Con un rápido movimiento, todo el césped fue levantado por una pequeña ráfaga de aire.

Kazuma miro esto con una leve sonrisa, mirando como Yunyun intentaba darle una patada directamente en el rostro.

— Recuerda, si el oponente te dobla en altura jamás ataques al rostro, concéntrate en su zona inferior.

— ¡Entendido!

Yunyun comenzó a concentrarse en la zona baja de Kazuma, dando ataques que simulaban o eran derivados de la capoeira.

Aunque esto no era nada para la velocidad de Kazuma, quien solo daba algunos pasos a los lados para evitar cualquier clase de ataque.

— Prepárate.

—... ¡!

Kazuma se acercó a Yunyun de golpe, sujetando con fuerza su cabeza para luego estamparla contra el suelo.

Aunque ella finalmente logro reaccionar a tiempo, activando al "Autoridad del Gobernante" para así lograr cambiar su reacción física con la misma materia, logrando traspasar el suelo.

De un momento a otro Yunyun había desaparecido por completo, hundiéndose en la tierra como si esta fuera un gran e inmenso mar.

Yunyun pensaba en una forma de intentar pasar la defensa de Kazuma, buscando intentar usar alguna clase de cebo.

'Tal vez funcione confundir su radar.'

Yunyun comenzó a crear unas esferas de mana puro, las cuales tenían tanto mana como para ser pasado como un archimago cada uno.

El plan era enviarlos para que Kazuma se confundiera en su presencia, usando esa fracción de segundo para sorprenderlo con un ataque inesperado.

— Esto funcionara.

— ¿Qué funcionara?

— ... ¡!

Yunyun sintió como Kazuma estaba detrás suyo, lanzando los orbes de mana por instinto. Aunque estas solo fueron esquivadas para posteriormente ser deshechas por Kazuma.

Para buscar defenderse y ganar distancia, Yunyun empezó a lanzar una gran cantidad de orbes en dirección de Kazuma, pero este solo esquivaba y deshacía los orbes con solo el roce con su ser.

Kazuma ya no necesitaba tener la "Autoridad del Gobernante" activo para usar una parte de su autoridad, cambiar las leyes y las reglas de la materia ya se había vuelto cosa de todos los días.

Pero a diferencia suya, Yunyun apenas estaba acostumbrándose al uso de la misma, controlándolo con más facilidad gracias a la guía de Kazuma.

Yunyun se empezó a sentir aprisionada por la gran superioridad entre las autoridades, optando para retomar las leyes de la materia alrededor de Kazuma para que este fue aplastado.

— Te hubiera servido contra alguien que dependiente.

— ¿Hmm?

Kazuma apretó sus puños, tomando con fuerza la tierra para así provocar una dispersión tectónica en la misma. Aunque fácilmente podía sobreponerse ante la autoridad de Yunyun, este decidió hacer esto como una especie de enseñanza.

Yunyun mantuvo su mente fría, optando por alejarse para volver a formular un plan.

— Intenta ser más suave conmigo.

Con un puchero, Yunyun abrió una grieta para así escapar de ese lugar, todo ante la mirada divertida de Kazuma.

— Bien, si es así como quieres jugar... entonces juguemos.

Kazuma empezó a rodearse en un manto de oscuridad para ir detrás del rastro de la autoridad de Yunyun, viajando entre sombras para llegar a su destino.

***

Yunyun salió de la grieta para estar en un desierto con varias montañas de rocas apiladas una cerca de la otra.

'¡Debo ser rápida!'

Yunyun uso su "Autoridad del Gobernante" para apilar las rocas y empezar a hacerlas levitar alrededor suyo.

Era la imagen de un tornado de tierra y roca, el cual estaba arrasando con todo alrededor suyo.

'¡Aquí viene!'

Yunyun logro predecir la aparición de Kazuma, lanzando todas las rocas hacia su dirección para crear una especie de tumba con forma de meteoro.

— "Cadenas Mágicas".

Una gran cantidad de cadenas oscuras y moradas rodearon toda la prisión de rocas, generando una especie de sellado interno y externo en la misma.

Pero de entre toda esa prisión de roca, un sonido similar a un derrumbo o terremoto comenzó a asolar toda la zona.

Yunyun sabía que Kazuma solo estaba flexionando los músculos de su cuerpo, así que procedió a incrementar el peso y la presión de las rocas junto al mana con la "Autoridad del Gobernante".

— Ñem, ñem, ñem, ñem.

Con mucho esfuerzo incluso la gravedad misma comenzó a ser alterada para mantener el sello que había puesto encima de Kazuma, para así lograr frenar su avance.

— Al menos finge que te retuve un poco.

Yunyun sintió como sus brazos ya no fueron capaces de seguir elevados, pues estaba completamente cansada mentalmente por siquiera intentar retener la fuerza abrumadora que poseía Kazuma.

La prisión con forma de meteoro exploto en cientos de fragmentos de tierra, mientras que al mismo tiempo la magia alrededor terminaba por volverse solo polvo de mana en el aire.

Kazuma empezó a descender hacia el suelo, pues él había acordado no usar nada más que solo fuerza física.

Pero incluso solo usando fuerza física, esta estaba en un nivel tan demoledor que incluso podía sacudir el mundo solo con sus golpes. Su misma masa física en presión propia podía generar un campo gravitacional, siendo la cúspide de la fuerza física sin usar mana o alguna otra habilidad especial.

Pero Yunyun no sintió miedo, pues Kazuma no estaba teniendo intenciones de matar, incluso podría decirse que él se estaba divirtiendo con lo que a sus palabras era: "Jugar con su novia".

— ¡Toma esto!

Yunyun genero una gran cantidad de diferentes circulos magicos, iniciando una lluvia de cientos o incluso miles de hechizos al mismo tiempo.

Todo esto era posible ya que gracias a su resiente cercanía intima con Kazuma, sus reservas habían sido aumentadas de manera exponencial.

Kazuma lo había hecho apropósito, pues quería evitar que Yunyun no pudiese protegerse a sí misma, error que no volvería a cometer.

— Esto ira con todo mi amor.

Kazuma apretó su puño estando por encima de Yunyun, apareciendo luego de dar un gran salto con el mínimo rose con la tierra.

— Aprieta los dientes.

— ¡No, espera un...!

No hubo forma de evitarlo, pues Kazuma solo conecto sin medida un puñete con todas sus fuerzas directamente en el rostro de Yunyun.

Ella fue enviada al suelo por el golpe, causando un estruendo por el choque en contra de la tierra, levantando así una cortina de polvo.

Luego de un par de segundos, Kazuma cayo al suelo para mantenerse de pie delante del lugar donde había caído Yunyun.

Ella salió luego de unos segundos, sujetando su rostro por el leve dolor que le había causado el golpe.

— ¿No puedes ser más amable conmigo?

— Sin sacrificio no hay gloria.

— ¿¡Que gloria!?

Yunyun se levantó mientras aun sentía el dolor por el golpe, haciendo que Kazuma sintiera claramente su enojo.

Kazuma se asusto al pensar que tal ves lanzar su novia con un golpe a una caída de 80 metros no había sido una buena idea, así que opto por una respuesta segura.

— Hagamos algo esta noche, tu elige.

Yunyun puso su atención en Kazuma, eso era un asunto que le interesaba.

— ¿Seguro? ¿Lo que sea?

— Si, lo que sea.

— Entonces...

Yunyun se acercó a Kazuma con un sentimiento de malicia y maldad, asustando un poco a este.

— Esta noche te llamare Kazumi. Hehe... hehe...

— ... ¡!

Kazuma sintió finalmente miedo, dándose cuenta que no había sido buena idea decirle a Yunyun si habilidad de metamorfosis.

Finalmente experimentaría la agonía que tantas mujeres tuvieron que pasar, todo por buscar un tema de conversación cualquiera.

— N-no aceptaras un no, ¿verdad?

— No.

— Bien... acepto.

— ¡Yeih!

Yunyun libero un aura cálida, cosa que hizo que todas sus heridas desaparecieran de forma instantánea.

Kazuma solo vio como ella se iba feliz mientras tarareaba, preparándose mentalmente para lo que vendría en la noche.

— Beru.

Del suelo emergió Beru, quien se arrodillo frente a su rey.

— Te encargas de la limpieza.

— ¡Si, mi rey!

Beru aleteo sus alas, cosa que llamo a un pelotón de hormigas bajo su mando, así iniciando la reconstrucción del ecosistema.

Como siempre, no había nadie que igualara el trabajo de las hormigas como obreras.

***

En el gran bosque, aquel bendito por el mana y territorio de los elfos junto a las bestias o demi humanos.

Un grupo de guardias altos elfos estaban haciendo guardia por la barrera, pues esta estaba bastante debilitada luego de que el mundo sufriera cambios debido al constante flujo intenso de mana.

Este estaba cerca de iniciar un cambio perpetuo, pues ya estaba al borde de dejar de ser un rango A para volverse de rango S, siendo el tercero así en todo el universo.

Mientras que el grupo de altos elfos patrullaba, Ryo Leon, quien estaba al mando había alcanzado a escuchar algo con sus finos sentidos del oído.

— ¿Hmm?

Ella miro hacia los árboles, jurando que había sentido un movimiento del viento el cual posiblemente se debió a la sacudida de un cuerpo.

— ¿Sintió algo, líder de equipo?

— ...

Ryo se acercó hacia un árbol, viendo como una hoja caía directamente hacia sus manos. Pero luego de ver bien, logro notar como un insecto era el que saltaba por los arboles.

Esto la confundió, pues nunca había visto a un ciempiés hacer algo así.

'El mundo se vuelve cada vez más loco.'

Ryo solo dejo caer la hoja de sus manos, suspirando por lo preocupada que se estaba sintiendo estos últimos días.

— Sigamos vigilando la zona, quiero que...

En un segundo toda la calma paso a volverse horror, pues todo su equipo había sido convertido en solo manchas de sangre o algún que otro pedazo de carne.

Por instinto, ella saco su espada para prepararse para alguna batalla.

— ¿¡Quien...!?

Ella busco en todos lados, pero al final unas gotas de sangre que cayeron en su cabeza fue la respuesta a su duda.

Encima de ella había un hombre de cabello blanco, el cual tenía un ojo rojo y manchas de sangre en su boca.

— ¡Tu!

Ryo quiso atacar, pero el peli blanco se movió antes para morder directamente su cuello, matándola en solo un par de segundos.

Este mismo comenzó a devorar todo el cuerpo de Ryu, poco a poco hasta que solo quedaron sobras de lo que hacía un par de segundos fue un cuerpo vivo.

— Eso fue peligroso, casi me descubren.

Cuando la luz de la luna se mostró, finalmente se logró ver bien el rostro de Kaneki, quien tenía una apariencia más madura.

Este mismo se empezó a limpiar la sangre de los labios, mirando los cadáveres sin emoción alguna.

'Aún tengo que acostumbrarme a mi nuevo cuerpo, las mejoras genéticas no fueron poca cosa.'

El cuerpo de Kaneki emitió por unos segundos una especie de luz de color rubí o carmesí, el cual brillo con intensidad al mismo tiempo que sus ojos irradiaban como el neón.

Kaneki suspiro para luego comenzar a sacar algo de su bolsillo, siendo una especie de aparato con forma de aguja y del tamaño de un control remoto.

*Suspiro*

Él puso el dispositivo en el suelo, empezando a tocar algunos botones que este tenía alrededor.

'Con esto la barrera caerá, así podremos iniciar el ataque.'

Kaneki siguió tocando el dispositivo durante un par de segundos, o al menos ese era el plan que tenía en mente.

***

— ... ¡¡!!

Este se lanzó al suelo para esquivar algo que sus sentidos le gritaron evitar, aunque de todas formas termino perdiendo casi toda su cabeza en el intento.

Slash*

Kaneki se tocó la zona perdida de su rostro con dolor, empezando a regenerarse al instante de perder su cara.

'¿¡Quien...!?'

Cuando levanto su mirada, este se dio con una silueta a la cual no veía hacía varios años.

Bañada con la luz de la luna, ahí estaba parada de forma tranquila Akayuki, quien agito su espada para limpiar la sangre de Kaneki en ella.

Akayuki mantuvo una vista tranquila, ocultando de forma exitosa toda la sed de venganza que sentía en contra de Kaneki.

— Por Dark, tu no volverás a conocer un amanecer, Ken Kaneki.

Kaneki se logró poner de pie, regenerando ya todo su rostro con éxito.

— ¡Hah! No me hagas reír, no sabes el pésimo momento en el cual decidiste venir a por mí.

'En unos 15 minutos la barrera se vendrá abajo y dará luz verde al avance de los refuerzos.'

Kaneki se mantuvo al margen, pues se había dado cuenta del enorme aumento de habilidad que había tenido Akayuki desde la última vez que la vio.

'Solo 15 minutos...'

Kaneki pensó en ganar tiempo para alargar la batalla.

— Tu...

Slash*

En un segundo su cabeza había sido cortada por Akayuki, quien solo se mantuvo seria y empezó a tener unos ojos rojos como la sangre.

Ella apunto su espada hacia Kaneki.

— Morirás justo ahora, se acabaron las conversaciones.

En un parpadeo, cientos o incluso miles de cortes atacaron la carne y el hueso de Kaneki, cortándolo incluso cerca del nivel molecular.

Slash*

Slash*

Slash*

Slash*

Slash*

Slash*

Slash*

Slash*

Slash*

El cuerpo de Kaneki se convirtió en el líquido de sangre y carne, la cual baño a Akayuki sin dejar rastro alguno de Kaneki.

Ella solo se quedó parada entre aquel charco de sangre.

— Dark... te he vengado.