Algunas veces estar en pareja significa no estar siempre de acuerdo. Y eso no significa que sea malo sino todo lo contrario... una pareja está para apoyar, aconsejar y estar ahí en las buenas y en las malas... Ninguna persona debe sentirse menos de su pareja, que está le diga que hacer, a dónde ir, con quien estar o inclusive en intentar cambiar su manera de pensar y de vestir.

Nadie debe permitir ese tipo de cosas y mucho menos celos mal encaminados... ningún tipo de celos son buenos, y siempre se debe tratar con respeto y amabilidad.

Eso era lo que Suoh y Toko tenían... pese al carácter del albino de ojos miel pues este es un tanto voluble y de mecha corta en algunas ocasiones, su romance con el joven de cabellos aguamarina siempre a tenido como base el respeto.

Y también la comprensión...

— ¿De verdad te interesa estudiar eso?.— Genji vio a su novio desconfiado.

— Si.— Toko enseguida sonrió.— Me llama la atención y quisiera intentar el examen de admisión.

Pero había escuchado un quejido de descontento por parte del mayor, lo que le llamo la atención.

— ¿Que pasa?.— Preguntó.

— Pero ya no vamos a poder pasar mucho tiempo juntos...

— Bueno, quizás tengas razón.— Sonrió levemente.— Pero... es algo bueno para mí...

Aunque Suoh no quería que dejarán de verse tanto debido a las clases, peor aún, que Toko fuera a conocer a personas mejores que él.

— Míralo de este modo.— El joven enseguida se apresuro.— Todo esfuerzo siempre tiene su recompensa.— Lo abrazo rodeando su cuello con sus brazos.— ¡No voy a descuidarte aún así!

Toko había sonreído mientras veía a su novio. Tenía razón, quizás al principio vaya a ser un poco difícil por el hecho de acostumbrarse al cambio pero no iba a dejarlo solo siempre. Suoh suspiró pero accedió.

— Está bien...

Finalmente el menor de los Aoi había hecho que sutilmente Suoh entendiera sus proyectos, sin forzar, sin pelear y sin crear de ello un conflicto más grande... Cómo dicen por ahí: hablando se entiende la gente.

— Empezaré a cobrarte la ausencia desde ahorita.— Suoh se burló viéndolo seductoramente.

— ¡Es-espera!.— Toko se puso nervioso.

Pues su novio lo acostó en el sofá para besarlo quedando sobre él.

Okey, al parecer no todas las cosas se entienden hablando...

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