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Brasas luego de la llama


Finalmente todo había terminado.

Mientras que Kazuma flotaba en el vacío del espacio, el no pudo hacer otra cosa más que pensar.

Pensar en lo que significó lo último que hizo Valac en existencia.

No entendía el por qué de esto, mucho menos el por qué sentía a Valac tan separado de sí mismo.

Mientras que veía el cuerpo separado en dos partes de Valac por el cuello, Kazuma pensó en silencio.

Había algo que no le cuadraba, algo más en la historia que estaba viviendo.

'Valac... ¿Qué tratabas de hacer?'

Pero mientras pensaba en ello, Kazuma comenzó a sentir un leve movimiento de su mente.

Pues finalmente había llegado toda la experiencia que le dio la muerte de Valac.

Y con eso... Un canto de campanas infernales comenzó.

—... ¡!

Ring*

Ring*

Ring*

Tingling*

Ring*

Ring*

Ring*

Tingling*

Las campanas no pararon de sonar como si estuvieran naciendo desde el interior del cerebro de Kazuma.

Debido a su estado físico y mental, esto estaba siendo demasiado para el.

—¡¡Arggggh!!

—... ¿?

Kurumi se alarmó al escuchar a Kazuma gritar poco después de matar a Valac.

Mientras pasaba eso ella logró notar varios portales emerger desde ese lugar.

Kurumi pudo ser la única aún consciente para ver cómo las deidades aparecían en ese lugar.

Libia fue la primera en aparecer, pero ella no pudo hacer más que aumentar su guardia al máximo.

'¿¡Que es este sentimiento!?'

Libia pudo sentir con miedo algo nacer desde Kazuma.

Esto era incluso mayor a cualquier que había sentido de el.

Incluso más que... Valac.

—¡¡Guardiana!!

Kazuma pudo ver como las deidades generaban varias barreras a su alrededor.

Su mente comenzó a nublar su juicio y su propia vista.

Y cuando finalmente cayó desmayado, en su cabeza sólo se escucho a la voz del sistema repetir la misma frase...

Una y otra vez.

[¡Has subido de nivel!]

[¡Has subido de nivel!]

[¡Has subido de nivel!]

[¡Has subido de nivel!]

[¡Has subido de nivel!]

[¡Has subido de...!]

[¡Has subido...!]

[¡Has...!]

[¡...!]




***




Había pasado mucho tiempo en la mente de Kazuma desde que el perdió la conciencia.

Estaba tan cansado que ni siquiera pudo pensar dentro de su desmayo..

Cuando su mente finalmente pudo volver en si, el se despertó al instante.

—... ¡!

Kazuma abrió sus ojos para mirar el entorno por instinto mientras tenía la guardia alta.

Lo primero que vio fue el rostro de Eris, haciendo entender por su posición que este había estado echado en su regazo.

-Oh... Estas despierto.

—Eris...

Kazuma miró detrás del rostro de Eris, notando un cielo claro y bastante natural.

Kazuma sintió su autoridad y energía recuperadas casi por completo, logrando usarlo para orientarse.

—Este planeta...

-Es uno de los jardines de Libia, te trajo aquí para que sanaras y tomaras energía del mundo para estar completo.

'Sanar...'

Kazuma miró su cuerpo notando que sus heridas habían desaparecido.

También noto como su vestimenta ahora era una especie de túnica blanca.

—¿Me cambiaste la ropa?

-De hecho fue Libia, no quería que mancharas el pasto de sangre.

—¿Era necesario de que me quitara la ropa interior?

-¿Sabes que le pasa a la ropa en el espacio?

—Si... Maldita sea.

Kazuma rodeo su cuerpo de oscuridad para tomar nuevamente su vestimenta común.

Eris miró algo decaída esto.

-Te quedaba lindo...

—Ve al grano, ¿Qué está pasando?

-Claro...

Eris se levantó para mirar hacia un lado, haciendo que Kazuma se guiará por su vista.

El logro ver a Mitsurugi siendo sanado por la diosa Libia, mientras que otras deidades lo rodeaban en ayuda.

Kazuma se sintió incómodo por esto, así que se acercó a Mitsurugi.




***




-No pasa nada...

Libia miró con tristeza a Mitsurugi, mientras que seguía aplicando magia de sanación en su brazo.

Pero este no volvía en sí...

—...

Mitsurugi miró decaído la posible respuesta de ello, recordando como pasó.

—No va a volver, ¿verdad?

-Normalmente el fragmento de luz lo haría, pero es diferente...

Libia hizo una ilusión sobre el cuerpo de Mitsurugi para crear un falso brazo brillante.

-El poder que Valac uso en tu brazo lo eliminó a raíz, no puedo... sanar las células para que este vuelva.

Un corto silencio se mantuvo en el ambiente mientras que las demás deidades mantenían rostro caídos.

—Solo hay que cambiar el código escrito.

-... ¿?

Kazuma apareció frente a ambos junto a Eris, mostrando mucha tranquilidad sobre el asunto.

—Solo usemos algo de autoridad y creemos células desde cero, ¿quieres que lo haga por ti?

Kazuma acercó su mano hasta Mitsurugi, pero este negó con la cabeza.

—Yo ya tome una decisión.

—¿Perder tu brazo es una decisión? Discúlpate con los mancos del universo.

—Ni que jugará Valoran y no... Es por algo más personal.

Mitsurugi señaló a Valac con algo de pesar en su acción.

—Valac tuvo que perder su vida y por eso pienso que... perder un brazo no es la gran cosa.

—Pero Valac fue un...

Kazuma se mantuvo en silencio sin lograr terminar su frase.

Por alguna razón, sentía que no era capaz de terminar esa frase después de todo.

Aún seguía confuso por la última acción de Valac en este mundo.

—...

Kazuma camino hacia el cadáver de Valac, llamando la atención de todos los presentes.

El se quedó mirándolo un rato, las deidades habían sido tan generosas que lo acomodaron de forma tranquila.

Pero mientras que muchas cosas estaban molestando la mente de Kazuma, algo...

Algo emergió frente a él.

—... ¡¡!!

'¡No puede...!'

—... ¿¡!?

Todos los presentes lo vieron, alarmándose por lo que sus ojos miraban.

Pues delante de Kazuma unas brasas de oscuridad emergía desde el cadáver de Valac.

Kazuma no creía que eso pueda ser posible, pero el "Sistema de Jugador" respondió su duda.

[¡Se puede extraer la sombra del "Tirano del Poder : Valac"!]

Las brasas de oscuridad que salían de Valac rodearon las manos de Kazuma.

Habían ciertas reglas que los soldados de sombra tenían que seguir a cambio de una existencia inmortal.

1. No desobedecer al rey.

2. Pelear por el rey.

3. Morir por el rey.

Siguiendo las reglas básicas de los soldados de sombra, Kazuma supo que había una oportunidad.

Una oportunidad para tener todas las respuesta que tanto había deseado.

Era el camino para asegurar sus deseos y ambiciones por la mano de un soldado que jamás perdería.

'El poder de tener todo en la palma de mi mano...'

Los labios de Kazuma se estaban moviendo para decir aquella palabra que le daría todo.

Su mano se extendió hacia Valac para tomar su existencia de un soldado eterno.

—No...

—... ¿?

Kazuma vio como Mitsurugi posaba su mano sobre su muñeca, dando a entender que bajara la mano.

—Vamos a casa.

—... Si.

Kazuma entendió la pésima idea que sería eso, pues mataría su objetivo al hacerlo.

El solo quería terminar con todo de una vez por todas.

El cuerpo de Valac fue rodeado por una masa de oscuridad para así ser enviado al "Inventario".

-... ¡!

-¡Espere Monarca!

Las deidades intentaron detener a Kazuma, pero este solo tuvo que dar una mala cara para pararlas.

Luego de tomar distancia con el, Kazuma abrió una "Puerta" que conectará con su mundo para así...

Volver a casa.




***




Los gritos de la batalla finalmente se habían apagado.

Una victoria se había dado sobre las fuerzas aliadas en contra de la brigada, dejándolos como únicos vencedores.

Entre un tumulto de cadáveres y de soldados sometidos estaba Thomas André.

En su mano se sujetaba el cuello de un desmayado Heracles.

—Fue una buena pelea...

Thomas decidió mantener con vida a Heracles, aunque sellando su destino como prisionero.

Eso fue por que logró sentir la ignorancia y ingenuidad que había en el.

Thomas por encima de su gran ego y de su instinto de superioridad, el era un héroe.

Dejó al cuerpo de Heracles en el suelo, mientras que otros héroes lo sometían con cadenas especiales y sellos mágicos.

-Señor André... ¿Cuál es la misión ahora?

—¿Misión? No creo que siga habiendo una misión.

Thomas miró al cielo, recordando todo lo que había sentido más allá de lo que sus ojos podían ver.

'Con la calma que siento... Veo que lograste ganar, Kazuma.'

Thomas pasó su mano por su hombro para estirarse en forma de relajarse.

Al sentir que sus músculos podían descansar, Thomas sólo pudo relajarse.

—La misión es llevar a los cautivos a una prisión cerca de la densa nebulosa.

-¡Si, enseguida señor André!

El héroe se alejo de Thomas mientras daba las indicaciones que él había mencionado.

Thomas miró a los soldados rendidos de la brigada y varios otros que habían caído.

Pero por encima de todo, Thomas sonrió al ver que finalmente todo había terminado.

'Finalmente el universo podrá ver un nuevo y pacifico amanecer.'




***




En el interior de la fortaleza, los miembros de la alianza no fueron comunicados a tiempo de la victoria.

Por culpa de ello, estos lucharon hasta la muerte hasta el último soldado de la brigada.

Al menos no hasta que finalmente supieron de su victoria.

Pero eso le había sentado mal a varios pues sus conocidos estaban ahí.

-No tenía que terminar así...

Fue Dust quien más lamentaba no haber podido saber de eso antes.

Pues su lanza sujetado por su mano estaba atravesando el estómago de Kieth.

La sangre manchaba el suelo mientras que la piel de Kieth perdía su tono.

-S-si... Tal ves pudo ser diferente...

-Aún vas a pagar por tu pecado, serás...

-Por favor...

Kieth tomó el brazo de Dust para llamar su atención.

-T-te lo ruego... Déjame morir...

-... ¡!

La vista de Dust se abrió por la sorpresa y la incertidumbre.

Kieth mantuvo una vista piadosa para que Dust sintiera pena por el.

-Yo no me arrepentimiento de lo que he hecho.

-¡Que mierda estas diciendo!

Dust tomó a Kieth por el cuello de su camisa con algo de fuerza.

Pero viendo que este no intentaba pelear, poco a poco aflojó el agarre.

-Por qué tu...

-Por ella...

Kieth puso una sonrisa tranquila, cosa que le hizo entender a Dust sus razones.

En su mirada ya rendida y cansada, Dust pudo ver que ninguna de sus acciones fueron por beneficio propio.

Tal ves era por el poder del dios de la guerra, ya que podía sentir la razón de guerra de Kieth.

Al entender eso, Dust finalmente soltó a Kieth.

-Y-yo... abandonaré y abandone todo por que ella este bien.

-...

-Te pido como el amigo que alguna vez fui, por favor, protégela...

-Le pides eso al tipo que mató a su marido.

-Ella no...

Kieth comenzó a toser hasta soltar algo de sangre por su boca.

Cof*

Cof*

Cajum*

-... ¡!

-Ella no me recordará... Antes de iniciar todo previ que algo pasaría por Kazuma... Los científicos la hicieron una autómata biológica y le borraron su memoria.

-Osea que ella...

-Quería saber si se había enamorado de mí por su código o por su corazón... Lamento no poder averiguarlo.

Kieth sacó un papel del bolsillo en su cinturón para dárselo a Dust.

El lo tomó notando que tenía algo de sangre manchando la hoja.

-Sálvala... Hazlo por mí... Hazlo por... Taylor...

Luego de decir eso, Dust pudo ver como el color se iba de los ojos de Kieth.

Sintió como su alma recibía un poco de poder, dando a entender que era la experiencia tomada de Kieth.

En silencio, Dust guardo el papel que le dio Kieth para así honrar su última voluntad.

-...

Cerrando los ojos, Dust se acercó para poner sus manos sobre los ojos de Kieth.

'Descansa en paz... Amigo mío.'

Dust se despidió de su gran amigo dejándolo descansar.




***




Humo salía de la boca de un hombre cansado.

Sentado en una pila de cadáveres estaba Kojiro, quien se relajada después de haber terminado todo.

.

Mientras se perdía en sus pensamientos, el logro escuchar unos pasos detrás suyo.

Pisando sin valor los cadáveres en el suelo con un tacón.

Tap*

Tap*

Tap*

Kojiro reconoció el calzado al instante, intentando ignorar su llegada.

Pero la voz de Rachel no lo dejaría escapar.

-¿Por qué haces eso?

-Estoy descansando.

-Por eso, ahora eres un no muerto, técnicamente ya no sientes cansancio.

-Déjame ser.

-¿Ser un estúpido? Pensé que ya eras.

-¡Por cosas como esa es por lo que jamás funcionaría os!

Kojiro reclamo mientras tiraba su cigarro al suelo.

Aunque era verdad lo del cansancio, Kojiro no descansaba por esa razón.

Pues el motivo era mucho más serio de lo que aparentaba.

-Bueno... Ahora termina de "descansar" y mueve tu culo que tenemos mucho que hacer.

-Tu... Sabes lo que me pasaría después de esto, ¿verdad?

-Hay que crear sellos para los poderosos que siguen sueltos y no morirán pronto.

-¿Siquiera me escuchaste?

-La parte más jodida será ver que hacer con este territorio ahora, tengo curiosidad por sus avances biológicos y mágicos.

-¡Ya para!

-Te dejo la ingeniería y lo demás, yo solo quiero...

-¡¡Rachel!!

Kojiro se giro ya enojado por la insistencia de Rachel.

-... ¡!

Pero este se quedó mudo por ver algo que jamás espero ver en su vida.

No de aquella mujer que siempre demostró fuerza y desinterés en el dolor.

Pues Rachel estaba apretando sus dientes para no llorar, pero sus lágrimas a cántaros no ayudaban.

Sus puños estaban apretando con fuerza para contener su temblar.

Kojiro sólo pudo sentirse mal sabiendo que eso era su culpa.

-Rachel yo...

-¡Simplemente no lo entiendo! ¡Finalmente todo termina y tu...!

Rachel finalmente ya no pudo ser fuerte y terminó soltando el dolor que sentía en forma de lágrimas.

-Tu simplemente te vas...

Rachel no quería aceptar la realidad de los deseos de Kojiro.

Pues de antemano el le había dicho que el no quería vivir como un no muerto.

Por ello el tomó la decisión de que si llegar a tener que usar ese poder, entonces el se perdería para así descansar en paz.

Pero eran esos deseos los que Rachel no quería aceptar.

Y por primera vez, Kojiro acarició la mejilla de Rachel con empatía y tristeza.

-Se que eres más fuerte que esto.

-¡Aqua puede volver humano! ¡Kazuma podría hacer algo o...! ¡¡Tenemos el favor de los que dirigen!!

Rachel se aferro a la ropa de Kojiro en desesperación.

Pero Kojiro solo podía sonreír por sentir que de verdad le importaba a Rachel.

-Lo sé, pero... Este es mi deseo, finalmente logré cumplir todas mis metas y ahora yo ya... Ya viví demasiado.

Kojiro recordó con amargura la gran cantidad de personas que había conocido en sus varios siglos.

Llegó a tal punto que el ya no quería ver partir a nadie más, incluso a la misma Rachel.

Esta era su única oportunidad de finalmente poder irse sin cargar con él peso de una vida inmortal.

-¡¡No seas un jodido egoísta!! ¡¡Que hay de las personas que aun te quieren con vida!! ¡¡Que hay de las personas que aun te necesitan!! ¡¡Que hay de...!!

Rachel abrazo a Kojiro con fuerza, mostrando por primera vez un lado débil de ella.

-... Que hay de mi...

-...

Kojiro ya no pudo soportar más.

Por instinto el tomó la barbilla de Rachel para besarla de forma cariñosa.

Aunque era algo normal para otros, ese beso significaba mucho más para ambos.

Pues aunque mucho hayan hecho entre ambos, este fue... su primer beso lleno de afecto y cariño.

Amor en pocas palabras.

-...

Rachel corto el beso rápidamente, pues sabía que de seguir cabía la posibilidad de aferrarse aún más en el.

Pues el amor es una maldición, no importa quien sea, si siente amor entonces estará maldito a sufrir por este.

-Se que es egoísta pero... Por favor no te acueste con nadie nunca más.

Kojiro hizo una última broma antes de empezar con su deseo.

Rachel solo pudo ver en silencio como este empezaba a brillar en un tono tenue.

-Tendrás que detenerme...

-Entonces te voy a acosar como un fantasma.

-Sabes que no funciona así...

-Si, lo sé.

-...

Sin decir nada más, ambos suavemente se acercaron para continuar con su tierno beso.

Pero esta ves la luz tenue se intensificó hasta cubrir la vista de Rachel incluso con los ojos cerrados.

Fooooh*

Pues cuando la luz desapareció, Rachel ya no pudo sentir el cuerpo de Kojiro.

Cuando abrió los ojos, ella solo vio como unas partículas de luz se perdían en el aire.

La luz se fue dejando consigo únicamente las pistolas de Kojiro en el suelo.

-...

Kojiro perdió la fuerza en sus piernas para caer de rodillas frente a las pistolas.

Y al final ella solo pudo despedirse con un leve susurro de aquel que significó su salvación y esperanza.

Pero también... su perdición y desesperación.

Pues luego de ganar, Rachel aún así había perdido.

-... Adiós... idiota...

*Chao Kojiro T^T*

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