Thomas André miró la escena con bastante calma, apretando a Beru por la cabeza.

Ejerció tanta fuerza que la cabeza de Beru explotó, pero el rey hormiga ya no era un tema principal para el.

¡Ploosh!

Una ves que se encargo de limpiar la ruptura de hormigas en la isla, sintió el poder mágico desde esta dirección.

El comunicado de la asociación de héroes hizo que su sangre ardiera de la emoción, corriendo como una bestia en dirección de Japón.

Ahora tenía justo delante suyo a Ashborn, la posible mayor amenaza que ha tenido la humanidad hasta la fecha.

Un reto de tal magnitud no hacia más que emocionarlo, sin poder esperar el momento en el cual pueda medirse en contra de aquel que llamaban “Monarca de las Sombras”.

Pero Kazuma no tenía planeado un dueño justo, viéndose inferior en términos de poder de ataque y tropas a su disposición.

Debía encargarse de la mayor cantidad de héroes justo aquí, al menos para poder concentrar el poder mágico necesario para activar su as bajo la manga.

-“¡Surjan!”

El grito del rey de la muerto resonó entre cada soldado, ocultos entre los héroes pertenecientes del top de héroes.

En la reunión que se llevó a cabo en la base naval, Kazuma había puesto la mayor parte de su ejército dentro de los héroes de alto rango. Buscando una forma de poder eliminarlos si la situación lo ameritaba.

Desde el suelo emergieron todos los restantes de la legión de sombras, ocultos en las sombras de cada héroe.

Pero Thomas André ni siquiera se inmutó, aplastando con su pie a la hormiga antes de que pudiera elevarse del suelo.

-¿Creíste que no me daría cuenta de tus miserables soldados?

-… ¡!

Kazuma vio como los héroes del top reaccionaron al instante, como si ya supieran del peligro que se escondida entre su sombra.

Algo tan imposible como era el lograr sentir a la legión de sombras, era sumamente sencillo para Thomas André. Quien ya había advertido de esta estrategia a su equipo.

Algunos héroes ni reaccionaron a tiempo, aunque está solo fue una menor parte de todo el ejército. Los más de 2000 soldados de sombras emergieron para ayudar a su rey.

-¡¡Pelea contra mi, Ashborn!!

Thomas André se lanzó en contra de Kazuma, quien sólo pudo concentrar todo su mana en el cuerpo para recibir la embestida.

[“Correr” ha sido activado.]

[Tu velocidad ha aumentado un 30% (1 de mana se consumirá por cada minuto).]

[“Potenciar” ha sido activado.]

[Tu fuerza ha aumentado un 30% (1 de mana se consumirá por cada minuto).]

Con su fuerza y velocidad aumentada, Kazuma se lanzó para impactar en contra de Thomas.

Pero la fuerza abrumadora que tenía Thomas no se podía comparar a la inferior fuerza de Kazuma, quien fue arrastrado por la presión de su cuerpo.

-¡AGRH!

Kazuma fue tomado por un fuerza apretón entre los brazos de Thomas, quien siguió su embestida hacia los edificios.

Los muros eran atravesados por aquella embestida, haciendo que Kazuma recibiera cada impacto.

¡BAM!

¡BAM!

¡BAM!

Kazuma dio varios golpes al rostro de Thomas, para lograr zafarse del agarre tan fuerte. Pero su fuerza no fue capas de causar más que simples manchas en el rostro de Thomas.

-¡Me haces cosquillas! ¡Se que puedes hacer mas que esto, Ashborn!

Thomas libero a Kazuma del agarre, preparando su puño para aplastar su cabeza.

-… ¡!

Pero Kazuma logró esquivarlo por los pelos, apretando sus dagas con fuerza para cortar el estómago de Thomas.

Kunsh

Pero sólo vio con incredulidad como sus dagas apenas eran capaces de hacer un ligero rasguño en la piel de Thomas.

La imagen era identidad a una piedra siendo rajada por un alfiler.

‘¡I-imposible!’

Kazuma logró tomar distancia a tiempo, dándose cuenta que su velocidad era lo único en lo que podría competir contra Thomas de forma física.

El cuerpo de Thomas empezaba a liberar un aura dorada, mientras que la sed de sangre que expulsada provocaba un ligero sentimiento de peligro en Kazuma.

‘Debo ganar tiempo y abrumarlo con mis números.’

Kazuma extendió su mano hacia Thomas, usando “Mano del Soberano” para retenerlo en su lugar.

-… Lo sabía, eras el Monarca después de todo…

-… ¡!

Pero incluso aquella presión aplastante no era capas de causarle el más minino retraso a Thomas, quien comenzó a rodear su cuerpo con una fuerza descomunal.

Thomas extendió su mano hacia Kazuma, para pronunciar unas palabras que dejarían helado al candidato a Monarca.

-“Autoridad… del Gobernante”.

‘¿¡Que…!?’

Una presión sin igual comenzó a aprisiona a Kazuma, causando fuertes grietas en la tierra.

Aquella presión parecía controlar todo alrededor de Kazuma, desde la gravedad hasta las mismas partículas del aire.

En ese momento, Kazuma recordó a la única otra persona que había visto usar aquella autoridad que el perdió luego de su muerte.

La “Autoridad del Gobernante” era la mano del sistema, y sólo habían dos seres capaces de usar algo similar en toda la creación.

Kazuma entendió por qué su ser repelía con fuerza la energía de Thomas, y incluso sentía miedo de esta.

‘¡El es un fragmento de la luz brillante! ¡Tiene el poder del “Gobernante de la Luz”!’

Thomas había sido bendito por una fuerza que incluso era mayor al de los cielos, el único que se encontraba por debajo del todo.

Tenía el poder del “Gobernante de la Luz” corriendo por sus venas, siendo el elegido de este universo para portar la luz.

Aún manteniendo a Kazuma en su prisión, Thomas se lanzó para darle un golpe directo a Kazuma.

La fuerza que recibió fue tan descomunal, que Kazuma incluso la comparó con la de Valac. Siendo enviado como un cohete por aquella fuerza.

¡¡BLAM!!

¡¡CRASH!!

¡¡CRASH!!

¡¡PLAM!!

La respiración se le volvía pesada, siendo difícil incluso seguir de pie. El poder que había tenido ese golpe era capas de destruir montañas benditas por el mana.

Esa era la fuerza de Thomas André, quien no sólo era el héroe 1 y el hombre más poderosa de toda la tierra.

-… Espero que no hayas muerto con eso, Ashborn. Aún tenemos… mucho que hacer.

-… C-carajo…

Esa era la fuerza, de quien posiblemente sea el humano más fuerte de todo el universo.

***

Varias bajas de ambas fuerzas ya habían sido confirmadas. Pero los soldados de sombra se levantaban gracias a la inmortalidad que poseían.

Pero aún así, estaban causándole un gasto de mana abismal a su rey. Esto culpa de ciertos humanos que los detenían con facilidad.

Incluso Beru estaba teniendo problema con estos humanos, conocidos como héroes de rango nacional.

Las llamas de Christopher Reed bañaron todas las calles de Japón, las cuales ya habían sido evacuadas con éxito.

Las fuerzas de los héroes llegaron como refuerzos de la luz, empezando a acabar con toda la fuerza de ataque de la legión de sombra.

Pero antes de que Liu Zhigang pudiera volver a matar a Igris, tuvo que esquivar una fuerte potencia de ataque.

‘¡Maldición!’

Un pilar de cristal helado se lanzó hacia eso, destruyendo con todo un edificio por la fuerza que conllevaba.

Al ver delante vio a una mujer, quien era conocida como la esposa de Kazuma Satou, Wiz. Aunque ahora que sabían su identidad verdadera, ella también era una amenaza.

-Malditos mortales inútiles que se atreven a tocar a mi rey.. ¡¡Sus pecados no serán perdonados!!

Wiz se lanzó en contra de Liu con un aura gélida que congelaba todo a su alrededor. Pero a su rescate aparecieron los otros 3 héroes de rango nacional.

Faltaba Jonas de Brasil, pero la fuerza de ataque de solo 3 héroes nacionales no era nada fácil de enfrentar.

-Ella es una maga de hielo, déjamela a mi.

Christopher Reed sonrió al ver una oponente perfecta para su magia elemental de fuego, siendo conocido como el mago más poderoso.

-Si, puedo sentir que ella no es la única…

Siddharth Bachchan miró hacia la oscuridad, apuntando la con su flecha bendita por los dioses.

Desde la oscuridad emergió un gato negro, siendo Wolbach, la cual sólo sonrió de forma gatuna.

-Humanos que quieren ir en contra de los dioses, nyejeje, que inusual.

Los rango nacionales estaban serios, lograron sentir el poder de una divinidad en aquel simple gato.

-Va a ser divertido tratar con estos humanyos.

La gata de rodeo de un humo tenso y oscuro, saliendo con la apariencia de una mujer hermosa. Estando vestida con un yukata japonés.

-¡Vamonyos a jugar! ¡Héroes!

Chomusuke se lanzó con el poder de la deidad de la destrucción en mano, disparando una potente explosión en contra de los héroes.

¡¡BOOM!!

Está fue la alerta perfecta para Wiz, quien se lanzó en contra de Christopher en una batalla de magia.

Tsunamis de hielo y llamas se colisionaron uno en contra del otro, causando un aire caliente que se expandió por todo el distrito.

Soldados de sombra y héroes fueron mandados a arrastrar por aquel fuerte viento, generando incluso torrentes de poder.

Pará Chomusuke tampoco era fácil, ya que ella también era una maga. La cual ahora tenía de oponente a un espadachín y un arquero bastante poderoso cada uno.

Liu Zhigang acordó la distancia entre ambos en un instante, pero Chomusuke pasaba entre forma humana y gatuna para lograr esquivar los cortes con más precisión.

-¡Por eso siempre fui más un hombre de perros!

-¡¡Cómnyo la perra de tu madre!!

-… ¡!

El comentario hizo enfurece a Liu Zhigang, quien era conocido por su pésimo carácter.

Los bombardeos y intercambios de la batalla causar un gran destrozó en toda el distrito. Siendo la batalla entre los siervos del Monarca y los héroes de rango nacional.

***

A pesar de que Kazuma estaba siendo apoyado por sus soldados de sombra, todos cayeron ante la fuerza de Thomas.

El poder de los héroes no se podía subestimar, ya habiendo gastado una inconmensurable cantidad de poder mágico en regenerar a sus soldados.

[Mp : 43.959/80.000]

En poco tiempo ya habría perdido casi la mitad de su mana, y si la batalla seguía así sería todo su mana.

Intentó extraer las sombras de los cadáveres de héroes ya caídos, pero Thomas no le daba el tiempo ni para activar la autoridad.

Junto con la “Autoridad del Gobernante”, Thomas le estaba dando una paliza a puño limpio a Kazuma. Ya habiendo quebrado varios de sus huesos, y manchándolo con sangre.

-Había esperado más de aquel que se hace llamar el rey de la muerte.

Thomas mandó a Kazuma al suelo de un contundente golpe en la cabeza, el cual lo dejó desorientado por unos segundos.

-Pero sólo eres otro saco de boxeo.

Thomas se puso encima de Kazuma, empezando un bombardeo de golpes directamente en todo su ser.

-¡Pensé que serias un maldito desafío! ¿¡Este es el poder de la muerte!?

Los golpes de Thomas no le dejaban a Kazuma ni siquiera pensar, solo pudiendo soportar el dolor apenas como podía.

Fueron tal sus golpes, que una alerta apareció luego de que uno de sus dientes salieran volando.

¡Ring~!

[“Coraje del Débil” ha sido activado.]

[Cuando el hp esté por debajo del 30%, el daño recibido será reducido en un 50%.]

Los golpes de Thomas empezaron a hacer solo la mitad del daño, y ese fue algo que Kazuma aprovecho al instante.

Concentró toda su fuerza en un golpe directo hacia Thomas André, incluso generando fuertes ráfagas de viento por ello.

¡¡BLAST!!

La ropa superior de Thomas fue destruida por el golpe, pero sólo había sido eso.

‘N-no puede ser…’

Thomas miró el puño de Kazuma, entendiendo que ese había sido el golpe más fuerte que el podía dar.

-Y al final solo es esto, ¿no das para mas verdad?

-… ¡!

-Bien, entonces que se acabar la función.

Thomas apretó su puño de tal forma, que incluso se rodeo de una especie de coraza protectora.

Y con ese refuerzo en su puño bañado del poder del Gobernante de la Luz, Thomas dio un golpe que hizo temblar toda la ciudad.

¡¡¡¡BLAAAAAAM!!!!

Primero fueron las costillas, luego los órganos, y finalmente todo en el área de la cintura de Kazuma fue aplastado por aquella fuerza descomunal.

No había perdido la mitad del cuerpo sólo gracias a su reducción al daño físico, el causante de que aguantara tanto castigo hasta ahora.

Y por esa fuerza, Kazuma fue enviado a través de varios edificios hasta colisionar en la torre más grande todo Japón.

¡Poom!

Todo su cuerpo estaba bañado en sangre, sus huesos estaban destruidos. Su cara bañada en los golpes de Thomas André.

‘Mierda…’

No podía moverse, no podía ni respirar. Solo podía pensar luego de que su cuerpo hubiera recibido tal castigo.

Pero una ves que estuvo en las puertas de la muerte, una voz nostálgica apareció.

(-Vaya, vaya, vaya. Mira como te han dejado.)

(-No estuviste… por un buen tiempo…)

(-Creí que deberías afrontar tu hogar por ti mismo. Pero ahora me doy cuenta de mi error)

(-Duele… me duele todo… todo duele…)

La vitalidad de Kazuma empezó a descender de manera drástica y preocupante, provocando que sus ojos se empezarán a cerrar.

(-Pero tu no vas a dejar que aquí termine todo. No, no lo harás.)

Cuando sus ojos se cerraron finalmente, Kazuma se vio dentro del abismo.

Ring~

[El “Jugador” ha muerto.]

Kazuma sentía la calma que le daba la muerte, aquel terreno en el cual daba un final para todo lo que se consideraba vivo.

Pero para el era diferente, este era su territorio. Un lugar en el que podía ver y sentir a la monarca que había dentro de él.

-Sabes que ya no podrás proteger este planeta, al menos si quieres vivir.

-Si… lo se.

La Monarca se acercó para pararse justo al frente de Kazuma, mirando con un rostro difícil de comprender.

-Perdimos el round 1.

-Pero volveremos pasa el round 2.

-El mismo error no se volverá a repetir.

-Nos vamos a caer, no nuevamente.

-Por qué…

-… Por qué.

Dentro del pecho de un muerto, un latido empezó a desbordar el poder de la muerte.
Ba-dum~

Ba-dum~

Aquel latido traería un apocalipsis consigo, era el pesado y abrumador poder que se ocultaba dentro del muchacho.

Había pasado mucho tiempo desde que lo sintió, pero esta ves no habría errores. Por qué…

-¡¡Mataremos a ese maldito bastardo, juntos!!

-¡¡Mataremos a ese maldito bastardo, juntos!!

Alto que jamás había pasado empezó a suceder, combinando dos conciencias a la perfección.

En el pasado, algo como esto jamás pudiera haber sucedido. Pero ahora era diferente.

Ambos habían pasado dificultades con la ayuda del otro, habían estado juntas desde que la muerte dejó de ser un tormento.

Un dicho muy sabio decía : “Dos mentes piensas mejor que una”.

Y ahora habían dos Monarcas habitando un solo cuerpo, dándole nacimiento a la peor catástrofe que alguna ves pudo nacer.

Ya no solo era el poder inexperto, sino que ahora había una experiencia controlando aquel tan abismal poder.

¡Ba-dum~!

¡Ba-dum~!

¡Ba-dum~!

¡Ba-dum~!

[El “Corazón negro” ha sido activado.]

El Monarca de las Sombras estaba listo para hacer aparición.

***

Thomas André estaba caminando en dirección de Kazuma, pero en ese momento lo sintió.

-… ¡!

‘¿Qué es este poder tan gigantesco?’

Miró el cielo, viendo cómo una cúpula de oscuridad nacía desde la tierra para cubrir todo el país.

Los héroes corrieron hacia Thomas André, esperando buscar apoyo en su actual líder.

Todas las batallas se detuvieron por un segundo, dándole inicio a la reunión junto a los reyes.

De entre todo el caos, los soldados de sombra rodearon un puesto justo. El paso del rey.

De entre aquella legión de muertos, el rey de la muerte empezó a caminar entre los vivos.

Con un brillo oscuro que lo cubría al igual que un manto real, Kazuma caminaba con su fuerza oculta al descubierto.

-…

Thomas André se paro encabezando toda la alianza de héroes, los cuales eran más de 8 mil héroes de los más altos rangos en el mundo.

Pero Kazuma también tenía sus tropas, aunque inferiores en números.
-Ya no hará falta ocultar nada.

-… ¡!

En es momento varios portales de un tamaño gigantesco aparecieron por detrás de Kazuma.

Pero lo que había causado la impresión a Thomas, fue que desde esos portales salió un ejército de vivos.

Y encabezando aquel ejerció apareció Makima, junto a todas las fuerzas de Kisaragi junto a ella.

-Oh mi rey. Sentí mucha soledad luego de no verlo en tanto tiempo, usted tiene un brillo encantador.

Makima sintió felicidad y un rubor en su rostro al ver el estado actual de Kazuma, desbordando el aroma tan armonioso de la muerte junto a él.

Wiz y Chomusuke también estaban al lado de Kazuma, preparadas pasa la batalla que estaba por iniciar.

Ahora los números estaban casi parejos, pero el poder entre ambas fuerzas sería difícil de medir en estos momentos.

Lo único que se sabía, es que aquella no era una simple batalla. Ahora una guerra por el futuro del planeta Tierra estaba por iniciar.

Kazuma extendió su mano, causando que Thomas André lo mirara serio y repitiera la acción.

La oscuridad y la luz bañaron a Japón con un aura que incluso se vería desde arriba de las nubes.

Una orden fue aquella que dio inicio a la guerra por el mundo entero.

-¡¡Avancen!!