XXX

La mañana había llegado y las cálidas manos del sol me tocaban el rostro, despertándome. Al asomarme por la ventana una carreta esperaba afuera; junto a ella, Wiz y otra platicaban animadamente.

- ¡ah!

Exclamó Wiz al verme y luego me señalo con su dedo índice. Su acompañante, asintió y luego me saludo agitando su mano.

"Wiz, es de mala educación señalar a la gente."

Aún somnoliento, respondí de la misma manera y me aliste para el día de hoy.

- Investigamos las cuevas, matamos a uno que otro monstruo y tras eso puedo regresar a Axel.

Bajé a la entrada y pude admirar mejor a la belleza que estaba con Wiz: una chica de dulces facciones, cabello oscuro y unos lindos ojos azul celeste; por la ropa no podía decir mucho, era sencilla, mas realzaba sus atributos y la hacia muy bonita.

- Nos vemos, Wiz

Justo cuando me iba a presentar, se fue.

- ¿Quién era ella?

- Es una amiga mía, cuando se enteró que vine, pasó a saludar.

- Bueno, ya me tengo que ir. Nos vemos.

- Iré yendo a Axel, nos vemos en mi tienda.

- Claro.

Empecé a trotar tras despedirme. 

Cercano a la plaza note un creciente grupo que rodeaba algo aterrorizada. Al acercarme vi lo que causaba el alboroto:

Casi todos los soldados de pueblo habían sido asesinados y el que parecía ser el líder fue empalado con las banderas del pueblo. Los pocos aventureros que estaban ahí intentaron cerrar la zona, pero el daño ya estaba hecho; los que lo vieron estaban aterrados por lo sucedido y clamaban por hacer algo, incluso los feligreses que salian de la capilla empezaron a rezar al presenciar la carnicería.

- ¿Quiénes podrían hacer esto?

- De seguro que fueron esas bestias. ¡Ellos causaron esto!

- No digas idioteces, los kobolds no tendrían la capacidad de hacer-

- ¡Es- Esperen!

La discusión fue interrumpida cuando uno de los aventureros que bajando el cadáver del general saco algo de su pecho.

"¿Pero que?..."

- ¡Estamos perdidos!

Grito el primero al leer la que parecía ser una tablilla cubierta de sangre.

- Dame eso... –lee nervioso– ¿Por que nos persigue la desgracia?

Calló de rodillas el segundo lamentándose.

- No puede ser tan mal... -al leer lo escrito ahí lo lanzó asustado.- ¡esto no puede ser!

"¿Acaso será algo relacionado a mi misión?"

*tack! tack! tack!*

Mire al suelo y ahí se encontraba la tablilla que decía:

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Este es un gran regalo de parte de nosotros, los lagartos de la niebla y de nuestro señor, Beldia, que les manda saludos para que se preparen a su pronta llegada.

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"¿Quien es ese tal Beldia? Talvez sea un criminal buscado."

- Debemos llamar a los caballeros. Envíen una carta a los caballeros.

- O tal vez a ese hombre –dijo un hombre uniformado como los trabajadores del gremio.

- Si, si. Llamen al héroe, él nos salvará.

- Pero hasta su llegada pasarían varios días.

 - Con todas las demoras vendría en un día o dos. -Afirmó otro.

- Esperen un momento! 

Un hombre ya mayor vociferó con un rostro preocupado. Al verlo, los rostros pueblerinos se iluminaron y le dieron paso a la escena.

'¡Es el alcalde!' fue la impresión que recibí de uno de los que estaban a mi costado.

"Con que él es el alcalde, si que es un estereotipo" 

El caballero, como la imagen de un dirigente promedio, era prácticamente idéntico al viejo del monopoly. con un sombrero de copa y traje negro completo, incluso llevaba consigo un bastón.

- Les pido un momento de calma, todo se va a solucionar.

Tras esas palabras en un momento tan incierto solo vino un mar de quejas; mas el alcalde supo calmarlos y mandarlos a casa. los más escépticos intentaron protestar y fueron mandados con la misma diplomacia a sus labores.

- Aunque están asustado tienen razón en algo: llamen al héroe a investigar esto lo más pronto posible.

Fue lo ultimo que escuche antes de ingresar en la alcaldía.

...

- ¿Usted tomo esta misión?

- Asi es.

El rostro de la única encargada gremial me miro dubitatiba y dudo mucho mirando mi tarjeta de aventurero y la solicitud.

*¡chisporroteo! ¡Chisporroteo!* 

Aunque naturalmente soy muy paciente, habia un problema con esta vez...

*¡Chisporroteo!*

Cada segundo que paso cerca de ella me causa un gran dolor por mi marca que me quema enérgicamente.

- ¿Se encuentra bien? 

- Si, lo estoy. Deme la información sobre la cuevas por favor.

- Esta bien... -Me extendió un mapa que tenia preparado.

El ambiente se sentía muy pesado y me costaba respirar. Ya me alejaba cuando escuche su voz de nuevo.

- Por lo que veo en su tarjeta de aventurero, no tienen ninguna habilidad aprendida y tiene bastantes puntos de habilidad. Le recomiendo aprender una o dos habilidades de los aventureros que encuentre, además de comprar una armadura decente.

- Eso es ofensivo.

- ¿tengo razón?

- Pero tienes razón.

Después de eso salí de su perímetro y sentí como el dolor se apagaba. Con una gran bocanada de aire tomé más calmado el buscar algunas habilidades. Con mis 8 puntos tenia mucha oportunidades para conseguir algo bueno.

- Disculpe que la moleste.

- Uh?... -mi primer objetivo, una maga de gran tamaño se volteo hacia mi.- ¿Si?

Su respuesta seca y sus proporciones eran de otro mundo, a eso se debía agregar sus prendas de bruja que tenían colores entre negro y púrpura en la capa y un sombrero de bruja con una hebilla en ella.

- U- um... verá... -mi nerviosismo fue causado por su imponente tamaño y sus ojos profundos que me recordaban a un búho.- ¿podría enseñar una habilidad?

 -Oh, claro! - su actitud dio un giro de 180 grados en un segundo con una amable sonrisa.

Tras unas preguntas estaba lista para enseñarme.

- Como no tienes mucho nivel mágico esto debería estar bien.

Extendió su varita de cristal.

- Presta atención. <Create Earth>... 

Al decir eso un afluente de tierra surgió de la punta de su varita.

- <Create Water>... 

Luego un chorro de agua salió cayendo a unos metros de nosotros

- <Wind Breath>... 

Un viento fresco fue presente por un breve tiempo.

- <Tinder>...

Y finalmente una pequeña llama ardía por unos instantes

- Eso es impresionante!

No pude evitar demostrar mi sentir al ver por primera vez la magia. Sin duda alguna algo de otro mundo.

- Ahora... <Freeze>... 

Un viento frío buscó el charco creado anteriormente y lo congelo al momento en el que se pronunciaron estas palabras.

- Ahora mira tu tarjeta y apréndelas apretando sobre ellas.

Saque lo dicho y note que debajo de mis medidas había dos nuevos escritos con un brillo místico, sin poder resistirme seleccione la opción de magias básicas tomando un punto. Sentí en un instante un gran recorrido de energía que cubrió todo mi cuerpo.

———————————————————

Se ha forzado el enlace a la habilidad principal.

1/3 estímulos para el siguiente paso.

———————————————————

Un mensaje flotante apareció frente a mí.

"¿Siguiente paso? ¿Al aprender una magia se activo mi habilidad?"

Para comprobar mi teoría, seleccione la habilidad Freeze y sentí otra descarga.

———————————————————

Se ha forzado nuevamente el enlace a la habilidad principal, se recomienda precaución.

2/3 estímulos para el siguiente paso.

———————————————————

"¿Que pasará si completo los requisitos?"

- Ya lo tienes, si es así sobre mi pago...

- ¿Me enseñas otra habilidad más?

- Otra más... veamos. -Tomo su barbilla, pensativa.-

...        Puedo enseñarte una que aprendí en la capital, sígueme.

Curioso la acompañe hasta donde se encontraba un barbudo de casco con cuernos que tomaba su cerveza en una mesa al aire libre.

- Mira esto atento, ¿Si? -Infantilmente me susurró, preparando algo entre manos.

Asentí, aún mas intrigado.

La mujer se posiciono detrás del antes mencionado y este, notándola, gruñó.

- Celia, si quieres vivir no te atrev- AAARGHH!!!!!

El enano convulsionó cuando la maga coloco su varita en su cuello y pronuncio Electrify.

- Esto, es la habilidad <Electrify body>.

Tras sus palabras el pobre convulsionó mas fuerte como en una caricatura. Al dejarlo quedo todo chamuscado.

-Oh... ¡eso es genial!

- No es tan genial para mi... Maldita Celia, te hare pagar.

- Tra- tranquilo Nisil.

"¡La magia es asombrosa!"

Mire mi tarjeta y seleccioné la habilidad. El electrizante volvió aún mas fuerte, siendo casi doloroso.

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El enlace ha sido conectado brevemente, el sistema celestial #00137 no se hace responsable de los cambios siguientes. El princ--- ha pu---- su mir--- en t- 02:29:54

3/3 estímulos para el siguiente paso.  

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-Nisil, aleja el mazo ¡Por favor!

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¡Felicidades! Has conseguido la clave de tu aprendizaje Nvl. 1 - Aprendizajes mágicos

Tu alma palpita de emoción ante tu latente poder mágico.

Sigue buscando 2 claves más.

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"El sistema celestial... debo conseguir las demás claves, así tendré nuevas respuestas."

- Muchas gracias. Nos vemos.

Agradecí rápidamente a Celia y a Nisil por su ayuda. (El último estaba moliendo a golpes a Celia mientras Kazuma se iba.)

XXX

- Que pesado... No debí dejarme convencer por esa linda señora.

Refunfuñaba por la compra que había hecho en la herrería de camino al bosque. Mi objetivo era una segunda espada, pero termine por comprar una alabarda.

"Ni siquiera se usarla correctamente."

Sin más solución que continuar leí el mapa que me indicaba que la cueva estaba a unos 30 metros al norte. 

"Estoy bastante cerca."

*trago, trago*

Tome la poción y un aura morada se hubo explosado de mi, que parecía contener mi olor. Me sentí feliz de ser indetectable, pero al tomarla llegaron unas fuertes náuseas que no pasaban.

El camino era largo y tendido, pero me sentía algo seguro con mi Kapesh en mano.

A los 5 minutos llegué y no parecía haber nada, era una cueva ordinaria.

"Sería bueno acercarme, aunque es mejor ir despacio."

El viento tomaba mis mechones de cabello y los agitaba junto al follaje y los densos arboles que me rodeaban. El sonido que estos producían lo hacia perfecto para entrar sin ser escuchado, asi que aseguré mi chaleco de cuero e ingrese presuroso para no ver mucho. Era una cueva muy profunda y algo oscura.

Aunque mi instinto me advertía que me detuviera, la marca de esclavitud que estaba en mi pecho no me dejaba regresar.

Seguí el camino, solo guiándome por las paredes. Estaba en completa oscuridad y no podría advertir un ataque enemigo; pero si encendía una luz con Tinder revelaría mi posición.

"Maldito Liam, me mandaste a mi muerte."

Aun con todos los deseos de salir por patas, mis piernas se negaban a obedecerme, cegadas por el miedo a mi marca. Seguí descendiendo en una espiral

En cierto momento divise una luz y debajo de ella dos lagartos humanoides que conversaban. grandes, con armaduras de cuero y grandes lanzas. 

- ¿Cuánto tiempo más van a tardar?

Dijo uno de ellos. Junto a él, una gran cesta metálica yacía estática. 

- No se cuanto más, pero pronto traerán comida para estos engendros.

En el momento que dijo el otro eso la cesta se agito, y con ella otros gruñidos también sonaron, al agudizar mi vista note que no había dos o tres más, sino doce cestas que eran del tamaño de un camarote cada una.

Entonces mis piernas pudieron mas que la maldición, y  empecé a retroceder por la posibilidad de morir, pero...

*tac! tac! tac!*

Justo en el momento menos oportuno, mi arma de respaldo calló al suelo e hizo eco de mi posición.

"oh carajo!"

- Eh? ¿Qué fue eso?

El primer lagarto se levanto alzando la linterna.

- Eso fue un arma, parece que tenemos un intruso aquí.

El segundo, armado, caminó con la lanza hacia mí

"¡Estoy jodido, jodido!"

Tomando mi arma corrí fuera de la cueva,

- Ey! ¡Ven aquí cobarde!

- ¡Te necesitamos como alimento de kobold, no corras!

Viendo la luz aumente mi velocidad, pero solo para encontrarme afuera con varios lagartos con carne cargando. Entre ellos, uno con armadura de placas y un tridente completo.

"estoy acorralado."

Sin otra opción tire la alabarda por su peso y desenvaine mi Khopesh para pelear.

- Parece que los humanos ya están moviendo a sus peones, así que les daremos un mensaje con tu cadáver.

Tras decir eso el lagarto jefe fue directo con su tridente hacia mi pecho, así que me hice a un lado con un salto, dejando que el lagarto pasara a mi costado.

/Idiota/

"Qu-"

En un instante recibí el golpe de la cola del reptil en el pecho, cosa que me mando hacia atrás.

*Cof Cof!*

Aquel golpe me dejo con poco aire.

Los lagartos que llevaban la comida parecían divertidos, así que se sentaron, observando la pelea.

- Miren muchachos, así deben matar a un humano.

El líder, instruyo a los demás lagartos como un maestro de ciencia a sus alumnos al diseccionar a una rana.

- Fijense bien!

 "Que cabron!"

En el momento en el que me dió la espalda corrí hacia él, con la intención de darle un tajo vertical. 

- Ahí!

Pero mi objetivo se hizo a un lado, haciendo mi corte inútil.

- Toma!

A eso lo acompaño un golpe con la parte contraria del tridente en mi cara y estomago. No quería matarme, era su juguete. 

*Plic, plic*

Tome mi nariz rota que goteo el rojo liquido al suelo. En ese instante escuche las celdas de la cueva agitarse, los kobolds estaban hambrientos.

/No te detraigas imbécil/

Esa voz de nuevo resonó, pero lo acompaño un corte en mi pecho que me trajo a la realidad: El tridente me corto la pechera y me mando al suelo.

- No estés tan ansioso de que te coman los diablillos. céntrate en la pelea.

'Jajaja que idiota' 'espero que los humanos no sean como él, da pena'

- Así es como deben dejar a los humanos, son bandos asi que seran faciles si practican lo suficiente

"malditos lagartos."

/Cálmate y ataca con inteligencia/

Esa voz me aconsejo.

/No me preguntes quien soy, solo acabalo y escapa/

 "Bien, se que me da la espalda para que le ataque de nuevo y me mate de forma faci, asi que..."

- Create Earth~ -Susurré y vertí la tierra en la botella.

- Ah!

/Idio- Ah, eso esta bien/

Lance la botella de poción y el lagarto la rompió para bloquearla.

- Ay! Mis ojos!

Pero eso hizo que los vidrios y la tierra cayeran en sus ojos cegándolo.

-toma esto! Electrify Body

Mi Khopesh electrificada fue y conecto con el pecho del lagarto entrado bastante en él.

- Aargh!!

- Capitán!

La preocupación de los demás reptiles fue evidente.

- Agr-ARR!!

- Toma esto caimán sobredesarrollado.

Profundice a Khopesh y entró casi hasta la empuñadura. La Herida sangraba un rojo amargo y a su vez expiaba un vapor producto de la electricidad.

Pronto un decaimiento me embargó, era mi energía mágica que se agotaba cada vez más.

Retira mi cuchilla, dando a mi oponente un descanso, cayendo de rodillas delante mío.

Alce mi cuchilla y la deje caer para acabarlo.

- No jefe!

- Agh!

*¡Crash!*

El lagarto había roto mi arma con su brazo izquierdo.

/Esquivalo!/

La voz me advirtió, pero era demasiado lento para responder. Dio un giro y me golpeo con la cola tan fuerte que me mando contra un arbol.

"Me ha roto algo... creo que mi costilla."

Palpé sobre mi pecho sin protección y encontré sangre y blanda carne. No sentía mis costillas.

"¿Acaso me las rompió todas?"

Al verlo, se acercaba a mí a paso tranquilo, con el tridente listo para encargarme.

- Ya veo por qué mi señor me advirtió sobre ustedes, nunca caen dos veces en el mismo truco.

Estaba indefenso y muy debil. Mi otra arma estaba demasiado lejos para tomarla y no podría correr con el cuerpo así.

- Para cuando llegues con la diosa plana, quiero que le des un mensaje: Huck Ni'ch le manda saludos.

Alzó su tridente para atravesarme con uno de sus ojos sangrando y una sonrisa como la que tenia Liam cuando me mando aqui. 

"Estoy por morir y al que recuerdo es a ese grandísimo hijo de p-" Crerre mis ojos esperando mi muerte.

- Aah- Guh!!

- Ice Broken Hit!

"¿Que esta pasando?"

Abrí los ojos y vi a mi agresor lejos mío, con un conjunto inmenso de cristales de hielo clavados en su pecho. Sus entradas estaban congeladas y los cristales se tiñeron con el carmesí de la sangre.  

A mi costado una persona encapuchada había llegado para salvarme.

XXX

No se pajeen...

Hidrátense

Avance:

Nuestro protagonista  al borde de la muerte pensó en Liam, el malo malosimo, que lo había esclavizado.

Pero...

- Achu!

¿Que estaba haciendo la rata en esos momento?

- Salud.

- Gracias darkness.

XXX

Plus:

El aire cálido tocaba el rostro del joven héroe que esperaba en la ventana.

‐ Que calor más horrible!

Opinó el desdichado por sus últimos días sin aventura:

- Ser alguien tan poderoso lo hace todo aburrido; además, el trato aquí por los locos de Axis por ser caballero de Eris lo hace peor. ¿Quién fue el tonto de mandarme aquí a esperar órdenes?

- Fue la princesa, Hiroshi-Sama.

Justo tras terminas su monologo había llegado con él una encapuchada, que traía noticias.

- Ya te habías tardado ¿Qué es esta vez?

- Un pueblo en la región de Lutis ha avistado señales de un general demoníaco. Beldia, para ser más exactos

El héroe llamado Hiroshi se encontraba extasiado, por fin podría acabar con uno de los grandes generales.

- Me pondré en camino entonces.

Sus guantes resplandecieron mientras empuñaba su espada.

XXX

A los primeros 5 los nombro en la siguiente parte.

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