—Cariño, ya llegué. —BaekHyun se miró una vez más al espejo en el intento de confirmar que su atuendo estuviera perfecto antes de salir del baño. Una vez que estuvo en el pasillo del departamento vio la gran maleta a un lado de la puerta y escuchó a su novio beber agua en la cocina—. ¿Bebé?

—Estoy en el pasillo —avisó nervioso y se pasó las manos por el cabello.

—Hey, Baek, debiste responderme antes. Me estabas asustando.

Cuando el gran cuerpo de su novio apareció por el inicio del pasillo este inmediatamente se detuvo al verlo. BaekHyun escuchó perfectamente como la respiración de su novio se cortó y sus ojos le recorrieron el cuerpo de manera nerviosa.

ChanYeol tosió antes de hablar—: ¿Por qué estás vestido así?

La diadema con orejas de gatito se veía por entre su cabello desordenado y su cuello estaba adornado con una linda correa de cuero con detalles de corazones rojizos. Su cuerpo estaba desnudo a exceptuar de la pequeña falda negra con detalles rojos que se puso para la ocasión, la cual quedaba un poco elevada por la parte trasera de su cuerpo debido a la cola peluda que se afirmaba a su butt plug*.

—Estuve esperándote por mucho rato. —Se volteó un poco con la idea de apoyar las manos sobre la pared y alzó un poco el trasero, haciendo notorio el bulto—. Y jugué un poquito conmigo. Espero que no te moleste.

Curvó las cejas y se pasó la lengua de un lado a otro por sobre los labios con la idea de verse sexy. Para su suerte, los ojos de su novio siguieron atentamente cada uno de sus movimientos.

—¿Por qué me haces esto...? —susurró el chico de manera ahogada, casi como si estuviera por hacer algo que no quisiera, cosa que lo hizo fruncir el ceño e incomodarse.

Desplazó su aparente actitud coqueta y dejó caer los brazos, provocando que su cuello se fuera hacia adelante de una manera estúpida porque el extremo de la correa que tenía amarrada al cuello la tenía entre las manos, cosa que ni siquiera recordó.

—¿Pasa algo? —Se tocó el pelo de manera nerviosa.

ChanYeol suspiró y se apoyó de espaldas a la pared mientras cerraba los ojos y se llevaba las manos al rostro. Él no hizo más que mirarlo atentamente desde donde estaba.

—BaekHyun, amor... —empezó el chico con voz suave mientras lo miraba—. Acabo de llegar de un viaje. Estuve horas sentado en el avión y luego en el taxi que me trajo hasta aquí.

BaekHyun se apresuró en acercársele y ponerle ambas palmas sobre el pecho, retomando su actitud anterior y recordando por qué se vistió así en primer lugar.

—Y yo te extrañé mucho. —Hizo un puchero y se acercó a los labios del contrario—. No deberías ser malo con tu novio. Te corresponde saludarlo como se debe.

El alto llevó una mano hasta su cintura en un gesto casi involuntario, aunque fue aquello lo que provocó que la gran extremidad tirara un poco de su falda, por lo tanto también de su colita y del tapón anal al que estaba atada.

—¿Te pusiste esto otra vez? —ChanYeol frunció el ceño, aunque no pareció enfadado, sino que más bien agotado, como si le costara soportar todo aquello.

—Me gusta como me queda —susurró y le dio un suave beso en la barbilla a su novio—. Aunque en esta ocasión incluí un par de cositas.

—Pensé que te gustaba que fuera yo quien usara la correa.

—Esta vez estaré a tu completa disposición, cariño. —Movió suavemente las caderas—. Seré tu pequeño gatito...

Su novio echó la cabeza hacia atrás, logrando hacer que se encontrara con sus ojos, los cuales ya empezaron a tomar un brillo distinto debido a la excitación. Las manos ajenas se movieron con rapidez y antes de que se diera cuenta fue empujado para quedar apegado a la pared que estaba al otro lado del pasillo. Una vez que estuvo acorralado ChanYeol metió una mano por debajo de su falda y apretó su nalga desnuda, provocando que gimiera al sentir que el dildo se movía en su interior. El chico pareció sorprendido por su reacción y sus grandes dedos recorrieron su piel con suavidad hasta situarse sobre el butt plug, elevando luego las cejas al sentir el objeto.

—Ya te dije que jugué un poco —susurró con la intención de explicarse.

A pesar de sus palabras, su novio siguió con la misma expresión, cosa que lo obligó a caminar hacia el final del pasillo, donde estaba la habitación que ambos compartían. Cuando abrió la puerta se encontró de inmediato con la amplia cama y se subió a esta para luego mirar por detrás de sí, notando como ChanYeol seguía con la misma expresión de lasitud, aunque se acercó hasta donde estaba y se apoyó en el marco de la puerta. BaekHyun volvió a posar la vista en el cabecero de la cama y sonrió para luego posar el pecho sobre el acolchado mientras sus rodillas estaban ancladas al colchón, haciendo resaltar su trasero. Llevó ambas manos hasta sus piernas y se acarició a sí mismo, subiendo cada vez un poco más sus manos hasta que estas se posaron sobre sus glúteos.

Sabía que su falda era tan corta que esta daría el espacio para que ChanYeol viera claramente de dónde brotaba su colita negra, pero, a pesar de eso, afirmó su propia piel con los dedos con intención de separar ambas nalgas y escuchó gruñir a su novio por detrás, cosa que lo hizo morderse el labio inferior con la intención de que su sonrisa no se hiciera tan notoria. Cuando escuchó que ChanYeol tuvo intenciones de acercársele, él rápidamente se soltó a sí mismo y se sentó sobres sus propias pantorrillas, impidiéndole que hiciera cualquier cosa. Se encontró de inmediato con el ceño fruncido de su novio, cosa que lo hizo sonreír con una actitud casi burlona.

—¿Quieres jugar con tu gatito? —susurró de forma coqueta.

Se movió con cierta elegancia por sobre la cama hasta llegar frente a ChanYeol, posó las manos sobre su pecho y tiró un poco de su camiseta con cuidado y lentitud, también rasguñando suavemente en algunas zonas con la intención de dar a conocer su intención por querer sacarle la ropa. Por suerte, el contrario logró comprender su propósito y terminó por sacarse todas las prendas que cubrían su pecho. Cuando BaekHyun vio la piel al descubierto no dudó en pasar la lengua por sobre la caliente superficie y una de las manos de ChanYeol terminó posándose sobre su cabeza mientras él continuaba con el recorrido que hacía su lengua por el pecho ajeno; a veces se detenía en los pezones para morderlos con suavidad mientras que sus uñas rasguñaban delicadamente el estomago del chico con la intención de parecer un felino.

—¿Aún sientes que estás muy cansado por el viaje? —Posó el mentón sobre el pecho de su novio y luego miró hacia arriba para provocarlo con una sonrisa.

—Estoy cansado, pero... —ChanYeol le acarició la mejilla, a lo que él cerró los ojos y ladeó la cabeza, buscando su caricia—. No puedo ni quiero negarme.

Sonrió mientras abría los ojos y luego pasó ambos brazos por sobre los hombros ajenos, creando algún tipo de abrazo que luego fue acompañado de un suave beso. Aquella fue su bienvenida, un beso que dejó de lado lo pícaro de la situación para mostrar el sentimiento de amor que había entre ambos, generando también una estimación de cuánto se echaron de menos.

—¿Qué tienes planeado? —preguntó ChanYeol con una sonrisa cuando se separaron.

BaekHyun se mostró más animado y se levantó de la cama con cuidado para luego empujar a su novio y hacer que este se sentara sobre la blanda superficie. ChanYeol rio con suavidad al verlo tan entusiasmando, pero él no se detuvo a contemplarlo a pesar de que quiso y solo avanzó con pasitos rápidos hasta la cocina, aunque siempre teniendo cuidado porque su propio movimiento le provocaba cierta sensación entre los glúteos.

Una vez que estuvo en la habitación buscó con rapidez dentro de la bolsa que estaba a un lado del microondas y sacó del interior de esta el pequeño pote de vidrio con la etiqueta de mermelada de mora. Cuando volvió a la habitación ChanYeol rio al ver lo que había entre sus manos y se levantó para acercarse al armario con la intención de buscar en el interior de este las esposas que estaban dentro de la caja plástica en la que dejaban sus juguetes sexuales.

—Te gustaría usarlas, ¿no?

Asintió cuando vio las esposas moviéndose un poco, ya que estas eran afirmadas por los dedos de ChanYeol.

—Lo haré rápido y luego podrás jugar conmigo. —Su novio le sonrió de medio lado, ya sabiendo a qué se refería.

ChanYeol caminó hasta la cama y le lanzó las esposas para luego sentarse sobre el colchón y apoyar la espalda contra el cabecero. Baekhyun no tardó en seguirle y pedirle mudamente que pusiera las manos en la posición correcta para luego afirmarlas con los barrotes.

Las esposas solo se trataban de un artículo de juego, por lo que el cierre de esta se abría con un tipo de presión, la cual no podía hacer ChanYeol por sí solo, lo que le daba más emoción al momento.

—¿Quieres que te saque los pantalones? —BaekHyun acomodó el pote de mora sobre la mesilla de noche y miró hacia el chico en espera de su respuesta.

—Sácalos para no ensuciarlos.

Asintió y llevó ambas manos hasta la correa que usaba su novio en ese momento. A pesar de que tenía intención de desnudarlo rápidamente, no pudo hacerlo y simplemente se quedó con la mirada fija en el abdomen ligeramente marcado de su novio. Observó atentamente la suave piel, quedándose prácticamente estático y aquello asustó un poco a ChanYeol.

—¿Sucede algo?

Rápidamente apegó la mejilla en el abdomen de su novio y le pasó los brazos por el torso en una especie de abrazo.

—Te extrañé tanto —murmuró con sinceridad y la voz un poco ahogada.

—Bebé...

Su agarre se hizo más fuerte y abultó el labio inferior a pesar de que ChanYeol no lo viera, simplemente haciéndolo porque sentía que en cualquier momento se largaría a llorar.

—Te amo, Yeol. —Sus palabras serias sonaron fuertes y claras, mostrando la veracidad de aquello que decía.

—BaekHyun, mírame. —Se levantó un poco, quedando de frente con quien estaba por debajo de él. ChanYeol lo miró serio, dándole a la situación mucha más importancia—. Acércate y bésame.

Sonrió suavemente y luego se acercó hasta su novio para besarlo con lentitud y dedicación, poniendo todo de sí para demostrar por segunda vez todo lo que lo extrañó.

Sin que siquiera se dieran cuenta, el beso cambió para pasar a convertirse en un pequeños juego entre los dos al morderse un poco.

—Deberíamos continuar.

Su novio asintió con una sonrisa y movió un poco las piernas por debajo de él con la intención de recalcar su punto.

BaekHyun se mordió el inferior para verse sexy y se movió por sobre el contrario hasta tener el rostro a la altura de la entrepierna ajena. Apoyó la mejilla sobre la superficie y pestañeó coquetamente con la intención de que su novio lo viera y por suerte logró conseguir lo que esperó, que era un movimiento de caderas y un gruñido.

Rio suavemente, como si se burlara y desde ahí pareció comenzar el juego. ChanYeol tiró de las esposas, haciendo que el sonido del metal se escuchara como demostración de la desesperación. Su dedo índice pasó sobre el botón del pantalón y luego recorrió la línea del cierre. Sus manos solo se movieron con más ímpetu cuando escuchó el gruñido de ChanYeol y supo que este estaba desesperándose.

Tiró un poco de los pantalones cuando pudo desabotonarlos e hizo que estos bajaran hasta medio muslo. Se movió sobre el colchón hasta quedar de manera horizontal, formando una especie de cruz con el contrario. Su cabeza entonces volvió a posarse sobre la entrepierna del otro y su cuerpo se instaló con mayor comodidad sobre la cama mientras que apoyaba los codos sobre la blanda superficie y luego la barbilla sobre el talón de su mano, esto más que nada con la intención de adoptar una postura desinteresada.

Volvió a utilizar su dedo índice para hacer que este pasara por sobre el bóxers de su novio y el bulto que había debajo de estos. Acarició suavemente la zona y sonrió cuando escuchó que ChanYeol volvía a tirar de los brazos con la intención de soltarse.

—Bebé, no vayas tan lento.

Apretó los labios en un gesto tierno y miró hacia el contrario para luego volver a tocarlo, aunque esa vez con toda la mano y sin dejar de tener aquel tacto pausado.

Observó atentamente el cambio de expresiones del otro y, luego de que ChanYeol le enviara una profunda mirada, sus intenciones cambiaron. Esa vez se alzó un poco para bajar por completo el bóxers que quedó ligeramente húmedo por el líquido preseminal. Cuando tuvo el miembro erecto de frente sonrió con picardía y se apoyó sobre este, dejando que su mejilla se contactara con la tibia piel. ChanYeol echó la cabeza hacia atrás ante su acción, provocando que se golpeara con el cabecero, pero al parecer a este le importó bastante poco, ya que no hizo más que gruñir y retorcerse ante sus caricias.

—Baek, por favor...

—¿Me dejarás usar la colita cuantas veces quiera?

Los ojos de su novio se encontraron con los suyos y él pestañeó con la idea de verse encantador. También frotó un poco su mejilla contra el miembro del contrario, creando más desespero en este.

—¡Está bien!

Sonrió ampliamente y se levantó un poco para acercarse hasta ChanYeol y dejarle un suave beso sobre la mejilla antes de volver a bajar, aunque antes se aseguró de tomar el pote de mermelada que dejó sobre la mesilla que estaba a un costado de la cama. Abrió el pote y metió el dedo índice en el interior con la idea de que este quedara de aquel color oscuro debido a la mezcla con trocitos de mora. Una vez que tuvo un poco de su dedo cubierto precedió a mirar a ChanYeol y pasar el dígito por sobre el labio inferior del contrario, manchándolo. Se acercó hasta él con una sonrisa pícara y pasó la lengua por sobre el lugar que ensució, consiguiendo que finalmente terminara con ChanYeol besándolo rudamente.

—Ve rápido antes que me moleste contigo. —Sonrió contra los labios ajenos al escuchar aquello, sabiendo que no había manera de que su novio se molestara, al menos no en un momento así.

—¿Te duele el pene? —preguntó con burla y posó una mano sobre el miembro del contrario.

El chico levantó las cejas sorprendido y lo miró fijamente a los ojos, casi en una postura estupefacta.

—Estás loco. —ChanYeol rio con suavidad a pesar de la situación y él se inclinó sobre la entrepierna ajena, estando más animado si es que aquello se podía.

Volvió a tomar la mermelada con la intención de ahora meter tres dedos para manchar estos y luego se los llevó hasta los labios, lugar en donde esparció la mermelada. Miró atentamente a ChanYeol mientras lo hacía, logrando recibir unos ojos fijos en sus labios.

—¿Qué harás con eso, bebé?

—¿Qué quieres que haga? —Lo miró pícaramente y se mordió el labio inferior, saboreando él mismo la dulce mermelada.

—¿Me besarás con eso, cariño? —Sus cejas se alzaron en sorpresa y la sonrisa de medio lado apareció por entre sus labios, casi como si se burlara de lo que dijo ChanYeol.

—Puedo besarte si así quieres. —Se acercó hasta el chico para dejar un suave beso sobre los labios ajenos que no fue nada más que un simple toque, cosa que claramente pareció serle insuficiente al alto, pero BaekHyun no tuvo tiempo para contentarlo con un beso mejor, tampoco esa fue su intención.

Volvió a meter los dedos dentro del pote de mermelada y sacó un poco de esta para volver a pasársela por sobre los labios, aunque no solo hizo eso, sino que también puso un poco sobre la punta del pene de su novio, haciendo que este gimiera ante el pronóstico de la situación.

BaekHyun se apoyó con mayor comodidad sobre la cama, acostando prácticamente todo su cuerpo sobre el colchón mientras que solo se apoyaba en sus codos para tener una mejor posición y así mirar el miembro ajeno. El pote de mermelada estaba justo a su lado con la intención de seguir incluyendo esta en la situación, pero antes de eso se decidió por pasar suavemente la lengua por allí donde manchó anteriormente, tratándose no específicamente de sus labios. La punta de su lengua tanteó el terreno y su novio gimió con fuerza cuando sintió el contacto húmedo, el cual fue bastante escaso, ya que solo se trató de una lamidita y al parece que fue lo suficientemente ágil para limpiar por completo el poco de mermelada que hubo sobre el glande.

ChanYeol tiró de las esposas y BaekHyun lo miró por un segundo antes de volver a lo suyo. Esa vez su boca se abrió para rodear el miembro ajeno, haciendo que la contextura y el sabor de la mermelada les sacara un gemido a ambos. Desde ese momento el alto pareció tener más intenciones de ser desatados y aquello se percibió perfectamente con tan solo escuchar el esfuerzo que hacía el chico para tirar de las esposas. Por otro lado, BaekHyun ya comenzó con la mamada; su cabeza subía y bajaba, esparciendo con sus labios la mermelada. Así continuó por un rato, deteniéndose de vez en cuando para incluir un poco de aquella sustancia dulce antes de volver a continuar. Solo se detuvo cuando su novio mediante un gruñido le indicó que lo hiciera.

—Se acabó, Baek. Suéltame. —Se sorprendió ante eso y se alzó un poco para quedar a la altura de ChanYeol. Su ceño permaneció fruncido ante lo que dijo el contrario, pero este ni siquiera se tomó el tiempo de darle algún tipo de explicación y solo le indicó mediante gestos que lo soltara.

—Pero aún no terminas —susurró temeroso de haber hecho algo malo.

—No quiero correrme en tu boca.

No supo por qué, pero aquel comentario no le gustó para nada. O sea, ChanYeol era su novio, se suponía que debía correrse en su boca si él así lo permitía. El contrario nunca se negó a ese tipo de cosas y podría decirse que hasta le dolió un poco escuchar a su novio decir aquello.

—¿Por qué...? —Sus palabras sonaron con poca fuerza y de seguro su rostro debió adoptar algún semblante triste. Supuso aquello al ver como ChanYeol cerraba los ojos con fuerza y echaba la cabeza hacia atrás mientras decía cosas incomprensibles entre dientes—. ¿ChanYeol?

El aludido suspiró y lo miró directo a los ojos—. No malentiendas mis palabras, bebé. —El chico movió un poco la cabeza, viéndose casi apenado—. Sabes que me gustan este tipo de cosas, es solo que... Desde hace rato que veo tu colita moverse y no me siento muy bien con ello. A pesar de que estás tocándome no pudo dejar de desear tocarte.

Apretó los labios con la intención de ocultar su sonrisa, eso más que nada para no demostrarle a ChanYeol mediante gesto que estaba a gusto con sus palabras y que estas le subieron el ego o algo así.

—¿De verdad quieres que te suelte?

El chico asintió y la sonrisa apareció grande en el rostro de BaekHyun al saber que tenía el poder total sobre su novio.

Se acercó hasta el contrario, estando lo suficientemente cerca para besarlo, pero decidió no hacerlo, en vez de eso simplemente se quedó ahí, mirado la boca ajena y viendo lo roja y húmeda que estaba esta por las constantes mordidas que se propinó ChanYeol a sí mismo con la intención de que sus gemidos y gruñidos no fueran tan audibles.

—Pero tengo una condición —susurró.

—¿Otra?

Llevó las manos hasta el rostro ajeno y acarició con la punta de sus dedos la cejas del chico, delineando estas y luego bajando por las mejillas hasta perderse en su barbilla. Lo miró atentamente durante todo el proceso, quizás enamorándose un poquito más del chico si es que realmente llegaba a haber espacio en sí mismo para almacenar más amor por quien estaba frente a él.

—Te quiero a ti y al dildo dentro —musitó.

ChanYeol hizo la cabeza hacia un lado, como si tuviera la intención de alejarse del contacto y darle algún tipo de respuesta muda.

—Sabes que no me gustan ese tipo de cosas.

Se alejó del chico y se mordió el labio nervioso al notar el cambio de aura del contrario. Sabía que aquel era un tema delicado para ChanYeol, quien siempre fue muy protector con él y buscaba lo mejor para su salud.

—He estado mucho rato con el butt plug. No creo que sea del todo divertido si ya estoy tan... abierto —murmuró lo último, quizás un poco avergonzado de su propio comentario.

Su idea era convencer al contrario, cosa que realmente no estaba haciendo y aquello lo confirmó al ver el cambio de expresiones que tuvo ChanYeol.

Sus manos se dirigieron hacia las esposas e hicieron que estas libraran las muñecas contrarias al notar que el ambiente tomó otro tipo de aura, dejando ya el toque pícaro atrás.

—Sé qué te pido muchas cosas, especialmente referente a lo sexual, pero debes comprenderme un poco, Yeol. —El susodicho lo miró con el ceño fruncido, casi como si estuviera ofendido—. Somos novios desde hace mucho y nunca te he sido infiel, tampoco quiero serlo.

—¿Qué estás queriendo decir?

Todo ese tiempo estuvo sentado sobre el regazo de su novio y ante aquellas palabras no pudo evitar sentirse un poco asustado, no porque ChanYeol fuera agresivo con él o algo por el estilo, sino porque sabía que el tema que tocó era delicado y que debía tratarlo con cuidado para así expresarse correctamente.

—Me gusta experimentar cosas nuevas —intentó explicarse—. A pesar de que no debería, el sexo toma un papel importante si se quiere mantener una relación amorosa.

—BaekHyun...

—Somos novios desde hace años —lo interrumpió—, y creo que hacer este tipo de cosas fortalecen nuestra relación, aunque sea un poco. Con esto ambos nos divertidos y probamos cosas nuevas, juntos, como una pareja, porque confío en ti y tú también deberías confiar en mí.

—Sí confío en ti, BaekHyun.

—Entonces ¿cuál es el problema?

Su novio suspiró y él le acarició la mejilla con la intención de demostrarle mediante aquel gesto que estaba ahí junto a él, apoyándolo en cualquier decisión que fuese a tomar.

—No confío en mí. Tengo miedo de hacer este tipo de cosas. —BaekHyun se topó con los ojos de ChanYeol, encontrándolos brillantes—. Tengo mucho miedo de perderte, de hacer algo mal y asustarte.

—No harás eso —murmuró enternecido por las palabras sinceras del contrario.

—Sí puedo hacerlo, bebé. —ChanYeol le acarició el cabello en un gesto distraído—. Puedo cometer muchos errores.

—Entonces yo intenté comprenderlo, lo corregirás, aprenderemos de ello y luego olvidaremos que fue un error. Tú también debes prometerme que harás lo mismo conmigo.

A pesar de que ChanYeol tuvo intenciones de contradecir sus palabras o mostrarle alguna expresión para aclararle que su respuesta no le gustó del todo, de igual forma el chico le regaló una pequeña sonrisa.

—¿De verdad quieres hacerlo?

BaekHyun se mordió el labio inferior con la intención de ocultar la inmensa sonrisa que tuvo intención de tomar lugar en su expresión.

—Sí, amor. De verdad quiero intentarlo.

El contrario suspiró y echó la cabeza hacia atrás, casi adoptando una actitud dramática—. Bien, vamos a hacerlo entonces.

Desde ahí ambos parecieron moverse rápidos, ansiosos. ChanYeol se las ingenió para rebuscar dentro de la mesilla que estaba a un costado de la cama el lubricante y BaekHyun se acostó de cara al colchón con la intención de morder un poco las sábanas para así ocultar el grito de emoción que tuvo atrapado en la garganta.

Estuvo tan concentrado pensando en todas las cosas que podrían pasar en tan solo unos minutos más que ni siquiera se dio cuenta que ChanYeol se sentó sobre sus piernas estiradas, prácticamente sobre su trasero, cosa que lo hizo dar un grito ahogado porque aún tenía el butt plug entre sus nalgas. Le pegó un manotazo en la pierna al contrario y este solo rio suavemente al ver su reacción, cosa por la cual se molestó. Por aquello mismo tuvo intenciones de reclamarle al chico, pero este se sentó sobre sus muslos y tomó del pequeño juguete para tirarlo levemente, haciendo que su espalda se arqueara y un gemido agudo saliera de manera inconsciente de su garganta. Enterró el rostro contra la almohada, viéndose incapaz de tener las fuerzas suficientes como para hacer algo más.

—ChanYeol... —gimió mientras de retorcía al sentir que el chico sacaba y metía el objeto lentamente.

—Apóyate sobre las rodillas y abre las piernas.

Con dificultad le hizo caso y debido a eso mismo terminó con el pecho sobre el colchón por la falta de estabilidad. ChanYeol se puso por detrás suyo y movió el juguete un rato más, logrando que BaekHyun apretara fuertemente las sábanas mientras no dejaba de retorcerse y morderse los labios, cosa que cambió cuando su novio finalmente sacó el objeto por completo.

Aún no eyaculaba, así que su miembro erecto estaba aprisionado entre su cuerpo y el colchón. Luego de una rápida mirada pudo confirmar que ChanYeol estaba casi tan duro como él, posiblemente por el intento de mamada que hizo anteriormente.

—¿Qué haces? —preguntó cuando vio como el contrario se levantaba de la cama y dejaba el butt plug a un costado del colchón.

El chico no le contestó y solo caminó hacia el armario que había en la habitación para rebuscar dentro de aquella famosilla caja plástica.

—Dijiste que esta vez querías hacer algo distinto. —ChanYeol no lo miró al hablar—. Mientras tanto deberías quitarte las cosas.

—Pero me gusta mi atuendo —susurró a la defensiva—. Además, aún tengo otras cosas que me gustaría ponerme.

ChanYeol suspiró desde donde estaba y se dio vuelta para apuntarlo con uno de los dildos, cosa que podía parecer ridícula, pero para BaekHyun no fue lo mismo, especialmente porque notó aquella mirada de advertencia que le dio su novio.

—Me cuesta hacer este tipo de cosas, BaekHyun. Por favor entiéndeme. No quiero que tengas más cosas aún.

Suspiró y se dio vuelta sobre el colchón para quedar mirando hacia el techo. Se sacó el cintillo para tirarlo a algún lugar de la habitación al verse un poco amurrado y luego tiró de la falda con la intención de bajarla, viéndose luego en la necesidad de levantar un poco las caderas para hacer que la prenda bajara del todo. Se sacó también el collar que tenía atado al cuello, dándose cuenta que la correa de algún modo se enredó en su cuello también, cosa que quizás ChanYeol hizo sin que siquiera darse cuenta al momento de hacerle la mamada.

Una vez que estuvo completamente desnudo y sin ningún otro tipo de implementos suspiró y miró a su novio, dándose cuenta que este elevaba uno de los dildos hacia él.

—¿Te parece bien este?

No era el juguete más grande que tenían en referencia de consoladores, de hecho, era uno de los primeros dildos que tuvo BaekHyun, algo que compraron juntos y una de sus primeras entretenciones de ese tipo.

Prefirió asentir para darle una respuesta a ChanYeol, sabiendo que este no aceptaría algo más grande. De igual forma, pensaba que estaba bien así y que no necesitaba nada más, al menos por el momento, ya que se trataba de su primera vez en ese ámbito, con esa idea en la cabeza.

ChanYeol se acercó hasta él y le hizo un gesto para que se volteara, a lo que obedeció y por lo que terminó de cara al colchón otra vez. Su novio se posó detrás de él y BaekHyun comprendió que aquel sería el momento así que se apoyó sobre sus rodillas y acomodó las piernas en el lugar adecuado para dejarle espacio a su novio entre ellas.

—Meteré esto con lubricante.

Se apoyó sobre sus codos y no hizo ningún comentario al respecto, especialmente porque sabía que el contrario tan solo le avisaba.

Finalmente, sintió como el dildo se adentraba en él, cosa que lo hizo suspirar y curveares un poco. No notó incomodidad debido a que anteriormente tenía el butt plug, así que ChanYeol instauró inmediatamente el movimiento del objeto. BaekHyun se descontroló inmediatamente ante eso y terminó otra vez afirmándose fuertemente de las sábanas mientras siseaba.

—No demores mucho, Yeol. Estoy ansioso.

—No seas impaciente. Para esto necesito tomarme un tiempo. —A pesar de decir aquello, ChanYeol de igual forma no se demoró demasiado en incluir el primer dedo en su interior mientras aún tenía el dildo dentro, abriéndolo un poquito más con cuidado y sutileza, cosa que ni siquiera tuvo demasiada importancia debido a que anteriormente ya tuvo el otro juguete dentro de él.

Cuando a su novio se le ocurrió meter el segundo dedo las cosas parecieron ser un poco más complicadas y BaekHyun se tuvo que morder con fuerza el labio inferior para no quejarse con demasiada fuerza y así no asustar al contrario, aunque de igual forma tomó el brazo de este para indicarle que no estaba muy a gusto con el segundo dedo.

ChanYeol de inmediato sacó la mano aunque no se detuvo ahí y volvió a intentarlo, aunque esta vez con mucho más lubricante y seguridad, moviendo antes el dildo para causarle algún tipo de placer a BaekHyun mientras lo masturbaba. El siguiente dedo terminó llegando de la misma manera, de forma silenciosa y precisa, casi indolora gracias a aquella cualidad que tenía su novio de encontrar sus puntos de placer y terminar dejándolo encantado con eso.

—Yeol, c-creo que ya está bien... —susurró con los ojos cerrados, viéndose incapaz de seguir aguantando antes de correrse debido a todo aquello que le causaba su novio.

—Solo espérame un poco más.

—ChanYeol... —gimoteó y el aludido suspiró detrás suyo.

—Bien, creo que es el momento.

Apoyó ambas manos sobre el colchón, irguiéndose y adoptando una mejor posición. Miró a ChanYeol por sobre el hombro y este se encaramó un poco por sobre su cuerpo para llegar hasta sus labios y besar estos. A pesar de la situación, el beso tuvo su toque lindo y delicado, cosa que pareció convencerlos a manos de continuar.

Ya para cuando ChanYeol se alejó, se posó inmediatamente en su entrada, le acarició los muslos y la espalda con una mano mientras que con la otra sujetaba el dildo. Cuando su novio metió la punta de su miembro en su interior no pudo evitar enterrar la cara en la almohada con la intención de ser lo menos audible posible. Aquella oportunidad no fue como las anteriores y a pesar de que anteriormente tuvo los dedos de su novio con la intención de prepararlo adecuadamente, estos no fueron suficiente y terminó sufriendo ligeramente, aunque supuso que era normal sentirlo en un situación como aquella.

ChanYeol terminó ingresando lentamente en su interior y más de una vez BaekHyun tuvo que detenerlo al verse en la necesidad de respirar con comodidad un segundo. Su novio siempre paró cuando se lo pidió, momentos donde lo acarició un poco y echó más lubricante para que todo transcurriera con más facilidad. El proceso de aquello duró bastante, tanto así que ambos suspiraron de alivio cuando ChanYeol logró entrar por completo. Luego esperaron lo que pareció ser una eternidad antes de que finalmente el alto se dignara a moverse. Todo fue tan lento, delicado y cuidadoso que BaekHyun realmente disfrutó de todo, incluso a pesar de lo complicado de la situación. El vaivén de ambos se instauró sin que alguno de los dos siquiera se diera cuenta y antes de lo que esperaron ya estaban ambos gimiendo por la acumulación de sensaciones.

Por mucho tiempo BaekHyun deseó dar un paso tan grande como ese. Sabía que ChanYeol no era muy dependiente del sexo, pero BaekHyun sí podía llegar a serlo. Por eso mismo aquellos juegos entre ellos solo le daban más confianza para saber que la relación iba por buen camino y que se pronosticaba como duradera, cosa que hacía que BaekHyun entregara por completo su corazón a ChanYeol, si es que ya no lo entregó todo.

—BaekHyun, ¿estás bien? —Ni siquiera se dio cuenta que se mantuvo callado durante todo ese tiempo mientras su novio lo embestía—. ¿No te gusta?

—No es eso. Simplemente estaba pensando —susurró mientras ladeaba un poco la cabeza e impulsaba sus caderas hacia atrás.

Su novio se apegó a su espalda y apoyó ambas palmas sobre el colchón mientras no dejaba de moverse.

—Normalmente no te dejo pensar mientras tenemos sexo. —BaekHyun gimió totalmente encantado al escuchar el gemido del contrario tan cerca de su oído.

La verdad era que mucho no duraron, solo bastaron unos cuantos embates más antes de que ambos se corrieran. Una vez que terminaron se pusieron uno al lado del otro sobre la cama mientras miraban hacia el techo e intentaban recuperarse de su orgasmo. A pesar de que fue ChanYeol quien viajó durante horas y quien debería estar cansado, fue BaekHyun el primero que se estaba quedando dormido.

—Cariño —lo llamó su novio y él abrió los ojos aún adormilado—, deja que te lleve al baño para ducharnos antes de dormir, ¿sí?

Mucho esfuerzo no tuvo que hacer, ya que su novio lo tomó en brazos y caminó con él hasta el baño que había en la habitación. Una vez dentro lo dejó de pie en el suelo para luego ir hasta la ducha y encender esta.

—El agua está lista. —ChanYeol lo ayudó a que avanzara hasta el chorro de agua y antes de que entrara le besó la sien—. Iré a cambiar las sábanas. ¿Puedes ducharte solo?

BaekHyun hizo un puchero y el contrario suspiró. Estaba tan cansando que de seguro en cualquier momento se quedaría dormido dentro de la ducha.

—Tú entra mientras yo hago la cama y luego vuelvo. —Las palabras contrarias no lo contentaron, así que mantuvo su puchero, lugar en donde su novio dejó un suave beso antes de salir a paso apresurado de la pequeña habitación.

BaekHyun mientras tanto decidió adentrarse a la ducha y dejó que el agua le quitara la suciedad que pudiera llegar a tener. Se quedó un rato ahí, debajo del chorro mientras tenía los ojos cerrados y pensó en aquello que no dejó de rondarle la cabeza durante todos esos días, meses en realidad. Quizás por aquello mismo ni siquiera estuvo consiente del tiempo y se terminó asustando cuando sintió las manos de su novio contra la piel desnuda y húmeda de sus caderas. Se dio vuelta y se apoyó en el pecho del contrario mientras este le acariciaba la espalda baja.

—¿Seguro que estás bien?

Asintió y dejó que su novio limpiara de él, que le lavara el pelo con dedicación y que le recorriera el cuerpo con la esponja cubierta de jabón. Cuando ya estuvieron listos dejó que lo secara y posteriormente que le pusiera el pijama.

—Amor —ChanYeol lo llamó con la voz más grave esa vez, casi autoritario—, sé que te gusta que haga cosas por ti, pero deberías al menos ayudarme un poco.

Pestañeó aturdido, con la intención de volver a la realidad, entonces se encontró con la cama hecha y las mantas echadas hacia un lado con cuidado, dejándole el espacio adecuado para que se acostara. ChanYeol estaba parado a su lado con el ceño fruncido, la toalla aún enrollada a su cadera desnuda y el secador en una mano.

—Lo siento —murmuró hasta un poco avergonzado y le quitó el secador al chico para luego conectarlo a un lado del mueble y así secarse el pelo.

Se sentó sobre el colchón con cuidado y vio como ChanYeol se daba la vuelta para dirigirse hacia el armario, de donde sacó su pijama. Ya para cuando el contrario logró desocuparse le hizo un gesto para que se recostara frente a él y así le secó el pelo.

—¿Hay algo de lo que deberíamos hablar? —Curveó ambas cejas, sorprendido por lo directo que fue su novio.

—No pasa nada, amor. —Sonrió suavemente y le acarició la nuca mientras intentaba que su voz se escuchara por arriba del sonido de secador—. Solo estoy cansado. —Cerró los ojos por un momento y ChanYeol acarició suavemente su muslo mientras tanto.

Finalmente el otro apagó el secador y lo desconectó. Su novio luego tomó el aparato sin decirle nada y caminó hasta el baño, posiblemente a guardarlo en el lugar adecuado. BaekHyun mientras tanto se acomodó en la cama y cerró los ojos, cosa por la cual ChanYeol supo que se quedó dormido.

A pesar de que su novio se acostó a su lado, apagó las luces y lo abrazó, no logró sacar ese malestar que tenía en el pecho, aquello que era referente a algo totalmente ajeno a lo que sucedió hace unos cuantos minutos sobre aquella cama. La verdad era que, a pesar del cansancio, no pudo conciliar el sueño, cosa que lo obligó a levantarse e ir al baño, dejando sobre la cama a su novio durmiendo. Independientemente del dolor punzante que sintió en la espalda baja, una vez que entró a la pequeña habitación se apoyó en una de las paredes luego de cerrar la puerta y se dejó caer en el frío suelo. Se llevó ambas manos hasta el pelo e hizo que sus dedos se enredaran allí mientras suspiraba. Apoyó la cabeza en la cerámica que estaba a su espalda y chasqueó la lengua al recordar por qué estaba así en primer lugar.

—¿Baek? —Suspiró en frustración cuando escuchó a su novio llamarlo. ChanYeol tocó unas cuantas veces la puerta del baño—. ¿Estás aquí dentro?

—Sí. —Suspiró con cansancio—. Salgo en un momento.

—No. Espera. —Escuchó como el chico tomó la manilla y giró esta, aunque luego la soltó—. ¿Puedo entrar?

—Sabes que puedes —susurró con desgano.

Finalmente, ChanYeol abrió la puerta y al verlo sentado sobre el suelo rápidamente se dejó caer a su lado y lo tomó por las mejillas para mirarlo a los ojos, quizás en el intento de buscar en ellos alguna respuesta.

—Baek, dime qué pasa. Ahora. —Volvió a suspirar al escuchar la voz autoritaria del chico y dejó que este le pasara las manos por el cuerpo con desespero, quizás en busca de algún tipo de herida.

—Yeol, estoy bien —gimió cansado.

—¿Entonces qué pasa? —El chico se sentó a su lado.

—Durante el último tiempo pensé mucho en una cosa —empezó suavemente mientras miraba hacia el frente con la intención de evitar sus ojos.

—¿Es algo malo? —El chico frunció las cejas con preocupación—. ¿Terminaremos?

—¿Qué? No, Yeol. —Llevó con urgencia una de sus manos hasta la mejilla del contrario y acarició suavemente ahí—. De hecho, podría decirse que es algo bueno, pero tengo miedo de cuál será tu reacción.

—Dilo más claro, cariño. No logro comprenderte.

BaekHyun suspiró y alejó las manos del chico para luego jugar con sus propios dedos mientras tenía la vista en el frente, inseguro por lo que siguiente que diría.

—ChanYeol, realmente estoy enamorado de ti.

—Yo también te amo —se apresuró en decir el alto, cosa que hizo suspirar a BaekHyun.

—Quiero ser padre —susurró de manera directa y al ver el cambio de expresiones que tuvo ChanYeol rápidamente se apresuró en agregar—: Quiero formar una familia contigo.

—BaekHyun... —Su novio le sonrió de manera incómoda—, no creo que ahora mismo sea el momento de plantearnos algo así. Hace poco terminamos la universidad y aún no tenemos un puesto estable en el mundo laboral.

—Lo sé, pero en verdad quiero esto, ChanYeol.

—Baek, por favor no lo pienses tan a la ligera.

—No lo estoy haciendo. —Lo miró ofendido—. Llevó meses pensando en esto, incluso hablé con mis padres al respecto. —ChanYeol se sorprendió ante su comentario y se acomodó un poco sobre el duro suelo.

—¿Y qué opinan ellos?

BaekHyun se encogió de hombros—. Te conocen desde hace años y siempre han dado por hecho que nuestra relación será la definitiva en mi vida, por lo tanto, estuvieron de acuerdo. De hecho, se entusiasmaron bastante con la idea.

—De igual forma, no creo que sea lo mejor en este momento.

Miró hacia la pared que estaba frente a él al escuchar las palabras de ChanYeol y luego cerró los ojos por un momento, pensando en aquello que estuvo rondándole por la cabeza durante tanto tiempo.

—¿Por qué no podemos tener un hijo en este momento? —espetó sin mirarlo—. Entiendo lo que me dices sobre estabilizarnos antes de darnos la oportunidad de mantener a alguien más, pero vamos a cumplir cinco años de relación y tres viviendo juntos. Quizás hay relaciones más duraderas, pero juro que te he amado fielmente por más de estos cinco años, ChanYeol. Tenemos mucho que nos beneficia para construir una familia.

—¿Y cómo piensas mantenerlo, BaekHyun? —gruñó el chico, quizás molesto por su insistencia—. Tenemos que trabajar.

—Trabajaré desde casa —se apresuró en contestar—. Además, no es necesario que trabaje en algo tan pesado y tú también trabajarás, no es como si los dos tuviéramos que estar exclusivamente aquí para cuidar del niño. Podemos ser como una familia común y corriente, mientras uno trabaja el otro cuida del niño, pasamos tiempo de calidad los fines de semana y durante las noches comemos una cena en familia, ChanYeol, como cualquier familia promedio.

—No lo sé... —BaekHyun suspiró ante la inseguridad del contrario.

—¿Por qué yo no puedo tener un bebé ahora? —ChanYeol lo miró asustado porque su voz sonó rasposa y, efectivamente, se sentía mal porque por fin estaba compartiendo aquello que tanto dolor le daba en el pecho—. Las mujeres pueden quedar embarazadas en cualquier momento, y creo que, de hecho, la mayoría de ellas ni siquiera planea tener un hijo...

—BaekHyun... —lo interrumpió el chico suavemente.

—¿Por qué no podemos, ChanYeol? —espetó molesto, aunque no con su novio, sino consigo mismo y con aquella sociedad putrefacta en las que les tocó vivir—. Tenemos unas buenas condiciones para cuidar a un niño.

—No estoy negando eso. —ChanYeol suspiró—. Solo creo que deberíamos esperar un poco.

—¿Esperar qué? —gruñó—. ¿Esperar que nos consuma el trabajo? ¿Esperar que se pierda el amor, que la monotonía nos haga dejar de querernos? —ChanYeol lo miró directamente a los ojos y él no pudo evitar que la primera lágrima cayera—. No entiendo, ChanYeol. ¿Por qué hay mujeres que pueden tenerlos en condiciones deplorables y nosotros no siendo que nos amamos tanto y vivimos en buenas condiciones para criar a un niño?

Su novio suspiró y echó la cabeza hacia atrás, dejando que esta reposara sobre la cerámica que estaba a sus espaldas. Cuando ChanYeol lo miró a los ojos y le abrió los brazos él no pudo contenerse y terminó acurrucándose entre ambas extremidades.

—Tengo miedo —le susurró el chico y BaekHyun dejó escapar una pequeña risa a pesar de la situación.

—Le tienes miedo a muchas cosas.

—Sentimentalmente dependo tanto de ti, BaekHyun. Ni siquiera te podrías imaginar cuánto. —Su novio le acarició suavemente el pelo—. Temo cometer errores, ya te lo dije anteriormente. Temo perderte y tener un bebé es un gran proyecto, algo que necesitará de la fuerza de ambos y total disposición. No es que me disguste tener un hijo, mucho menos contigo, pero ¿qué pasa si algo sale mal?

—No puedes regirte por el miedo a lo que saldrá mal. —Se separó del chico y lo tomó por las mejillas para decirle directamente aquello que estuvo meditando—. ChanYeol, tomé una decisión hace un tiempo. —Tomó un poco de aire antes de continuar—. Quiero tener a un niño y lo tendré contigo o sin ti. —Al ver la expresión de pánico que se instauró en el rostro de ChanYeol se apresuró en agregar—: Obviamente sería ideal tenerlo juntos y hacerle un espacio en nuestro nidito de amor. Además, esto no quiere decir que nuestra relación se termine, simplemente tendré un hijo.

Tomó al chico por las mejillas y se acercó hasta él para dejarle un pequeño y casto beso sobre los labios. Al ver que el contrario no pareció tener intenciones de salir de su estupor pensó en algo que pudiera remediar la situación.

—Velo de una manera más fácil. —Sonrió con suavidad—. ChanYeol, estoy embarazado y obviamente tú eres el padre. Si no quieres hacerte cargo está bien, pero ese niño nacerá sí o sí.

ChanYeol miró hacia otro lado, pero BaekHyun notó claramente como el chico tuvo intenciones de ocultar su sonrisa, cosa que finalmente no pudo hacer.

—Felicidades por el bebé —dijo finalmente el otro mientras lo miraba y sonreía—. Seré un hombre responsable y me haré cargo.

Pasó ambos brazos por sobre los hombros del chico y dejó escapar un pequeño grito de de emoción antes de bajar hasta los labios de su novio para besarlo con dedicación y cariño.

—ChanYeol —susurró cuando se separaron—, tengo que decirte otra cosa.

Las cejas del contrario se fruncieron y luego bufó bajito—. ¿Ahora qué pasa?

—La verdad es que tengo ocho meses de embarazo. —Apretó los labios en espera de la reacción del chico, pero este solo mostró su rostro confundido.

—No vayas con juegos y dímelo directamente.

—Ya hice los papeles de adopción y tendremos al niño en un mes.

ChanYeol jadeó—. ¿Por qué haces esto? —gimoteó y BaekHyun rio al verlo—. Se supone que teníamos que casarnos primero.

El comentario del chico lo hizo fruncir el ceño y alejarse un poco del cuerpo ajeno para buscar algún indicio que le indicara que mentía o algo.

—¿Eso qué quiere decir? —preguntó pausadamente.

—El anillo de propuesta de matrimonio está dentro de la caja de los juguetes sexuales. Pensaba dártelo en unos meses. Ni siquiera planeaba la propuesta todavía. —ChanYeol se cruzó de brazos, amurrado.

—¿Me ibas a pedir matrimonio? —interrogó esperanzado y acarició el rostro del contrario con cariño, sintiéndose enternecido por las palabras ajenas, aunque luego fue consiente de lo que le dijo—. ¿Lo metiste en la caja de los juguetes?

—Sí, está dentro de una caja de condones vacía. —BaekHyun abrió la boca ofendido y ChanYeol alzó la voz la siguiente vez que habló, nervioso—. ¡No supe dónde dejarlo para que no lo notaras!

—¿Y la cajita esa del anillo?

—Sería muy obvio.

Se quedó un momento en silencio, aparentando estar ofendido, pero en el fondo estaba realmente contento por la nueva noticia.

—Iré a buscarlo —dijo emocionado mientras se ponía de pie.

—Claro, ve. —El chico le hizo un gesto de desinterés.

A BaekHyun le costó un jodido infierno llegar hasta el armario de su habitación, especialmente porque anteriormente tuvo un encuentro amoroso con su novio y la espalda baja le dolía tanto que pensaba que en cualquier momento se caería. Aunque, una vez que se encontró de frente con la cajita de juguetes pudo, confirmar que dentro de esta sí había una caja de condones con un anillo dentro, algo hermoso y masculino, pero con algunos pequeños brillos que le daban ese toque encantador y delicado. Al confirma que sí estaba el objeto, decidió tomar la caja de uno de los consoladores, en la cual guardó la confirmación de la adopción que tanto se esforzó por conseguir.

—ChanYeol, yo también tengo algo para ti —dijo alzando la voz mientras tomaba la caja del consolador.

—¿Qué es, bebé? —Se asustó un poco cuando sitio la voz de su novio detrás suyo y posteriormente los brazos rodearle la cintura y el mentón apoyándose sobre su hombro.

Se apegó al pecho ajeno y le entregó la caja que tenía entre las manos con una pequeña sonrisa.

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Kitten boy

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