El rescate fue un éxito. Fue algo fuera de lo usual haber rescatado a la princesa con la ayuda de un general del ejército del rey demonio. Sylvia, la Quimera.

A pesar de que Megumin fuera su aliada. No perdono la traición y servicio de los Dioses que Eris me advirtió.

Y aunque por ahora tenemos un enemigo en común, mi querida Diosa se niega a trabajar con ella.

Ve suciedad de demonio en ella, además claro amenaza entre los melónes que se asoman y saltan salvajes entre su escote.

No ayudo mucho el coqueteo de Sylvia al llegar sano y Salvo con mis aliadas.
Si, al llegar y ser atacada. Nos liberó.
Mis aliadas listas para atacar las tuve que detener para explícarles, pero Sylvia me abrazo diciendo que se sentía como una mujer enamorada ante mi caballería.
Aqua se lanzó contra ella como un tigre hambriento.
Su pelea era algo que intentaba evitar. Pero Dada su fuerza física.

Darknes miraba el espectáculo sin saber cómo reaccionar ante un acto tan vergonzoso, Rain nos ignoró por completo tomando a Iris entre sus brazos con una mirada de alivio.

Mi vida anterior está muy eclipsada por está etapa de popularidad.
Aunque ciertamente Aqua es y será aquella mujer que yo elija a pesar de todo. Sylvia me acapara ahora mismo. Dado su fuerza física me es imposible escapar de los suaves atributos de Sylvia. Aqua no para de gritar y yo aún no se cómo sentirme al respecto con esta situación.

— Nini infiel! Golpe divino!.

Al no poder liberarme de la prisión carnal de Sylvia y Aqua al no poder acertar ni un golpe a la quimera. Optó por el punto débil. Mi cara que se despegó del pecho de Sylvia...

Normalmente la golpearía por esto, estaría molesto por este acto, pero Aqua ahora mismo parece más un demonio que una Diosa.
No es que tenga miedo de enfrentarla o debatir si podría librarme de Sylvia o no. Pero era mejor dejar las cosas como estaban desde mi perspectiva.

— Nya! Si tan solo lo hubiera abrazado con fuerza y no con la delicadeza que lo hice no me lo hubieran arrebatado.

Ese comentario enfureció a Aqua. No solo miro a Sylvia con ojos de muerte. También estaba yo en su campo visual.
Suspirando opte por la opción viable, pacífica y diplomática.

Posición Dogeza...

Estuve en aquella posición al rededor de 4 horas. La noche había caido y el frío del desierto hacia que los huesos dolieran, estaba temblando sin parar. Mientras las chicas habían echo una fogata y preparado sopa caliente. ¿De dónde carajo consiguieron ingredientes?!.
No solo eso, ¿Por qué me excluyeron a mi y aceptaron a Sylvia simplemente?

Aqua tal vez estaba en contra de ello y no mira muy bien a la Quimera. Pero las chicas están bien con ello.
Rain envolvió a Iris en una manta y la alimenta en la boca.

Aunque me intento acercar, Aqua me mira horrible si lo intento.
Que mujer más desconsiderada!

Si muero aquí...

Es cierto Aqua puede revivirme, pero de verdad esperara a que muera de una hipotermia aquí para después revivirme, ¿Así de cruel es su castigo?.

Vaya mierda.

Todas se fueron a dormir.
Excepto Aqua que me mira por encima del fuego. Sus ojos como el agua adoptan el color del rojizo fuego de la fogata. Ella no es mi Diosa, es un demonio...

— Kazuma!

— ¿Si?— ¿Por qué mi voz es aguda?. Es el frío o el miedo. ¿Miedo?

— Ven aquí

Sin pensarlo me acerque a ella.
Dudoso de que distancia debía tener con ella me quedé solo lo suficiente para sentir el calor de la fogata y para verla de frente.

— Siéntate aquí conmigo— dijo Aqua dando palmadas a lado de ella.

No estoy en condiciones de objetar.
Obedecí sin más.

—con su permiso

Aqua cruzo los brazos y las piernas mientras volteo su cara a lado contrario de dónde yo estaba.

El calor de la fogata rápidamente hizo entrar en calor a mi cuerpo. Sentía como esa calidez revitaliza mis articulaciones. Me expreso como un viejo pero a decir verdad el frío fue muy agresivo está vez.

— Toma.

Aqua me dio un tazón de sopa caliente sin voltear a verme. Supongo que estará así un buen tiempo.

— Gracias...

El caldo de está revivió los pulmones casi congelados, terminó por revivirme por completo. Además era deliciosa.

Bendita sea está sopa que extendió mi Diosa hacia mi!

— Kazuma!— la voz de Aqua me sacó del transe que tenía al degustar la sopa de extraños condimentos. No había probado nada igual ni en mi anterior vida...

— Si?

— Ya no quiero estar molesta, pídeme perdón!

Suspire de alivio ante sus palabras. Ella era realmente buena. Demasiado buena para mí.

— Está bien, no quiero más discusiones ni te daré razones. todo fue tan de repente así que simplemente lo siento Aqua. Aunque todo lo que hice no fue planeado ni fue mi intención. Solo fue una serie de sucesos que llevaron a lo que ahora te molesta. ¿Me perdonas?

— No.

¿Qué?

Aqua empezó a temblar de ira como si un volcán estuviera a punto de hacer erupción. Y dela nada gritó tallando su cabeza, desde mi perspectiva parecía sacar humo.

— Entiendo si te coquetean, pero te dejaste seducir por los encantos de una Súcubo y ahora por los de una lider del ejército del rey demonio, no quiero preguntar que tiene ella que yo no. Lo sé, ella tiene un enorme busto y un excelente trasero y yo...

— Basta Aqua!, tu también tienes un excelente cuerpo!

— ¿También?

Mierda ... Debo corregirlo.

— No niego que su cuerpo es atractivo pero no basta para que me enamore. Tu Aqua eres la mejor y la única que puede tener mi corazón.

Aqua abrió los ojos ante mis palabras. Desvió su mirada.

— ¿Yo soy la única de tu corazón?— una voz frágil y tierna salieron de esos divinos labios.

Solo sentí alivio. Esboce una sonrisa ligera mientras extendía mi mano a la cara de Aqua.

— Si

Aqua desvió mi mano de un golpe.
¿Sigue molesta?

— Si como no, no creas que soy tan fácil!, soy la única de tu corazón pero cualquiera puede tener tu cuerpo, ¿No?

Ahora sí me hizo enojar.

— Escucha Diosa inútil, solo eres lista para cambiar el significado de mis palabras a tu conveniencia, deberías ser así de habil en momentos más críticos...

— Whaaa! ¿Ahora tu estás enojado?

— Claro que lo estoy. Estoy haciendo lo posible por reconciliarme contigo y tú simplemente encuentras como hacer este conflicto más grande!

— Pero tu tienes la culpa...

— ¿Yo? ...

— ¿Quieren callarse de una buena vez par de idiotas?!!!!— una voz gruesa de hombre nos interrumpió en este intercambio de palabras.
Nos había tomado por sorpresa, no había nadie con nosotros que tuviera esa voz, al girar nuestra cabeza nos encontramos con Sylvia somnolienta pero con una evidente furia.

— Si van a seguir peleando váyanse a conseguir una habitación, terminen de pelear y hagan el amor pero a otro lado, no molesten a la gente que quiere dormir!

Nadie más que yo se sorprendió por escuchar aquella voz venir de Sylvia... Tanto que mis piernas se debilitaron cayendo al suelo.

— T-tu, eres...

— ¿Ah?, no te lo dije?, soy una quimera, todo en mi cuerpo es una modificación y aditamentos...

Llevando sus manos al par de pechos que tenía, moviendolos dijo

— Incluso estás tetas que tanto te gustan fueron aditamentos extras. Pensé que lo sabías y no te molestaba, pero ya veo que si, ni modo. Tenía a mi amigo listo para recorrer tu interior y estaba lista para que tú recorrieras el mío... Bueno a dormir.
Eso último lo dijo con su voz de siempre, de mujer. 

Sin más se acomodo de nuevo mientras yo trataba de asimilar lo que había, visto, escuchado y...

Creo que algo en mi se rompió.
Mi cordura y voluntad.
Yo ... Quiero morir.
Creo que uno de los que yo pensé que era un tentáculo de ella era... Era... ERA!...

—¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOO!

— AHHHHHHHHHHHHHHHHHH!

— ¡Que se callen dije maldita sea!

Aqua estuvo toda la noche consolandome. Me acostó en su regazo y acaricio mi cabello hasta que pude dormir. Este trauma , está desgracia me acompañará por mucho. Mucho tiempo.

— Ya, ya pequeño Kazuma, todo está bien, yo estoy contigo, deja tus penas en el regazo de tu Diosa y encuentra la calma...

Bendita sea mi Diosa!

Bendita Sea mi Diosa!

BENDITA SEA AQUA Y SUS BRAGAS A RAYAS BLANCAS Y AZULES!!!