La Princesa Iris, conocida por todo el reino como la dulce chica sin idea alguna sobre el mundo, inocente y con una extraña afición por casi todo lo que considere nuevo para ella. Esa es la imagen que todos en el reino tienen de su princesa, siendo este un ser puro y de buen corazón que jamás haría algo que decepcione a su fiel sequito de lolicones obsesionados con ella.

Claro que muchos creyeron que la princesa sería corrompida cuando cierto aventurero idiota entro en su vida, claro que muchos lo consideraban un héroe que había logrado vencer a varios generales del Rey Demonio con extrema facilidad, pero aquellos que lo veían junto a la princesa tan solo lo consideraban como un pervertido lolicon... siendo ellos los pervertidos lolicones.

Aunque, había una seguidora que era realmente cercana a la princesa, después de todo se trataba de su guardaespaldas y era aquella que mantenía a los demás a raya cuando estaban cerca de la princesa.

Desde el principio esta mujer ha odiado a Satou Kazuma, el "hermano mayor" de la princesa Iris, después de todo era un simple plebeyo que era considerado como Bazuma, Kakazuma y miles de apodos mas que lo mostraban como un ser repugnante que obviamente sería una mala influencia para la princesa.

¿Pero qué me dirían si les dijera que la peor influencia de la princesa no es Satou Kazuma? Por qué es cierto, la princesa tiene una persona que la ha llevado a perder su pureza e inocencia.

Axel, pueblo de aventureros novatos, en este pequeño pueblo se podían encontrar a varios aventureros valientes que se han enfrentado al ejército del Rey Demonio en diversas ocasiones, aventureros legendarios que eran conocidos como héroes.

La razón del porqué hay tantas personas impresionantes en este pueblo, es gracias a un pequeño café conocido por unos cuantos.

El café de las sucubos, en donde un aventurero podría pedir cualquier clase de sueño para complacerá sus deseos carnales.

–Vaaamos, cuando hablamos del café de las sucubos siempre eres el primero en apuntarte, ¿y ahora me dices que no iras?

Gritaba un cierto rubio a un castaño mientras bebían cerveza en el gremio de aventureros.

–Lo siento, pero tengo otros planes para hoy.

Respondió el castaño para después darle un largo sorbo a su tarro de cerveza.

Era claro que el rubio se veía molesto ya que su invitación había sido rechazada, en especial porque hoy era un día especial en el café de las sucubos, una en donde sí llevabas a un amigo entonces ambos recibirían un regalo especial de las sucubos.

Pero el castaño no se quedaba atrás, se le notaba realmente molesto mientras bebía con amargura su bebida.

Estaba esperando con ansias por este evento tan único, ya que quería saber de que se trataba ese regalo tan especial de las sucubos, pero una carta había llegado esta mañana, la cual decía:

"Querido Onii-chan:

Hoy iré de visita al pueblo de Axel por asuntos de la corona con el padre de Lalatina, por lo que he decidido volver a escaparme para ir a verte, o por lo menos eso tenía planeado, Claire descubrió mis planes y dijo que me vigilaria con suma atención. Pero me prometió que si me portaba bien en la junta, entonces me permitiría quedarme la noche en tu hogar, aunque realmente seria con Lalatina como mi guardia por la noche.

Pero no puedo esperar a verte, me escabullire durante la noche a tu habitación para que podamos tener una pijamada juntos.

Con amor, tu dulce hermana Iris. "

Kazuma era un pervertido, eso todos en Axel lo sabían, pero incluso él tenía ciertos límites que no cruzaba. El primero de ellos era no hacer nada indebido cuando Iris estaba presente, ya que quería mantener una buena imagen de hermano mayor frente a ella sin importar que.

Por ese motivo tuvo que cancelar sus planes con las súcubos, ya que si Iris se quedaba en la mansión, o peor, en su habitación, ella descubría que su hermano es un pervertido que pide sueños eróticos sobre sus compañeras.

Claro que en su mente no están aquellas ocasiones en donde mostró ser un pervertido, como cuando intento tomar un baño cuando estaba en el cuerpo de esa misma hermana menor a la cual no quiere decepcionar.

Pero eso está todo en el pasado, y el presente es lo que cuenta ahora, a pesar de que Iris conocía perfectamente el como era su hermano, pero aún así lo quería tal y como era.

Ebrio, Kazuma volvió a la mansión pocos minutos antes de que anocheciera por completo, llego con bastantes dificultades, después de todo había bebido un poco de mas, cosa que no parecía molestarle mostrar a su hermana menor.

Llego a la mansión apenas sosteniéndose, y para su sorpresa había una chica bastante atractiva sentada en el sofá de la sala de estar, su cabello rubio y ojos azules brillaron con alegría en el momento en el que vio a Kazuma.

–¡Al fin llegaste!

Grito la chica emocionada, pero Kazuma estaba completamente confundido. ¿Quién era esta linda chica? ¿Qué estaba haciendo en su mansion a altas horas de la noche? Y la pregunta más importante. ¿Por qué estaba tan feliz de verlo?

En Axel todas las chicas conoces y temen a Satou Kazuma, saben sobre sus pervertidas habilidades y huyen cuando él se acerca, pero esta chica en cambio se acercó a él para abrazarlo.

–Me da gusto verte Onii-chan.

Ella dijo eso mientras lo abrazaba, pero no tardó mucho en separarse de él por su terrible peste a licor.

–Puahh, hueles demasiado a alcohol Onii-chan. Mohhh, ¿fuiste a beber incluso cuando te dije que vendría?

Dijo aquella última frase que incentivo a Kazuma a darse cuenta de quien se trataba la chica.

–¿I-Iris? ¿Eres, tu?

–¡Sí, soy yo! Aunque, me veo un poco diferente por... un pequeño incidente.

Así es, la hermosa chica, que aparentaba tener 16 años, se trataba realmente de la princesa Iris, la cual por algún motivo había crecido hasta parecer mas grande de lo que realmente era.

–¿Incidente? ¿Pequeño? Dudo que un pequeño incidente te allá dejado de este tamaño.

Dijo Kazuma aún sorprendido por la sorpresa de ver que su hermana menor era un completa belleza ahora, y que realmente parecía ser más grande que él ahora.

–Bueno, lo que pasó fue...

"Fuimos a la mansion Dustiness como había mencionado en mi carta, teníamos que ver unos asuntos con respecto a los impuestos de Axel, ya que el gremio parecía estar dando bastante dinero por misiones y casi ningún aventurero estaba pagando impuestos.

Claro que el padre de Lalatina se disculpo de rodillas incluso cuando le dije que no era necesario, aunque Claire parecía disfrutar la supremacía en este momento.

No tuve más opción que disculparme con él dentro de mi cabeza.

Una vez terminamos nuestros asuntos, fuimos a dar un paseo por Axel para ver en las condiciones en las que estaba. Ahí fue cuando encontramos una tienda mágica algo extraña.

Decidimos entrar para ver los productos que vendían, y un extraño hombre nos recibió con una forma de hablar muy extraña.

–¡Moi puede oler el dinero, clientes con bastas riquezas han llegado! Dígame, ¿en que puede servirles Moi el día de hoy?

El hombre usaba una máscara y un traje bastante peculiar. A mí me parecía algo gracioso, aunque Claire parecía bastante molesta con tan sólo verlo.

–¿Que artículos populares tiene?

Le pregunté curiosa, este al instante arquio su sonrisa de oreja a oreja y, como si de un truco de magia se tratara, saco un montón de artículos de su manga y los coloco sobre el mostrador.

–¡Deje que Moi le presente los mejores artículos de esta tienda! Para chicas de su edad tenemos este brazalete, muy útil para ahuyentar lolicones que quieran hacerle daño.

Me mostró un extraño brazalete con una pequeña cadena que parecía ser un interruptor.

–Al jalar está cadena, el artículo mágico reaccionará y sonará con fuerza llamando la atención de todos alrededor y asustando al pervertido.

–¡La Pri, di-digo, Alice-Sama no necesita esa clase de cosa! Jamás deja mi lado, así que yo la protejere de cualquier lolicon.

Claire proclamó molesto mientras yo solo la veía divertida.

–Crea a Moi, nunca sabe cuando uno de estos artículos sean necesarios. ¡Pero si ese no le gustó no se preocupe, Moi tiene muchos más para mostrarle!

El hombre nos enseñó varios artículos por varias horas, muchos de ellos iban más dirigidos a Claire que a mi, después de todo el hombre debió darse cuenta de que Claire era la que pagaría por los artículos al fin y al cabo.

Viendo que ninguno de los artículos no me interesaban, comencé a caminar por la tienda curiosa.

Había muchas cosas interesantes, varios estantes llenos de pociones mágicas. Reconocía algunas de ellas gracias a mis clases de pociones con Rain, pero había muchas otras de las que jamás había escuchado.

–Edad deseada.

Era el nombre que estaba escrito en la etiqueta de la botella, no entendía completamente cuál era el efecto de esta poción, pero al leer el nombre podría darme una idea.

Si bebía está poción entonces podría tener la edad de Onii-chan, y así podríamos tener una cita sin que nadie nos interrumpa.

Tome la botella entre mis manos, decidida en beberla, pero me arrepentí incluso antes de abrirla.

No quería molestar a mi Onii-chan con un asunto tan trivial como una cita, además, podremos tener cientos de citas cuando crezca y nos casemos, después de todo, mi Onii-chan es un héroe que no se le puede comparar.

–Moi le repite que este primer artículo sería muy útil.

–Y yo le digo que no, Alice-Sama no necesita nada por el estilo, siempre estoy a su lado sin importar que.

–Pues Moi sabe de fuentes muy confiables que su pequeña chica es muy propensa a escapar de usted, y si usted compra esto junto con esto, podrá activar la alarma para saber en donde se encuentra de inmediato, justo así.

Un fuerte sonido irrumpió la paz de la tienda en cuestión de segundos, asustandome y provocando que tirara la botella que sostenía. Esta no tardó en caer al suelo y romperse, provocando una nube de humo mágico que me cubrió por completo.

–¡¡A-Alice-Sama!!

Escuche a Claire gritar del otro lado de la cortina de humo, pronto esta comenzó a dispersarse mientras yo tocia por el humo mágico que había entrado a mis pulmones.

Cuando finalmente el humo se disperso por completo lo primero que vi fue a Claire, la cual me miraba con un rostro estupefacto.

Su mandíbula parecía estar por caer al suelo ya que algo la había sorprendido, pero lo único que veía era a mí. ¿Será que la poción me afecto?

–Vaya, esto podría ser un problema.

Dijo el hombre mientras yo me acercaba a un espejo que estaba dentro de la tienda.

–¡¿Como que un problema?! ¡Explícate!

Claire grito furiosa mientras estaba enfrente del hombre. Yo me pare enfrente del espejo y miré mi reflejo asombrada.

–¡Suelte a Moi antes de que comience a defenderme! Realmente ustedes los nobles son realmente torpes al manejar los asuntos.

Claire se tranquiliza tras recibir el regaño del hombre. Mientras tanto yo me seguía viendo fascinada al espejo, pero algo avergonzada ya que mi ropa se había deshecho cuando crecí.

–A lo que Moi se refería es que esa poción esta diseñada para ser bebida, no inhalada.

Mi pecho y trasero no habían crecido mucho, pero se veían mucho más modestos que cuando era una simple niña, tal vez así le guste a Onii-chan.

–¿Y eso en que afectará a Alice-Sama?

–Moi no está del todo seguro, pero por lo usual esa poción es reversible con tan solo decir una frase.

–¿Y cual es esa frase?

–Los caminos de la vida, no son lo que yo creía.

Mi rostro se veía más maduro y mi cabello era mucho más largo, estoy segura de que mi Onii-chan le gustará como me veo.

–¡Entonces tendrá que decirlo Alice-Sama! Aunque sea algo tan humillante como eso... ¿Alice-Sama?"

–Y después de tomar algo de ropa vine corriendo para verte, y dime. ¿Que tal me veo Kazuma?

Era la primera vez que la Princesa llamaba a Kazuma por su nombre en lugar de sólo Onii-chan, pero creí que era apropiado tomando en cuenta de que ahora tenían la misma edad.

–Tu, en verdad, te ves muy linda Iris.

Dijo con una estúpida mueca en su rostro mientras no podía dejar de ver a Iris, o tal vez era el hecho de que ella lo había sorprendido cuando estaba completamente ebrio, por lo que se sintió algo mareado de repente.

–Oye Kazuma, ahora que Iris-Sama esta aquí será mejor que no digas o hagas cosas indebidas, en especial con ella en esa forma.

De repente Darkness había entrado en escena, se coloco detrás de Kazuma con una voz imponente para dejarle en claro que no permitiría ninguna clase de actitud típica de Kazuma en esta ocasión.

–Ya ya, no tienes que ser tan dura con ella Lalatina, además, Onii-chan jamás haría algo indebido.

Iris se paro al lado de Darkness para intentar tranquilizarla.

–Usted no lo conoce Princesa, Kazuma es un degenerado que roba la ropa interior de las chicas solo por diversión.

–Bu-bueno, eso es común en los chicos hoy en día, ¿no es así?

Iris trato de defender a Kazuma dando puntos para nada válidos.

–¡No lo es princesa, y quien le diga lo contrario es un pervertido, además...!

Ambas continuaron discutiendo sin darse cuenta de que el rostro de Kazuma había comenzado a ponerse verde por lo mareado que estaba, terminando vomitando sobre ambas chicas.
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Era algo noche por lo que casi todos en la mansion ya habían caído rendidos, en especial aquel ebrio que vomito sobre la princesa.

Y hablando de ella, en estos momentos se encontraba en el baño junto a Darkness, ambas estaban ahí tratando de quitarse aquel horrible aroma del vomito.

–Realmente lo lamento princesa, le prometo que lastimarte severamente a Kazuma por lo que le hizo.

Decía Darkness apenada mientras lavaba el cabello de Iris, la cual estaba sentada sobre un pequeño banco con un sonrisa relajada en su rostro.

–No tienes que preocuparte por eso, además, te agradezco que entraras a tomar un baño conmigo, puedo verme así, pero jamás había tomado un baño por mi propia cuenta.

–No hay problema, además de que es mi deber ya que esto lo causó mi ebrio compañero.

Darkness continuaba disculpándose, a pesar de que la Princesa no parecía haberle molestado lo sucedido, o no por completo, ya que se sintió algo asqueada por el aroma a alcohol al igual que un poco mareada, pero le agradaba ver una nueva faceta de su Onii-chan que jamás había visto.

Mientras Darkness continuaba lavando el cabello de la princesa, esta se encontraba revisando su más adulto cuerpo.

No lo había podido ver bien en el espejo de la tienda, por lo que ahora podía satisfacer su curiosidad con mayor facilidad.

Comenzó por explorar sus pechos, viéndolos directamente le hizo darse cuenta de lo bastante que habían crecido, no estaban del tamaño de Darkness, pero fácilmente superaban al pecho de su maestra.

Dio pequeños vistazos a su entrepierna cuando Darkness no la estaba mirando, después de todo sabía que era una zona pervertida con la que no debería de jugar, y mucho menos enfrente de otra persona.

Pero estaba curiosa, ya que un sutil bello de color dorado cubría una parte de su entrepierna.

Recordaba haber visto aquella zona de Megumin cuando se bañaba con ella, pero no recordaba que hubiera bello cubriendo aquella zona en específico.

Por esa razón sentía que su cuerpo podría ser raro, pero, tras dar un ligero vistazo a la entrepierna de Darkness, su ansiedad había desaparecido y la hizo pensar "Entonces mi maestra es la rara".

–Princesa Iris, ¿está todo bien?

Preguntó Darkness al notar que Iris la había volteado a ver un segundo.

–Sí, solo tenía curiosidad.

Dijo ella con inocencia, dejando completamente confundida a Darkness. "¿A qué se refería con curiosidad exactamente?" se preguntó casi al instante. No divago mucho en la pregunta, ya que podría que la respuesta fuera más vergonzosa.

Darkness comenzó a lavar el cuerpo de la princesa, usando una pequeña esponja enjabonada. Ella trató de ser lo más cuidadosa posible, después de todo no estaba lavando el cuerpo de una niña, si no de una adulta, lo cual hizo que esto fuera más incómodo de lo que debería ser, después de todo solo había una niña de 13 en aquel cuerpo de adulta.

Pasó la esponja por los hombros de Iris, ella solo soltaba pequeñas carcajadas por la sensación tan extraña, pero entre más iba bajando Darkness, las carcajadas pasaron a ser cada vez menos audibles.

Cuando finalmente se detuvieron fue cuando Darkness había llegado a los pechos de Iris, al principio Darkness se sobresalto un poco ya que eran mucho más grandes que cuando se baño con ella la última vez.

Claro, una poción la había afectado y por eso había crecido, pero ella parecía haber olvidado ese asunto por la situación en la que estaba.

La boca de Iris comenzó a producir un pequeño sonido apenas audible, unos ligeros quejidos que Darkness ferviente trataba de ignorar.

Por esa razón pasó rápidamente de esa zona hasta el vientre de Iris, para ese punto tan solo se escuchaban suspiros cortos, cosa que también afectaba la mente de Darkness en estos momentos.

"¿Qué está pasando? ¿Por qué me siento de esta forma por algo tan simple?" eran las preguntas que aparecían dentro de su mente.

Pero mientras Darkness estaba confundida por sus pensamientos, Iris también se encontraba en un par de dilemas propios.

La pregunta,"¿por qué se siente tan bien cuando agarra mi pecho?" era la más constante dentro de la cabeza de Iris, pero la segunda idea era sobre un dulce sentimiento en su espalda.

Podía sentir como el pecho de Darkness se recargaba sobre su espalda, era una suavidad que jamás había sentido o a una que jamás le había prestado atención antes cuando tomaba un baño con Claire.

"¿Será porque se trata de Lalatina?" era la única opción razonable para ella.

Cuando la esponja estuvo por llegar a la zona íntima de Iris, fue cuando Darkness se detuvo.

–Cre-creo que debería lavar el resto usted misma princesa.

Dijo mientras se alejo rápidamente apenada, la princesa se sintió ligeramente aliviada ya que comenzaba a sentirse extraña.

–S-sí, yo puedo el resto, gracias Lalatina.

Dijo Iris mientras se levantaba para tomar la esponja, pero el suelo enjabonado provocó que ella se tropezara.

–¡Princesa!

Grito Darkness mientras veía a Iris caer, se lanzó para atraparla provocando que esta cayera encima de ella.

La situación, sería una de las más incómodas si alguien las encontrará de esa forma. Iris estaba sobre Darkness, con el cuerpo de ambas completamente enjabonadas y con Iris sobre los pechos de Darkness y con su rostros casi pegados.

Se miraban detenidamente con rubor en sus mejillas, no sabían en qué tipo de situación se encontraban o como es que habían terminado de esta forma.

En una típica historia erotica ambas chicas admitirian al instante que querían explorar más sobre el asunto, pero en estos momentos ellas estaban conmocionadas por diversos factores.

Pará empezar, ninguna de las dos entendía porque tenían estos extraños sentimientos, no parecían ser normales para ninguna de las dos, después de todo ambas gustaban de cierto chico... que provocó esta situación en un principio.

Darkness también estaba acongojada, se trataba de la princesa, pero incluso sabiendo eso, su pecho latía con fuerza.

Continuaban con las miradas pegadas, un extraño resplandor rosa parecía notarse en los ojos de ambas, y tras ver ese hipnótico color, fue cuando todo comenzó a suceder.

Con una mirada intoxicada, Iris comenzó a besar a Darkness sorprendido a esta. Sentía una ligera necesidad de separarla, pero al mismo tiempo disfrutaba de esto por alguna razón.

Coloco sus manos sobre los hombros de Iris e intento empujarla, pero el beso le robaba toda su fuerza como si de Drain Touch se tratara.

Podía escuchar con facilidad los gemidos que Iris producía junto al erotico sonido que de sus bocas salía.

Pero el beso no era lo único que estaba sucediendo. Las manos de Iris, ambas estaban sobre los pechos de Darkness, acariciando esas jugosas sandías, era de una forma torpe y parecía el trabajo de un simple niño, pero Darkness estaba realmente sensible y podía sentir cualquier tacto con excitación, después de todo la rodilla de Iris rozaba perfectamente con la entrepierna de Darkness.

Obviamente era algo involuntario, después de todo no se habían movido nada desde que ambas cayeron, y tal vez por esa razón era que Darkness no tenía fuerza en su cuerpo.

Cuando el beso terminó, Iris respiraba bruscamente mientras veía a Darkness, se notaba cansada y algo extraña.

Su rostro parecía estar perdido en mundo completamente diferente al real, sus ojos tan solo veían a Darkness con deseo, con ganas de seguir con este juego que se sentía tan bien para ella.

Darkness no podía hablar ya que la rodilla de Iris seguía frotándose contra su entrepierna, ahora con una mayor intensidad que antes. Todo esto ya que Iris había comenzado a moverse, de una forma erotica.

Su pequeño cuerpo, comparado al de Darkness, se movía de un lado al otro en un intento desesperado por calmar la ansiedad que Iris sentía en este momento. Su cuerpo ardía y sentía una gran necesidad de jugar con su entrepierna de forma extrema, por esa misma razón es que se movía, frotándose contra la pierna de Darkness, sintiendo el placer de la piel contra la piel.

Pero no le era completamente suficiente. Movió discretamente su mano hasta su entrepierna, no sabía el porqué, pero sentía la necesidad de hacerlo. Con un simple rose de su mano sintió como todo su ser se estremecía.

Un pequeño charco comenzó a formarse debajo de la pierna de Darkness, era cálido y ella sabía exactamente de qué se trataba, en especial al ver el rostro de Iris sobre su pecho.

Iris había caído rendida, no sabía que había sido esa experiencia tan mágica, pero la había dejado exhausta y sin una gota de energía.

Darkness finalmente pudo moverse y cargo a la princesa mientras se levantaba del suelo. Estaba completamente apenada por lo que había sucedido y esperaba que nadie supiera de esto o su nombre de familia estaría en peligro.

Aunque, había sido la princesa la que hizo todo esto, Darkness se seguía sintiendo culpable.

Llevó a la princesa hasta la tina y la introdujo suavemente para quitar cualquier aroma sobrante de aquella experiencia, se sentó al lado de ella cuidándola de que nada le pasara.

El agua no estaba caliente, estaba algo tivia por el tiempo que había pasado, aunque estaba en una temperatura perfecta para que la Princesa no estuviera en condiciones peores que en las que estaba.

Claro que Darkness pensó en salir del baño con la princesa para que descansará en la cama, pero dudaba que ella se sintiera cómoda oliendo a orina.

–Haa, esto no puede haberme pasado, y todo por ese tonto de Kazuma.

Dijo Darkness fastidiada mientras suspiraba de forma pesada.

Cerró sus ojos por un segundo para poder tranquilizarse, pero en cuanto lo hizo sintió como algo comenzaba a lamer su pecho.

–¡E-espere Iris-Sama, no haga eso!

Grito en el momento en el que abrió los ojos y vio a Iris, lamiendo su pecho como si estuviera hipnotizada por ellos.

Darkness quería resistirse, pero aún seguía sensible por lo de hace unos minutos, por lo que su cuerpo tan sólo continuaba estremeciendose.

Ella cada vez perdía más el control sobre su cuerpo y sobre su mente, cuando menos lo supo ya estaba besando a Iris mientras está estaba sentada sobre sus piernas.

El beso era largo y erotico, con el cuerpo de ambas chicas desnudas siendo iluminadas por las suaves llamas del baño.

Los pechos de Iris se frotaban contra los de Darkness, aunque estos la empujaban ocasionalmente, de una forma divertida y erotica que Iris parecía disfrutar bastante.

Darkness movió su mano lentamente hasta la entrepierna de Iris, comenzando a frotar su vagina delicadamente. Suave, estrecha, caliente y húmeda, son las palabras que se pueden usar para definir la vagina de Iris, en la cual apenas y entraban un par de dedos de Darkness.

En diversas ocasiones Iris rompía el beso mientras era penetrada bruscamente por los dedos de Darkness. Al principio era algo doloroso y no había notado las gotas de sangre que cubrían parte del agua debajo de ella, pero no le importaba ya que el placer comenzó a apoderarse de ella rápidamente.

Con una respiración brusca, Iris se recostó sobre el pecho de Darkness mientras está movía sus dedos más aprisa, provocando que Iris tuviera un fuerte orgasmo.

Sus pies estaban rendidos, y si no estuviera sentada en el regazo de Darkness seguramente habría caído al suelo.

Pero Darkness no parecía del todo satisfecha, parecía fascinada al ver a Iris tan indefensa y con un cuerpo que le pedía más placer.

Pero su cuerpo también pedía por algo, aunque decidió guarsarselo mientras comenzaba a besar el pecho de Iris, provocando que está soltara un fuerte gemidos que podría ser escuchado por toda la mansion, pero a ninguna de las dos parecía importarle.

Iris abrazaba la cabeza de Darkness para evitar que esta se alejara. Sus pequeños pezones estaban erectos dentro de la boca de Darkness, siendo la idos y mordidos de diferentes formas.

Esto hacia enloquecer a Iris, amaba esta sensación y quería que siguiera para siempre, pero sabía que no podía ser egoísta por lo que tras un impulso empujó a Darkness provocando que está se acostarás fuera de la tina.

Dejando todo su cuerpo completamente expuesto, Iris se dedico a lamer el cuerpo de Darkness.

Empezó por el rostro, lamiendo sus mejillas hasta bajar lentamente hasta su cuello, provocando diversos gemidos entre más se acercaba a los pechos.

En venganza, Iris hizo lo mismo que le hicieron a sus pechos  a los pechos de Darkness, lamiendo y mordiendo sus pezones de diversas formas, pero ella no se detuvo solo en eso.

Bajo su mano hasta la entrepierna de la paladína y comenzó a meter un dedo, dos dedos, tres dedos dentro de la vagina de Darkness.

Esta parecía succionar los dedos de Iris con fuerza, cosa que le agradaba a la chica mientras mordía con fuerza los pezones de la masoquista.

Pero pronto su boca perdió interés en los pezones de Darkness, había algo más jugoso en la parte de abajo que la estaba llamando.

Iris coloco su rostro justo enfrente de la vagina de Darkness, vio como sus dedos entraban y salían junto a un oloroso, pero delicioso, líquido que no paraba de salir de Darkness.

Ansiosa por probar ese jugo comenzó a lamer la entrada mientras aún la penetraba con sus dedos. El sabor era tan extraño, pero adictivo al mismo tiempo, Iris no podía parar de lamer por esa razón, además de que Darkness la sostenía con sus piernas para que no alejara su rostro ni un segundo.

Iris lamia curiosa todo lo que encontraba en esa húmeda zona, pero había una cosa que llamó su atención más que el resto.

Al verlo comenzó a acercar su lengua, lamio aquello que parecía un pequeño frijol de carne, cosa que provocó que Darkness perdiera la fuerza de su cuerpo una vez más, además de gemir cada vez que la lengua de Iris tocaba ese punto.

Pero Iris pensó algo un poco malvado, "si ese lugar era tan sensible como los pezones, entonces es probable que pueda hacer lo mismo que hice con ellos."

Fue lo último que pensó antes de morder aquel dulce frijol, provocando que Darkness soltara un fuerto gemidos junto a una fuente que mojo el rostro de Iris en cuestión de segundos.

Darkness respiraba con fuerza, buscando recuperar el aliento tras aquel orgasmo tan intenso, pero Iris no planeaba darle ese descanso, ya que se lanzó hacia ella para volver a besarla mientras continuaba acariciando la empapada vagina de Darkness.

Claro que Darkness no se quedó quieta y también jugo con el cuerpo de Iris de la misma forma.

Ese juego entre ambas comenzó a ser una competencia para saber quien de las dos terminaba antes, no hubo una clara ganadora ya que ambas terminaron al mismo tiempo.

Ambas estaban agotadas, pero también seguían ansiosas. Juntaron sus cuerpos mientras frotaba sus vagina entre ellas, el jugo que ambas producían provocaban un erotico sonido cada vez que se rozaban.

Ambas movían sus caderas, en busca del mejor placer que jamás habían sentido antes.

Un charco con el jugo de ambas comenzó a juntarse debajo de ellas, un aroma tan dulce que las hacía continuar con aquella dulce danza.

Ninguna de las dos podía parar de gemir, respirando bruscamente y con ojos rosados llenos de placer en ese momento.

Tras unos minutos las dos habían tenido varios orgasmos, uno tras otro hasta que finalmente se agotaron, y como si estuvieran hipnotizada tomaron un último baño antes de volver a la cama para finalmente dormir.
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Al día siguiente. El sol mañanero acaricio los rostros de todos los habitantes de la mansion, provocando que todos despertarán sorprendidos, ya que por algún motivo, todos habían tenido un sueño erotico.

O por lo menos todos, ya que no está claro que si lo que hicieron Darkness e Iris habia sido un simple sueño, pero para ambas aquello estaba bastante borroso y decidieron que no era un tema del cual hablar.

Tras pasar la noche Iris había vuelto a su cuerpo de siempre y regreso con Claire, la cual estaba preocupada por ella desde que desapareció el día anterior.

Amenazó a Satou Kazuma pensando en que le había puesto un dedo encima por su cuerpo, pero la única persona que se sentía culpable era Darkness, ya que puede que ella haya sido quien jugará con él cuerpo adulto de Iris.

//Interludio: Dust es el responsable?

Si recordarán al inicio de esta historia, un evento especial de las sucubos solo si era por grupo.

Dust no tenía un grupo ya que Kazuma lo había "rechazado" en acompañarlo, pero aún así intento ir al local de las sucubos.

–Oh, la promoción es para dos aventureros, pero no necesariamente deben estar los dos presentes, así que, solo coloque el nombre y dirección de su compañero y nosotros haremos nuestra magia.

Dijo una de las sucubos que trabajan en el bar.

–Nuestra habilidad nueva crea un círculo mágico rodeando el lugar en el que duermen, provocando que todos los que estén dentro tengan sueños eroticos..., pero hay un pequeño inconveniente, si alguien está despierto entonces comenzará a actuar de manera pervertida.

Fue lo último que dijeron antes de que Dust, el cual no presto atención en lo absoluto, firmara el contrato con la mansion de Kazuma como segundo objetivo.

Era probable que 7 personas tuvieran un simple sueño, o sólo 5 mientras que dos sufrieron del efecto secundario, pero aquellos sueños son una historia para otro momento.

Continuara....