Vergüenza era todo lo que podía sentir Jinhwan cuando pensaba en las palabras de la señora Koo. Él y su familia habían pedido no solo un techo donde pasar la noche, sino también su madre había pedido un préstamo.

       Y Junhoe sabía. ¿Qué pensaba exactamente acerca de la miseria de su familia? ¿Que se estaban aprovechando de la buena voluntad de sus padres?

      Jinhwan no quería ni imaginarlo y luego estaba esa otra cosa.

        Cuando Junhoe estuvo encima de él a punto de besarlo su cuerpo tuvo una reacción involuntaria y sus labios palpitaban por unas malditas ganas de ser besado por Koo Junhoe.

       Incluso dolía, tenía esa especie de hormigueo en los labios cuando lo vió por última vez.

         Acababan de mudarse y Jinhwan consiguió trabajo en un restaurante de comida occidental como repartidor. Incluso le habían dado una motoneta.

       Ganaba el salario mínimo y a veces hacía turnos extra cubriendo a otros compañeros.

       Su relación con su padre era tensa, pero soportaba llevar a su hermana menor a visitarlo cuando esa mujer no estaba.

       Por su cuenta había estado devolviéndole a los padres de Junhoe el dinero prestado en varias cuotas fijas, estos se negaron a cobrar intereses.

        Junhoe casi nunca estaba por la mañana debido a que iba a clases, aunque ese día lluvioso fue el pelinegro quien le abrió la puerta.

       Habían pasado cuatro meses y Jinhwan ni siquiera lo había felicitado cuando fue su cumpleaños.

      Solo quería evitarlo porque se sentía muy avergonzado, pero entonces pasó el tiempo y se sintió también culpable por evadirlo.

       Estaba seguro de que en la cabeza de Junhoe, la razón era ese beso que casi se dieron antes de ser interrumpidos. ¿Qué le había dicho esa vez? Claro. Que lo iba a devorar.
―Hyung, adelante, pasa por favor.

        Jinhwan no tuvo opción. Su camisa se había transparentado por la lluvia y moría de frío.

       Junhoe puso su ropa a secar y lo cubrió con una manta.
―¿Tus padres no están?
―Llevaron a la abuela a una revisión y Yejin tiene una obra en la escuela. Van a tardar todo el día.
―¿Tú no deberías estar también en la escuela?
―Agarré un resfriado.

         Jinhwan levantó una ceja, lo examinó de arriba a abajo y luego sonrió de lado.
―Tú no estás enfermo, pequeño mentiroso.
―Me pillaste ―Junhoe juntó las manos y le guiñó un ojo ―no vayas a decirle a mis padres. El sonido de la lluvia me tentaba a dormir todo el día.

        Jinhwan sonrió y lo tranquilizó revolviendo su cabello.
―Descuida, no es como si no hubiera hecho lo mismo a tu edad.
―No hables como un adulto.
―Soy un adulto.

       Junhoe puso una mano sobre la boca ajena tapándola por completo.
―Si admites que eres un adulto entonces quedaría muy mal si intentas comerme.

      Jinhwan sintió cómo su corazón se aceleró con ese pensamiento. Junhoe parecía muy inocente pero, ¿qué mierda? Solo fingía serlo. Y él cayó redondo a la boca del lobo.

      Estaba desnudo bajo esa manta y en la cama ajena. Todo su cuerpo ardía de deseo por que Junhoe hiciera de las suyas.

       Estaba perdido, podía tener diecisiete años pero definitivamente su mentalidad era otra cosa, incluso su anatomía decía a gritos que ya era un hombre. ¿Cuándo había crecido tanto?
―Entonces devórame tú.

       Junhoe jadeó ante su respuesta y sus ojos se oscurecieron.
―Hyung no me tientes, no tienes idea de lo mucho que te quiero para mí.
―Entonces házmelo saber.
―Me gustas mucho. Cada vez que estoy cerca de ti ―Junhoe tomó la mano ajena y la posó sobre su pecho ―mi corazón late tan rápido que pienso que tal vez esté descompuesto. Porque así como haces que mis latidos se aceleren, también haces que se detengan. Como la vez que me besaste mientras creías que estaba dormido.

         Jinhwan se sonrojó por completo.
―¿También te gusto, hyung?

      Las palabras de Junhoe hacían eco una y otra vez dentro de la cabeza de Jinhwan.
―Me gustas tanto que justo ahora estoy temblando.

      No mentía, su mano no temblaba solo porque Junhoe la estaba sosteniendo.

      Entonces Jinhwan se abalanzó hacia Junhoe para besarlo. El menor soltó su mano para sostenerlo por la cintura, la manta cayó por un lado exhibiendo el hombro derecho de Kim.

       Jinhwan alzó lentamente sus manos hasta envolver sus brazos alrededor del cuello ajeno, dejando caer la manta por completo. No la necesitaba, Junhoe era lo suficientemente cálido.

       Jinhwan se sorprendió cuando Junhoe intentó introducir su lengua en su boca, ¿dónde había aprendido a besar así? Estaba celoso pero al mismo tiempo agradecido porque la forma en la que Koo lo besaba hacía que se derritiera por completo.

        Junhoe se inclinó, acostando a Jinhwan sobre sus sábanas y pegó sus cuerpos, no quería que el mayor sintiera frío. En cambio, pudo sentir su reacción al beso y estaba más que complacido porque su cuerpo estaba reaccionando de la misma manera.

       Jinhwan jadeó por aire aún entre sus labios y Junhoe se apartó por tan solo unos segundos antes de volver a besarlo.
―Hyung.
―¿Mnh?
― Déjame comerte a besos por favor.

        Jinhwan simplemente asintió y se entregó por completo a los besos ajenos.

💓💓💓
862 palabras.

Dadas las nuevas políticas de wattpad me toca aclarar que nuestros chicos solo llegaron a segunda base.

Y antes de que me pregunten de dónde salió la imagen del chico idéntico a nuestro Jinan, es un manhwa llamado: "Tú y yo no podemos hacer esto"

No lo he leído aún, me apareció mientras buscaba imágenes parecidas a Jinani pero leí en los comentarios que la historia es muy linda. (Dejaré un comentario aquí cuando lo lea y les diré si me gustó :3)