---Capitulo 20: La armera---

La agente bajaba lentamente las escaleras viendo como los dos hechiceros intentaban alzar el martillo con hechizos siendo en vano la mayoría de los intentos.

Kirito: ¡Tch! ¡¿Qué tiene esta cosa?! Pesa lo mismo que una galaxia ¿o qué? — Exclamo fastidiado al ver que ningún hechizo le estaba sirviendo para nada.

Asuna: Hm, parece que hay un conjuro impuesto. Que nos impide levantarlo — Exclama creando un pequeño martillo a partir de su magia viendo las propiedades físicas y mágicas internas del artefacto.

Kirito: Ahg. No puede ser, debemos llevárnoslo de aquí, pero es imposible levantarlo — Expreso cansado llevándose la mano al mentón pensante en cual podría ser su movimiento.

Sinon: ¿Y si crean un portal llevándoselo lejos? — Propone apareciendo en escena.

Kirito: Lo pensamos, pero el martillo parece inhibir cualquier magia que lo trapacé lejos de aquí — Explico viendo el martillo, para después pensar posibles soluciones.

Mientras Asuna con ayuda de Sinon pensaban que hacer, el pelinegro se le ocurría posibilidades infinitas para poder sacar el martillo.

Kirito: Asuna — Llamo a la castaña, la cual volteo a verle, el pelinegro pensó en una posibilidad la cual debía deducir — Dices que tiene un conjuro ¿no?

Asuna: Sí, creo que eso es lo que nos impide moverlo, debemos averiguar cómo romperlo antes de todo — Explico.

Kirito: Me puedes decir, de que está compuesto el hechizo. Cuáles son las ruinas encantadas con la cual esta conjurado el hechizo — Pidió viendo el martillo, si su teoría era cierta, esto sería aún más tardado de lo que pensaban.

Asuna: El conjuro dicta 'Aquel que empuñe el martillo y sea digno de él, poseerá el poder del relámpago' suena a una mitología nórdica ¿no? — Expreso recordado los libros que había leído con anterioridad.

Kirito: Sí, específicamente al Mjölnir, pero ¿por qué un objeto de Asgard estaría aquí? — Cuestiono viendo el artefacto.

Asuna: Por qué no lo es... — Todos en la sala voltearon a ver a la chica, la cual estaba manipulando un martillo holográfico creado a partir de magia, esta lo manipulaba viendo el interior del martillo.

Silica: ¿Eh? pero si es Asgaliano, ¿no?

Kirito: Asgardiano — Corrigió a la menor — Y sí, Kieko tiene razón. Dentro de la mitología nórdica, Odín impuso ese encantamiento para que nadie exceptuando Thor levantase el martillo, si este es el martillo debería ser de Asgard — Explico.

Asuna: Sí, pero por extraño que pareciese, esta es una réplica creada a partir de magia, pero con los mismos encantamientos y poderes internos, no es el real. Es solo una réplica, pero poderosa — Explico deshaciendo el holograma.

Kirito: Hm, eso complica las cosas. Si esto fuera magia asgardiana podría hacer algo al respecto como contactar los Asgardianos, pero al no serlo. No vendrían, aunque se los rogase, tch. Opción b — Exclama sacando una aguja de su bolsillo, Asuna supo que planeaba el pelinegro, creando así un globo terráqueo.

Silica: ¿Eh? ¿Qué harán? — Pregunto confusa al no entender que harían los dos hechiceros.

Kirito: Debemos buscar quien es el que puede levantar el martillo, al ya saberlo contactaremos con él y haremos que lo lleve por nosotros, sencillo ¿no? — Dice sarcástico para después ponerse la aguja rozando sus labios — ollitram etse ed ongid la acsuB — Susurro, rápidamente la aguja empezó a imbuirse de un brillo amarillo para después empezar a rodear el globo terráqueo.

Sinon: Avísenme si necesitan algo, debo ver a alguien — Aviso retirándose de la habitación.

La peliazul recordó aquellas palabras de su antiguo compañero las cuales empezaron a resonar en su cabeza.

—¡Siempre tan graciosa! ¡Nos volveremos a ver! ¡Iré a saludar a tu amiga! Nos vemos. Le diré a Rika, que la extrañas...

La agente agito su cabeza de izquierda a derecha, haciendo que aquel amargo recuerdo desaparezca. Sabía que la chica estaba en un lugar seguro que era este, pero no se podía quitar de la cabeza que él podría ir contra ella, sabia su morus operandi y si Rika perdía la vida solo por confiarse jamás se lo perdonaría.

Cuando menos lo esperaba la agente estaba frente a una puerta, viendo el nombre encima de esta 'Armería' la chica abrió la puerta sin preguntar, ya que ese lugar solo estaban autorizados agentes de alto rango, pero había alguien quien no recordaba eso.

—Oe, oe. ¿no te enseñaron a tocar? — Dijo una voz proveniente de debajo de una mesa de trabajo.

Sinon sonrió al oír aquella voz, al poner un paso dentro de aquella sala, la persona que estaba debajo de la mesa de trabajo salió mostrando su apariencia una chica de aproximadamente la edad de Kirito, Asuna y Sinon de color de pelo rosado esponjoso corto llegando un poco más arriba de los hombros decorado con una orquídea para sujetárselo, sus ojos del mismo tono que su cabello.

La chica portaba ropa normal, algo raro para una persona dentro de aquella base militar, pero esta chica tenia ciertos beneficios. La chica al ver a Sinon su sonrisa se hizo de par en par, corriendo rápidamente rodeando la mesa de trabajo corriendo hacia ella yéndola a abrazar.

Lisbeth: ¡Shinon! — Saludo la chica con un fuerte abrazo.

Sinon: Hola, Rika — Saludo la chica quitándose un peso y preocupación de encima, el solo hecho de que ella pudiese estar en peligro, le estaba acongojando.

Lisbeth: ¡Me debiste haber dicho, que vendrías! — Se quejó separándose del abrazo con la chica.

Sinon: Lo siento, se me atravesaron demasiados pendientes, mi viaje a Japón mi investigación privada, se me acumulo todo que apenas tuve tiempo para mí — Expreso sentándose en un sillón de la armería. Lisbeth replico lo mismo sentándose en un sillón frente a la francotiradora.

Lisbeth: Ya veo, también he tenido demasiado trabajo aquí, estar detrás fabricando las mejoras de la Legión de Guerra es demasiado, además también les hago los preparativos para misiones de alto nivel — Dice en un tono de cansancio, Sinon se preocupó al pensar que su amiga se estaba sobre exigiendo.

Sinon: No me digas, que no te han dejado descansar — Exclama preocupada por la salud de su amiga, Lisbeth alzo la mirada rápidamente viendo la mirada de preocupación de Sinon.

Rápidamente negó con la cabeza y con las manos.

Lisbeth: Nononono, yo soy la que lo hace a voluntad. La legión, me dice siempre que me tome un descanso, incluso han llegado a esconder sus armas todo con el hecho de que me tome un pequeño descanso para mí — Explico rápidamente, quitándole la preocupación a su amiga la cual soltó un suspiro.

Sinon: Ya veo, ¿Por qué no te lo tomas? Deberías hacerles caso, ellos son eficientes con o sin buenas armas, ellos mismos te lo dicen tomate un respiro de vez en cuando — La mira de preocupación de la peliazul le trajo recuerdos a Lisbeth la cual sonrió levemente.

Lisbeth: Je, lo tomare más en cuenta. Ahora dime ¿Cómo te fue en tu investigación? — Pregunto viendo a la chica la cual se rasco la nuca riendo nerviosa.

Sinon: Es tan raro, complicado y hasta imposible de explicar — Expresa riendo levemente recordando apenas las horas que llevaba con los dos hechiceros, las cuales, aunque hayan sido pocas horas, ya había visto en primera mano la forma tan peculiar y rara en la que vivían esos dos.

La pelirosada al oír eso, le dio más curiosidad ante lo que decía su amiga, ella había vivido demasiadas cosas como para decir que era las personas con las que habían convivido habían sido raras.

Lisbeth: ¡Cuéntamelo todo! — Pidió emocionada.

Mientras tanto en las afueras en el desierto Mordo junto con su compañero veían a la lejanía la base en la que se encontraban nuestros protagonistas.

Shinkawa: ¿Cuál es el plan Mordo? — Cuestiono a su compañero.

Mordo: Aunque pudiéramos, debemos tener un ejército, para poder llevarnos el artefacto — El hechicero no era un idiota, sabía que los soldados le presentarían varias complicaciones y eso le impediría moverse como le gustaría, necesitaba algo grande con la cual poder llevarse el artefacto sin tanto problema.

Shinkawa: Esta bien, seguiré tus ordenes siempre y cuando cumplas la parte del trato — Expresa preparando su arma.

Mordo: Lo hare — Afirmo empezando a mover sus manos creando anillos de color verde a su alrededor — Aljer, mujs, okers, olers...

De vuelta en la base, unos pasos se acercaban a la armería en donde Lisbeth y Sinon platicaban de todo lo que ha estado, ahora la armera Lisbeth estaba analizando el nuevo Hecate que le había encantado la hechicera.

Lisbeth: Increíble, parece que absorbe energía y la crea para poder hacer balas de poder — Dedujo con las explicaciones que le había dado la francotiradora — No veo, un núcleo de carga, tiene el miso pesa que el Hecate de siempre, parece que el cartucho de balas es el mismo de siempre, no cambio el modo cerrojo, solo parece que mejoro las estadísticas visuales y le implemento la forma de balas infinitas...

Sinon: Veo que sigues siendo la misma armera de siempre — Dijo feliz al ver que su amiga no había cambiado para nada estas semanas en las que se había ido.

"Lisbeth, o también conocida con su nombre real Rika Shinozaki, es la armera personal del equipo de la Legión de Guerra, aun con su edad entro al equipo gracias a que su padre es un soldado de alto rango y algunas veces cuando era niña la llevaba a la base militar, ahí observo la construcción y el armamento de armas, ella se memorizo todo con el paso del tiempo. Con ello un día armo más de 10 armas especiales de fusil de asalto, en menos de 20 minutos algo que era complicado para muchas personas, ella lo había logrado sencillo y en un tiempo bueno, con ello se ganó su lugar en la Legión de Guerra como armera personal. Ella fue la que creo el Hecate II de Sinon y hasta hace poco era la mejor arma de la agente..."

Lisbeth: Es que digo, es un arma increíble, ya lo era cuando la hice, pero las mejoras mágicas que Asuna le implemento son algo que jamás había visto — Expreso maravillada.

Sinon: Aun no logro comprender muchas cosas de la magia, pero lo que si entiendo es que, hasta el momento, ellos no son malos. Pero si son fuertes — Expreso sincera. La pelirosada volteo a ver a la agente la cual mostraba un rostro tranquilo, algo que no pasaba seguido, debido a que la chica siempre parecía vivir ajetreada y llena de tareas y trabajos. Pero esta vez parecía que no tenía trabajo más bien, parecía estar tranquila junto con esos dos hechiceros.

Lisbeth: Oh ya veo... — Expreso feliz por cómo se encontraba su amiga.

Y sin que se percataran, las puertas de la armería se abrieron, entrando dos chicas y un chico. Estos al ver a la armera junto con la chica se sorprendieron y se alegraron. A los pocos segundos Lisbeth y Sinon se percataron de la presencia de los recién llegados.

Sinon: Es bueno ver que siguen vivos — Bromeo la agente viendo a lo que alguna vez fue su antiguo equipo.

—¡Es bueno ver que estas aquí! ¡Qué alegría Sinon! — Expreso una chica de ojos azules y cabello rosado, con una sola cola de caballo a su derecha. Vistiendo una camiseta negra y falda blanca que van acompañadas de una chaqueta rosa, junto con unos guantes y botas blancos.

Sinon: Lo mismo digo, Kureha...

Takamine Momiji.

Alias: Kureha.

—Ara, ara. Parece que la hija prodiga ha vuelto ¿Cómo has estado querida Sinon? — Saludo la mujer de ojos rojos, cabello blanco que descansaba sobre su hombro izquierdo, un pequeño lunar debajo de su ojo izquierdo decoraba su refinado y hermoso rostro y en su oreja izquierda colgaba un pendiente único. Vistiendo un atuendo mayormente en color púrpura real, con patrones blancos. Su cinturón va acompañado de dos bolsas en el lado derecho de su cadera.

Hoshiyama Midoriko.

Alias: Zeliska.

Sinon: La reina sin corona, como siempre siendo tan llamativa y amable...

—Ehh, ahora que lo veo, te ves más alegre ¿paso algo en nuestra ausencia? — Pregunto el único varón del grupo de ojos entrecerrados y cabello gris oscuro. Vistiendo un atuendo presenta de manera mayormente colores blanco y negro, con costuras rojas en general. El interior de los brazos de su abrigo de cola larga es de color azul claro. Y por último llevaba casquillos de arma en el costado y la parte posterior de su abrigo.

Sai Yukitsugu.

Alias: Itsuki.

Sinon: Comandante Alphard — Bromeo la chica saludando al chico el cual se cruzó de brazos al oír el apodo que le había puesto la francotiradora, el cual al chico no le terminaba de agradar, pero le gustaba hasta cierto punto.

Enfrente de la francotiradora estaba lo que era su anterior equipo, La Legión de Guerra, lo que alguna vez fue un equipo de misiones de asalto especializado para cualquier misión, eficiente y fuerte.

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Para los que no sepan quienes son Kureha, Zeliska y Itsuki. Ellos son del juego de Sword Art Online Fatal Bullet, las imágenes que se mostraron son ellos dentro del juego.

Sin mas que decir bye!

Próximo Capitulo:

La Legión de Guerra en acción.