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Continuación capítulo 64
Dedicado a: Stay4aWhile
-Vas fatal Keith. -decía el cubano, mirándole. Keith estaba apoyado en la pared, tocándose el cabello. Sus ojos rojos se clavaron en él.
- Que no. Voy bien.
-Pero si me has dicho por el móvil que ibas mal.
-Ah eso... ni caso. -el cubano negó riendo y se quitó la camiseta. El coreano le imitó. Se quedó mirándole el abdomen. Keith se había quedado empanado mirándole aquel torso hecho, a su parecer, por dioses. Se quitó el pantalón a la vez que Lance. Y se fijo en su culo, su culo aplanado pero duro como una roca. Y su paquete. Su paquete remarcadito.
Lance abrió el grifo y dejó el agua caer.
-Quítate eso y entra, vamos. -dijo mientras se quitaba su propia ropa interior. Y le copió. Esta atontado: tanto por el alcohol y compañía como por ver al chico desnudo.
Entró junto a él a la ducha, y comenzó la tontería.
-¿Entonces una paja? -dijo pegándose el coreano al cubano. El chico se mordió el labio al tener al cubanos tan cerca. Cerca... y pegado a la pared. Acorraladito por si cuerpo.
-Una paja. Sólo una paja. -murmuró el chico. -¿Me besas ya o... ? -le pegó a su cara desde la nuca.
Lance estaba acorralado. No tenía opción. Tenía que dejarse llevar. Pero Keith estaba... en fin, un poquito bebido y fumado.
Notaba el agua entre ambos, notaba que estaba fría, ligeramente fría. Demasiado calor acumulado. Notó la mano del chico colocarse sobre su sexo con suavidad. Hizo un suave vaivén y se alejó. Pero volvió, volvió sustituida por la mano contraria. La otra comenzó a acariciar la curvatura de su trasero.
- Keith... -susurró Lance contra sus labios. El vaivén de la mano del coreano arrancaba al cubano diversos jadeos y gemidos. -¿No te cabe en la mano o qué?... -dijo en una sonrisa. Y notó un pellizco en su culo que le hizo estremecerse. Lance soltó un suave gemido contra la boca de Keith. -Dale... así Keith... -el coreano ahora movía su mano con rapidez. Su pulgar paseó por la punta. -No, quítalo de ahí... -y obedeció como un buen gatito. Keith estaba sobre su boca, sin besarle, tentándole aún más. Y su mano del culo se volvió un dedo, y ese mismo amenazó en su entrada. -No, quita. Ahí no. -decía como podía. Keith sonreía de forma boba.
-Se va a colar...
- Que no. Sácalo de ahí. -y obedeció. El cubano acarició si nuca, aún pegado a él. Que bueno estaba ese niñato.
-Lance... -murmuró contra su boca.
-Estas durísimo... -dijo entre suave jadeos: la mano del chico no había acabado su faena. Y no, no iba a dejarle correrse. -Quita... quita... -apartó su mano de allí. Lo miró a los ojos. Estaban menos rojos. -Uno rápido. Pero sólo uno. -el coreano asintió con su cabeza, aún víctima de los efectos del alcohol. El cubano lentamente se alzó en la pared, abrazando la cadera de Keith con sus piernas. -Házmelo Keith.
-Si... -susurró el coreano. Ah si, seguían bajo el agua de la ducha. Pero ya daba igual. Lo que era ducharse... se ducharian más tarde.
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[💜 Nota de la autora porque puede y porque quiere oír a los lectores(?) :
Si queréis segundas partes de algún One Shot de los publicados, comentarlo y lo tendreis. 💜 ]
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