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Epílogo

Jimin, mantiene sus ojos cerrados mientras siente la brisa fresca golpeando en su rostro. A lo lejos puede oír las risas de sus amigos, aun así, intenta concentrarse en sonidos más reconfortantes como las olas del mar y las gaviotas graznando.
Con ambas manos, masajea muy suavemente su vientre abultado y sonríe.

—Cada día vas creciendo más, pequeñito —susurra a aquello que está dentro de su vientre, sin abandonar los movimientos circulares. Ha oído que acariciarse el vientre cuando se está esperando un bebé, es una forma de comunicación.

Repentinamente siente arena en su rostro y abre los ojos para toparse con YoonGi, este está de cuclillas a su lado, observándolo con el ceño fruncido.

—Quítate esa ridícula almohada debajo de tu ropa, ya te he dicho mil veces que tú no puedes quedar embarazado.

—Pero YoonGi, mira lo felices que están los tres —musita señalando hacia donde TaeHyung, JungKook y el pequeño Yaong se encuentran, estos están haciendo un castillo de arena no muy lejos de allí.

—Pues mira como lo soluciono.

YoonGi corre hacia la feliz familia gritando: "¡Temblor!" y se arroja sobre el castillo de arena, haciéndolo desaparecer.

Yaong, comienza a reír y aplaude para que YoonGi repita la escena, mientras que TaeHyung se cruza de brazos haciendo un puchero, pues el castillo estaba quedando perfecto.

JungKook, quien no le importa un tonto castillo de arena, sonríe al ver a su pálido amigo hacer ángeles en donde hacía un instante, estaba la gran construcción. Pero en cuanto ve a TaeHyung cabizbajo, borra su sonrisa.

—¡Hey! —vocifera enfadado dirigiéndose a YoonGi, este se incorpora a toda velocidad y comienza a correr en dirección al mar.

—¡Ya quédense quietos!, ¿qué le están enseñando a Yaong? —grita Jin desde la orilla, este está juntando caracoles y esquivando a esos dos, quienes se persiguen como si fuesen dos niños.

No muy lejos de allí, se encuentra su nuevo amigo NamJoon, este está concentrado practicando sus poses de yoga, está pasando de la posición de Loto a la de ángulo lateral extendido, muy en su propio mundo, como si se encontrara solo. Ningún griterío puede alterar su meditación.

TaeHyung suspira y se sienta nuevamente sobre la arena, esta vez quiere intentar hacer pirámides de Egipto.

— ¿Alguien trajo algo para comer? Ya saben como son los antojos —dice Jimin mientras revuelve la canasta de SeokJin.

TaeHyung lo observa curioso, pero luego regresa a su labor, no comprende por qué su amigo sigue fingiendo en que está esperando un bebé, de todas formas no quiere contradecirlo, aún no logra comprender del todo a los humanos.
Jimin toma un emparedado y se sienta junto al castaño, lo observa un buen rato en silencio, las pirámides le están quedando muy bonitas.

— ¿Extrañas aquella época? —pregunta con la boca llena.

—Solo un poco, a veces me siento extraño viviendo en este siglo.

— ¿Te arrepientes? —pregunta Jimin ahora un tanto más bajo para que Yaong no escuche, aunque este está inmerso en su canturreo mientras cava con su pequeña palita de plástico.

—Claro que no, ¿tú te podrías arrepentir de una cosita tan linda como mi Yaong? —pregunta mientras observa a su hijo con cariño.

—De Yaong no, pero del padre... —dice mientras observa a JungKook jugando a los ahogados con YoonGi en el mar, aunque ahora que observa mejor, ya no está tan seguro de si están jugando o si lo está intentando ahogar de enserio.

TaeHyung mira en aquella dirección y sonríe.

—JungKook a veces actúa como un pequeño niño, sobre todo cuando está con sus amigos. Sin embargo él nos ha llevado adelante, se ha esforzado y ha hecho un trabajo increíble para cuidarnos a Yaong y a mí. No nos hace faltar nada y es un padre increíble, no podría estar más enamorado —admite con un repentino rubor en sus mejillas.

—Jamás pensé que JungKook podría llegar a ser tan responsable, hace mucho tiempo que somos amigos, créeme que lo conocía mejor que nadie, me cuesta creer lo mucho que ha madurado.

—A veces lo noto preocupado, por las noches no duerme bien, no me quiere decir la razón, pero estoy seguro que teme que regrese a mi forma felina y ya no vuelva, no sabes como se desespera cuando Yaong se convierte en gato.

— ¿Le puede ocurrir a Yaong lo mismo que te ha ocurrido a ti?

— ¿Sabes lo que es un híbrido? —pregunta TaeHyung. De pronto deja lo que está haciendo y observa a Jimin atentamente.

Este, niega con la cabeza.

—Es aquel que es formado mediante la mezcla de dos seres de diferente naturaleza. Animal y humano en este caso. Yaong y yo somos diferentes. Yo, a diferencia de mi hijo,  no he sido concebido naturalmente con dicha unión, mis padres eran humanos, fui un humano común y corriente, a mí me fusionaron con un ser animal ¿Comprendes?

Jimin se rasca la cabeza en señal de confusión —osea que Yaong es un híbrido, tú no. Pero, hay algo que no comprendo, ¿qué tanto de animal tienes, aun cuando eres un humano?

—Ello es algo que me cuesta admitir —TaeHyung agacha la cabeza—. Cuando estoy en mi forma de gato, yo sigo consiente, a veces mis instintos me juegan una mala pasada pero ello no significa que yo me sienta un animal, es decir yo, el humano consiente y racional, TaeHyung. Pero, lo mismo sucede cuando estoy en mi forma de humano, mi instinto felino permanece, le he dicho muchas veces a JungKook lo contrario para que no se sienta mal o raro al respecto, pero así son las cosas, nunca me podré deshacer de ese animal.

—Eso convierte a JungKook oficialmente en zoofílico.

—Estoy muy frustrado. No me siento un animal, pienso y razono como un humano, pero a veces no sé ni lo que soy.

—Eres humano, no importa todo lo demás, siquiera voy a mencionar que no eres al cien por ciento un hombre, ya que puedes quedar embarazado, eso generaría otro mar de confusiones.

—Lo acabas de mencionar.

—Lo importante es que Yaong, puede cambiar a su antojo su forma sin temer que el felino en su interior se interponga, pues, no hay nadie más, solo él.

—Exacto, no corre peligro alguno, no fue fusionado a otra alma, es él todo el tiempo por más que su forma cambie.

—Pero, ¿a ti te podría ocurrir de nuevo aquello que no puedas regresar?

—Desde aquella vez, no he regresado a mi forma felina, si te soy sincero, me da miedo hacerlo. Pero regresé una vez, estoy seguro que sabré cómo volver si me sucede de nuevo.

—Y cuentas con la ayuda de aquel sujeto raro —susurra Jimin señalando a NamJoon.

—Estás hablando con una persona a la cual la fusionaron con un gato y una nigromante, ¿y te parece raro un joven psíquico haciendo yoga?

Ambos comienzan a reír.

—Oigan ustedes dos, vengan a ayudar, ya es hora de comer —grita Jin, quien está de cuclillas extendiendo el mantel sobre la arena.

Enseguida, Jimin se incorpora y camina hacia Yaong, al cual lo levanta para llevar en volandas hasta el mar con el propósito de quitarle la arena de encima.
TaeHyung comienza a agitar sus brazos y llamar a todos los demás, que, en cuanto escuchan la palabra "comida" dejan lo que están haciendo y van con prisa hacia la canasta de alimentos como muertos de hambre.

JungKook toma un panecillo de la cesta, pero Jin le da una palmadita en la mano. —No aún, espera a que estén todos.

NamJoon viene caminando con toda su parsimonia, él nunca lleva prisa, y aquello a veces exaspera a los demás, sobre todo cuando hay comida de por medio.
En cuanto llega, toma un emparedado de la canasta y se va a sentar en un banco de concreto, no muy lejos de allí.

— ¿Por qué a él no lo reprendiste por servirse antes de que estemos todos? —Refunfuña JungKook.

—Él no es un muerto de hambre como tú.

En seguida llega Jimin con Yaong en brazos.

—Ahora sí, ya pueden comer —dice Jin, quien, se sirve unos cuantos vegetales en un plato y camina hasta donde NamJoon se encuentra para sentarse junto a él.

Jimin lo observa a JungKook con el ceño levantado —parece que tu familia se seguirá agrandando—. Dice señalando al mayor.

—Ya cállate y come.

Mientras, Jin le cuenta a NamJoon respecto a todas las caracolas que ha encontrado y lo lindo que va a decorar su jardín con ellas. NamJoon asiente con la cabeza sin emitir ni una palabra. Jin está inmerso en su cháchara, siquiera se detiene para comer.
Tal vez está nervioso, odia los silencios incómodos. De pronto, ve una gaviota volando muy bajo cerca de sus amigos, esta planea a toda velocidad y le roba a Yaong la comida de su manito, luego ve como los demás la espantan grácilmente. Jin le señala la cómica escena a NamJoon, pero al voltearse, ve a un gato de pelaje plateado y ojos cafés, sentado justo dónde NamJoon estaba segundos antes.
Jin se tensa y se incorpora del asiento, aventando el plato de vegetales al suelo.

—Dime que esto no está pasando de nuevo —dice para sí.

El gato lo observa fijamente y luego de varios segundos, maúlla.

— ¿NamJoon? ¿Eres tú?, lo siento, no he pretendido asustarte —dice a medida que se pone de cuclillas frente al felino.
Lo observa con una expresión lastimera, no quiere que NamJoon se ofenda por la forma en que reaccionó al saber que su naturaleza era igual a la de TaeHyung—. Te comprendo, pudiste habérmelo dicho, ¿eso era lo que te inquietaba? ¿Es por eso que te mantenías callado y pensante? Puedes ser tú mismo con nosotros no tienes por qué fing... —Jin frena sus palabras en cuanto ve a NamJoon tras él. Este está con la boca abierta, observándolo con notoria confusión en su rostro, por como interactúa con un gato.

—Fui por bebidas al coche y cuando regresé, te vi tan concentrado charlando con el gato, que no quise interrumpir —dice el moreno quien no deja de observar a Jin como si fuese un bicho raro.

Este sonríe nervioso y niega repetidamente con la cabeza. —No, yo... creí que tú... ya, olvídalo —resopla frustrado, decirle que creyó que se había convertido en gato, era peor que admitir sus rarezas.

NamJoon le sonríe, acto que hace que se le enmarquen sus preciosos hoyuelos, Jin suspira y lo observa en silencio, completamente embobado. Pero inoportunamente, llega JungKook corriendo hacia él quitándolo de su ensueño.

—NamJoon, ¿Jin y Yaong pueden dormir esta noche en tu casa? ¡Es una urgencia!

—Lo veía venir —dice este con serenidad.

Jin observa a su hermano con el ceño fruncido, pero sus dudas se le aclaran en cuanto ve a JungKook corriendo hacia el coche junto con TaeHyung.

Jimin le grita a su amigo desde lejos. — ¡Usen protección!

SeokJin agacha la cabeza sonriendo, ningún día es normal con esos dos. Sin duda el celo de TaeHyung está llegando otra vez, pero al menos ya han aprendido a darse cuenta de los síntomas previos.
Este se pone extremadamente irritable, sensible y muy muy cariñoso, todo un bipolar consagrado. JungKook dice que el aroma de TaeHyung cambia, lo cuál a todos les parece admirable, ya que solo él lo puede percibir.

Bien, ya es algo a lo que Jin se está acostumbrando, al menos le reconforta saber que pasará la noche en casa de NamJoon, no va a negar que estaba harto de andar corriendo con su sobrino a cuartos de hotel cada vez que el castaño entraba en celo; este, antes se limitaba a encerrarse con Yaong en la habitación, pero las paredes se tornaban como frágiles láminas y los sonidos no cooperaban a la imaginación del pequeño Yaong, quien aún en su inocencia preguntaba:

-—Jinie, ¿a mis papás les busta jugad a las luchas?

¡Gracias a dios ahora está el tío Yoonie!, como le suele decir Yaong al moreno. Jin recuerda otra vez que pasará la noche con él y su corazón comienza a latir con desenfreno.

[...]

Jimin termina de comer y se acerca a YoonGi, se sienta sobre sus rodillas y gira el cuello para propiciarle un delicado beso en sus labios.

Suspira.

—He comido tanto que ya no necesito un almohadón para pretender estar embarazado —se queja mientras se afloja el cinto de sus jeans.

YoonGi le sonríe —no sé por qué insistes con ello, ¿no que era una maldición?, te he oído muchas veces hablar respecto a la mala suerte de JungKook al ser padre, ¿qué ha cambiado ahora?

—Han formado su familia y siempre se los ve felices a causa de ello, yo también quiero eso para nosotros.

—¿Cambiar pañales sucios? ¿No dormir por meses?

—Tener un bebé es como una gran aventura, claro que se requiere de sacrificios, pero las alegrías son aún mucho más satisfactorias.

— ¿Sabes que con un bebé recién nacido en la casa, el sexo es historia pasada?

Jimin cambia su expresión y se aleja unos centímetros de YoonGi, para observarlo con asombro.

—Mejor consígueme un pez.

El pálido sonríe y abraza a Jimin por detrás, le acaricia el vientre por debajo de su playera mientras observa a lo lejos a un pequeño Yaong en forma de gatito, juega con el felino de pelaje plateado, correteando de un lado a otro. Quiere avisarle a Jin, pero lo ve tan feliz conversando con NamJoon, que prefiere esperar un poco más para quitarlo de su burbuja de ensueño y traerlo nuevamente a la realidad.


Esto ha sido todo, espero hayan disfrutado la historia.
Prometo regresar con nuevos libros KookV en el futuro; tengo algunos extras de "Kitten" en un borrador, quizá os comparta más adelante.

Os amo un montón, gracias por el apoyo.

ℹSi les gustó, agradecería MUCHO si recomiendan la historia, para que más personitas la lean.

¡Cuidense mucho!
Y una vez más;
¡Gracias!

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