Canción del capítulo: Lana del Rey - Yes to Heaven.
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Capítulo 22
La dama de rojo
La noche del festival llegó, JungKook iba sobre KenJi mientras ChungHa rodeaba su torso, todo estaba muy sereno, se escuchaban algunos animales nocturnos en el camino al pueblo Luton. El chico decidió contarle a su nana sobre un dato.
—TaeBin sabe que no pertenezco a la familia Moon—reveló—Ella también fue adoptada cuando era una bebé, su madre dijo que la habían abandonado en el bosque durante el invierno...
—Espera, ¿Conociste a su madre?
—Sí, hace tres meses. He ido en otras ocasiones, la señora Camille hace un estofado muy bueno.
ChungHa no podía creer lo que escuchaba.
—Así que realmente te has hecho cercano a ella.
—Es...una buena compañía.
—Ahora entiendo la actitud de YooRi hace tres días.
JungKook detuvo el caballo en seco queriendo escuchar mejor. Intentó ver a ChungHa sobre su hombro con el ceño fruncido.
—¿Qué pasó con YooRi?
La comunicación entre ambos era nula, incluso viviendo en el mismo lugar no se encontraban mucho, YooRi parecía odiarlo por la forma en que lo veía y JungKook se sentía decepcionado de ver como la relación entre ambos se había destruido por completo desde ese beso. Beso que seguía siendo secreto entre ellos dos.
—No me sorprende que TaeBin no te lo haya dicho.
—Nana, ¿Qué pasó?
ChungHa tomó una bocanada de aire antes de explicarle.
—YooRi estaba diciéndole cosas a TaeBin como que no coqueteara contigo porque se encargaría de hacer que la echaran del castillo, la llamó campesina y en sí, sólo la humilló—JungKook tensó su mandíbula. No podía creer esa actitud infantil de la chica—Intenté hacer que se disculpara con ella, no funcionó, por supuesto.
—Hablaré con YooRi.
—No creo que sea bueno tocar el tema en el festival.
—¿YooRi irá al festival?
—¿No lo sabías?
—Desde hace tres meses no sé mucho sobre ella.
—TaeHyung la invitó, ellos dos pasan mucho tiempo junto, YooRi suele estar con él en el mercado, han hecho una bonita amistad—indicó. A JungKook le sorprendió un poco, no hubiera esperado que ella socializara, ¿Y si YooRi lograba enamorarse de alguien más?, una parte de él se entristeció mientras que la otra se alegró de que tuviera una oportunidad con alguien más, así sus padres estarían tranquilos respecto a la maldición—Estoy sorprendida por su actitud, YooRi nunca ha sido así.
—A veces las personas cambian, nana.
—Será mejor que intentemos disfrutar este festival, ¿De acuerdo?
Él asintió volviendo a ordenar al caballo que cabalgara.
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El pueblo Luton estaba realmente lleno esa noche, había hombres, mujeres, niños, ancianos, personas de todas las edades celebrando el inicio de la primavera. Todo estaba iluminado de alguna manera, habían decorado el pueblo con colores pasteles propios de la época, JungKook se sentía un tanto incómodo por tanta gente, sino fuera por ChungHa allí se habría regresado, la música sonaba por un grupo de personas en la plaza que invitaba a cualquiera a bailar.
—¿Por qué nunca vinimos a estas cosas?, todos lucen muy felices—preguntó a su nana quien tomaba su brazo entre la multitud, algunos observaban el grupo que bailaba entre risas y pequeños gritos que aumentaban la emoción del baile.
—JiHwa y SonWoo detestaban estas cosas, son demasiados humanos para su gusto—contó.
El chico formó una O con su boca sin sorprenderse, desde hace unos meses se había distanciado de nuevo de sus padres. Estaba notando que desde que TaeBin y él se hicieron más cercanos, el resto se volvió lejano para el chico, TaeBin lograba transmitirle tanto que no se daba cuenta de las veces que la buscaba inconscientemente. Como en ese momento, su mirada paseó por las personas de la plaza, respiró profundo preguntándose donde estaría la chica. En medio de las personas que bailaban distinguió a YooRi con TaeHyung danzando entre risas, se notaba mucho lo cómoda que se encontraba con el chico. JungKook hablaría con ella sobre esa actitud con TaeBin, pero no sería esa noche.
Su nana tenía razón, debían disfrutar el festival.
YooRi tenía un vestido morado con algunos detalles en negro y un ligero brillo en la falda. Sus rulos parecían bailar con ella en cada movimiento, una extraña sensación lo recorrió, verla así le agradó mucho y dolió al mismo tiempo, no porque sintiera algo por ella (lo cual era pequeño todavía), sino por el hecho de lo mucho que se habían distanciado. Extrañaba a YooRi.
Extrañaba a la chica que creció con él como su hermana.
ChungHa notó el semblante pensativo del muchacho, sabía que esos dos no se trataban en ese instante. Intentaba escuchar ambas partes y cómo se sentían, la mujer rubia era más esa figura materna que necesitaba. Aunque quería a YooRi con todo su corazón, se sentía un poco molesta con su actitud de hace tres días. No quería que se dejara llevar por su enojo.
Porque TaeBin era inocente de todo.
Justo en ese momento, JungKook la identificó en compañía de la señora Camille, TaeBin tenía un vestido rojo con una capa delgada del mismo color que formaba parte del vestido, su cabello negro se encontraba una parte recogida en un moño con la otra parte suelta en ondas por sus brazos hasta su cintura, sus labios rosados formaron una sonrisa por una conversación que sostenía con su madre, TaeBin estaba hermosa esa noche.
Y era la primera vez que consideraba que era una chica brillaba más que YooRi.
—Ve con ella.
—¿Qué? —JungKook parpadeó varias veces—No, estoy bien aquí.
—¿Qué dices?, vinimos porque nos invitó, ve con ella para que sepa que estamos aquí—animó empujándolo con suavidad.
—Iremos los dos—jaló a su nana. ChungHa rodó los ojos escuchando su risita, ese chico era terco.
TaeBin sonrió mucho más al encontrarlo allí, incluso sus ojos mostraron su emoción brillando más. Tanto ella como su madre hicieron una reverencia hacia ambos.
—Oh, mamá, ella es la nana del joven Moon, también trabaja para sus padres—presentó—Ahjumma, ella es mi madre.
ChungHa hizo un ligero movimiento de cabeza en forma de saludo.
—Su hija ha hecho un buen trabajo en el castillo, es una muchacha muy responsable.
—Puedo confirmar eso.
TaeBin se sonrojó por las palabras de JungKook. La música cambió a una más suave y dulce al oído, ChungHa con la mirada parecía gritarle al chico que diera el paso.
—¿Te gustaría bailar? —invitó.
—¿Oh?, ah, sí—su nerviosismo se notó. JungKook le ofreció su mano y ella la tomó permitiendo que jalara suavemente de su brazo hasta la plaza, sólo había parejas bailando. Fue en ese momento que YooRi notó a ambos y TaeHyung también lo vio.
—Parece que vas a desmayarte en cualquier momento—comentó divertido mirando su rostro.
—Cuando vengo al festival con mamá no suelo bailar estas melodías—aclaró su garganta situándose frente a él.
—¿Por qué?
—Nadie me invita—se encogió de hombros.
—Bueno—le hizo dar una vuelta sin soltar su mano—Me invitaste al festival así que es mi deber invitar a bailar—sonrió un poco e hizo una reverencia ante ella como si de una princesa se tratara—Señorita Kim, ¿Puede guiarme en este baile?
TaeBin sonrió respondiendo a su reverencia cortésmente.
—Haré lo que pueda...—hizo una pequeña pausa añadiendo—JungKook.
El pelinegro sonrió por su forma tímida de decir su nombre. El baile tenía pasos que se repetían mediante la canción, se notaba cierta química entre ambos que no pasó desapercibida para muchos. JungKook mantuvo sus ojos en la chica de rojo frente a él y TaeBin mantuvo su atención en él sosteniéndole esa mirada.
Aunque YooRi intentó disimularlo, ver aquello le dolió y mucho.
No sé ustedes, pero estas parejas están gustándome.
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