Royalty!AU

Si algo había que celebrar esa noche era el futuro pacto de los príncipes de Marmora y Altea. Bueno, eso y su ascenso la poder en semanas, incluso escasos días.

-Ya está la gente abajo. Hay mucha eh. - la hermana del príncipe de Altea de asoma al cuarto del mismo.

-Bueno. No es la primera vez. - sonríe y se coloca la americana de forma correcta. - ¿Han llegado los de Marmora?

-Si. Y los duques de Balmera.

-Ya bueno. Esos no van a tomarse una copa conmigo.

-Por qué no quieres... - susurra su hermana. El castaño sale junto a ella de la habitación. Y juntos bajan las escaleras. - Los condes de Arus se mueren por saber de tu pacto.

-Ya. Son un poco cotillas.

-Y pesados... - murmura su hermana por lo bajo.

-No, lo tienen todo, desde luego... - gruñe el castaño.
Cuando se dan cuenta han bajado todas las escaleras. Y en los últimos escalones están ellos, los arusianos.
-Joder. - bufa el moreno por lo bajo.

-Cállate. - y con un pellizco de su hermana, sonríe y da dos besos a cada conde. - ¡Ay que alegría veros!

-Gracias linda, igualmente. Que mayores. Que guapo estas, Lance. - dice una mujer de edad alta, con joyas en el cuello y elegancia marcada.

-Gracias.

-¿Que tal ese pacto?

-Bueno bueno. - ríe y alza sus hombros. - Se va viendo...

-Nos fiamos de ti, que Altea tiene que estar en buenas manos. - el moreno planta una pequeña sonrisa en su cara, pero se ensancha al ver a Keith a la lejanía. Esa melena, sus prendas rojizas y su mirada buscando la suya son imposibles de esquivar.

-Si si. Les dejo, tengo que saludar a mucha gente. Vero, cuenta, cuentales lo de los músicos de esta noche. - su hermana abre sus ojos y le dedica una cara de mala muerte. Le desea cualquier mal ahora mismo. ¿Le va a dejar semejante marrón encima? Si, le va a dejar semejante marrón encima.

-Lance, no, oye... - el moreno sonríe y se aleja entre la multitud, saludando de forma rápida y torpe a la gente. Keith, mirando a Lance, se ha escurrido hacia la cocina. Su hermana sólo puede mirar a los condes y sonreír.
Lo va a matar.

El príncipe de Marmora trata de colarse a la cocina.
La jugada sale bien, y desde la cocina, sale al pasillo que conduce a la biblioteca y las habitaciones. Hay gente, poca, la suficiente como para pasar desapercibido. Los tacones resuenan en el parqué.

-Hola. - susurra Keith, despidiendo a dos personas de alto poder. Duque y duquesa de vete tú a saber donde.
Desde la cocina aparece un chico de ojos azules y moreno.
Keith sonríe y mirando a su alrededor, abre la puerta de una habitación. Lance sonríe y entra detrás suya, casi al mismo momento.
La habitación es amplia. Huele a tabaco caro y está llena de pequeños regalos y flores. Seguramente sean pequeños regalos para los invitados. Guardarlos en la cocina o en el almacén sería mala idea.
Keith sonríe y cruza sus brazos, dando la espalda a la pared.
-Saludas a todos menos a mi. - murmura el chico de melena negra como la noche. Lance niega sonriendo y le pega a la pared desde los hombros.

-Vete a la mierda. - susurra sonriendo, con sus manos tirando del borde de la zona del cuello de su americana roja. Y es ahí donde ambos buscan el rostro ajeno, llenos de hambre y rabia.
Lance busca con urgencia el cuerpo ajeno. Sus manos le acercan a él de manera furiosa y desesperada. Enseguida se agarran a su camisa y no a su americana. Despega sus labios de los ajenos y busca su cuello.
Sus piernas ya están entre las ajenas, pegandose a su cuerpo todo lo posible.

-Sabía que no aguantarías...

-Ni tú. Vamos. Mirate... - jadea como puede, besando su cuerpo, con sus manos descendiendo por su camisa en busca de botones. La lengua del castaño recorre la longitud de su cuello lentamente, como si fuera a medirlo. Se permite el lujo de pasar sus dientes y apretar con sus labios.

-No... para... - ríe mientras cuela sus manos a su cabello. - Chupetones no. Si me pillan...

-Te has liado con una... - susurra sonriendo, mordiendo su cuello y subiendo de nuevo hacia su rostro. Permanece a centímetros, esperando su voz. Su nariz está colocada en su barbilla.

-Si, con la princesa de Naxzela... - murmura.

-Bueno, es galra. - Keith rueda sus ojos y coge su cara de nuevo. El moreno sólo puede dejar una risa en su boca y descender las manos a su entrepierna. Sus dedos se pierden en su bragueta y en sus intentos torpes por bajarla.
En cuanto lo consigue, sube sus manos por su pecho y separa sus labios de los ajenos.
Las respiraciones ya están descoordinadas. La boca de Lance, antes de descender a su pecho, baja a su mentón y lo perfila con besos y alguna mordidita.
Las manos de Keith han descendido a su trasero, y allí han desaparecido.
Lance tarda segundos en ponerse de rodillas y deshacerse de la bragueta de Keith.
Es su puta oportunidad y nada lo va a joder. Nada.
Los labios de Lance se sitúan en la zona del pubis y allí deja besos lentos e insoportables. Keith sólo puede morder su labios y subir suavemente sus caderas, colocando su zona baja cerca del rostro de Lance. Sus dedos se han clavado en la piel de su cintura.
Y sus labios van bajando muy poco a poco. Está matando la cordura de Keith con cada beso.
Y la remata con el primer acto de presencia de su boca en su sexo. A Keith se le escapa un suave gemido al sentir su lengua y sus labios.
Lance sonríe y dirige sus ojos a los ajenos. Keith tarda poco en conducir su mano a su cabello.
La boca de Keith se abre y sin mucha vergüenza, suelta suaves jadeos y gemidos con el nombre del príncipe de Altea tatuado. Está agarrando con rabia esa mata de pelo castaña y corta, tratando de no forzarle y estropear su trabajo.
El castaño se demora lo que quiere, le encanta escuchar a Keith. Y más cuando tarda. Y aún más cuando hay gente tras la puerta, en ese pasillo. Eso le pone aún más. El peligro y lo prohibido siempre gusta más.

-Lance... - jadea el azabache, tratando saliva.

Mentiría si dijera que se quedó en una triste mamada.
Mentiría.

Continuará...

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[💜 Nota de la autora para oír a sus lectorxs:
Si queréis segundas partes de algún One Shot de los publicados, comentarlo y lo tendreis.
Si tenéis alguna idea que os hace ilusión, comentarla y se pondrá en marcha. 💜 ]