el idiota de la espada
Tal vez hayan escuchado de mi con anterioridad, después de todo soy considerado como el aventurero más fuerte que haya salido del pueblo de principiantes Axel, claro que todo mi éxito se lo agradezco a la hermosa diosa que me dio la oportunidad de poder viajar a este maravilloso mundo.
Pará mi mala suerte, esta diosa se encuentra atrapada en las garras de un horrible hombre conocido como Satou Kazuma.
Se trata de un maldito degenerado que es detestado por todas las chicas del gremio, llamándolo Bazuma ya que no es más que una basura de persona.
No podía dejar que una persona tan horrible se quede con mi diosa, por lo que tenia un plan para salvarla y llevarla a un lugar seguro en el que aquel hombre no pueda encontrarla.
Aunque el problema es que mi diosa parece estar hipnotizada de alguna forma para no alejarse de aquel sujeto, por lo que la única forma de salvarla es hacerlo sin que ella se diera cuenta... sé que suena como si estuviera por raptarla, pero...... bien, debo de raptarla para salvarla.
A pesar de que estaba por cometer una acción tan vulgar, lo hago para que mi diosa esté libre... y tal vez para que pueda acompañarme en la aventura para la que fui enviado a este lugar.
Era de noche en estos momentos, por lo que todos en aquella horrible mansión deberían de estar dormidos en este mismo instante.
Me dirigí a aquel lugar de forma sigilosa, logrando entrar a esta sin mucha dificultad, despues de todo esta no era la primera vez que intentaba entrar a este lugar, pero por lo usual siempre me encontraba a una chica ladrona que siempre arruinaba mis planes, pero esta vez parece que ella no se encuentra en este lugar.
Me dirigí al cuarto de mi diosa y entre a este sin hacer mucho ruido, y ahí fue cuando finalmente la vi, tan hermosa y maravillosa como siempre, incluso mientras duerme es perfecto, podría quedarmele viendo por horas, pero ahora tenía que cumplir mi misión y llevármela de aquí.
Tome las cobijas qué la cubrían y las retire suavemente hasta que mi diosa estaba al descubierta y lista para que la rescatara, y entonces...
(Justo en ese momento el hechizo se las sucubos entro en efecto, afectando a todas las personas que estaban dentro de la mansión. Este hechizo te afectaba de distinto modo, dependiendo de si estabas despierto o dormido, por lo usual, cuando uno está dormido simplemente tiene sueños húmedos como ya es de costumbre..., pero cuando uno está despierto, el lívido de esa persona se vuelve tan grande que sin importar quien esté enfrente suyo, tener sexo es algo obligatorio.
Por esa misma razón es que el "héroe de la espada" en estos mismos momentos se encontraba en un trance, lo que le hacía imposible continuar narrando esta historia, por lo que yo seré su narrador.)
En aquellos momentos el sujeto de la espada se encontraba mirando a Aqua intensamente mientras su lívido subía cada vez con más fuerza.
Una línea de baba recorría su barbilla mientras veía la hermosa figura de la chica enfrente de él, con el más grande descaro comenzó a oler el cabello de esta, y a pesar de que olía a alcohol y otros aromas algo fuertes, al chico no pareció importarle en lo absoluto, en su lugar parecía estarlo disfrutando como un completo fetichista.
Su concentración fue interrumpida cuando los ronquidos de la chica se volvieron estruendosos y pesados, provocando que la boca de la chica estuviera completamente abierta, y llamando completamente la atención del chico que no paraba de verla con cierto interes.
Comenzó por meter sus dedos en la boca de la chica, ella comenzó a lamerlos como si fueran una paleta al principio, pero poco a poco su boca comenzó a moverse de una forma cada vez más erotica, llenando completamente los dedos del chico con una dulce y erotica capa de saliva.
El chico no pensó ni un segúndo para decidir sacar su pene y colocarlo dentro de la boca de la chica.
Al igual que sus dedos, su pene fue lamido con entusiasmo, provocando un asqueroso sonido dentro de la boca de la chica mientras el chico movía sus caderas de forma constante, violando la boca de la chica con una intensidad que hacía a la chica ahogarse en constantes ocasiones, pero esto no parecía molestar a la somnolienta chica, en su lugar parecía disfrutarlo.
La sensación de que la diosa qué tanto admiraba estuviera chupando su pene era tal que no pudo contenerse, con un fuerte empujón de sus caderas metió su pene hasta el fondo de la garganta de Aqua, y con intensidad se corrió dentro de su boca.
Sin sacarla el chico comenzó a respirar de forma agitada, aliviado tras la intensa sensación que recorrió su cuerpo no pudo hacer nada por varios segundos.
Cuando finalmente pudo moverse fue para alejar su miembro de la boca de la chica, pero solo era para ver como un lago de esperma salía de la boca de Aqua.
Él miró intensamente como su esperma caía por la boca de la chica, pero esta comenzó a beberlo como si de su licor favorito se tratase.
-Ghhuu, uhhhh, ahhh. N-no, no puedo más chicos -decía la chica entre sueños.
Se movió ligeramente sobre su cama, cambiando su pose dejando expuesto su abdomen y ligeramente su pecho.
El chico hipnotizado miró aquella área con interés, comenzó a frotar el abdomen de Aqua y comenzó a subir suavemente hasta poder tocar uno de los pechos de Aqua por debajo de su blusa.
La suavidad de estos era tal que el chico parecía haberse vuelto adicto a los pechos de la chica, los cuales el comenzó a apretarlos con un poco más de agresividad, pero comenzó a desesperarse por la dificultad que le costaba jugar con los pechos de la chica por culpa de su pijama.
Con cierto enojo rompió la camisa de la pijama, dejando completamente expuestos los pechos de Aqua. Eran bastante grandes y sus pezones eran de un hermoso color rosado, pero esto no parecía importarle al chico en lo absoluto, ya que cubrió aquellos lindos pechos con sus manos y los apretó de forma insesante, sin contener sus deseos en lo absoluto.
Le encantaba ver como la chica se retorcía de placer cada vez que este parecía jugar con cierto lugar en concreto, por lo que comenzó a pellizcar los pezones de la chica, estirandolos de distintas formas y con gran fuerza, provocando que los gemidos de Aqua fueran intensos e insesantes, incluso cuando ella continuaba roncando.
El chico noto nuevamente la reacción que el cuerpo de la chica había provocado en él, una gran erección incluso mayor que la anterior.
Su vista se intercalada entre sus pene y los pechos de la chica, y esto se repitió un par de veces hasta que finalmente tomo acción.
Puso su pene entre los pechos de Aqua y apretó ambos para envolver su pene con ellos, movió sus caderas de manera agresiva violando ahora los pechos de Aqua.
Eran una sensación tan suave y excitante que provocaba un fuerte estremecer en el cuerpo del chico. Le fascinaba ver como la punta de su pene se asomaba por encima de los pechos de Aqua y como este estaba cerca de la boca de la misma.
Si este fuera el momento perfecto entonces Aqua estaría besando el pene del chico siempre que este saliera a saludarla, pero para su mala suerte el sueño de la chica era tan profundo que lo único que parecía poder hacer ahora era roncar.
O al menos es lo que creía, puesto que Aqua comenzó a lamer el pene del chico siempre que este estaba cerca de su boca, haciéndolo con cierta inercia qué parecía ser un superpoder de Aqua, uno bastante inútil al menos de que sea en una situación como esta.
Esto hizo que el chico estuviera contento, por lo que sin más reparo, volvió a correrse, llenando la boca y el rostro de la chica en su esperma.
El chico se encontraba agotado después de haberse venido dos veces, tan solo miraba al techo mientras se recostaba sobre la cama, pero en su mente tan solo podía ver cosas eroticas, sexo, los pechos de Aqua y al final se imagino la vagina de la chica y lo bien que se sentiría el meter su pene en ella.
Con esa idea en mente vio como una nueva erección se alzó, dándole la energía para levantarse y deshacerse del resto de la pijama de Aqua, dejándola completamente desnuda.
Miró detenidamente la entrepierna de Aqua, era sumamente llamativa, contando con una ligera capa de bello púbico que por suerte no cubría ninguna parte de la vagina de la chica.
La abrió con sus dedos y noto que estaba sumamente húmeda y desprendia un erotico aroma que inundaba la nariz del chico. Sentía la necesidad de lamer esa suculenta vagina, y fue justo lo que hizo.
Consu lengua jugaba con la vagina de Aqua, empezando por los suaves y rosados labios y subiendo hasta el erecto clitoris de la chica. Esto provocaba que el cuerpo entero de la chica se estremeciera mientras sentía como una corriente eléctrica recorría su cuerpo.
Podía despertar en cualquier momento por lo bien que se sentía en esos momentos, pero parecía que el hechizo de las sucubos realmente la había atrapado, obligandola a estar dentro de sus sueños hasta que este termine.
El chico no duró mucho lamiendo la vagina de la chica, pues un agujero llamó más su atención. El chico degusto el ano de la chica con un entusiasmo algo preocupante.
Metiendo su lengua dentro de este, para su suerte la chica había tomado un baño antes de dormir, pero seguramente no le hubiera importado si este no fuera el caso.
Lleno con su saliva aquella agujero, y cuando sintió que estaba listo dejo de lamerlo y se levantó del suelo.
Tomo las piernas de Aqua y comenzó a usarlas como pendientes, mientras lentamente comenzaba a penetrar el ano de la diosa.
Lentamente entró dentro de ella, empujando cada vez con más fuerza hasta que ya no pudo más. Lo apretado que estaba este era algo inimaginable, no pudo contenerse y comenzó a violar el culo de la chica sin compasión, cosa que la chica parecía disfrutar y sufrir al mismo tiempo.
Las paredes del culo de la chica le apretaban con fuerza, después de todo no querían dejar escapar el pene del chico sin importar que.
Los movimientos de las caderas del chico se volvía cada vez más salvajes, en un intento desesperado por tomar el control de la violación, pero parecía que la chica lo controlaba a él con su apretado culo qué no paraba se absorberlo dentro de ella.
El chico estaba sumamente sensible por las dos veces que ya había eyaculado, por lo que las sensaciones que rodeaban a su pene eran tan fuertes que no pudo evitar venirse una tercera vez dentro del culo de Aqua, llenándola completamente con cierta alegría.
Después de esa vez ya no tuvo las energías de pararse y simplemente se quedó ahí acostado aún dentro de la chica, quedándose dormido profundamente.
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El día siguiente llegó pronto, y la luz del sol golpeó la ventana de Aqua, entrando en su habitación hasta llegar a los ojos de la chica que había tenido un extraño, pero agradable sueño anoche.
Comenzó a levantarse lentamente con cierta pesadez, después de todo sentía una cierta incomodidad en casi todo su cuerpo, en especial su rostro y su trasero.
-Ughh, me siento horrible por alguna razón.
Dijo mientras trataba de abrir sus pesados ojos, los cuales le costaban bastante trabajo de abrirlos, como si estos estuvieran pegados.
-Ughh, ¿me habrá caído algo pegajoso en el rostro? -dijo mientras se limpia a su rostro con un pedazo de tela qué encontró sobre su cama.
Tras unos minutos su rostro estaba parcialmente limpio y finalmente podía abrir sus ojos, y al hacerlo se llevó diversas horribles sorpresas.
La primera era que estaba completamente desnuda, y el pedazo de tela con el que se había limpiado era parte de su pijama qué ahora estaba destrozada. La segunda era que estaba cubierta por un extraño líquido blando, incluido su rostro, pecho y cabello, este tenía un extraño aroma bastante asqueroso similar a calamar.
La tercera sorpresa fue la más horrible de todas, puesto que al lado de Aqua había un chico con su pene de fuera y cubierto del mismo líquido que tenía en su cabello, aterrorizada miró a aquel chico y reviso el último lugar en el que sentía inconformidad.
Toco su trasero con sus manos qué no paraban de temblar, tan solo para llevarse la horrible sorpresa de que aquel mismo liquido blanco estaba goteando de su ano, llevadola a la única conclusión posible.
-¿Hmm, en donde estoy? No recuerdo nada de lo que sucedió anoche -dijo el chico mientras despertaba, sin darse cuenta del golpe mortal que se acercaba a su rostro.
-¡¡God Blow!! -grito Aqua para lanzar un fuerte golpe contra el rostro del chico, provocando que este saliera volando por el techo y cayendo quien sabe donde.
Un poco asustada, Megumin se levantó de su cama y corrió para ver que le había sucedido a Aqua, tan solo para encontrarla desnuda sobre su cama mientras parecía decir algo.
-Purificar, purificar, purificar -repitió esa palabra una y otra vez, tratando de purificarse de lo sucedido anoche.
Megumin al ver aquella extraña escena, tan solo cerró la puerta lentamente y volvió a su habitación, después de todo, aun tenía que entender aquel extraño sueño que había tenido anoche..., pero eso es una historia para otro día.
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