio lo que Kazuma hizo.

Kazuma: ¿Sorprendida?, Lo he conseguido.

Dijo levantando la lanza del suelo.

Ruri: Pues si me sorprende, es bastante difícil lograr eso, a mí me costó bastante...

Kazuma: Pues a mí no, memoricé todo lo que sabia y pude conseguirlo.

Dijo con orgullo.

Ruri: No basta con solo memorizarlo, tienes que entender completamente las 3 ramas de la Alquimia, y eso me costó, pero tú pudiste hacerlo en poco tiempo, tienes talento en esto...

Kazuma: Si, al parecer lo tengo... (Aunque creo que es más por mí bendición, al parecer si me sirve de algo...)

Pensó al recordar que uno de los extras de su bendición era que tendría más inteligencia y poder guardar mejor la información en su cerebro.

Ruri: Supongo que sí lo tienes...

Dijo algo... ¿Orgullosa?.

Yumeko: ¡¿Que más puedes crear Kazuma nii-chan?!

Pregunto muy emocionada por creer que Kazuma podría crear más cosas.

Kazuma: Ammm, pues varias cosas, pero aún debo aprender más a crear otras.

Yumeko: Oh, ¿Entonces deberás de aprender más?.

Dijo curiosa.

Kazuma: Si.

Yumeko: Está bien.

Ruri: Por cierto, entren ya, vine a avisarles que la comida ya está lista, además de que Fuji tal vez ya esté de regreso.

Les dijo a los dos.

Kazuma y Yumeko: Está bien.

Entonces todos entraron a comer.

Se sirvieron su comida, cuando estaban a punto de comer escucharon como la puerta de la casa se abría.

Se levantaron y fueron a ver quién era, aunque era algo obvio quién sería.

Fuji: Hola...

Saludo cortamente.

Justo acababa de regresar.

Kazuma y Ruri: Hola.

Yumeko: ¡Papá!

Corrio hacia su padre y le dió un abrazo.

Este correspondió, pero su rostro estaba muy serio.

Todos notaron eso.

Yumeko: Papá, ¿Estás bien?

Ruri: ¿Pasa algo...?.

Pregunto con preocupación.

Fuji: ... Les contaré en un momento, veo que ya están a punto de almorzar, comamos y ahí les cuento.

Dijo muy serio.

Ruri: Está bien...

Kazuma: ...

El castaño solo se quedó en silencio.

Todos fueron a sentarse y comieron tranquilamente.

Ahí Fuji empezó a contarles.

Fuji: El trabajo va de mal en peor, no logro vender nada, si esto sigue así estoy acabado...

Dijo con enojo y frustración.

Ruri: ¿Por qué no logras vender más?

Fuji: No tengo los materiales suficientes, y cada vez hay más puestos que llaman la atención de las personas, si esto sigue así me quedaré sin dinero.

Ruri: Deberías ir a Axel como te recomendé, es la mejor opción...

Mientras ellos hablaban de eso Kazuma y Yumeko solo escuchaban callados.

Fuji: Ya te dije que no, además de que estoy escaso de dinero ahora...

Ruri: Entonces te ayudaré, podría...

Fuji: No, esto lo haré solo...

Dijo mientras bajaba la cabeza.

Ruri: Deja tu orgullo de lado, ¿Acaso no entiendes que esto es malo?, Si sigues así no podrás.

Fuji: ¡CÁLLATE!, ¡YO LO ARREGLARÉ!

Gritó furioso.

Su grito exaltó a Yumeko, quien se asustó, pero Kazuma trató de calmarla.

Fuji al ver eso se levantó y parecía dirigirse a su biblioteca.

Antes de irse dijo.

Fuji: Váyanse, vuelvan otro día.

Dijo de forma cortante.

Ruri lo miraba muy enojada, pero al ver cómo estaba Yumeko se calmó y trato de calmarla junto con Kazuma.

Luego de unos minutos, Yumeko volvió a estar calmada.

Kazuma: ¿Estás mejor?

Yumeko: S- si, solo me asusté un poco.

Dijo ya más tranquila.

Ruri: Lamentamos eso, no debimos discutir.

Le dijo a la niña mientras le acariciaba la cabeza.

Yumeko: Esta bien, mi papá aveces se pone así, pero pronto volverá a estar normal, siempre se le pasa.

Dijo con una sonrisa calmada.

Kazuma: ... (No puedo dejar que este así, pero Dijo dijo que nos vayamos)

Yumeko: Supongo que ya se deben ir.

Dijo con tristeza.

Ruri: No creo que estés bien, tu padre está molesto, podría hacerte algo si no piensa bien lo que hace.

Yumeko: ¡Papá no haría eso!, ¡Yo soy su pequeña, el nunca me hará nada!, ¡Yo confío en el!.

Dijo en voz alta de forma muy seria.

Kazuma y Ruri no estaban convencidos, pero tampoco podrían quedarse, no querían causar un gran problema.

Kai: ¡Wof Wof!.

Escucharon todos de repente.

Kai se había despertado.

Kazuma: Kai, hmmm... (Supongo que el podría cuidar a Yumeko-chan si pasa algo, aunque lo dudo, este perro no es violento...).

Ruri: ... *Suspiró* No puedo llevarte, pero si tú dices que tú padre no te hará nada confiaré en ti, igual mejor mantente en tu cuarto hasta que tú padre se calme.

Dijo con preocupación por la niña.

Yumeko: Está bien.

Ruri: Entonces me despido, cuídate, vámonos Kazuma.

Dijo mirando al castaño.

Kazuma: Si...

Dijo muy serio.

A pesar de que lo más probable es que no pase nada malo, aún así estaba algo preocupado.

Yumeko notó eso.

Yumeko: No te preocupes Kazuma nii-chan, nada malo pasará.

Dijo tranquila.

Kazuma: Está bien... (Tal vez solo me preocupo demasiado)

Pensó ya más tranquilo.

Se acercó a la pequeña y le susurro.

Kazuma: Ya falta poco para acabar los guantes, mañana los terminamos.

Le susurro alegre.

Yumeko: Claro.

Le susurro también.

Ruri: ¿De que hablan?.

Les pregunto a los dos, quienes se pusieron nerviosos.

Kazuma y Yumeko: De nada importante.

Dijeron al unisonó.

Ruri: ... *Suspiró* Está bien, mañana vendremos a verte de nuevo Yumeko-chan...

Dijo mientras se dirigía a la puerta de la casa.

Ruri: (Por si acaso... Vendré más tarde a revisar...)

Pensó muy seria.

Yumeko: Si, cuidense, adiós.

Se despidió la niña con una sonrisa tierna.

Kazuma acaricio la cabeza de Yumeko antes de irse también.

Kazuma y Ruri: Adiós.

Dijeron para luego salir de la casa.

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Habían pasado unas dos horas desde que Kazuma y Ruri se fueron.

Yumeko se quedó en su cuarto jugando con Kai.

Se veía por la ventana que afuera estaba a punto de llover.

Yumeko: Parece que lloverá Kai.

Kai: Wof...

Ambos estaban en silencio, no tenían mucho que hacer.

Además de que se estaban aburriendo de quedarse adentro, pero no podían hacer nada.

Yumeko estaba sentada en su cama mientras acariciaba a su perrito.

Yumeko: Kazuma nii-chan dijo que los acabaramos juntos, pero se llevará una sorpresa al ver que yo solita termine sus guantes.

Dijo orgullosa de si misma tenían al costado de ella los guantes con Símbolos de Alquimia.

Kai: ¡Wof!.

Ladro alegre.

Yumeko: (Se alegrará mucho mañana).

Pensó muy feliz.

Hasta que escucharon que alguien tocaba la puerta.

Fuji: Yumeko, soy yo, ¿Puedo pasar?

Dijo al otro lado de la puerta.

Aunque no se notaba mucho, su voz estaba algo sería.

Yumeko: Claro.

Dijo la niña.

Entonces la puerta se abrió y Fuji entro al cuarto.

Se acercó a su hija y le acaricio la cabeza.

Fuji: Lamentó lo de hace un rato, no debí de ponerme así.

Dijo con un tono más sereno.

Yumeko: Está bien, me alegra que ya estés mejor, no te preocupes por lo de tu trabajo, pronto se solucionará papá, después de todo nunca me has fallado, confío en ti.

Dijo con una tierna sonrisa.

Fuji también sonrió, aunque su sonrisa... Se notaba rota.

Fuji: Gracias por confiar en mi Yumeko, sabes... No he pasado mucho tiempo contigo ni con Kai, ¿Creo que podríamos jugar un rato más antes de que sea hora de dormir?, ¿Te parece bien?.

Dijo con una sonrisa amable.

Kai: ¡Wof Wof!.

Yumeko: ¡¿En serio?!, ¡Me encantaría jugar contigo papá!.

Dijo muy alegre.

Fuji: Está bien, jugaremos a algo muy divertido.

Dijo mientras abrazaba a su hija.

La niña correspondió muy alegre.

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4 horas después.

Pov Kazuma Satou:

Me encontraba en mi hechado cama pensando en lo que pase hace unas horas.

Aunque Yumeko dijo que todo estaría bien, y Fuji seguramente no la lastimé...

No puedo evitar sentirme mal...

Tengo un mal presentimiento...

Hace unos días escuché rumores sobre Fuji-san.

Que el había hecho algo hace años.

Sobre una quimera que habla.

Una maldición o algo así, algo que iba en contra de lo que crearon los dioses.

Me dió curiosidad, pero supuse que eran solo rumores tontos y decidí ignorarlo.

Me levanté de mi cama y fui a lavarme la cara al baño que había en mi cuarto.

Kazuma: Ahora que recuerdo, aún tengo esa duda de lo que leí hace unos días, debería preguntarle a la sensei.

Dije mientras me secaba la cara.

Luego salí de mi habitación y fui al de la sensei.

Iba a tocar la puerta pero antes de que lo haga está fue abierta por la sensei.

Está me vio sorprendida por estar ahí.

Ruri: ¿Que sucede?, ¿Que hacías ahí parado?.

Dijo de una forma sería.

Kazuma: Vine a hablar con usted... Hay algo que no me cuadra en mis libros de Alquimia, y quisiera que responda mi pregunta.

Ruri: No tengo tiempo, será cuando regrese.

Dijo a punto de irse, pero la detuve.

De seguro no volvería en un buen rato, es mejor que responda mi duda ahora.

Kazuma: ¿La Alquimia también puede modificar partes del cuerpo no es así?, Cómo con la Alquimia médica que permite aliviar ciertas heridas...

Dije con duda.

Los días que me la pasaba en la casa de Fuji no solo estudie la trasmutación de objetos.

También ví un libro que hablaba sobre la Alquimia médica, decía que es algo complicada.

Me llamó la atención y la estudie.

El libro decía que ayudaba a curar algunas partes del cuerpo, como por ejemplo poder cerrar heridas.

Pero la duda que se me vino a la mente fue que entonces la Alquimia puede modificar partes del cuerpo.

Ruri: ... Si también puede modificar partes del cuerpo, pero no para hacerte más fuerte o esas cosas, no afecta seres vivos ni algo con mana concentrado, solo funciona para aliviar o cerrar heridas, pero no se necesita actualmente con las pociones y sacerdotes que pueden curarte, solo se usaba para situaciones desesperantes.

Me explico rápidamente.

Ruri: Ahora ya me voy.

Dijo intentando irse de nuevo.

Pero yo la detuve.

Kazuma: ¿Por qué está nerviosa?, ¿Ocurrió algo?.

Dije con preocupación.

Ruri: No, solo necesito ir a un lugar, regresaré rápido.

Dijo apartándome.

Fui a detenerla de nuevo.

Aunque no soy de los que les gusta molestar a las personas evitando que hagan lo que quieren, estaba algo preocupado.

Kazuma: Sensei, se nota que le preocupa algo, dígame qué es, tal vez pueda ayudarla.

Dije serio.

No quisiera meterme en un problema que no sea mío, pero esto me estaba asustando un poco.

Ruri: Te explicaré después.

Dijo apartándome con fuerza.

Y entonces salió corriendo.

Por alguna razón empeze a correr para seguirla.

Estoy asustado, ¿Por qué?

Salí del hotel y fui a por dónde ella iba, pero en un punto se detuvo y le jalo a una parte alejada.

Ruri: ¡Ya deja de seguirme!.

Me grito enojada.

Kazuma: Estoy preocupado, ¿Que no lo entiende?, Además de que usted se ve nerviosa desde que salimos de casa de Fuji-san, ¿Por qué?.

Pregunté con un tono algo más serio de lo usual.

Ruri: ... *Suspiró* Me preocupa Yumeko-chan.

Kazuma: Fuji no le haría nada, es su padre, debe querer mucho a su hija como para lastimarla.

Dije serio, pero en mi tono se notaba algo de duda, como si no estuviera seguro de mis palabras.

La sensei al parecer notó eso, y me preguntó.

Ruri: ¿Escuchaste de los rumores?.

Pregunto con la mirada baja.

Kazuma: ¿Rumores...?, ¿Sobre los de Fuji-san?,

Ruri: Al parecer si los escuchaste... *Suspiró*

Dió un largo suspiró y me dijo.

Ruri: Te explicaría, pero quiero ver a Yumeko y ya perdí mucho tiempo contigo, me ire ahora.

Kazuma: Está bien, pero la seguiré, a mi también me preocupa ella.

Dije con un tono decidido.

Ruri: ........ Bien, vámonos.

Entonces ambos fuimos corriendo a la casa de Fuji.

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20 minutos después.

Llegamos y la sensei tocó la puerta con algo de brusquedad.

Ruri: ¡Fuji!, ¡Abre la puerta!.

Grito mientras seguía tocando la puerta.

No se escuchaba ningún ruido dentro de la casa, solo los golpes a la puerta.

La sensei al ver que no abrían entonces uso su Alquimia para abrir la manija de la puerta.

Ambos entramos y vimos que todo estaba oscuro, y no se escuchaba nada.

Pero al fondo de un pasillo se veía una luz.

Nos acercamos rápidamente y abrimos.

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No creía lo que tenía delante.

Habían varías jaulas, en ellas habían lo que parecían ser animales, pero se veían violentos y en mal estado.

Ruri: Fuji...

Dijo con un tono demasiado serio.

Fuji-san estaba delante de nosotros.

Estaba de espaldas, y algo estaba detrás de el.

Kazuma: ¿Fuji-san...?

Me acerque a el y ví su rostro, estaba sonriendo.

Fuji: ... Lo logré...

Dijo con una sonrisa algo macabra.

Ví lo que estaba delante de él y...

No sé que era esa especie de animal, pero me... Daba una mala sensación.

Fuji: Lo logré de nuevo...

¿De nuevo?

Ruri corrió rápidamente hacía nosotros.

Pero cuando vio lo que estaba delante de nosotros...

Se quedó en Shock, y se arrodilló.

¿Por qué...?

Fuji: Una quimera, pero esta es capaz de hablar el lenguaje humano.

Kazuma: ¿Eh?.

Dije sorprendido.

Fuji: Di "Kazuma".

Le dijo a lo que estaba delante, al parecer una quimera.

???: Kazu-ma.

Me sorprendí demasiado al escuchar eso.

Fuji: Si, muy bien.

Dijo alegre.

Esto no me cuadra....

Espera...

Ruri: Fuji...

Me voltee al escuchar eso.

Vi a la sensei, y su rostro... Demostraba mucha irá y a su vez... horror.

???: Kazu-ma, Kazu-ma.

Siguió repitiendo mi nombre.

Kazuma: ....

Solo seguía mirándo a la quimera.

???: Kazu-ma ... Nii-chan.

Kazuma: ¡AH!

...

No... No... ¡NO!.

Kazuma: Fuji... ¿Puedo hacerle una pregunta?

Fuji: Si...

Kazuma: Sabe de los rumores que hablan de usted ¿Verdad?, Algo sobre una quimera.

Dije sin mirar a Fuji...

Fuji: Si, fue hace algunos años, hice una que podía hablar, y ahora logré hacerla de nuevo.

Dijo con un tono de voz... ¿Roto?.

Kazuma: Ya veo... Por lo que se su esposa se fue hace algunos años también ¿No?.

Fuji: Si.

Por favor, que esté equivocado.

Kazuma: Una última pregunta... ¿Dónde están Yumeko-chan y Kai?

Dijo mirando a Fuji con mucha irá.

La expresión de Fuji cambio a una de furia.

Fuji: Odio que los mocosos como tú se metan en lo que no les importa.

Ahí fue cuando... Explote de irá, pero antes de que haga algo, la sensei empujó a Fuji bruscamente hacia la pared.

Ruri: ¡LO HICISTE VERDAD!, ¡COMETISTE UNO DE LOS PECADOS MÁS GRANDES!.

Le gritó mientras lo golpeaba.

Ruri: ¡TU LE HICISTE ESO A HINA-SAN!, ¡Y AHORA A TU HIJA NO ES ASI!.

Gritó sin dejar de golpearlo.

Yo solo me quedé parado viendo...

No podía moverme.

Ruri: ¡¿POR QUÉ LO HICISTE?!, ¡¿POR QUE HICISTE ESTO?!.

Fuji: ... Para probar algo.

Ruri: ¿Que?

Pregunto sin dejar de presionarlo contra la pared.

Fuji: Desde que crea por primera una quimera que podría hablar, esa idea nunca se fue, intentando mejorarla, pero era complicado, además de que me quedaba sin recursos.

No mostraba ni una pizca de tristeza en sus palabras, parecía como si no le importara.

Ruri: ¡LAS PERSONAS NO SON OBJETOS QUE PUEDES USAR A TU BENEFICIO!.

Fuji: ¡¿PERO HICISTE LO MISMO NO?!, ¡¿ACASO LO OLVIDASTE?!, ¡¿LO QUE HICISTE HACE AÑOS POR TRATAR DE RECUPERAR A TU HERMANO?!, ¡LA RAZÓN POR LA QUE NO PUEDES USAR HABILIDADES?!

Gritó mientras reía como un loco.

¿La razón por la que no puede usar Habilidades?

Ruri: ¡NO SOY COMO TU!, ¡NUNCA LO FUÍ!.

Fuji: ¡¿En serio?!, ¡¿Acaso no querías que el regresará y por eso rompiste el tabú?!.

Gritó mirando a la sensei a los ojos.

La sensei paro de golpearlo, pero no de tenerlo contra la pared.

Me acerque hacia ellos, cerré mis puños.

Estaba furioso, quería... Matarlo.

Pero... Algo me detuvo.

Yumeko: Nii-chan... Nii-chan...

Me mordía la manga de mi abrigo.

Me quedé quieto, sin moverme.

Pero... Empeze a llorar.

Yumeko: Nii-chan... Nii-chan...

La ví directo a la cara... Me sentía horrible.

Pero Yumeko rápidamente fue hacia un lado de la habitación y note que tenía algo en la boca.

Lo que tenía mi lo entrego en la mano.

...

No puede ser.

Kazuma: Lo- los guantes...

Dijo sin dejar de llorar.

Yumeko: Kazu-ma nii-chan...

Decía con dificultad.

Kazuma: Fui un estúpido... Debí haberme quedado, debí haberlo evitado... Debí... Protegerte.

Yumeko: O- omae no yu-me o mit-a

Kazuma: Ah...- las lágrimas seguían saliendo.

Empecé a abrazarla, no aguantaba más.

Yumeko: ga ki-koe-ru
ore no sei-shun dat-ta oma-e no uta-u

Kazuma: Midnight Blues...

Me arrodille y empeze a llorar.

Kazuma: Lo siento, por favor perdona a este fracaso de hermano mayor...

Solo sollozaba, ni siquiera podía verla, tampoco quería ver a Ruri o a Fuji.

Ruri: Maldita escoria... No te importo ella, no te importo Hina-san, solo tu maldita prueba...

Dijo mirando a Fuji con odio mientras lloraba.

Fuji: Recuerda Ruri, la alquimia es en base a mejorar todo lo nuevo para el bien del resto.

Ruri: Y- y esto... ¡¿EN QUE MIERDA AYUDA AL RESTO?!

Todo esto... Debes ser una pesadilla.

Un maldita pesadilla.

Continuará...