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El sagrado deseo


Faitfore había llegado a la mazmorra de taratec luego de unas horas volando.

Ella estaba lejos de igualar la velocidad de Kaisel, quien a palabras de Aqua, había llegado en menos de una hora.

Claro que era con la velocidad que tuvo hacer dos años.

Luego de aterrizar, Aqua comenzó a correr sin parar, seguida por Dust y Faitfore, quienes la habían acompañado.

-¡Oye, Aqua! ¡Al menos dinos a donde diablos estamos yendo! ¡También que diablos vamos a hacer!

Aqua estaba concentrada en el poco rastro de autoridad que se sentía, pero también le respondió a Dust.

-¡Es Kazuma! ¡Si no llegamos algo muy malo va a pasar!

-Cosas muy malas ya han pasado, demasiadas...

Dust miro el rostro de Aqua, viendo su mirada asustada.

Incluso luego de todo lo que había pasado, Aqua estaba asustada de algo que podría ser mucho peor.

Dust se dio cuenta de esto.

'Mierda, Kazuma... ¿En qué te has metido ahora?'

Mientras seguían corriendo, Faitfore logró denotar un hedor peculiar en el aire, estando plagado de mana.

-¡Dust!

Faitfore señaló hacia un lado, guiando la mirada de Dust hacia ese lugar.

Una especie de pasillo abierto era lo que veía.

-¿Una doble mazmorra?

Pero de aquellas escaleras escaparon un poco de autoridad.

Aqua reconoció la existencia de Kazuma entre ese sentimiento.

-... ¡¡!!

Aqua corrió tan rápido como pudo, bajando sin temer a una posible caída.

-¡Oye, espera un segundo, Aqua!

Dust corrió mientras cargaba a Faitfore, teniendo un poco más de cuidado que Aqua al bajar.

Aqua no tenía tiempo para preocuparse en si misma.

Ya que había logrado sentir otra autoridad junto a la de Kazuma, una que la aterro.

Recordó las palabras de Vanir : "No pude ver más que oscuridad en mi visión. Pero entre toda esa oscuridad.. Solo estaba tu."

Aqua sabía que significaba el poder ver una visión como esa, estando al tanto de la impotencia que poseía Vanir en estos momentos.

Sabiendo los resultados, la posible consecuencia fue el mayor terror de todos.

'Kazuma... por favor. '

Aqua agitó su cabeza para alinear sus pensamientos.

Debía concentrarse.




***




Finalmente había aparecido la gran puerta.

Esta estaba en una gran habitación en la caverna, luego de bajar durante muchas escaleras.

Aqua camino hacia la puerta, mientras que Dust apenas llegaba.

-S-sólo... dame un segundo.

Dust dejó a Faitfore en el suelo, recuperando el aire.

*Hiperventilar*

Aqua se paro frente a la gran puerta, apuntando su mano hacia ella.

-...

Aqua ahora estaba segura de quien estaba detrás de esa puerta, reconociendo el templo de Cartenon.

Los labios de Aqua se movieron en un gentil susurro.

De repente su cabello comenzó a brillar, para luego levitar un poco.

Dust se vio asombrado, ya que no podía sentir el mana de Aqua, incluso luego de poder usar el mana divino de Hares.

'Se escucha algo agradable... '

Dust no fue capaz de escuchar las palabras de Aqua, pero si algunos tonos ligeros.

La gran puerta comenzó a brillar en una secuencia de escritos imposibles de descifrar.

La puerta se había abierto.

-...

Aqua camino a paso lento para entrar en la habitación, seguida por Dust y Faitfore.

Algo no se sentía bien, era incómodo y molesto.

Toda la habitación parecía estar negándole el acceso a Dust y a Faitfore, pero no tenía problema con Aqua.

Una ves dentro, Dust miró con sorpresa el escenario.

En el suelo habían pedazos de varias estatuas de piedra, incluyendo una colosal.

'¿Qué está...?'

Busco a alguien con la mirada, encontrándose con Kazuma al final.

El estaba frente a una puerta que expulsada una irradiante luz.

-¡¡Kazuma!!

Dust camino hacia delante para ir con Kazuma, más no pudo continuar.

Aqua lo había detenido antes de que cometiera una idiotez.

-¡Ahí esta Kazuma, Aqua! ¡Se ve raro!

-...

Aqua no dijo ninguna palabra.

Su mirada estaba fija en otro lado, dirigiendo la atención de Dust hacia ahí.

-¿Quién...?

Dust miró a una estatua con alas de piedra, semejantes a las de un ángel.

Aqua lo reconoció al instante, ya que el era el Administrador.

-Oh, vaya. Esto es una sorpresa, no había previsto esto.

El Administrador miró al trío, concentrándose en la lanza que tenía Dust en la espalda.

-Veo que el muñeco de Ares vino a darme un saludo.

El Administrador sonrió cuando vio a Aqua.

-¡Por el sistema! ¡Ni siquiera de rodillas soy digno de estar ante usted! ¡Oh, gran valquiria!

El Administrador hizo una reverencia ante Aqua, quien solo se mantuvo callada.

Aqua miró a Kazuma, deduciendo que su alma ya no estaba en su cuerpo.

La posible ubicación de esta era lo que le provocaba temor.

-Juegas con fuerzas que no comprendes. Incluso si has estado desde el inicio de este universo, sólo vives en la gota de un inmenso mar.

-¡Oh, las referencias con el agua! ¡Típico de ti, valquiria!

El Administrador dejó de sonreír.

-Solo le estoy entregando su merecida recompensa, valquiria. Eso es algo que tú jamás comprenderás.

-¿Qué te da tanta seguridad?

-¿No eres tú la culpable?

-... ¡¡¡!!!

Los ojos de Aqua se abrieron en sorpresa, no podía creer que el Administrador supiera esa verdad.

Se supone que incluso Antares, quien regia este universo, estaba sin conocimiento de aquella verdad.

-Me tomó un tiempo analizarlo y darme cuenta. Vamos... que el Monarca y tu se conocieran, tu de todas las valquirias.

El Administrador señaló a Aqua con un rostro de desagrado.

-Menuda casualidad, ¿no lo crees?

Aqua de mantuvo callada y con la mirada hacia abajo por algunos segundos.

Pero luego volvió a levantarla, mostrando un rostro sereno y que imponía autoridad.

-Administrador, lo diré una y solo una ves.

El cabello de Aqua empezó a brillar levemente, al mismo tiempo que este levitaba de forma elegante.

-Trae el alma de Kazuma de nuevo a su cuerpo, evita una calamidad.

-¡Haha! ¡Tu no eres nadie para ordenarme ahora, valquiria! ¡Esta es su voluntad!

El Administrador comenzó a sacar varios brazos de su espalda, mostrando tres pares de estas.

De repente un brillo dorado apareció en sus ojos, causando que Aqua se mantuviera alerta.

'¡Gobernante! ¿Le has otorgado un fragmento a un Administrador?'

Aqua se puso en guardia, al mismo tiempo que el techo empezaba a temblar.

Dust y Faitfore ya no pudieron quedarse al margen, preparándose para la batalla.

Faitfore tomó su forma de dragón, al mismo tiempo que Dust empuñaba su lanza.

-¡Mierda! ¿¡Qué es ese sonido!?

De repente el techo desapareció, mostrando una habitación con miles de pisos hacia arriba.

Estos tenían cientos de miles de estatuas de piedra rodeando las paredes.

Era el ejército personal del Administrador, incluso el más débil era al menos un rango Rey.

'¡Mierda! Yo apenas estoy rozando el terreno de los dioses, no somos rivales.'

Dust se preocupo más por lo que podría pasarle a Faitfore, temiendo el resultado.

Pero Aqua no se quedó quieta, comenzando a cantar en susurros una melodía de guerra.

De repente todo el cuerpo de Dust brillo, al mismo tiempo que un aura se expulsaba del cuerpo de Faitfore.

-¡Dust!

-¡Yo tampoco se que pasa!

Dust miro su puño.

'Pero... me siento fuerte.'

Dust apretó su puño con una valentía repentina, ni siquiera el sabía de dónde había salido.

Esto había sido obra de Aqua, quien manipuló el sistema de manera momentánea para llevar a ambos al limite impuesto por el mismo.

Podría romper esta limitante, pero en no había tiempo para cantar un comando tan largo.

-¡Baila conmigo, valquiria! ¡Muéstrame el primer significado de la guerra! ¡Muéstrame que se siente ser el primer arma de guerra que se creó en toda la creación!

Varias estatuas de piedra saltaron hacia abajo, mirando directamente hacia el trío.

La batalla era algo que no se podía detener o evitar.




***




Dust se lanzó en contra de varias estatuas.

Estas también avanzaron en contra del lancero, sin poder sentir mucho poder de él.

Pero el verdadero potencial que tenía estaba en su lanza.

-"¡Grito de guerra!"

De un momento para otro, los músculos de Dust parecieron hincharse.

El poder del dios de la guerra, el cual residía en la lanza de Dust, ahora se estaba manifestando.

Con un golpe concentrado impacto en el pecho de una estatua, apoyado del extremo de sus límites gracias a Aqua.

Con esfuerzo, Dust logró destruir el pecho de una estatua de piedra.

-¡Vengan!

Dust se lanzó para continuar su pelea con las demás estatuas.

Faitfore se vio rodeada por varias estatuas, pero está ya estaba cargando una llamada en su garganta.

Una ves que la libero, una torrente de llamas blancas fueron directamente a las estatuas.

¡¡Fush!!

¡¡Embrrr!!

*¡Incendiar!*

La piedra de las estatuas se comenzó a carbonizar, hasta que dejó de haber algo que las mantenga unidas.

Pero sólo habían sido unos cuantos.

Un caballero de piedra se acercó a Faitfore, atacando y dejando una herida en una de sus patas.

*Cortar*

-¡¡Aghhhhh!!

Faitfore rugió con dolor, golpeando a la estatua de piedra con su cola.

Dust también recibió un golpe, luego de destruir algunas estatuas, enviado hacia un muro.

¡Poom!

-... ¡Mierda!

Dust salió de la pared corriendo hacia sus oponentes.

'¡Son demasiados! La diferencia entre nuestras fuerzas es apenas mínima.'

Dust vio como las estatuas se concentraban en ellos, mientras que Aqua seguía frente al Administrador.

-¡Oye, Aqua! ¡Haz algo de una ves!

Dust dio un gran salto, aunque fue interceptado por una estatua con un mazo de piedra.

Este amenazó con atacarlo en el aire, pero Dust generó un escudo en su brazo izquierdo.

-"¡Escudo de Guerra!"

El mazo impacto en el escudo, el cual absorbió el daño y la fuerza del mismo ataque.

Dust lanzó su lanza hacia la estatua, destruyéndola.

'Tengo que causar una brecha.'

Dust apareció la lanza nuevamente en su mano, mientras caía hasta el suelo.

Una ves en el, Dust comenzó a golpear la base de su lanza en el suelo.

'¡Odio esta parte tan vergonzosa!'

Dust lleno sus pulmones con aire, moviendo sus labios para cargar un grito.

-¡Au! ¡Au! ¡Au! ¡Au! ¡Au!

Después de efectuar varios golpes con la base de la lanza en el suelo, una clase de bandera roja apareció en la cabeza de Dust.

Una especie de armadura corta y ligera de manifestó como una ilusión en Dust.

Todas sus estadísticas estaban al máximo y un poco más.

'No podré mantener esta forma mucho tiempo... Aún no me he acostumbrado.'

-¡El poder del dios más fastidioso e iracundo!

Dust cargo con fuerza su lanza, corriendo a extremas velocidades a través de las estatuas de piedras.

Fue apoyado por las llamas blancas de Faitfore, aunque poco a poco también estaban recibiendo daño.

Lograban derrotar a la tan perfecta calidad de las estatuas de piedra.

Pero poco podían hacer con esos números tan abismales, sabiendo que serían derrotados si no fueran sólo físicos.

Las estatuas no estaban usando poderes, solo atacaban como simples golems.

La cantidad de poder mágico que tenían era equiparable a un dios, quedando atrás por solo ser marionetas.

'¡Esto no puede seguir así!'

Los minutos pasaban tan rápidos como segundos, generando aún más y más cansancio en ambos.

Faitfore había sufrido una mejora en su genética, cosa a la que su cerebro aún no aceptaba.

Dust estaba igual, su alma no estaba soportando la presión del dios en la guerra y su poder.

Continuar por mucho solo llevaría a un resultado.

'¡Maldita sea! ¡Has algo Aqua! ¡Has que Kazuma despierte!'

Dust puso toda la fe que tenía en el retorno de su amigo.




***




Aqua seguía mirando al Administrador.

El Administrador estaba sintiendo, al mismo tiempo que una luz dorada aparecía en sus 6 manos.

-¿No vas a retirarte verdad, valquiria?

-...

Los ojos de Aqua sólo respondían un rotundo : "no".

-¡Sagrado el poder del Gobernante! El cual ahora me ha otorgado esta oportunidad.

De las manos del Gobernante aparecieron varias armas doradas.

-¡La oportunidad de luchar en contra de una valquiria!

El Administrador lo sabía.

Aqua estaba en un estado lamentable, todo derivado al juramento de las valquirias.

Gracias a ese juramento, Aqua no sería capaz de usar más allá del poder de un dios superior.

-Has malentendido una cosa, Administrador.

El pelo de Aqua comenzó a brillar en un intenso celeste cielo.

Era como ver una majestuosa luz bajo el mar.

-Las valquirias no necesitan algo como el poder.

-... ¡¡!!

El Administrador lo sintió.

Aqua estaba finalmente usando su autoridad. 

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