Disclaimer: Los personajes de Haikyuu no me pertenecen; créditos correspondientes a Haruichi Furudate Posible (o mucho) OoC en los personajes. Este fic contiene escenas explícitas, lenguaje fuerte, temas adultos tratados de modo detallado y escenas fuertes; se recomienda discreción.

Pareja principal: OsaYama

Pareja secundaria: AtsuHina, OiSuga, BokuAka, DaiKita, entre otras.

EL CHICO DEL ÁREA DE KARASUNO

Septiembre 2012

Esa mañana por alguna razón le estaba yendo de mal en peor. Su alarma no sono, provocando que llegara muy tarde a su clase de inglés, rechazando le la entrada a su salón de clases. Su tarea que se había esforzado toda la noche de ayer la olvidó en su abitacion, ahora tendría menos valor su calificación.

Caminando por los pasillos de la escuela para llegar a su casillero, su mente estado en otro lado que no sea fijarse por donde pisa o por donde va.
Su cara se golpeó con la dura puerta de un casillero abierto color rojo.

—Mierda —Bufa. Sobandose su frente con sus dedos.

—¿Donde te has metido? —Pregunto su hermano.

—Qué te importa

—Tienes falta en la clase de inglés —Le menciono. Cerrado la puerta del casillero.

—Callate Tsumu.

Discutiendo como normalmente lo hacen, dándose insultos, golpes en sus hombros, piquetes en sus estómagos y unas patadas en los muslos, Ambos hermanos se fueron a la cafetería, ya que es hora del descanso. Pero atsumu no fue a la cafetería, el se fue a la asotea, como lo a estado haciendo estas últimas semanas. Dejándolo solo con suna.

Esperando en la fila para poder elegir lo que comerian. Un shadwich, una gelatina o pudin de chocolate, un jugo de caja o leche más una fruta.

Que almuerzo tan pobre.

Castaño y peligris se fueron a sentar a una mesa a comer tranquilamente, pero osamu ni dio tres paso para irse a la mesa cuando sitio un manotazo en su charola de comida, causando de esa acción que su comida callera al suelo. El sonido que hizo la charola de metal con la lozeta del suelo fue estruendoso, llamando la atención de todo el público en la cafetería.

—¡Lo siento mucho! —Se disculpa. Pero el que se está disculpando ni siquiera fue quien le provocó eso sino su acompañante.

—Porque te disculpas, si tu no lo tiraste —Aclara osamu. El de ojos grises no apartaba la mirada de aquel que si tiro su comida.

—Bueno... Yo.. -

—Por qué tiraste a propósito mi charola —Pregunto con enfado.

—Mi mano se resbaló —Se justifica con burla en su voz.

—Me estas jodiendo —Grueñe osamu. Dando dos pasos hacia adelante, donde se encontraba el que tiro su charola.

—¡Yuudai! —Replica —Miya - San perdón por el accidente con su charola, puede tomar la mía — Yamaguchi levantaba su charola para que osamu la tomará —Aun no e tomado nada, esta intacta.

Lo que quiere yamaguchi es que no se arme una pelea en la cafetería y queden suspendidos los involucrados.

Nunca le gustó la violencia.

Estaba por negarse a tomar la charola de comida del pecoso pero el jalón que le hizieron a yamaguchi lo hizo desorbitar lo ojos. Aquel sujeto llamado Yuudai había jalado a yamaguchi de su brazo con fuerza, escucho a tadashi soltó un pequeño gemido de dolor por el apretón que le hizieron, casi tirando su comida en el movimiento brusco.

—Oye idiota no tienes porque tratarlo así —Decreta con enfado.

—Lo trato como se merece

—Tu no lo mereces

— ¿Y tu si? —Yuudai abrazo a yamaguchi de su cintura, arrimando lo más a él. —El es mío —Restregaba su nariz en el cuello y cabeza de tadashi.

Hacia sentir muy incómodo a tadashi, por la cercanía que le tenía, su aliento caliente desagradable chocaba contra su cuello y mejilla. Y que lo tratara como un simple objeto.

—El no es un objeto para que digas que es tuyo. —A osamu le daba asco el como ese sujeto trataba a yamaguchi de esa manera.

Ya que esta no es la primera vez que pasa.

—Eres mio verdad que si Mi amor — Yuudai seguía apretado a tadashi. Incomodando a este por la fuerza que estaba aplicando.

—Lo estás lastimando, ¡sueltalo! — Espeta con voz hostil. Cada vez llamando la atención de todos, reuniéndose a su alrededor para ver lo que pasaba.

Yuudai no quería soltar a yamaguchi para nada, el agarre del mayor se hacía más fuerte. Osamu tomó con fuerza el brazo de Yuudai para alejarlo de tadashi, logrando liberarlo.

—Te dije que lo estabas lastimando, eres sordo o estúpido

—Creo que ambos —Contesto otra voz.

Los tres voltearon a ver al dueño de la voz, pero no lo encontraban, no hasta que se hizo paso entre los alumnos para poder revelarse.

—Yuudai no te advertí que si volvías a acercarte a Tadashi estaria dispuesto a usar la violencia

—No creo que puedas hacerlo tu solo — Le dijo con burla

—Te lo puedo demostrar ahora mismo —Le aclaro. Dándole una gran cachetada, yuudai perdiendo el equilibrio por el impacto.

El peliverde pasó el dorso de su mano en el lugar afectado, volteando a ver a su atacante con una sonrisa burlona en sus labios. Apretando su puño derecho dio dos pasos hacia adelante, estaba a punto de devolver el golpe con un puñetazo, pero antes de hacerlo un cuerpo se interpuso entre los dos.

—Acaso inteabas ponerle un dedo ensima

—Es lo justo, el me golpe primero. — Replica hostil.

—¿Lo golpeaste primero? —Se giro hacia atrás - Koushi.

— Se lo merecía

—Tu te lo merecías —Se giro de nuevo. —Porque no mejor te vas de aquí y te evitas de problemas —Iba a reprochar que no se retiraría pero otros cuatro cuerpo aparecieron atrás de él.

Uno chico alto pelinegro con mirada felina, un peliverde con cuerpo corpulento, ceño fruncido y dando una mirada inexpresiva, Otro chico de cabello gris con líneas negras peinado hacia arriba - mirando en un punto en específico - admirando algo fascinante para el y por último otro pelinegro con una sonrisa en su rostro, sus labios estaban sonriendo pero sus expresión demostraban otra cosa.

Bufando mientras salía de ahí, no sin antes darle una mirada rápida a yamaguchi y osamu. Tadashi sintiéndose indifenso actuó inconsciente escondiéndose con el cuerpo de osamu y el peligris le dio una última mirada con su ceño fruncido.

—Podía encargarme de esto, Tooru.

— Lose, pero no cres que me vi muy Rudo —El Cataño le sonrió poniendo sus manos en sus caderas. Se acercó a Sugawuara para acariciarle una mejilla.

— Muy sexy diría yo —El peliplata acercó su rostro al del Cataño, dándose besos y cariños en público.

Ahora ambos se estaban coqueteando en medio de la cafetería. El más bajo y el castaño siempre aprovechaban cualquier lugar para coquetear entre ellos.

—¡Akaashi! —Alza la voz hacia su novio que se encontraba sentado solo en una mesa. Estirando sus brazos hacia arriba y moviendolos para que lo notará. —Nos vemos luego —Se despidió de sus amigos. Bokuto se fue con Akaashi.

Bokuto y Akaashi han sido una pareja desde los últimos meses antes que pasarán a segundo y tercer año. Un noviazgo que es privado más no un secreto y a ellos les gusta mucho.

—Bokuto - San no debe de gritar en la cafetería.

—Lo siento Akaashi

—¿Quiere un poco? —El de ojos turquesas le esta ofreciendo un ongiri a bokuto. —Lo prepare yo mismo así que no le aseguro que-

Bokuto le había quitado el ongiri de las manos del colocador y se lo había echado todo a la boca en el instante que escucho "Lo prepare yo mismo".

—Bokuto - San tome —Akaashi le dio un vaso de agua para que la comida bajara.

—La comida de Akaashi siempre es la mejor.

—No coma la comida así, podría ahogarse. —Aclara Akaashi.

(...)

—Debemos irnos, estamos llamando la atención.

—Hay que dejar a los enamorados aquí

Todos ya se habían ido a sentar a sus respectivas mesas, los únicos parados eran Sugawuara, Oikawa, osamu y yamaguchi. El amigo de osamu se fue a sus mesa cuando todos empezaron a dispersarse. Pero con su teléfono en mano por si osamu hacia el ridículo.

—¿Estas bien?

—Si, gracias por ayudarme —le sonrió.

—No fue nada y espero que ese sujeto no vuelva a molestarte

—Tambien yo —Ambos se miraban a los ojos con sonrisas bobas en sus labios. Escucharon el sonido de una cámara al tomar una foto.

Osamu busco a su amigo con la mirada, encontrando lo con teléfono en la mano y su pulgar arriba. Osamu solo le dio una mirada fulminante.

—Toma —Yamaguchi le estaba dando la mitad de su sawnduich a osamu. — Tienes que comer algo —Esperando a que le resiviera la comida para poder irse. Samu aún no respondía.

Solo abría la boca para decir algo pero ningún palabra entendible salía de ella, solo balbuceos.

¿Que le podía decir? Que no porque es comida de él, pero se estaba muriendo de hambre. Es lo que le pasaba por no despertarse a tiempo y llevar dos onigiris.

Podría robarle un poco de dinero a su hermano idiota o podría aguantarse hasta llegar a casa, pero hoy le toca clase de deportes y no va a poder aguantar tanto tiempo. A la cinco vueltas que corriera caerá desmayado seguramente.

Tomó la grande mano de osamu y dejó la mitad del sawnduich en ella. Dándole una última sonrisa al peligris.

—Nos vemos después, Miya - San.

Se quedó tanto tiempo pensado en sus opciones para un almuerzo y no quitarle el de ese chico que ya le habían puesto la mitad de un sandwich en su mano derecha.

Cuándo tadashi desapareció del campo de visión de samu, este volvió en sí, tratando de procesar lo que acaba de pasar.

Su mañana empezaba de ser de mal en peor pero la mitad de su sandwich podría animarlo un poco.

—¿Quien es el chico? —Hablo suna. Mirando el video que grabó, donde osamu solo se quedaba como idiota frente al de pecas.

—Es del área de Karasuno

Después de despedirse de Miya, yamaguchi se fue a su mesa donde lo estarían esperando sus amigos.

Ellos ya habían ido por su comida y esperaron a yamaguchi en su mesa. Yamaguchi había salido tarde de su salón de clases por un trabajo extra que debía entregar.

Encontrando en la mesa a Kageyama, Tsukishima y Yachi.

—¿Y Hinata?

— Desapareció. Tiene semanas que lleva haciendo eso —Menciona Kageyama.

—Yamaguchi ¿y tu almuerzo?

—Oh hubo un accidente y ofreci la mitad de mi sandwich. —Responde con voz cantarina.

Los otros dos varones no preguntaron más sobre el "accidente" de su almuerzo.

—Toma — Yachi le ofreció un poco de fruta a tadashi.

—Gracias Yachi

— Me voy —Kageyama se levanta de su asiento, tomando su charola.

— ¿A donde vas?

—Debo practicar mis colocaciones

—Yo también me retiro, me voy a la biblioteca —Comenta el de lentes.

Pelinegro y rubio se fueron a donde tenían que ir. Dejando a yamaguchi y Yachi solos. Tadashi estaba terminando de almorzar y Yachi solo lo observaba y a su vez viendo por la ventana.

—Ya me contaras que paso con tu almuerzo

—Yuudai tiro la charola de alguien más a propósito

—Yuudai sigue rondando te

—Si.... Le tiro la charola a un chico de inarizaki, Miya - San. Yo trataba de ofrecerle mi almuerzo para que no ocurriera una pelea —Tadashi le explicaba a Yachi lo que paso en la cafetería —pero yuudai me jalo a su lado apretando mi brazo —Se dio leves caricias en su brazo afectado — Miya - San me libero de su agarre, estaban por pelear hasta que Sugawuara - senpai apareció junto con Oikawa. Antes de irme le dio la mitad de mi sandwich.

—Pero estas bien

—Si, no fue nada grave.

Ambos se había vuelto muy cercanos, teniendo la confianza para contarse lo que sea, sea cualquier tema serio o una Babosada. Yamaguchi no quería molestar a tsukki con sus problemas, más si su amigo estaba ocupado con sus estudios.

Estuvieron hablando de otras cosas como las clases, los partidos, las prácticas que tendrían al fina de las clases y....

—Vas a ir hoy Yamaguchi

—No, tengo tarea atrasada que es para esta semana.

—Entonces nos vemos y suerte en tus trabajos —Yachi se levanto y se fue a su próxima clase.

—Adiós Yachi

El peli verde se dirigía a su salón de clases pero antes tenía que pasar a su casillero por unos libros y dejar los que ocupo en la clase anterior.

Recogiendo sus libros y girando para irse a su clase vio a dos personas saliendo por la puerta donde te llevaría a la azotea. Ambos cuidándose de no ser vistos por alguien. Tendiendo mala discreción ya que el y otra persona los estaban viendo.

Tomados de la mano se dieron un beso en los labios, al separarse el más alto se fue a la izquierda y el más pequeño se quedó ahí viendo a su compañero irse.

—Por el es que nos abandonas — Susurro yamaguchi en la oreja de su amigo. El contrario Saltando del susto y moviendo sus manos nerviosamente.

—Ya- Yamaguchi —Tartamudea —Si— Quiero decir No... Etto— ¿De qué hablas?

—De tus escapadas desde hace semanas

—No, yo e estado estudiando y practicando mis remates.

—Estudiando la anatomía Humana — Fórmula con mirada pícara.

—¿Eh? Si.. La anotomia humana.

—Hinata —Yamaguchi le dio un pequeño golpe a Hinata en su frente con un libro que tenía en mano —Ni siquiera nos dan anatomía humana.

—Bueno... Yo

—Hinata ¿Por qué tratas de ocultarmelo? Lose desde que empezaste a desaparecer, no son nada buenos siendo discretos y acabo de ver ese beso apasionado que se dieron.

—No le digas a nadie por favor

—¿Por qué no?

—Te lo explico después, pero por ahora guarda el secreto —aclara el pelirojo.

Después de cruzar más palabras ambos se despidieron, cada uno yendo a su clase correspondiente. Pero lo que no contaba yamaguchi es el tiempo, se quedó más tiempo hablando con Hinata que no se dio cuenta de lo tarde.

No lo dejaron entrar a su clase.

Su profesor le cerró la puerta en su cara, dejándolo sólo en el solitario pasillo. Antes que alguien lo reportará por estar rondando los pasillos se fue a las gradas. Ahí nadie iba o eso le dijeron.

Al llegar a las gradas de madera color verdes se encontró con Hinata, en solitario. Sentando y recargando su espalda y Cabeza en la pared -Ya que estaba sentado en las de hasta arriba- Viendo las nubes y cielo azul.

—Hinata —Lo llamó yamaguchi

—Yamaguchi, tampoco te dejaron entrar.

—No —Se sentó a lado de Hinata. Se quedarían en silencio por diez segundos, el tiempo suficiente ya que Hinata empezó hablar de cualquier tontería que estuviera pensando o de Misfits.

Ya que últimamente ese lugar a sido su tema de conversación las Últimas semana y discutían si irían de nuevo o no. Cada viernes, sábado o fin de semana se reúne en casa de Tsukishima para irse juntos.

El viernes pasado fueron por el cumpleaños de Tsukishima, el jueves lo celebró con su familia y el viernes con ellos yendo a Misfits.

—¿Vas a asistir este viernes?

—No, tengo tarea que hacer pero Yachi dijo que iría. —Sacó su libreta de álgebra, para terminar los ejercicios que no le alcanzó a terminar —¿Y tu?

—Si, quiero ir con kenma, me dijo que quería conocer el famoso Misfits. — Respondió animado. Ambos se quedaron sin tema de conversación hasta que yamaguchi lo recordó.

—Ya me contaras lo de tu secreto — Pregunto. Dejando sus ejercicios de lado.

—No puedo decirle a nadie sobre nuestras relación —Explicó Shoyo —Se esparceria por toda la escuela y también a los oídos de su madre. Su madre me odia.

— ¿Por que su madre te odia? ¿Por que alguien te odiaría?

—Porque él es de la clase alta y yo soy alguien de la clase baja. Pará su madre nuestra relación está mal, lo nuestro no podría ser a ojos y palabras de ella.

—Y tu estas bien con eso

—Si, cualquier cosa está bien si puedo estar a lado de Atsumu Miya.

Yamaguchi vio los ojos brillosos de Hinata, esos ojos miel se iluminaban cada vez que hablaba de él, su sonrisa estaba más grande que cuando remata un balón y su mejillas rojas. Se notaba que a Hinata le gustaba ese chico que pertenecía al área de Inarazaki.

Los pasos de dos personas viniendo hacia ellos les llamo la atención, pero ambos venían discutiendo y peleando.

Los gemelos miya.

Osamu le di un sape en la nuca de su hermano, mientras que atsumu se sobaba con su mano izquierda y con la derecha le pico su estómago con tres dedos, osamu le volvió a regresar el golpe pateando atrás de la rodilla, asiendo que atsumu callera al suelo, el peligris se sostuvo el estómago y solto una carcajada por la caída de su hermano, el rubio teñido no dejándose con las ganas jalo el pie izquierdo de su gemelo, callendo al suelo.

Los dos en el suelo no dejaban de pellizcarse la cara, picarse el estómago, dándose manotazos en los brazos y jalandose el cabello.

—Creo que debemos detenerlos antes que llamen la atención

—Si creo que tienes razón —Ambos se levantaron para poder separar la pelea que los gemelos estaban teniendo.

Osamu estaba sobre del estómago de atsumu, sacudiendolo de su camisa blanca, que ya no estaba tan blanca.

—Deja de ser tan estúpido maldito osamu.

—Y tu tan arrogante, por eso a todos les caes mal.

—Como si me importara

—Por tu culpa nos echaran de la clase

—¿Y?

—Por tu culpa no podré entregar mi trabajo

—¿Y?

—Maldito estúpido — Osamu tenía listo su puño para impactar lo con el rostro de su hermano.

Pero otra mano detuvo su puño, volteando a ver de quien se trataba, quedando en shok por la persona que lo detuvo, viendo sus ojos y sus mejillas llenas de pecas.

—Miya - San por favor suelte a su hermano, se que esta enojado con el pero no se desquite así. —viendo el estado en el que se encontraban los gemelos miya y la cara de preocupación de Hinata, Yamaguchi solto poco a poco el puño de osamu, este soltando la camisa de su hermano, pero sin que nadie se lo esperara osamu le solto una cachetada a su hermano.

—Mucho mejor —Se levantó y se orillo para que su hermano se levantará del sesped.

Los tres se quedaron sorprendidos por la acción del peligris, nadie se esperaba la cachetada, bueno talvez atsumu.

Hinata ayudó a atsumu a levantarse y a arreglar un poco su uniforme desalineado. Los cuatro se fueron a sentar donde antes estaban los menores, los gemelos en los lados, yamaguchi y Hinata en medio de los dos.

Shoyo le estaba dando leves caricias al rostro de atsumu, el rubio se dejaba mimar por su novio.

Yamaguchi estaba buscando algo en su mochila, algodón, gasas, cinta y alcohol. Tomo un poco de algodón y le echo alcohol, dándose lo a Hinata.

El pelirrojo le limpio las heridas a su novio, quejándose por el contacto de sus heridas con el alcohol.

Tadashi volvió a humedecer el algodón con alcohol, ahora volteando se a osamu. Fue acercando su mano lentamente al rostro del peligris, hasta que el algodón hizo contacto con una rasguño en su frente, haciendolo sobre saltar por el ardor. Pero se dejó curar por el chico.

—No sabía que era un imán para los problemas Miya - San —Dijo el menor, tratando de iniciar una conversación con el mayor.

—No lo soy, solo que hoy a sido un día muy malo. —Osamu ni siquiera sabía porque le decía esas cosas a él, un chico que apenas conoció hoy

—No creo que su día sea tan malo, debe haberle pasado algo bueno, aun que sea algo pequeño.

—Si puede ser —Habla, viendo a yamaguchi de reojo.

Mientras le trataba las heridas, osamu se quedó observando el rostro de yamaguchi, sus ojos eran cafés al estar en la sombra pero a la luz del sol le daba un color verde olivo, sus pestañas largas, delgadas y negras, al igual que sus mejillas, al estar adentro en la cafetería no se notaba casi ninguna pero con la luz de sol podía verlas perfectamente, podía jurar que las podía contar.

Nunca antes había visto un rostro tan precioso como lo es el de yamaguchi Tadashi.

—Hermoso —Susurro el mayor.

—Dijo algo Miya - San —Dudo yamaguchi de lo que había escuchado.

—Ah, doloroso que es doloroso

—Aguante un poco mas ya casi termino Miya - San

—Puedes llamarme Osamu —El mayor quiere escuchar de esos labios su nombre.

—Esta seguro, lo acabo de conocer

—No creo que me acabes de conocer hoy

—No, pero es nuestra primera interacción y siento que sería algo irrespetuoso de mi parte, más porque eres mi senpai.

—No lo es, si yo te lo pido. Además el idiota que se está besuqueando por haya —Señaló a su hermano que se estaba besando con Hinata —también es miya y sería confuso.

—De acuerdo, osamu - San — Ambos sonrieron. Yamaguchi le ponía un curita en la mejilla derecha —Puedes llamarme Tadashi.

—De acuerdo, Tadashi - kun — Ambos rieron —Por sierto siempre cargas eso en tu mochila.

—Si, suelo ser muy torpe y me golpeó muy seguido.

Mentiroso.

El timbre para cambio de clases sono, yamaguchi guardo su cuaderno de álgebra y las cosas que uso para curar las heridas de miya. Los dos se levantaron para irse a sus clases, pero los otros dos ni se movían de sus posiciones. Hinata estaba sentado en las piernas de atsumu, rodeado el cuello del mayor con sus brazos, besandose aún.

—Ajam — Yamaguchi trataba de llamar la atención de Hinata, pero este ni caso hacía. —¡Hinata Shoyo! — Exclama, asiendo sobre saltar a ambos —Si quieres seguir yendo a partidos y que siga siendo tu alacaguete¹ es mejor que asistas a todas tus clases y entreges tus tareas. O le diré a Daichi - San que te prohíba la entrada al gimnasio.

El pelirrojo se levantó como resorte de las piernas de miya, despidiéndose de su novio fue bajando las gradas.

— Nos vemos luego osamu - San, Miya - San

—Claro Tadashi - kun

Los de primero se fueron y al estar lejos atsumu vio a su hermano que no apartaba la vista del chico de pecas. Sin decir nada ambos bajaron de las gradas para irse a su salón.

Al estar en su casa atsumu le ofreció a su hermano hacer onigiri, aceptando ambos se pusieron hacer onigiri ya que su madre nunca estaba en casa y ellos tenían que hacer su comida y cena, ellos se hablaba de osamu solamente ya que atsumu es un asco en la cocina, echándole azúcar a lo que llevaba sal y sal a lo que llevaba azúcar, quemando igual los huevos y dejando evaporar el agua para café o para el ramen instantáneo.

Al terminar los onigiri, los dos se pusieron a comer y hablar de cualquier cosa, volviendo a la normalidad y olvidándose de su pelea hace unas horas.

Lo normal con los hermanos miya.

Al alcanzar a Hinata, quien ya se había adelantado a la entrada de los salones de Karasuno. Se encontró a su amigo de lentes.

Ambos iban a sus respectivos casilleros para después irse a la siguiente clase.

— ¿Porque no entraste a clases? — Le preguntó su amigo.

—El profesor no me dejó entrar

—La razón por la que llegaste tarde ¿fue?

—Me entretuve charlando con Hinata — Se justificó —Terminaste todo en la biblioteca.

—No, me faltó un tema por encontrar —Le dijo Acomodando sus propios lentes.

Solo les daba cinco minutos para cambiar de clase e ir por sus materiales a sus casilleros. Hinata se había encontrado con Kageyama en camino y a la primera que se vieron empezaron a discutir de cualquier cosa, normal entre ellos dos. Kei le preguntó a tadashi porque no entro a clases ya que no hacerlo es algo que el nunca haría.

Pero siempre hay una primera vez para algo.

Hoy tenían entrenamiento con el equipo de vóleibol al terminar las clases. Fueron a los vestidores para intercambiar su uniforme de la escuela con el que usualmente usaban para entrenar.

Al llegar al gimnasio junto con Tsukishima encontraron a Kageyama y Hinata discutiendo - De nuevo - pero está vez su conversación se vea más sería que de lo normal, ya que sus expresiones estaban tensas y el seño fruncido común de Kageyama estaba más fruncido de lo normal.

Cuándo ellos pusieron un pie en el gimnasio sus senpais llegaron, encontrando al dúo monstruoso en las mismas que ellos los encontraron.

—¿Qué hay de mi? —Pregunto el pelinegro al pelirojo.

Hinata se estaba pensando cuidadosamente la respuesta a la pregunta de su amigo y rival. Abrió la boca para contestar pero vio de reojo a todo el equipo como espectadores. Dejando su respuesta en el aire. "Hablaremos más tarde" le susurro en oído.

La práctica empezó, su discusión no dejó que afectará su rendimiento en la cancha y su trabajo en equipo. Los bloqueos de Tsukishima cada vez mejoraban más. Los saques flotantes de yamaguchi cada vez alcanzaba a pasar la red. Es el turno de Kageyama y Hinata para limpiar el gimnasio, dejandolos solos para que terminarán su labor.... Y su conversación

Al terminar aquí, rápidamente irá con shimada para seguir entrenando sus saque flotante, para seguir Esforzándose como todos en su equipo.

Si bien su entrenamiento con su mentor iba de lo mejor, enseñándole como debe hacer ese saque flotante que le sorprendió en el partido de Karasuno vs Asociación de vecinos.

Cuándo el entrenamiento con shimada terminó, yamaguchi ayuda en lo que puede en la tienda Shimada mart. Barriendo, acomodando la mercancía o a veces atiende a los clientes.

Pará yamaguchi es su forma de agradecer por todo lo que shimada a escho por el. No sólo lo a ayudado con sus saques flotante, también lo a ayudado en otras cosas importantes.

Mientras que la discusión de Hinata y Kageyama. Ambos estaban guardando la red en la bodega con las demás cosas.

Al estar solos sin ninguna interrupción y ningún espectador Kageyama tomó la iniciativa para retomar su conversación que dejaron pendiente.

—Hinata

—¿Me preguntaste que hay de ti? —Iris caramelo e iris azules chocaron. Hinata no dejaba de verlo a los ojos. —La verdad es que no se a lo que te refieres Que hay de mi.

—¿Por qué lo elegiste a él? —Quiso saber Kageyama —¿Qué hay de especial en Miya Atsumu?

Hinata se asustó que Kageyama los haya visto en el momento que se despedían, ya le estaba preguntando aserca de atsumu, no le creería si lo negaba.

—Atsumu Miya a sido mi Brujula desde la primera vez que me lo tope por accidente.

Y es sierto, Shoyo y Atsumu se conocieron por un accidente. El pelirojo se encontraba perdido en la gran ciudad de Tokio, sin saber el nombre de las calles, sin saber a quien pedir ayuda, se encontraba solo.

Atsumu iba llegando tarde a un compromiso obligatorio que su padre le había dicho que no podía faltar, corriendo por las calles de Tokio, empujando a cualquier que se le cruzará en el camino, sin querer disculparse.

Shoyo sólo iba caminando como todas las personas en esa tarde, hasta que sintió un fuerte dolor en toda su persona. En un abrir y cerrar de ojos se encontraba tirado en el suelo con algo pesado aplastandolo.

La primera vez que atsumu vio a Shoyo se sorprendió por aquellos cabellos naranjas, ya que nunca había visto a alguien con ese tipo de color de cabello natural. Al igual que sus ojos color caramelo, la primera vez que lo ves a los ojos podría decirse que sus iris son castaños pero ahora podría decir que no lo son.

Siendo con la primera persona que se disculpa. Ambos se levantaron del sucio suelo, intercambiando un para de palabras y diciéndole a atsumu que se encontraba perdido, miya le dijo que lo ayudaría a encontrar el lugar a donde planea ir o a su casa, pero antes tenía que ir a su compromiso. Shoyo dijo que en ése mismo lugar lo esperaría y así lo hizo hasta que la luz del sol se fuera.

Hinata siempre a sido muy confiado con cualquier persona, en ese momento no se puso a pensar que aquel sujeto rubio teñido podría haber sido una persona mala, que sólo quería dañarlo.

Pero al contrario de eso, Hinata cree y está seguro que encontró a su soulmate.

Al final del día miya llevó a shoyo a la casa de su amigo Kenma, la cual su dirección se la había aprendido.

Ambos adolescentes se despidieron sin saber que pronto se volverían a encontrar.

Desde el primero día que Shoyo conoció a Atsumu, este se convirtió en su brujula.

—¿Brujula?

—Atsumu ha sido mi brujula cuando más perdió e estado. —Contesta. Mirando a Kageyama a los ojos. —Por muy jodidas estén las cosas, el siempre está ahí.

Y con esa respuesta Kageyama logró comprender. Shoyo ya le pertenecía a alguien más, sus sentimientos ya le pertenecían a alguien más.

Ahora bien eran casi media noche y ya había terminado todos sus pendientes con sus materias, también con los trabajos extras, se había terminando de duchar sintiéndose bien y listo para ir a dormir. Lo estaba pero.

La puerta de su habitación se fue abriendo lentamente, asomándose una cabeza rubia teñida. Se vieron por unos segundos hasta que le dio una mirada interrogativa al intruso.

—Si hacemos Ramen instantáneo — Murmura —Con salsa.

Osamu se quedó viendo a su hermano, observando su vestimenta, no tenía puesto su usual piyama de balones de vóleibol color azul cielo que usaba para dormir, estaba usando un pantalón negro que utiliza para correr en la mañana, una sudadera holgada color gris, junto con el gorro en sus cabeza.

Atsumu estaba listo para salir con sus hermano, aun sin haberle preguntado antes.

Osamu sin poder negarse ante la petición de su hermano, comer ramen instantáneo con un poco de salsa. Tomó una sudadera y se encaminaron a la tienda de veinticuatro horas, a comprar el ramen.

En el camino a la tienda osamu quería conversar sobre un tema en espacial con su hermano.

—Tsumu

—¿Mm?

—¿Qué harás si madre se entera de lo tuyo con Hinata?

—Samu —Pausa —Peleare con todo lo que este a mi alacaze para estar con ese chico. —Aclara, alzando si mirada al cielo estrellado —Creme que me gusta mucho ese chico, es algo más que gustarme.

Osamu se dio cuenta algo, la persona que más ama ya había encontrado a alguien que le hará bien o mal a su corazón y el espera que su hermano no sufra por la ausencia de ese chico.

Tienen una regla que respetar.

Viendo de lejos la tienda que solían recurrir cuando eran más de media noche, ambos hermanos dejaron en el olvido el tema de la relación de tsumu.

El aire tibio que les brindó la tienda al entrar fue agradable, el olor de café que desprendía la máquina para prepararlo, también de salchichas y entre otras comidas más que solían vender. Se fueron a donde estaría su ramen, eligiendo el que suelen comer junto con la salta en botellada.

Finalmente al estar en la caja registradora tocaron el timbre para que les atendieran, en el mostrador se enseñaban un para de libros de álgebra, ejercicios a medio terminar.

—Rayos —Exclamó una voz. Aquella voz se escucho abajo del mostrador. El de la caja se había golpeado su cabeza al intentar levantar algo debajo de esta.

—¿Tadashi - kun, eres tu?

—Osamu - San buenas noches — Yamaguchi se incorporó —Ahorita les digo cuanto es —Paso los productos por la maquina que registraba lo que se vendía.

—No sabía que trabajabas aquí

—Bueno no es un trabajo en sí, le ayudo al dueño de la tienda —Puso los ramen y la salsa en una bolsa de plástico —Son cien yenes por favor —Le dijo.

Entregaron el dinero y atsumu agarro la bolsa de plástico, estaba esperando a su hermano para que le entregarán su cambio pero su teléfono empezó a sonar.

Lo saco del bolso de su pantalón, leyendo el nombre del contacto, con una sonrisa en sus labios salió de la tienda para contestar. Dejando a solas a sus hermano con yamaguchi.

—Tu cambio —indica el de pecas. Entregándole un par de monedas.

—Aun no terminás tu tarea —Señaló sus libros de álgebra.

—No, bueno hasta ahorita me dio tiempo para terminarla.

—Es media noche

—Si lo se, el entrenamiento de hoy se alargó un poco —Se excuso. Se sobo su nuca. —Y estos ejercicios son una molestia.

—¿No le entiendes?

—Algunos son un poco confusos y me rebuelvo

—Si quieres puedo ayudarte

—Oh, no quiero quitarte de tu tiempo, de seguro tienes muchas cosas que hacer —habla alarmado. Moviendo sus manos en negación. —Puedo pedirle ayuda a tsukki después.

—¿Tsukki?

—Mi mejor amigo

—No estoy muy ocupado y puedo ayudarte en cosas que no entiendas — Aclara muy convencido —Aún que no lo parezca soy muy listo y aplicado con mis notas.

—Bueno... Yo....

—Podemos reunirnos mañana en la hora del almuerzo en la cafetería.

—Ah esta bien

—Okey, mañana en la entrada de la cafetería en el almuerzo —Informa decidido —Buenas noches tadashi - kun —Le sonrió para después irse.

—Buenas noches osamu - San....

De alguna manera lo sintió como si fuera una especie de cita. Pero nada que ver, sólo se reunirían en la cafetería de la escuela para estudiar álgebra o otra materia.

Así pues tendría que decirle a sus amigos que mañana no almorzaria con ellos, pero no tenía ni idea del como hacérselo saber. El tenía confianza que no se lo tomarían a mal, es solo alguien del area de inarizaki enseñándole álgebra.

Osamu miya más bien.

—Así que mañana tienes una cita

—¡Shimida - San! —chilla, dando un salto del susto que le dio su mentor que estaba atrás de el. —Y no, no es una cita, solo me enseñará álgebra.

—Si tu lo dices —Su mentor no le creía.

—Lo es, solo me enseñará álgebra —Se justifica. Moviendo sus dedos entre sí y apartando la mirada de su mentor.

—De acuerdo —Le dijo —Toma — Shimida le entregó unas llaves a yamaguchi —Puedes adelantarte a casa yo ya termino aquí y por favor ve a dormir.

—Si...

Hola! ❤️✨

Este Fanfic vuelve a la vida después de mucho tiempo en los borradores.

¿Por que se fue a los borradores? No lose simplemente fue un impulso.

Ah y estaré revisando los capítulos por alguna falta de ortografía pero aún así creo que se me pasó alguna o muchas.