Infección y Perdición
Akayuki ya se estaba preparando para irse, pero un sentimiento de fastidio no la dejaba.
Ella ya le había dado la espalda al charco de sangre que había dejado el cuerpo de Kaneki, pero una cosa era clara.
Esto no había terminado.
—... ¡!
De forma repentina ella se giro, viendo como el charco de sangre se convertía en una masa de carne.
Las células se estaban regenerando a tal velocidad, que incluso los huesos y los nervios quedaron a la vista.
Una ves que todo terminó, sólo se vio a Kaneki nuevamente, pero está ves el estaba diferente.
Su masa muscular había sido comprimida, rodeando su cuerpo desnudo con una exoesqueleto oscuro.
Ahora en la frente de Kaneki había una especie de pico o cuerno caído.
—Maldita...
Una luz carmesí brillo a través de lo que aparentaba ser las cuencas de Kaneki.
—¡Te mataré!
Kaneki se preparo para dar un paso, pero esta pelea ya no era de ese estilo.
Akayuki se movió nuevamente a una velocidad imperceptible, dando miles de cortes en solo un par de segundos.
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Nuevamente Kaneki quedo convertido en un charco de sangre.
Pero igual que lo antes visto, este mismo comenzó a regenerarse a una velocidad Instantánea.
Pero está ves no solo estaba formando un cuerpo humanoide, sino que su carne estaba creando algo más.
Si las células se regeneraban de forma instantánea y sin final, entonces ya no había ninguna limitación física en su cuerpo.
Akayuki vio como varios fragmentos de lo que parecían ser huesos fueron disparados hacia ella, pero ella sólo los esquivo.
'Esta creando algo grande.'
Akayuki dio un salto hacia la copa de un árbol, esto luego de ver como la masa de carne creció hasta por encima de estos.
Wosh*
Una vez arriba, ella afilo su mirada con el panorama.
Aquella masa de carne se había convertido en un monstruo, con un tamaño capas de abarcar todo a la vista cercana del gran bosque.
La única imagen que Akayuki pudo diferenciar de Kaneki, era...
Un dragón monstruoso.
***
Toda la gente del gran bosque estaba contemplando al gran dragón que tomaba el cielo.
Pero esto no fue lo único que llego con aquella aparición, pues unas esposas comenzaron a ser desplegadas por todos lados.
Algunos fueron los desafortunados que lograron entrar con el mínimo contacto con estas.
—¡Whuaaaa!
—¿¡Que nos está...!?
—¡¡Aghhhh!!
De repente los cuerpos de elfos, de mi humanos y Bestias empezaron a mutar. Todos sus cuerpos fueron rodeados por una capa de carne sólida.
Poco a poco aquel virus comenzó a ser desplegado por toda la zona, infectando a un gran número de seres.
Incluso algunos árboles tomaron una forma más carnosa, pues ese era el virus Ghoul.
Un virus nacido en este mundo gracias a Kaneki, quien poseía el gen Ghoul en su genética.
Este una ves que se convirtió en aquel dragón, empezó a dispersar un proceso de contaminación para que aquel patógeno se multiplicará.
Era simple biología bacteriológica.
—¡¡Se están comiendo al pueblo!!
—¡¡Mátenlos!! ¡¡Ya no son quienes algunas ves fueron!!
El peor lado de aquel horrendo virus era el hambre desmesurado y sin control por la carne de su propia raza.
Similar a un virus zombi, aunque sin contagio, el virus Ghoul obligó a los seres infectados a cometer canibalismo.
Cuando todos estaban entrando en desesperación, vieron cómo varios de estos Ghoul fueron aplastado con una gran ferocidad.
Este era el rey de las Bestias, Kurst, quien había llegado para eliminar aquel peligro para su pueblo.
'¿¡Que demonios esta pasando!?'
Varios Ghoul se lanzaron en contra del rey de las Bestias, pero este solo las corto con sus garras.
Krush*
Wash*
El rey de las Bestias comenzó a mirar con odio a aquel dragón de carne, mientras que empezaba a tomar su forma bestia.
Un pelaje blanco rodeo su cuerpo, mientras que sus rasgos humanos habían desaparecido por completo.
—¡¡Bastardo!! ¡¡Pagarás por esto!!
El rey de las Bestias dio un rugido con su ira acumulada en contra de aquel dragón, iniciando una confrontación en contra de los Ghoul.
***
'¡¡Mierda!!'
Akayuki comenzó a correr por todo lo que era la espalda de aquel dragón, cortando lo más rápido que pudiera con su paso.
Cientos de cortes eran dados sólo en segundos, cortando la carne de Kaneki como si se tratara de pura mantequilla.
Pero esto no era suficiente, no había forma de poder eliminar era regeneración Instantánea tan fácilmente.
La peor parte era que aquel dragón seguía creciendo, así que Akayuki decidió ir por lo que aparentemente era el núcleo.
'¡Ahí esta!'
Con un gran salto, esta apareció directamente en la cabeza de aquel dragón, mirando en la cima una especie de cuerpo.
—... ¡!
De repente Akayuki dio un paso hacia atrás, pues una lanza de luz había sido enviado hacia su dirección.
Ella lo esquivo con facilidad, aunque su mirada pasó en seguida hacia el tirador.
—Tu...
Akayuki vio cómo el dragón empezó a disparar varias lanzas de luz y carne, aunque estos no eran más que huesos bañados en zinc.
—¡No creas que te has escapado tan fácil!
Akayuki comenzó a cortar lo mas rápido que pudo, hasta el punto que su cuerpo empezó a dejar de ser percibido por radares o la misma visión.
Miles de cortes empezaron a cortar cada fragmento de carne alrededor, empezando a dejar solo una lluvia de sangre a su paso.
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Pero Akayuki empezó a sentir como su cuerpo le dejaba de hacer caso, así seguía empeorando poco a poco.
Ella aún así siguió con su avance, sin dejar de esquivar ningún solo ataque que era dado hacia su zona.
Pero el súper esfuerzo dado en su cuerpo empezó a cobrar fractura, aunque ella se dio cuenta que esto estaba pasando muy antes de lo previsto.
Ella era consciente de los límites de su cuerpo, pero este no era el límite al que ella había logrado alcanzar.
'¿Qué me está pasando?'
Poco a poco los cortes de Akayuki dejaron de ser tan rápidos y efectivos como antes, incluso teniendo que detenerse.
Ella se paro de repente en toda la cabeza del dragón de carne, logrando escuchar en su trance una risa.
—¡Kuhahaha!
Akayuki no estaba prestando atención, pero frente a ella una fracción del cuerpo de Kaneki estaba formándose.
Este solo tenía de forma reconocible su rostro, el cual estaba casi partiéndose de la risa.
—Sin importar que tan rápida o hábil seas, tu... sigues siendo una humana. Una humana que vive, muerte y también...
De repente Akayuki escupió una alarmante cantidad de sangre, mientras que sus venas tomaban diferentes tonos.
—... Qué se enferma.
Incluso con todo su poder, ella seguía siendo humana. Por culpa de su humanidad ahora ella estaba comenzando a padecer la enfermedad de los Ghoul, aunque su sistema se estaba resistiendo de manera natural.
La primera sensación que tuvo Akayuki fue el hambre, cosa que empezó a tomar su mente y por ello mismo su cuerpo rechazo todo proceso de digestión que se llevaba haciendo hasta el momento.
Eso causo el vomito de bilis y sangre.
Akayuki intento dar algunos pasos, pero su cuerpo se tambaleo de tal forma que esta termino cayendo hacia un lado del dragón de carne.
Kaneki solo miro su resultado satisfecho, teniendo en cuenta su objetivo real.
'5 minutos más... Solo eso y esto ya habrá iniciado.'
Kaneki se preparo para volver a tomar su forma original, pues la forma que poseía actualmente le causaba un estrés masivo en todo su ser.
Mantener su cordura ya era un milagro para notar, así que no era buena idea abusar de su propio aguante durante mucho tiempo.
—...¡!
Pero Kaneki comenzó a sentir nuevos ataques en todo el lateral de su zona inferior, sentía como unas garras perforaban y desgarraban su carne con suma facilidad.
—¡Quien!
Kaneki miro hacia abajo, viendo así a Kurst, rey de las bestias. Este mismo estaba con una forma de bestia completa, mostrando la apariencia de lo que parecía ser un lobo blanco gigante.
—¡Bastardo de mierda! ¡no te dejare vivir luego de lo que le hiciste a mi pueblo! ¡lo juro por mi nombre!
Kaneki miro como Kurst mordía con fuerza y ferocidad todo el inferior de su forma dragón, cosa que lo fastidio demasiado.
—¡Quítate de encima maldito pulgoso!
Kaneki comenzó a atacar al rey de las bestias con lanzas de huesos brillantes, pero este mismo lo detuvo todo con solo la fuerza de su rugido.
—¡KAHOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!
Un potente estruendo se escucho por el rugido de un rey, cosa que incluso sacudió todas las células del cuerpo del dragón gigante.
Pero este mismo ya no era mas que una simple molestia, cosa que obligo a Kaneki actuar.
—Ya me harté... Yo mismo te matare.
Kaneki se lanzo en contra de Kurst, quien también se preparo para la feroz batalla que le esperaba.
***
Akayuki estaba apunto de tocar el suelo con su cabeza, debido a la altura ella iba a morir.
Su mente entro en paz una vez que estuvo cerca de la muerte, como si ella misma ya lo hubiera visto durante mucho tiempo.
Pero en esos instantes ella no pensaba en la muerte o el destino que le tocaría, sino mas bien en su pasado.
Ella pensó en Dark, llorando millones de veces en solo segundos para poder calmar su impotencia y frustración.
Sin importar cuanto intento, ella no logro superar a Kazuma para que este lo trajera de vuelta.
Tampoco había sido lo suficientemente rápida como para evitar la muerte uno de sus mejores amigos.
Pero lo que mas le dolía, no había sido fuerte como para poder proteger a Dark o siquiera vengarlo.
'Soy una tonta...'
Frustración por una verdad que siempre le habían dejado en claro, ese fue el único sentimiento que ella sintió en ese momento.
El gran espadachín que nadie podía ver, iba a morir de una forma estúpida a manos de una enfermedad que no tomo mas de un par de segundos en afectar.
Era como ver al héroe de un mundo entero perder la batalla en contra del cáncer o alguna enfermedad derivada.
¿De que le servía poder ir tan rápido como la misma luz si no podía superar este miserable obstáculo?
Ella ya se había hartado de todo eso, por eso decidió pensar más en cada acción que hiciera. Sin importar que tan estúpida que fuera esta, ella pensaría dos veces todo lo que hiciera.
'Eso es lo que tu hubieras hecho.'
Akayuki toco su cinturón, pues en esta estaba el ultimo fragmento de la máscara de Dark.
'¿Qué hubieras hecho tu... Dark?'
Cuando la desesperación esta tocando la puerta, la esperanza será aquella que no le dejará entrar.
Una voz en su mente resonó, tal vez por una ilusión culpa de su situación.
Ella solo escucho la voz de Dark diciéndole: "Confiaría en ti".
—Yo...
A pocos milímetros de la muerte, ella tomo la máscara y su espada.
—Confiare.
Akayuki abrió sus ojos siendo una persona completamente diferente.
***
La pelea entre el rey de las bestias y el dragón de carne había llegado a tal punto, que gran parte del bosque había sido eliminado en esa zona.
El rey de las bestias solo se salvo de la enfermedad gracias a su "Longevidad". Pero la diferencia entre sus fuerzas eran tan basta que padeciera que solo le provocaba heridas momentáneas.
Kaneki al verse con la clara ventaja por el cansancio de Kurst, decidió acabar con esa batalla de una vez por todas.
—¡Muere maldito perro!
Kaneki se lanzo en contra de Kurst, pero la muerte no era algo que le había tocado ya.
—... ¿?
Kurst abrió los ojos para ver delante de si a una mujer de cabello blanco, la cual parecía tener una máscara tapando sus ojos.
Esta era Akayuki, quien se mantuvo con su espada extendida hacia la dirección en donde había estado Kaneki.
Solo fue cosa de un segundo, para que luego de que esta guardara su espada todo el cielo se llenara de una lluvia de sangre.
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
Fush*
El cuerpo de Kaneki y de todo el dragón de carne fue reducido a no mas que solo un par de manchas de sangre en el cielo.
'¡No puedo...! ¡No perderé así!'
Pero al igual que antes, Kaneki solo se empezó a regenerar nuevamente como si no hubiera recibido ningún daño.
—¿¡No lo has entendido!? ¡Jamás serás capaz de ganarme!
Pero Akayuki solo se mantuvo serena, ante todo, poniendo su mano nuevamente en la empuñadura de su espada.
Kaneki se lanzo hacia ella mientras que multiplicaba su abismal tamaño y la cantidad de carne, pareciendo una bestia sacada desde el mismo infierno para acabar con toda la vida.
Incluso después de todo lo que se miraba, Akayuki solo dio un corto respiro antes de susurrar algo que su mente estaba guardando.
—"Murasame".
Este era el fruto de su entrenamiento, de su coraje, de su determinación... Y sobre todo, este era el fruto de su amor el cual sirvió como combustible para encender aquella llama que ocultaba su propia alma.
Y en honor a ese amor, ella bendijo todo aquel fruto con su nombre.
¡Esta era la cima de su arte con la espada!
—... "Dark Step"
*Paso oscuro en ingles*
En un segundo todo se volvió oscuro para Akayuki, pues su mente se movió sola en conjunto a la velocidad máxima alcanzada.
Cuando ella dejo de necesitar el ver para caminar gracias a los sentidos otorgados por su esfuerzo, entonces el limite de la misma velocidad fue liberada.
Esta era la velocidad de aquello que devoraba incluso a la misma luz, era la velocidad de la oscuridad.
Durante esa fracción de segundo ella no pensó en nada, pues esa era su forma de ser, logrando pararse una vez que la luz volvió a su mirada.
—...
Akayuki tardo un mínimo instante en guardar su espada nuevamente, sintiendo como Kaneki aun iba en su contra.
Pero ese había sido su final.
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Slash*
Millones de cortes fueron dado con tanta precisión que parecieron ser una montaña de filosos tajos, el cual termino por erradicar toda la carne de Kaneki.
Pero no había sido suficiente ahí, pues incluso sus células fueron cortadas con aquel corte tan fino y eficaz.
El corte fue más allá de un simple corte celular, pues había cortado incluso los átomos. Erradicándolos con tanta precisión que la explosión resultante por la fragmentación entre átomos jamás se dio.
Al final no quedo nada más que solo Akayuki mirando hacia el lugar donde algunas ves estuvo Kaneki, pues ahora ni una lluvia ni rastro del quedo.
Ella solo miro el cielo pensando que el la escucharía, dejando escapar un susurro desde su corazón.
—Gracias, Dark.
Su corazón fue bañado con el suave tacto de la satisfacción tras la victoria, pues su venganza ya había sido consumada.
***
Esa paz y satisfacción murió cuando un timbre se escuchó.
Ring*
Ring*
Ring*
Akayuki miro con duda la ubicación del timbre, abriendo sus ojos en susto cuando lo recordó.
Kaneki no había llegado ahí para luchar.
—¡Mierda!
Akayuki quiso ir hacia ahí, pero ya había sido demasiado tarde para ella y para todos. Pues aquel aparato exploto en una nube de humo de color gris.
¡Boom-!*
Este mismo se disperso hacia toda la barrera que protegía el árbol del mundo, eliminándola como si fuera solo un poco de agua en contra de una hoja de papel.
Kurst miro horrorizado como la barrera que protegía su hogar caído.
'E-esto no puede...'
Pero la peor parte todavía no llegaba, pues aquel humo comenzó a tomar forma de vórtice.
Este mismo termino creando un portal incluso mas grande que el de Axel durante la guerra.
Akayuki reconoció aquel entorno, tomando su espada con nervios mientras miraba con temor hacia delante, pues ella lo había sentido.
—E-el no...
Con miedo sintió nuevamente el terror y horror que su cuerpo junto con su alma quería olvidar sin éxito.
Pues entre el portal vio con nervios como un solo ser salía de este, volando a varios metros por encima del suelo.
—...V-v-valac...
Valac había llegado al lugar, mirando con una sonrisa el gran árbol del mundo.
Incluso a esa abismal distancia, ella fue capas de entender claramente las palabras que Valac había dicho para todo ser que lo lograra ver.
Estas fueron: "Que inicie la diversión".
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro