Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

El Sumiso

AVISO IMPORTANTE

Este capitulo tiene contenido +21 de carácter sexual.

Por favor, léanlo con responsabilidad y respetando las edades recomendadas.

Gracias por la comprensión.












1995, Hamburgo, Alemania

Vino hacia mí, me miró y me quedé completamente congelada, nunca me acostumbraba al poder que ejercía sobre mí, pero por lo que habíamos pasado... No, así no se podían hacer las cosas, debía respetarme.

Si yo respetaba sus límites él tenía que respetar los míos.

(Aguanta, sé fuerte, no le mires a los ojos. No seas tonta)

— Me rindo a ti, Sophie. Esta es la mayor muestra de sumisión que soy capaz de darte.

Clavó sus ojos marrones como el café recién tostado en los míos con la intensidad de un verdadero demonio, solo que este diablo estaba suplicándome mientras permanecía de rodillas y esposado.

(Mierda, mierda, mierda. Reacciona.)

— ¿Qué vas a hacer, pequeña, vas a tomarme o me dejarás ir?

Jadeé en respuesta, le cogí de las manos para ayudarlo a levantarse, pero no le quite las esposas en ningún momento.

Desde ese momento empezó mi descenso al infierno, después de ese ofrecimiento directo de Samael tenía muy claro lo que quería de él, al menos una parte de mí lo sabía. Eso me iba a bastar por ahora.

Me abalancé sobre él manteniendo las esposas por encima de su cabeza y a la vez provocando un poco de fricción en su piel desnuda hasta que se enrojeció.

— He sido demasiado indulgente contigo y me he cansado de eso. Ahora seré yo la que te haga suplicar - Me acerqué hasta que la punta de nuestras narices se rozaron - Así que, prepárate, no voy a jugar limpio y quiero escuchar como gimes.

Después de sentenciarle, ni si quiera lo dude un segundo, no me importaba nada, mucho menos ser brusca o pensar en ser torpe.
Tenía un verdadero postre en mis manos y no iba a dudar ni un solo segundo en comérmelo.

Me puse a ahorcajadas sobre él, pasé mis piernas sobre las suyas hasta dejarlas a sus lados obligándolo a casi cerrar las suyas. Desabroche su pantalón muy lentamente haciendo una pequeña pausa después de desabrochar el botón para muy lentamente ir bajando la cremallera con la intención de desesperarlo de a pocos.

Su respiración cada vez se estaba haciendo más pesada y se le notaba bastante tenso, sé de sobra que estaba deseando tener el control de la situación, pero había accedido a dármelo, no podía tirarse atrás ahora.

Una vez con la cremallera completamente bajada, quite del camino, lo justo, los bóxer negros que tanto me gustaban, para dar paso a su erección caliente y venosa.

— Que me perdone el cielo, pero pedazo ejemplar voy a devorar. - Pensé en voz alta.

— Pues empieza, pequeña, no dejes que me enfríe - Dijo con una sonrisa burlona en sus labios carnosos y rojos. Se pasó la lengua por ellos humedeciéndolos y se podía ver el brillo del deseo en sus ojos.

— Tendrás que esperar un poco, quiero jugar antes.

Me acomodé  dejando caer mi peso sobre sus rodillas mientras mis dedos jugaban con el glande. Poco a poco el prepucio fue retrocediendo ante el crecimiento que seguía teniendo, dejando así al descubierto una pequeña gota de pre-seminal.

Jugueteé con ella con los dedos haciendo círculos sobre el grande hasta rodear por completo el falo con mi mano.

Masajeé despacio, pero con la presión justa hasta que Samael empezó poco a poco a perder el control de su respiración dejando salir pequeños gruñidos y bufidos de placer.

Cuando me sentí suficiente poderosa al poder tenerlo así para mí, me bajé de encima de él, abrí sus piernas lentamente por los muslos y me coloqué de rodillas entre ellas.

Me recogí el pelo en un moño bastante desarreglado y sin previo aviso le di la primera lamida al glande.
Eso provocó que Samael dejase caer su cabeza hacía atrás y soltara otro fuerte gruñido para mi.

— Si quieres que siga vas a tener que empezar a respetar mis decisiones, estoy cambiando todo tu mundo, pero tu también el mío. No voy a dejar que me apagues, Samael.

>> O aceptas mis condiciones y jugamos por igual... - Le di otra lamida más extensa desde la base hasta el glande - O me pierdes para siempre. Tu decides.

Me quedé mirándole fijamente a los ojos con determinación mientras tenía su miembro cogido con mis manos esperando por una respuesta.

Samael se incorporo un poco, pero aún en sus ojos castaños se podía ver la bruma de deseo que yo misma había despertado.

Pasó en un rápido movimiento las dos manos esposadas por encima de mi cabeza y me acercó a él empujando con la cadena mi nuca.

— Muy bien, pequeña Sophie...

(Dioses, como me gustaba que dijera mi nombre)

— Tu ganas, seré todo tuyo y seguiré al pie de la letra tus condiciones, pero no te atrevas a dejarme así.

Le rodeé el miembro con mis labios y, desde ahora solo nos podrán encontrar en el segundo círculo del infierno de Dante.

Buenas buenas queridos lectores!

Seguimos viendo diferentes épocas de nuestra pareja favorita!!

Y con este capítulo un poco subido más de tono vemos otra de las muchas caras de ellos jijijiji

Espero que os haya gustado y siempre quedo abierta a crítica positiva, opiniones y sobretodo a vuestros comentarios 🔥

Para ver más de mi trabajo y no solo texto os invito a seguirme en IG @Mahoheca.

Nuevo capítulo cada dos días, permaneced atentos!!❤️

Gracias por leer!✨

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro