Veinticuatro
El sonido del reloj de pared llenaba el silencio en la sala de estar de Hyunjin. Jisung estaba recostado en el sofá, abriendo un paquete de papas fritas con cuidado, mientras Hyunjin caminaba de un lado a otro, sosteniendo una botella de agua en las manos.
—¿Vas a decirme qué te pasa o prefieres que adivine? —preguntó Jisung con una sonrisa, mordiendo una papa mientras observaba a su amigo.
Hyunjin se detuvo, lanzándole una mirada cansada antes de dejarse caer en un sillón cercano.
—Es Seungmin —susurró, mientras dedos jugueteaban con la tapa de la botella.
—Siempre es él. ¿Qué pasó ahora? —Jisung arqueó una ceja, dejando la bolsa en su regazo—. ¿Qué hicieron cuando los dejé solos?
Hyunjin frunció el ceño, mirándolo brevemente antes de responder.
—Nada malo. Bueno... no sé —se inclinó hacia adelante, apoyando los codos en las rodillas—. Seungmin me contó sobre un sueño que tuvo. Una pesadilla.
—¿Qué soñó? —Jisung volvió a tomar la bolsa, sacando otra papa mientras lo observaba curioso. ¿Por qué un sueño preocupa a Hyunjin?
—El instituto estaba destruido. Fuego, escombros... Y Chan culpándolo de todo —Hyunjin hizo una pausa, sus cejas gruesas se arquearon dramáticamente, parecía al borde del llanto—. Pero lo peor fue que yo estaba ahí... llorando.
Jisung dejó de masticar por un momento, sorprendido.
—¿Llorando? —repitió lentamente—. Ok, sí, es raro su sueño. Pero... ¿Por qué te afecta tanto? Es solo una pesadilla, ¿no? Todos hemos tenido.
—No lo sé —Hyunjin se pasó una mano por el cabello con fuerza, frustrado—. Pero él se veía... grave. Como si fuera más que solo un sueño —bufó al no saber cómo explicarse—. Su sufrimiento era real.
—¿Y qué tienes que ver tú en esto? —preguntó Jisung, inclinándose hacia adelante—. ¿Tú y Chan?
—No sé, ¿ok? —Hyunjin apretó los labios antes de continuar—. Pero, a mí, antes Chan me ponía muy ansioso, hasta que me acostumbre a él y a su perfección —al decirlo sintió como un peso dejaba sus hombros—. No quiero sonar paranoico, pero yo no sabía de su existencia hasta que comenzó a salir con Seungmin, y aun así, había algo en él que no me cuadraba —agregó, acomodándose en el sillón para encarar a su amigo—. Y ahora, con esto, otra vez siento que algo anda mal.
Jisung asintió lentamente, dejando la bolsa de papas en la mesa.
—A mí tampoco me da buenas vibras —comentó Jisung con la mirada ida.
Hyunjin rio sin gracia.
—Apenas lo conoces —señaló, pensando en las pocas veces que Jisung y Chan han estado en el mismo lugar.
—¿Y tú realmente lo conoces?
Hyunjin sintió como el aire abandonaba de golpe sus pulmones, un escalofrío lo azotó de pies a cabeza, entonces negó
» Lo digo en serio —agregó Jisung enderezándose—. Ninguno de nosotros lo conoce, quizás ni el mismo Seungmin —un denso silencio los cubrió después de esas palabras—. Pero tal vez estamos sobrepensando las cosas —murmuró—, y ahora me dio miedo. Pero... ¿Y lo demás? —preguntó, para cambiar el tema. Hasta el mismo había comenzado a tiritar de ansiedad—. ¿Qué pasó cuando los dejé solos? No me digas que solo hablaron del sueño, Hyun —cambió a un tono más divertido.
Hyunjin sintió cómo el calor subía a su rostro, así que miró hacia otro lado para disimular.
—Bueno... Nos besamos.
Jisung parpadeó, completamente sorprendido. Luego, una gran sonrisa se extendió por su rostro.
—¡Sabía que algo así había pasado! —exclamó, señalándolo con un dedo—. Por eso estaban tan tiesos cuando volví.
—Baja la voz —Hyunjin miró hacia todos lados con nerviosismo, aunque no había nadie más en su casa.
—Ok, ok. Pero... ¡Wow, Hyunjinnie! —Jisung lo miró con un brillo travieso en los ojos—. No creí que fueras tan rápido cuando apenas... —se interrumpió a sí mismo—. ¿Cómo fue?
—Fue... bien —Hyunjin se frotó la nuca, claramente incómodo—. Pero no fue solo eso. Durante el beso... sentí algo.
La sonrisa de Jisung comenzó a desvanecerse.
—¿Algo como qué?
—Su voz. En mi cabeza. Dijo algo sobre cuidarlo y tal... Pero no lo dijo en voz alta. Lo escuché en mi mente. Estoy seguro que volvió a pasar.
Jisung parpadeó, procesando la información.
—¿Ah? —preguntó en un susurro—. Hyun, eso no debería pasar. No eres un big one.
—Lo sé. Por eso estoy confundido —Hyunjin lo miró directamente—. Pero pasó. De eso estoy seguro.
Jisung se encogió de hombros y tomó la bolsa de papas otra vez, como si necesitará algo que hacer mientras pensaba.
—¿Crees que tenga algo que ver con su sueño? ¿Con sus miedos?
—No lo sé... Solo quiero que nada más le pase a Seungmin. En verdad, lo quiero ayudar. Quiero cuidar de él.
—Tal vez deberías hablar con Seungmin sobre lo que sientes —comentó—, para calmarte —agregó—. Podría ser solo un mal sueño.
Hyunjin asintió lentamente, aunque las dudas seguían presentes.
—No lo sé. Tal vez debería hablarlo. Pero no quiero que se preocupe más o que piense que estoy volviéndome loco —Hyunjin dejó caer la cabeza hacia atrás, cerrando los ojos.
Jisung lo observó por un momento antes de asentir.
—Sea lo que sea, Hyunjin, lo resolveremos. Pero... ¡Wow! No puedo creer que hayas besado a Seungmin, otra vez. Ahora todo tiene sentido —sonrió ampliamente antes de añadir—: Aunque, ¿quién te dio permiso para dejarme fuera de la acción? Ya te había dicho que amo los romances adolescentes.
Hyunjin dejó escapar una risa suave, a pesar de sí mismo.
—Estás loco, pero gracias, Jisung. Por todo.
—Para eso estoy aquí. Bueno, eso y para compartir mis papas —Jisung levantó la bolsa con una sonrisa, ofreciéndole.
Aunque las dudas seguían presentes y su estómago revuelto, Hyunjin se sentía un poco más ligero con la compañía de su amigo.
🏵🏵🏵
tengo sueño
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro