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Amargo adiós...


Al final de aquella tormentosa tempestad que llegó a cada rincón del universo.

Finalmente una calma junto al silencio dieron fruto a la paz.

Tres cuerpos flotando sin dirección o índice de detenerse era lo último que quedó.

Pero abajo del cuerpo de Kazuma apareció una especie de plataforma cristalina.

—¡Kazuma!

El llamado de su nombre fue algo que resonó en la mente de Kazuma.

Este apenas logró recobrar la conciencia, sin saber cuánto tiempo estuvo sin pensar en algo.

'Esa voz... '

Kazuma logró abrir sus ojos para ver a la persona que lo había llamado.

No podía sentirlo pues su desgaste y cansancio era mayor que nunca.

Lo primero que logró ver fue un par de ojos dorados mirarlo fijamente con preocupación.

—¡Kazuma! ¡Reacciona por favor! ¡Kazuma!

Luego de que su vista logrará aclararse, Kazuma logró diferencia a aquella voz femenina.

Era Kurumi, quien había recostado su cabeza en su pecho mientras lo intentaba despertar.

—K-Ku... rumi...

—¡Kazuma!

Kurumi sonrió feliz y con algunas lágrimas al ver que Kazuma reaccionaba.

Kazuma movió difícilmente sus labios por culpa de otra preocupación.

—Mitsu... Mit...

—¡Oh, si!

Kurumi extendió su mano para atraer a Mitsurugi hacia una plataforma cristalina.

El rubio movió sus ojos al sentir su conciencia llegar luego de tener un espacio firme donde echarse.

Kazuma por su parte recordó la tarea que le brindó a Kurumi mientras se recuperaba lentamente.

—¿Funcionó?

—Si, todo salió casi perfecto. Aunque fue demasiado incluso teniendo los ojos del "Administrador", sus poderes casi quiebran el universo.

—Ya veo...

Kazuma agradeció haber pensando en ello anteriormente.

Al entender las secuelas y las consecuencias de chocar sus poderes con los de Valac, el hizo un plan.

Le entregó a Kurumi los ojos del "Administrador" para que ella se centrará en evitar el colapso del universo a la distancia.

Al verla aquí, el entendió que todo estaba bien ahora.

—Menos mal... ya todo... todo terminó...

Kazuma sonrió cansado luego de ver que todo su esfuerzo finalmente había dado fruto.

Kurumi miró hacia lo profundo del espacio, sintiendo un muy débil presencia.

—¿Qué harás con el?

—...

Kazuma ladeo su cabeza hacia donde miraba Kurumi, logrando ver a Valac.

El flotaba sin presentar ninguna acción o reacción a la deriva.

Finalmente y después de tantos sacrificios... lo habían derrotado.

—Terminar... lo que iniciamos.

Kazuma miró a Kurumi para hacerle entender que iban a terminar con la última fase del plan.

—... ¿Huh?

Pero antes de eso, Mitsurugi se logró despertar para girar su cabeza hacia Valac.

Luego de verlo unos segundos, este se dirigió en palabras hacia el.

—Ríndete, Valac... Ya has perdido.

—...

Mitsurugi se dio cuenta que Valac estaba consciente pero sin moverse en lo absoluto.

El se mantuvo en silencio escuchándolo.

—Las deidades vienen justo ahora a esta posición, en tu estado actual no podrás hacer nada...

Mitsurugi levantó su mano para mostrar un poco de luz irradiante.

—Ya no pelees... Por favor, paga por tus pecados encerrado en soledad.

—...

Incluso después de todo, Mitsurugi no quería matar a Valac.

Toda vida es valiosa, toda vida tiene redención.

Mitsurugi lo había sentido en Valac, pues sintió que el no era malo del todo.

Pudo sentir bondad en lo más profundo de su ser, aunque el no pueda entender por qué.

Al sentir esto, Mitsurugi comenzó a sentir esperanza en Valac.

Esperanza de que incluso el... podría redimirse.

—Que me rinda dices... ¿Me dejarías enserio?

Valac finalmente respondió, moviendo únicamente sus labios.

—Incluso después de todo lo que he hecho... ¿Crees que yo tengo perdón?

—Nadie...

Mitsurugi pensó en sus palabras, pensó en lo que había vivido.

Finalmente el había tenido una respuesta al enigma de la vida misma.

—"No existe nadie completamente bueno, no existe nadie complemente malo."

—¿Incluso...yo?

—Incluso tu, incluso yo... Incluso el "Gobernante de la Luz" y el "Monarca de las Sombras".

Valac se tomó unos segundos para responder.

—Yo... Poder ser perdonado después de todo lo que hice...




***




—... ¿Eres idiota?

—... ¿?

Mitsurugi miró con duda a Valac, pues comenzó a sentir algo rodear todo el lugar.

El vacío del espacio comenzó a sentirse pesado con una sola palabra.

—Yo no me equivoque... Son ustedes los que tiraron al tacho todo lo que hice por su egoísmo...

—Tu no entiendes el valor....

—¡Ya para con el eufemismo y el camino misterioso! ¡Carajo!

De repente varias ondas de autoridad pura fueron liberadas de Valac.

—... ¡¡!!

—... ¿¡!?

Kazuma se puso en alerta máxima al instante, pues no entendía como aún había fuerza para usar autoridad en Valac.

—¡¡Son ustedes los que jamás entenderán lo que yo estuve apuntó de hacer!! ¡¡No lo harán nunca!!

Valac comenzó a concentrar toda su autoridad en un solo punto.

—Que son otros cuantos años... Puedo empezar de nuevo, otro candidato...

—¡Entiende, Valac! ¡Tu ya has perdido y tu anhelo ya no tiene futuro!

—Mi anhelo en todo para mi... Dices que yo no tengo futuro...

Valac comenzó a expandir su autoridad hacia todos lados, logrando incluso a salir de la visión.

—Entonces... ¡¡Entonces!!

En un parpadeo Valac se logró recomponer y levantó sus manos para liberar toda la autoridad concentrada.

—¡¡SE IRÁN CONMIGO!!

La autoridad explotó al igual que una supernova, expandiéndose hacia cada rincón del universo.

—"¡Exterminar!"

En un instante, aquella autoridad destructiva fue liberada en todo el universo.

Poco a poco, todo empezó a mostrar signos de quebrarse en millones de fragmentos.

Valac iba a destruir el universo.

'¡Maldición!'

Kazuma quiso avanzar, pero su cuerpo ya no tenía fuerzas para ponerse en pie.

Kurumi sabía que su autoridad no era suficiente para ir en contra de la de Valac.

'¡Esto debe ser una broma! ¡Ya ninguno tiene fuerzas para pelear!'

Kurumi extendió una barrera para intentar contener la autoridad de Valac.

Crash*

Crash*

Crash*

Esta barrera comenzó a aguantar debido a la debilidad de Valac, pero no por mucho.

—¡No aguantare...!

—... ¡!

Mitsurugi levantó su brazo de la plataforma para así ir en contra de Valac.

Pero su fuerza fallo al instante para enviar su rostro nuevamente hacia abajo.

Pum*

Aunque incluso así Mitsurugi volvió a intentarlo una vez más.

'¡¡Por favor cuerpo mío!! ¡¡Solo un poco más!!'

El brazo de Mitsurugi fallaron otra vez, pero el volvió a intentarlo.

'¡¡Te lo ruego!! ¡¡Ya puedes descansar para siempre luego...!! ¡¡Pero levántate por favor!!'

El rostro de Mitsurugi se lleno de impotencia y frustración al sentir que su cuerpo ya no le hacía caso.

Su cansancio era tanto que incluso su autoridad pedía descansar.

Mitsurugi comenzó a llorar al sentirse inútil.

'¡Por favor...!'

No había forma de ir en contra de Valac, nadie podía.

Pero Kazuma aún así seguía intentándolo, cosa que noto Kurumi.

—No lo hagas... Aún tienes fuerza para algo más...

—... ¡¡!!

Kazuma sintió como la plataforma en donde estaba echada comenzó a moverse.

Fush*

Está se dirigió como un platillo en dirección de Valac, lanzándolo cuando estuvo cerca de él.

—¡¡Acaba con el!!

Kazuma sintió como el "Exterminio" de Valac estaba llegando a Kurumi por concentrarse en enviarlo.

El sabía que está era su única oportunidad, así que no podía fallar.

'Ya no... ¡¡Ya no volveré a fallar!!'

Sin armas, sin poder, sin autoridad y sin nada.

Kazuma decidió ir en contra de Valac sin nada de lo que le daría una oportunidad.

—... ¡¡!!

Mitsurugi vio a Kazuma incluso más cansado que el lanzarse hacia Valac.

'Yo tenía razón...'

Mitsurugi apretó su puño mientras concentraba toda su existencia en un punto.

'Tu al final siempre debes ser el héroe.'

Una luz resplandecía como ninguna en la mano de Mitsurugi, siendo este su fragmento de luz brillante.

Todo el poder que los cielos le habían dado se concentro fuera de sí mismo.

'¡¡Así que más te vale no fallar!!'

Mitsurugi extendió su mano para enviar su fragmento de luz hacia Kazuma.

WOOOOOSH*

*¡Resplandecer!*

La luz cegó un costado de Kazuma, aunque el la logró sujetar por instinto.

El poder de la luz le quemo la mano como nunca, pero el ignoro todo eso.

Incluso sin saber que sería de él, Mitsurugi se había enviado el fragmento para poder terminar el trabajo.

Por un instante, toda su aventura pasó por sus ojos al ver aquella luz.

'Yo jamás quise ser un héroe... No quiero ser uno.'

En las manos de Kazuma, la luz comenzó a alargarse hasta parecer una espada larga.

Kazuma comenzó a preparar la espada cuando ya estaba cerca de Valac.

'¡¡Maldito cliché de mierda!!'

Kazuma vio a Valac apuntó de destruirlo todo justo delante de él.

Sin pensarlo, el ladeo la espada de luz hacia el cuello de Valac.

—¡¡MALDIGO A ESTA MALDITA HISTORIA!!'

Kazuma centro todo de sí en su último ataque hacia Valac.

Pero al acercarse, el finalmente logró ver encima de toda la autoridad y poder que liberaba Valac.

Y cuando su espada estaba cerca del cuello de Valac, Kazuma se quedó inmóvil.

—... ¿¡!?

El no podía entender incluso si su mente lo pensara una infinidad de veces.

El tiempo pareció ir cada vez más lento para dejar ver con claridad...

Pues en el rostro de Valac había una sonrisa cálida y honesta.

Un susurro paso por la mente de Kazuma en ese instante.

—"Gracias..."




***




Luego de ese susurro, el tiempo finalmente se detuvo en un instante.

Lo único que pareció moverse fueron los ojos de Valac.

'Ah~... Finalmente ha terminado.'

Mientras que el escenario estaba congelado, algo pareció salir de Valac.

Una versión suya o espiritual, pero esta era diferente a su apariencia normal.

Parecía ser el Valac de siempre, pero está ves teniendo una apariencia un poco más humana.

—Si que me costo más de lo previsto tener esa apariencia siempre.

'No me he sentido tan cómodo desde hace años.'

Valac comenzó a estirarse mientras disfrutaba solo ese momento.

El término viendo a Kazuma, algo decaído al verlo.

—Sabes... De no haber tenido que hacer este teatro tu y yo podríamos haber sido amigos.

Valac sonrió de forma melancólica.

—Tu eres el único que ha logrado comprender ambos lados, el verdadero significado de la muerte.

Valac pasó su mano por la cabeza de Kazuma para acariciarlo.

—Lamento lo que le hice a Anna, lo que te hice a ti y a todos...

Luego de expresar aunque sea de esta forma lo que lo anclaba a este plano, finalmente se logró escuchar algo.

Clap*

Clap*

Clap*

Unos aplausos lentos se escucharon a espaldas de Valac.

—Sigues siendo el mismo niño débil que encontré ese día. Pensar que incluso les mentiste sobre quien eras y ninguno sospecho.

—También lo creo... Yo soy muy bueno mintiendo, te mentía hasta a ti.

Valac se giro para verla después de tanto, la Monarca frente suyo.

La razón por la cual ella estaba aquí era por que Valac finalmente había aceptado por completo la muerte.

Con ello, el se reunió con el portero que lo visitaría.

—Lo que has hecho ha jodido mi retorno por completo, Parca.

—Ese era el plan.

Valac sonrió al escuchar su verdadero nombre después de tanto tiempo.

—Siempre tienes que hacer estas cosas, de no ser útil te hubiera eliminado desde el primer instante.

—Por eso debía serlo, soy el único que te ha puesto límites, loca.

Valac se paro frente a frente con la Monarca, teniendo un rostro desafiante.

—Tu jamás... vas a entender lo que eres incluso siéndolo.

—Por eso siempre has jodido todo... Por ti perdí esa batalla, por esa maldita frase tuya que tanto odio...

—Es muy popular estos días.

—La detesto, odio que esa maldita esperanza hacia mi sea lo que irónicamente mate mi desesperación.

Valac camino en silencio hacia su cuerpo mientras se recostada lentamente en el.

—Pues yo... la amo...

Pues Valac solo tenía que decir una frase para generar esperanza en su causa.

No importa hacia quién sea dirigida, pues sólo la esperanza era tan fuerte como para poder ir en contra de la desesperación del Monarca.

Ya que la esperanza más fuerte es la que nace en la misma oscuridad.

Valac entró en su cuerpo mientras que el tiempo volvía a tomar su curso.

Pero no sin antes sacarle el dedo corazón a la Monarca y empezar a mover sus labios.

—... ¡!

Ella puso un rostro furioso, pues no quería escuchar aquella frase que le costó la victoria.

En una última frase, los labios de Valac solamente dijeron :




***




—"Bendito sea el Monarca".

Una última frase fue lo que escucho Kazuma antes de pasar del cuerpo de Valac.

Su mente y su corazón se detuvieron en un segundo, sintiendo...

En el fondo de su corazón como Valac libero bondad y satisfacción.

Era casi como si este mismo hubiera programado todo para que Kazuma lo sintiera luego de cometer aquella acción.

Un único y último regalo para aquel que tuvo que ser un personaje dentro del teatro.

Algo que hizo que Kazuma sintiera pena por su acción.

En silencio el solo sintió como la cabeza de Valac se desprendía de su cuerpo luego de cortarla con la espada de luz.

Su cuerpo extendió sus brazos al sentir después de tanto la libertad que tanto buscaba.

Ese fue el adiós...

—...

En su mente, Kazuma espero que Valac logrará escuchar aquella sinceridad que le iba a dedicar.

'Adiós Valac...'

[¡Has derrotado al "Tirano del Poder : Valac"!] 

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