Cap. 14 B U R N E D
versión Klance.

-¿Ya? - la voz seca de Keith entra a su habitación. Él está en el salón, probablemente con el móvil entre sus dedos, con los ojos en la pantalla y con una pierna moviéndose de forma nerviosa.
Lance sube la parte de abajo de la ropa hasta su cintura, rodeándola totalmente y ciñéndose a ella.

- Si. - canta el castaño.

No iba a mentir, se veía perfecto. Tan guapo, tan estilizado y realzado... Su piel de  canela, bronceada de forma natural, resaltaba en ese uniforme. Demasiado corto, tal vez. No le disgustaba, una ocasión era una ocasión.
Si era verdad que no era él muy de disfraces, al menos llevarlos. Por experiencia, tendía a que su pareja o la persona de ese día lo llevara. Pero oye, esa falda le quedaba perfecta.
Dió una última vuelta sobre sí mismo, asegurándose de que sus nalgas asomaban suavemente bajo el vuelo rojo. La curva de estas estaba escasamente cubierta por ropa interior casi a juego.
Se miró de frente, acomodó la camisa blanca y salió por la puerta de la habitación.

Sin duda, acertó en cuanto a cómo se encontraba Keith: las piernas separadas, con los codos apoyados en las mismas, el móvil entre sus dedos y sus ojos pegados a la pantalla, deslizándose por esta. Con suerte había conseguido hacer ponerse una corbata y unas gafas, tópico de profesor. Sobre la mesa, la regla que le había dado para dar mayor emoción al juego.
Los pasos de Lance fueron el único motivo por el que despegar sus ojos del móvil, aunque fuera un segundo.
Sabía que tramaba algo, básicamente por como le había insistido en que se quedara sentado en el sofá y esperase por la sorpresa. No entendía nada, y sabía que si era obra de Lance, no era nada bueno.
Verle salir de su habitación con esa sonrisa tonta tampoco era algo por lo que quedarse tranquilo. Observaba sus piernas, largas y estilizadas contoneándose por el salón hasta llegar a él, con las manos sobre su faldita escarlata, corta y provocativa. Sus ojos clavados en él, esperando alguna reacción, con las mejillas levemente coloreadas de un tono cereza. La camisa blanca que lleva la decora un lazo del mismo color que la falda y se podría decir que es alguna talla más pequeña de lo que debería. Va descalzo, apenas lleva unas medias blancas hasta los muslos. Era mucho esfuerzo llevar la falda, no iba a llevar tacones – por ahora.

- Vengo a las clases extraescolares - Keith sólo puede alzar una ceja y apagar el móvil. Deja el mismo sobre la mesa y apoya ahora su cara en sus manos, concretamente la zona de su bigote sobre sus dedos. - Profesor Kogane.

Todo iba bien. Keith simplemente palmeó sus muslos, con mirada desafiante y una sonrisa ancha en su cara. Lance desfiló su cuerpo a su asiento, y allí se sentó. Las manos de Keith tardaron relativamente poco en colocarse en su cintura, haciendo que le mirase a él.
A veces sus dedos jugaban bajo la falda, tanteando las costuras de su ropa lencera. Podría dibujar las curvas de la goma de sus ropa interior, al menos la zona baja, que es la que tenía a mano.

Todo iba bien. Iba, hasta que pasaron diez minutos y Lance ya no era capaz de pensar por sí mismo.
El cubano era incapaz de no restregar su cuerpo en el ajeno, de robarle besos y algún mordisco en los labios, de pegarse a él y de soltar su nombre contra su piel.
Quería empezar cuanto antes. No podía más. Su cuerpo no podía más. Tenía calor.
Tiene sus dedos agarrando su corbata.

La emoción duró dos minutos más. Solo eso.

- ¿Entonces de qué soy profesor? - esa pregunta consigue que Lance despegue sus labios de su mandíbula.

- Eso da igual...

- Pero debería saberlo. - susurra con voz ronca, con sus manos aún en su culo, bajo la falda.

- Vale, si. De ciencias.

- ¿Ciencias? Joder, eso se me da mal. Sería un profesor de mierda... - Keith siente como los labios de Lance vuelven a esfumarse. Un suspiro es lo que aterriza en su piel.

- Joder vale, pues... de geografía. - vuelve a pegar su cuerpo al ajeno, y juraría que Keith agarra más fuerte la piel de su culo. - Eso es lo de menos. - no iba a mentir, para él era otra fantasía que le pegase contra la mesa, él detrás suya embistiendo, y que le obligara a leer todos los países de un mapa. Pero no, no parecía que fuera a ser así.

- Vale. Entonces... ¿por qué me estoy dejando seducir por esta... este estudiante? - susurra, apretando sus nalgas.

- Por que te pongo muy cachondo, Keith...

- ¿Por eso? - sabe que esa pregunta no va con segundas. Sabe que es una pregunta de verdad. Otro suspiro del Lance.

- Si Keith. No le des más vueltas. Déjate llevar...

- No puedo. No me pongo cachondo así, sin más. Necesito desarrollo del personaje. - Lance hace un afán de tirarle del pelo, pero prefiere separar su cuerpo junto un resoplo agotado. Vuelve a clavar sus ojos en los de Keith. Quiere imaginar escuchar sus risas mentales con solo mirar su cara seria. Está guapo con las gafas, como para tirarselo ahí mismo. Pero es un capullo sin escrúpulos. O un tonto muy hábil.

- ¿Que coño me estás...? Keith, es como una película porno, sin trama, ¡solo follar!

- ¡Pero - escuchar esa palabra solo hace que quiera pegarle una bofetada. La erección que tenía comienza a desaparecer. - que necesito entender el panorama! ¿Por qué un profesor respetado como yo se iba a follar a un alumno? - Lance simplemente permite que el silencio reine la situación. El coreano sigue agarrando su culo, y Lance sigue pegado a su paquete. Le mira serio, a los ojos.

- Estás haciendo que me arrepienta.

- Necesito un poquito de información para meterme en el papel. - bufa y peina su pelo, molesto al ver esa pequeña sonrisa en sus labios.

- Eres un pavo que pretende ganar dinero viendo una peli porno dónde tú eres un profesor que se folla a su alumno.

- ¿De geografía?

- Un profesor - un resoplido agotado de Lance. No se imaginaba que estaría en una situación así. - de geografía que se folla a su alumno. Vale, perfecto. ¿Listos? Acción.

- Entonces... - Keith vuelve a apretar su culo. Lance ladea su rostro al sentir la cercanía. Un beso, un beso... Ladea su cara y sonríe. - ¿Te sabes los países de Europa? - Lance rueda sus ojos.
Coloca sus manos en su pecho e impulsa su cuerpo del suyo. No, ni de broma. Despega su culo de sus muslos y su entrepierna. Se coloca la falda en su sitio en cuanto siente la ausencia del calor de las manos de Keith.

- Paso.

- Era broma, vamos, ¡era broma! - con una sonrisa en la boca se levanta. Sabe cómo es Lance, y me encanta conseguir molestarlo o destrozar sus ideas o planes. No tanto como eso, desde luego. Coge la regla que hay en la mesa y se acerca a Lance. - Vamos. Ven. Era broma. Va, vamos a echar uno. ¿Lance? No, no te metas en el... - la puerta cerrarse le interrumpe. - ...cuarto.

- Si quieres algo, ven a por ello, imbécil.

- ¿Puedo ser profesor de lengua? Eso se me da bien. - no escucha respuesta. - Era una broma tuya. No lo has... ¿pillado? Lengua, Lance... Lance, ya sabes: lengua, para follar y... - suspira y su mano – concretamente la regla que se encuentra en ella – se acerca a su cabeza y rasca su nuca. - Tío, que estoy cachondo...

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créditos de la idea: @ crispyhawks en TW.

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Si queréis segundas partes de algún One Shot de los publicados, comentarlo y lo tendreis.
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